Universidad Autónoma De Baja California Sur Tesis

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UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE BAJA CALIFORNIA SUR Área Interdisciplinaria de Ciencias Sociales y Humanidades Departamento de Humanidades TESIS La Fundación del Ingenio Azucarero “Emiliano Zapata” de Zacatepec, su desarrollo, económico, político y su impacto social, en la región cañera del sur del estado de Morelos (1937-1990) Que para optar por el grado de: Maestro en Historia Regional Presenta: Roberto León Ramírez Director: Dr. Rubén Salmerón Codirectora: Dra. Edith González Cruz La Paz, Baja California Sur Diciembre de 2012 I N D I C E G E N E R A L. NOTA PRELIMINAR. SIGLAS DE ARCHIVO------------------------------------------------------------------------------1 INTRODUCCIÓN-------------------------------------------------------------------------------------2 CAPÍTULO I. Estado de Morelos un acercamiento a la región. 1. Su geografía---------------------------------------------------------------------------------5 2. Antecedentes históricos de la región--------------------------------------------------8 3. Su población y principales pueblos---------------------------------------------------22 CAPÍTULO II. Un nuevo marco legal y la reforma agraria en Morelos. 1. El artículo 27 de la Constitución de 1917--------------------------------------------28 2. La cuestión agraria en Morelos---------------------------------------------------------33 3. La política económica durante el cardenismo--------------------------------------39 4. Las consecuencias políticas del cardenismo---------------------------------------48 CAPÍTULO III. La fundación del Ingenio, “Emiliano Zapata” 1. Fundación y creación de la cooperativa ejidal del ingenio de Zacatepec---56 2. El estado del recurso y el desarrollo tecnológico--------------------------------101 3. El impacto social--------------------------------------------------------------------------110 CONCLUSIONES---------------------------------------------------------------------------------117 BIBLIOGRAFÍA------------------------------------------------------------------------------------121 ANEXOS--------------------------------------------------------------------------------------------125 NOTA PRELIMINAR. Debo agradecer aquí a todas aquellas personas e instituciones que me brindaron su apoyo en la realización de este trabajo de investigación. A mis maestros en la licenciatura, que siempre tuvieron la paciencia de escucharme y respetar mis opiniones, por absurdas que éstas fueran, a mis compañeros de la Maestría, a los profesores de la misma. A mis compañeros de trabajo, en el Cicimar, a sus autoridades, al Instituto Politécnico Nacional, por brindarme la oportunidad de hacerlo. A mi Universidad, por la posibilidad de realizar esta hermosa aventura, que es la adquisición de conocimientos, cualquiera que estos sean. Al SNTE, que por la vía de sus prestaciones fue posible concluir mi tesis de Maestría. A mi Comité de tesis, el M. en C. Ignacio Rivas Hernández, a la Doctora, Edith González Cruz, por sus comentarios y observaciones que me fueron de gran utilidad y valor académico. A mi director de tesis, el Dr. Rubén Salmerón, por su valiosa participación que hicieron posible la realización de este Proyecto de Investigación. Dedico el presente trabajo, a la memoria de mi padre, don Carlos León Treque, al que nunca pude comprender del todo, pero que siempre respeté por su incansable labor como obrero del ingenio, que por más de 40 años siempre realizó. A mi hermano el ingeniero mecánico, Carlos Eugenio León Ramírez, que siempre trabajó de manera responsable y eficiente, que por circunstancias del destino partió prematuramente. A mi madre (finada), la que siempre me alentó en todo lo que hacía y se me ocurría, y de la que guardo un gran recuerdo. A mi esposa Rosy por su invaluable apoyo y comprensión; a mis hijos, Roberto Amín, Carlos Aurelio, Oscar Guillermo y Álvaro Adrián, León González. A mi nieto Santi. A mis suegros, a mis cuñados. A mis hermanas, Elva, Josefina y Conchita; a mi Tía Petra (finada), quien siempre me acicateo con unas frases muy motivadoras. A mi prima Petra (finada), excelente oficinista del ingenio. A Guillermo Ledesma, “por sus sabios consejos”. A mis primos, José Manuel, Guillermo Enrique y Marcela. Y de la manera más humilde, a todos los trabajadores del ingenio, que hicieron posible con su esfuerzo y dedicación, la consolidación de ese gran sueño “de dulce amargo”, que fue la Cooperativa de Ejidatarios, Obreros y Empleados, que yo conocí, y de la que siempre me sentiré muy orgulloso. 1    SIGLAS DE ARCHIVO AGN Archivo General de la Nación Eduardo Molina 113, esquina con Albañiles. Colonia Penitenciaría. Ampliación (entrada por Héroe de Nacozari) Delegación, Venustiano Carranza, C.P. 15350 México, D.F. 2    INTRODUCCIÓN. El tema cañero siempre me pareció fascinante, quizá tenga que ver el ser nativo de la región cañera en que nací, crecí y me desarrollé al compás del pitido del “chacuaco” del ingenio de Zacatepec, siendo mi padre socio fundador de la cooperativa, todo en el pueblo se desarrollaba alrededor de la actividad del Ingenio y su cooperativa, por eso puedo afirmar que en la región cañera morelense, en particular el pueblo de Zacatepec, durante mucho tiempo vivieron la experiencia de ser la zona productora de caña de azúcar por excelencia, con el mayor rendimiento en el país. Desde la época de las haciendas porfirianas, donde el campesino vivía de forma muy precaria y no era sujeto de crédito ni propiedad, hasta el momento de la fundación del moderno ingenio azucarero, por el general Lázaro Cárdenas, que esta situación cambió de manera y formas radicales en su propio beneficio. El objetivo de nuestra tesis es dar a conocer lo que, a nuestro juicio, ocurrió en el periodo final de las haciendas porfiristas y de manera muy particular en el estado de Morelos; como consecuencia de esto y porque el gobierno federal tenía conocimiento de la situación de crisis por la que atravesaba la industria azucarera en ese momento, hay estudios que así lo indican (Horacio Crespo), llegando a un acuerdo que se concreta el 19 de diciembre de 1931, para el ordenamiento definitivo de la propia industria. La pieza maestra fue la disolución de la Compañía Estabilizadora, que había tenido poco éxito y se remplazó por un Cartel de 3    Productores, que se denomino “Azúcar, S.A.”, con ello se pretendía alcanzar un acuerdo para regular el mercado del azúcar en México. La hipótesis es ¿el estado de Morelos siempre fue tierra de despojos, por ello resarcir la propiedad de la tierra y las aguas a sus antiguos dueños?, fue así como la reforma agraria cardenista cumpliría con este propósito, además de dotar a los campesinos morelenses de la infraestructura necesaria para llevar a cabo dicha transformación. Con la investigación realizada comprobamos que, con la fundación del Ingenio y la creación de la cooperativa, fue el paso fundamental que la administración del general Cárdenas dio en su gobierno para sacar de la crisis en que se encontraba la industria azucarera nacional. Comprobando que, desde su fundación en (1937) del ingenio y de la posterior creación de la sociedad cooperativa, hasta el año de la disolución de la misma (1990), fue en este espacio temporal que la cooperativa experimentó diferentes formas de organización: desde sociedad de consumidores, cooperativa ejidal, cooperativa de ejidatarios y obreros de participación estatal, y finalmente cooperativa de ejidatarios, obreros y empleados. Con esta figura el gobierno federal la declaró en quiebra, la disolvió y vendió el ingenio a empresarios privados. Echando por la borda la mejor época de la industria azucarera nacional. En cuanto a la estructura del trabajo, contiene Tres Capítulos. En el primero se explica la región geográfica donde se encuentra ubicada la zona de estudio, los antecedentes históricos de la misma, sus principales pueblos que la conforman como estado de Morelos; el Segundo se analiza la conformación del ejido en el 4    contexto histórico de la Constitución de 1917, las leyes agrarias, su aplicación en Morelos y las consecuencias económicas y políticas del cardenismo; en el Tercero se da cuenta de la fundación del Ingenio, de las Leyes Cooperativas, de la creación de la sociedad cooperativa, del acta y las bases constitutivas de la misma, del estado del recurso y la innovación tecnológica en la industria, del impacto social en la región y del desarrollo de la cooperativa hasta su liquidación y el estado actual que guarda. Para la realización de esta investigación se consultaron fuentes primarias en el Archivo General de la Nación (AGN), el Ramo de Cooperativas de Producción. En este archivo se encuentra la mayor parte de la información documental oficial, que existe sobre el tema, de la extinta Secretaría de la Economía Nacional. Y en las fuentes secundarias, la mayor parte de la bibliografía existente sobre ingenios azucareros, así como del tema agrario y del cooperativo, en libros, tesis y revistas. 5    CAPITULO I ESTADO DE MORELOS: UN ACERCAMIENTO A LA REGIÓN 1.-Su geografía El estado de Morelos está situado entre los 18° 20´ 10´´ y los 19° 7´30´´ de latitud norte y 98° 42´22´´ y 99°24´13´´ de longitud oeste de Greenwich. Limita al norte con el Distrito Federal y el estado de México; al sur, la serranía de Ocotlán y San Gabriel lo separan del estado de Guerrero; colinda al oriente con el estado de Puebla, constituyendo sus límites las estribaciones australes del Popocatépetl y hacia el sur algunas de las corrientes tributarias del río Nexapa; al occidente limita con los estados de México y Guerrero. Es el más meridional de los Estados del Centro, y su extensión territorial de 4964 kilómetros cuadrados lo coloca en el vigésimo séptimo lugar entre los Estados de la República. Variado es el aspecto topográfico del estado, situado en las estribaciones australes de la gran serranía del Ajusco; presentando un declive de norte a sur, propio tanto por el terreno como por las corrientes de agua, propicio para toda clase de cultivos. La zona norte montañosa y cubierta de bosques da nacimiento a un gran número de ríos y arroyos que, al llegar a las llanuras, riegan extensos y fértiles campos en donde, desde el tiempo de la conquista española, se comenzó por cultivar la caña de azúcar. En cuanto a la zona sur, es también montañosa y está cubierta de vegetación tropical. En la serranía del Ajusco se encuentran las cumbres más importantes del estado, de las cuales mencionaremos la de Tres Marías y los montes de Tepoztlán, Tlayacapan y Tlalnepantla Cuautenco, que tienen alturas de 3500 metros. Destacándose también el volcán del Popocatépetl, que forma el vértice de las líneas limítrofes con los estados de México y Puebla, con una altura de 6    5400 metros sobre el nivel medio del mar. Al sur, y partiendo de la sierra de Taxco, se encuentran los montes de San Gabriel y de Ocotlán que forman el límite con el estado de Guerrero, los que se juntan en las serranías de Huautla y la de Huitzuco, esta última ya en Guerrero. Las montañas del este que parten el Popocatépetl, van perdiéndose en una serie de ondulaciones antes de terminar en las llanuras de Tepalcingo y Axochiapan, destacándose en su primer trayecto los montes de Jumiltepec, Achichipico, Tétela del Volcán y Hueyapan. Las montañas mencionadas rodean al estado, que se encuentra dividido en dos grandes porciones por una sierra interior que parte de los montes de Tepoztlán y que, formada por los cerros de Barriga de Plata, de San Gaspar y de Jojutla, termina en las inmediaciones de la confluencia del río Higuerón con el Amacuzac. Estas dos grandes porciones constituyen el Plan de Amilpas al este y la Cañada de Cuernavaca al oeste. La vida agrícola y social de Morelos se ha reconcentrado en las llanuras del Plan y de la Cañada, y en ellas se encuentran los campos de caña, que dieron nacimiento a los grandes ingenios azucareros. Es pues, la región cañera del sur del Estado de Morelos. Todo el Estado de Morelos pertenece a la vertiente del Pacífico y forma parte de la Gran Cuenca Hidrográfica del caudaloso río Balsas. Presenta, dentro de su territorio, dos sub-cuencas: la del río Amacuzac, que es la principal corriente del estado y que abarca casi toda su totalidad; y en pequeña parte la del Nexapa, a la que desemboca la barranca de Amatzinac. Tanto el Amacuzac como el Nexapa van a dar al río Mezcala, el que tomando después el nombre del río Balsas, desemboca en el Océano Pacífico, cerca del Puerto de Zihuatanejo. Dada la naturaleza montañosa del estado y su pequeña 7    extensión, pocas son las lagunas que en él se encuentran, citándose tan sólo las de Tequesquitengo, Hueyapan y las de Zempoala, estas últimas a 2700 metros sobre el nivel del mar. Dada la variedad de las alturas que presenta el estado, que van desde 3500 y 988 metros, se encuentran todos los climas, desde el frio de montaña, al casi tórrido de las riberas del río Amacuzac. Los poblados en Morelos se pueden clasificar como sigue: lugares de temperatura fría: Huitzilac, Coajomulco, Tres Marías, Tlalnepantla, Ocoxoaltepec, Tétela del Volcán, Metepec y Xochicalco. Lugares con temperatura templada-fría: Palpa, Santa María, Chamilpa, Ahuatepec, Ocotepec, Tepoztlán, San Juanico, Santo Domingo, Tlayacapan, Totolapan. Con temperatura templada: Cuernavaca, San Antón, Tlaltenango, Amatitlán, Acapancingo, Chapultepec, Santa Catarina, San Andrés, Atlatlahucan, Yecapixtla, Xochiatlán, Achichipico, Zacuelpan Amilpas, Popotlán, Tlacotepec, Temoac y Amilcingo. Lugares de temperatura templada-caliente: Itzamatitlán, Xochitepec, Oaculco, Santa Jiutepec, Catarina, Tejalpa, Yautepec, Oaxtepec, Cuautla, Cocoyoc, Cuautlixco, Tetelcingo, Ayala, Jonacatepec. Y por último, lugares de temperatura casi tórrida: Miacatlán, Coatetelco, Mazatepec, Coatlan del Río, Tetecala, Puente de Ixtla, Tlaquiltenango, Huautla, Tetelpa, Zacatepec, Tlaltizapán, Tucumán, Axochiapan, Tetelilla, Atlacahualoya y Tepalcingo. Las lluvias, en los últimos tiempos, han sido irregulares, debido a la tala de los bosques; pero en cuanto a su cantidad anual es de importancia, pudiendo colocarse al Estado de Morelos como uno de los más favorecidos. En la parte norte se registran de 80 a 90 8    centímetros y en Tétela del Volcán se ha llegado a observar 120 centímetros anuales. 1 2.- Antecedentes históricos de la región Muy interesante es la historia del hoy Estado de Morelos. Poblado intensamente desde los tiempos anteriores a la conquista española y ya con una agricultura bastante desarrollada, fue el proveedor de semillas y, sobre todo, del algodón, del que tanto necesitaban los Reinos de México y sus aliados. Posteriormente a la conquista, al formar parte del Marquesado de Oaxaca, recibió las primeras plantas de la caña de azúcar 2 , cuyo cultivo fue                                                              1  Situación- limites y extensiones, Bosquejo geográfico del Estado de Morelos, Emiliano Zapata y el Agrarismo en México, Tomo I, Cap. 1, Gildardo Magaña, Ed. Instituto Nacional de Estudios Históricos de la Revolución Mexicana- (INEHRM), México 1985, ed. Facsimilar, p.3-8. 2 La historia de la caña de azúcar, la cuestión de sus orígenes fue un problema concienzudamente indagado y que suscitó difíciles interrogantes entre los sabios. Es probable que todavía hoy sea un tema no resuelto de manera concluyente, aunque las aportaciones hechas para aclararlo hayan contribuido en buena medida a lo que hoy sabemos de la prehistoria del azúcar. Porter, en su libro “La naturaleza y propiedades de la caña de azúcar” publicado en 1843, que China había sido tanto la cuna del cultivo de la caña de azúcar como de la elaboración de su producto. En 1848 Wray, en “El plantador practico de caña” aceptaba la antigüedad de tres milenios en el cultivo de la gramínea allí – hoy se sabe que es mucho menor – .pero discutía la procedencia del Imperio del Medio, inclinándose por la India como asiento del nacimiento de la planta. De Candolle, en su libro “El origen de las plantas cultivadas”, señaló que la gramínea había prosperado inicialmente en Asía meridional, mientras que Karl Ritter coincidió con Wray al señalar que los inicios de la caña estaban en India, y lo mismo hicieron Roxburgh, Wallick, Royle y Aichison. Pero Roxburgh hizo, además, un señalamiento metodológico muy pertinente retomado en futuras y decisivas investigaciones, al indicar que no se sabía dónde el género Saccharum creciera espontáneamente. En 1861 Bentham anotaba lo mismo después de estudiar la flora de Hong Kong. En otras investigaciones se analizaba la etimología de la palabra “azúcar”: en todos los lenguajes indoeuropeos se deriva del sanscrito “sarkara o sakkara”, lo que ofrece un indicio interesante acerca del origen y probable centro difusor del dulce obtenido de la caña. En castellano la evidencia resulta muy clara, ya que el término “azúcar” se deriva del árabe “súkkar”, testimoniando la vía de introducción del producto en la península ibérica. La aparición documentada de la palabra se encuentra en la obra de Gonzalo de Berceo, en la primera mitad del siglo XIII. Tanto el vocablo árabe como el griego provienen a su vez del sánscrito. También la denominación árabe está en la base etimológica del término portugués. Del castellano se derivó al catalán “sucre” y el asturiano “asucre”. El mismo origen árabe se encuentra en la palabra italiana “succhero” y de las lenguas romances del 9    intensificándose a medida que se formaron los grandes latifundios. Siendo el propio conquistador, quien llevó a tierras de Cuernavaca las primeras plantas de caña de azúcar, que sembró en el pueblo de Tlaltenango, de donde se propagaron a la hacienda de Atlacomulco, que fue la primera en la que se estableció la maquinaria para la fabricación del azúcar. El éxito de la empresa hizo que fuera extendiéndose rápidamente el cultivo y que se fundaran nuevas haciendas hasta constituir el Marquesado del Valle, el Primer Centro Azucarero del Continente.                                                                                                                                                                                Mediterráneo se desprendió la denominación alemana “sucker” y la inglesa “sugar”. La palabra francesa “sucre” seguramente proviene de su similar catalán. Estas derivaciones lingüísticas nos dan un panorama del origen y dispersión del producto en esas regiones de Europa, y resultan reveladoras de su pasado hindú y de su vehículo de transmisión árabe.143 Esto se refuerza con otro apoyo lingüístico, ahora en sentido inverso: el descubrimiento de la raíz hindú el término utilizado para nombrar al azúcar en esos lugares daría cuenta de que el proceso de elaboración sí se originó en la India y siguió un camino contrario al de la expansión del vegetal. Las pruebas etimológicas del occidente europeo serían una confirmación de que la creación del método de producción azucarero tuvo su cuna en la India. Aclimatada en el subcontinente indio, donde llegó en tiempos pre-arios desde el sudeste asiático, la primera referencia confiable escrita del azúcar e inferencialmente de la caña proviene de Nearco, en 325 a. C., un jefe de la expedición de Alejandro Magno al valle del Indo.144. En esa época ya la caña había traspasado toda la ancha garganta de la India, desde Bengala a su vertiente occidental. De allí, el azúcar cruzó el mar Arábigo antes del año 100 de nuestra era como artículo comercial, pero no superó el litoral del mar Rojo.145. Derr desestima que la introducción de la caña en China se haya producido en épocas muy tempranas, ya que apenas en tiempos de Wu-ri (146-86 a. C.) fue conquistado el territorio situado al sur del Yangtsé-Kiang y se abrió la comunicación con Asía sudoriental, donde la caña estaba bien ambientada desde hacía ya muchos siglos. Es posible que figurase entre las plantas exóticas recibidas para su aclimatación en un gran jardín botánico instalado en Beijing en 111 a. C. Para el siglo IV de nuestra era hay claros testimonios de que su cultivo se encontraba muy desarrollado, especialmente en el sudeste, en el área de Cantón, y los grandes viajeros medievales Marco Polo, fray Oderico de Pordenone e Ibn Battuta fueron testigos de este florecimiento azucarero varios siglos más tarde. Véase Luis Gorozpe, “La caña de azúcar, opiniones de varios profesores extranjeros tomados por el agricultor” Sr.Lic.p.1-2. Joan Corominas, “Diccionario crítico etimológico de la lengua castellana”, I, p.352., Noel Derr, The history of sugar, 2 vols., Chapman & mp. Hall, Ltd. London, 1950.     10    Hernán Cortés, antes de atacar definitivamente a la gran Tenochtitlán, emprendió la conquista de las tierras del sur, ocupadas entonces por un fuerte grupo de guerreros mexicas y tribus sojuzgando sucesivamente a Oaxtepec, Yecapixtla, Yautepec, Jiutepec y por fin a Cuernavaca, el 13 de abril de 1521. Una vez consumada la conquista española, el emperador Carlos V dio a Cortés, por una cédula de junio de 1529, el título de Marqués del Valle de Oaxaca y le cedió una inmensa porción del territorio conquistado. Entre las villas y los pueblos del actual Morelos que pasaron al conquistador se hallaban: Cuernavaca, Oaxtepec, Yecapixtla, Yautepec, Tepoztlán. Los códices que aún se conservan expresan que la mayoría de los pueblos de las grandes jurisdicciones de Cuernavaca y Oaxtepec formaron parte del marquesado del valle, con excepción de Ocuituco que fue dado en encomienda a Fray Juan de Zumárraga. La conquista española tuvo el doble carácter de militar y religiosa. Cortés sojuzgó por la fuerza a los indios, los misioneros completaron la labor evangelizando a los recién sometidos. La conquista española terminó con las propiedades comunales establecidas por los indios y creó los pueblos y los ejidos, siguiendo el modelo español. En el año de 1786 se establecieron las Intendencias de Ejército y Provincia, y con tal motivo el territorio del hoy estado de Morelos quedó comprendido dentro de la Provincia o Intendencia de México. La población indígena, huyendo de la tiranía del conquistador encomendero que la destinaba al trabajo rudo de los campos y las minas, sin atender en nada a su conservación, no obstante las leyes y las disposiciones terminantes de los monarcas de España, se refugió en los montes, dispuesta a morir antes de seguir en manos de los encomenderos. Entonces los prelados y 11    los religiosos españoles resolvieron pedir a la Metrópoli la reducción de los indios a los pueblos. El 26 de mayo de 1567, el virrey, dio una ordenanza sobre mercedes de tierras, concediendo a los pueblos hasta 500 varas para el fundo legal y 1000 varas para las estancias de ganado. Carlos II, el 4 de julio de 1587, amplió el fundo legal a 600 varas y a 1100 varas para las estancias de ganado; Fernando VI, el 12 de julio de 1695, ordenó que las 600 varas del fundo legal se contaran desde el atrio de la Iglesia del pueblo. Todas las disposiciones perfectamente claras y muy bien definidas establecieron en la Nueva España los ejidos y los fundos legales, respetados durante todo el gobierno virreinal, e hicieron que los pueblos se acostumbraran a tener una vida comunal, explotando sus ejidos; pero sin poder disponer de ellos ya fuera por venta o por cesión a otros pueblos o particulares. Así que la explotación en común se hizo arraigada costumbre y dio como resultado el gran cariño del indio hacia el ejido, que tuvo como cosa propia. Las tierras de Morelos que, como se ha apuntado aquí, pertenecían casi en su totalidad al Marquesado del Valle de Oaxaca, siguieron teniendo su asiento en los pueblos que existían en la época de los emperadores aztecas y la mayoría de ellos conservaron sus ejidos durante mucho tiempo. Ya durante la Guerra de Independencia ninguna disposición se dio en relación con los ejidos y propiedades de los pueblos, los que siguieron trabajando la tierra en las mismas condiciones que lo habían hecho durante la dominación española. Consumada la emancipación de México, las tendencias de los gobiernos fueron cambiando paulatinamente y se notó la bien marcada idea de acaparar la propiedad, principalmente por las clases pudientes para formar los latifundios, que, como fue natural, comenzaron por los terrenos comunales que 12    podían ser vendidos; pero se siguieron respetando los pueblos. Ya en plena época de la Reforma, la ley del 25 de junio de 1856, en su artículo 8°, excluyó de la desamortización a los ejidos, a los que consideró propiedad nacional; pero la Constitución Federal de 1857, en el inciso II del artículo 27, prohibió a las corporaciones civiles y religiosas la adquisición y administración de bienes raíces, con lo cual quedaron derogadas las disposiciones anteriores y, prácticamente, todas las leyes y ordenanzas que se habían dado con respecto a las tierras. No habiendo garantías para la conservación de la propiedad ejidal, ésta fue pasando poco a poco a poder de los propietarios de las haciendas que se habían formado, las que aumentaron sus extensiones a costa de las tierras de los pueblos, algunos de los cuales desaparecieron por completo. En la época independiente y en tiempo del gobierno de Escandón tomó mayor incremento el problema del latifundismo en el Estado de Morelos. Las haciendas tuvieron gran auge; pero en cambio el descontento de los pueblos se demostró palpablemente, con ataques más o menos directos a las haciendas o a los poseedores de ellas. En el año de 1862, para organizar debidamente la campaña contra las tropas invasoras, el gobierno de Don Benito Juárez dividió el extenso estado de México en tres distritos militares, habiendo sido el Tercero el que comprendió los distritos políticos de Cuernavaca. Esta división fue a no dudarlo, la que trajo las primeras ideas para la conformación de un estado Independiente. Terminada la guerra, el Distrito Militar no tuvo razón de ser; pero los pueblos pidieron que subsistiera mientras se levantaban las actas para pedir formalmente la creación de la nueva Entidad Federativa. A esto debe agregarse la circunstancia de que el Distrito Federal se encontraba 13    absolutamente rodeado por el extenso estado de México. Resultando el asunto en el Congreso de la Unión, y el 16 de abril de 1869 se promulga el decreto por el cual se erige el estado de Morelos con el territorio que había sido Tercer Distrito Militar. Uno de los más entusiastas para dar vida independiente a la entidad suriana fue el general don Francisco Leyva, diputado al Congreso General por los tres distritos políticos de Cuernavaca. Siendo además su primer Gobernador Constitucional, fue precisamente el general Leyva quien siguió una política liberal de franca defensa de los pueblos, que lo enfrentó con los hacendados, logrando salir avante, en ocasión de un sonado amparo de varios hacendados españoles. Al triunfo de la Revolución de Tuxtepec, en el año de 1876, dio fin a éste que fue uno de los gobiernos más progresistas, quedando el estado en manos de los victoriosos porfiristas. Porfirio Díaz antes de ser presidente de la República fue uno de los principales opositores de Juárez. Fue, un joven militar prestigiado que encabezó el movimiento contra la radicalización de Lerdo de Tejada al querer llevar la Reforma hasta sus últimas consecuencias. En 1876, Porfirio Díaz subió al poder con el triunfo de la revolución De Tuxtepec bajo la promesa de reparto de tierras. Entonces el Estado se consolidó y se centralizó el poder como nunca. . Durante el porfiriato la economía funcionó de acuerdo con las transformaciones que tenían lugar en las economías industriales. Había por parte de los países más desarrollados una fuerte demanda de materias primas y alimentos que, en la división internacional del trabajo, era crecientemente abastecida por las economías más atrasadas. La política económica del régimen porfirista atendió ampliamente esa exigencia. Por eso fue que los 14    sectores clave en el crecimiento económico de esta etapa de la historia nacional se desarrollaran fundamentalmente con bases en la inversión extranjera directa. Los capitales foráneos que llegaron de manera creciente en el transcurso del periodo porfiriano, tuvieron como destinos principales la minería – de metales preciosos en un inicio y posteriormente de los metales de uso industrial –, los bancos y los ferrocarriles. A lo largo del periodo de 18761910, la inversión extranjera se fue volcando en actividades orientadas a la exportación de productos primarios y en la construcción de la infraestructura que tales actividades requirieron. 3 Cabe decir que el sector agrario ocupaba a la mayor parte de la fuerza de trabajo, producía los alimentos y la riqueza del país y era fuente de acumulación originaria de la naciente burguesía. Algunos de los cambios más significativos en el agro, que se consolidaron en el último tercio del siglo XIX fueron: la restructuración de la propiedad rural y la modificación en la composición social en todos los niveles desde las clases que detentaban el poder hasta los trabajadores del campo, que enfrentaron una nueva etapa de dependencia y control, ejercida sobre ellos por los hacendados. Todo esto fue posible a partir de la constitución de un sector de empresarios nacionales y extranjeros con suficiente capital y con el interés de acrecentarlo no sólo a través de formas de acumulación violentas y fraudulentas, sino también mediante la inversión productiva. La participación del estado fue mucho más decisiva en torno a la distribución de la tierra, a través de una serie de                                                              3 “Los capitales colocados en empresas agrícolas se dirigieron a la producción de café, cacao, algodón y otros productos de exportación; las inversiones en el sistema bancario tuvieron por objeto el financiamiento y consolidación de las empresas extranjeras y la captación de recursos internos para el mismo propósito”…en José Luis Ceceña Cervantes, México en la Órbita Imperial, México, Ediciones el Caballito,1976, p.51-53.                                                                                                       15    disposiciones legales que facilitaron la concentración en menos de la clase dominante y liberaron fuerza de trabajo, lo que permitió que en el tercer cuarto de siglo de siglo XIX se transformara la estructura de la propiedad y se modificaran las relaciones sociales de producción. La Ley de desamortización de 1856, al convertir la propiedad comunal en individual – cuando realmente quedó en manos de los miembros de las comunidades indígenas – facilitó su enajenación, y pronto formó parte de las grandes haciendas. Así mismo, abrió la posibilidad de una expropiación masiva a las comunidades indígenas. Las tierras del “propio” – cuyos frutos se destinaban a solventar los gastos del ayuntamiento – cuando fueron reclamados por las comunidades fueron puestas en subasta o pasaron a manos de los arrendatarios. Pero no de los pequeños arrendatarios, estos no se beneficiaron de tal disposición. Dos obstáculos se erigían frente a ellos: los impuestos y gastos de escrituración que había que liquidar y, cuando se trataba de tierras de la iglesia, la amenaza de excomunión que había lanzado el clero. Quienes aprovecharon estos decretos fueron los hacendados y las personas acaudaladas – entre ellos “liberales prominentes” – que denunciaron las propiedades y se las adjudicaron. 4 Pero hubo dos factores más que estuvieron precedentes en esta ambición de expansión y concentración de la propiedad territorial: el dominio del mercado local y quizá la pasión de poder, la                                                              4 Bowell publica un cuadro sobre la “Adquisición de inmuebles por parte de liberales prominentes durante el año de 1856 según los términos de la Ley Lerdo”, extraído de la Memoria de la Secretaria de Hacienda de 1857. Entre ellos se encuentran: Benito Juárez, José Ma. Iglesias, Manuel Payno, Ignacio Comonfort, Ignacio Ramírez, etc. T.G. Powell, “El liberalismo y el campesinado en el centro de México (1850-1876), México, SEP, 1974 (Sepsetentas núm.122) p.174.   16    búsqueda de prestigio y de “status” social, heredados de la época colonial. 5 Al respecto lo dice G. Mc Cutchen Mc Bride: “La hacienda tiene un valor social que sobrepasa en mucho su valor económico. A través de toda la historia de México la clase terrateniente domina generalmente la situación social. Más aun los grandes terratenientes han gobernado el país”. Ahora bien, aunque no hubo el cambio en la propiedad rural que se había esperado, si se dio una redistribución de la tierra, que por un lado deterioró el poder económico de la iglesia, destruyó la base económica y cultural de la comunidad indígena y fortaleció a los hacendados, y a los nuevos ricos-funcionarios. La acción de las compañías deslindadoras cerró este episodio durante el porfiriato. Hasta mediados del siglo XIX no hubo una modificación significativa de la hacienda respecto a la del siglo XVIII, como se aprecia en las haciendas azucareras, en cuyo seno se realizaban la fase agrícola e industrial de la producción. Un ejemplo de ello es la hacienda de Zacatepec, ubicada en la municipalidad de Tlaquiltenango, distrito de Juárez, en el estado de Morelos. Sus terrenos eran de tres tipos: planos, de loma y de agostadero. Todos sus terrenos eran de buena clase, es decir, adecuados para el cultivo. La hacienda contaba con un total de 1684 hectáreas. Las dimensiones de los tipos de terreno eran las siguientes en 1910:700 hectáreas de riego, 100 hectáreas de temporal y 884 de agostadero. 6                                                              5 George Mc Cutchen Mc Bride, The Land System of Mexico, “Los sistemas de propiedad de la tierra en México, México 1923, p. 36   6 Tortolero Villaseñor, Alejandro; De la coa a la máquina de vapor; Editorial, Siglo XXI Editores, México 1995, p.329.   17    Juan Pagaza fue el propietario de la finca. Para la irrigación de sus terrenos aprovechaba las aguas de río Apatlaco, afluente del río Amacuzac, de jurisdicción federal. Se tomaban de ese río un mínimo de 2000 litros de agua por segundo. 7 Zacatepec, a finales del siglo XIX, era administrada por Tomás Ruiz de Velasco y posteriormente lo sucedió su hijo, el ingeniero agrónomo Felipe Ruiz de Velasco, durante la primera década del siglo XX. La importancia de Felipe Ruiz de Velasco para Zacatepec está en el aporte de carácter científico, pues introdujo elementos nuevos en los trabajos de cultivo, en aras de una mayor producción: la introducción del drenaje, surcar con nivel y el uso de abonos, que, para la época, eran elementos nuevos que hacían cultivables terrenos que no lo eran y permitían la reutilización de las aguas rescatadas por el drenaje y el “acholoteo” de los surcos. Los terrenos de la hacienda de Zacatepec presentaban dificultades para el cultivo de la caña de azúcar, al ser muy húmedos eran necesarias algunas modificaciones como la introducción de drenaje. Este elemento tenía importancia porque el cultivo de caña requería de las cantidades justas de agua. Los terrenos en malas condiciones necesitaban mayor atención e inversión y por otro lado los que representaban buenas condiciones aminoraban el costo del cultivo. Los terrenos calificados como malos o de regular clase pero ubicados en zonas privilegiadas por contar con aguas abundantes, con clima apropiado, con proximidad a los centros de consumo y con vías férreas cercanas, no debían abandonarse porque con una “pequeña” inversión en drenaje en los terrenos que fuera necesario los colocaba en la categoría de terrenos de primera clase. El saneamiento de terrenos, logrado por el drenaje, era para la época una de                                                              7 Véase, Archivo Histórico del Agua, Aprovechamientos Superficiales, (A.H.A., A.S.) exp. 6472.   18    las conquistas más importantes de la agricultura moderna; por ejemplo, si tres hectáreas de terrenos sin drenaje producían 120 toneladas de caña, una sola hectárea perfectamente drenada producía las mismas 120 toneladas. 8 Felipe Ruiz de Velasco introdujo el drenaje en los campos de la hacienda de Zacatepec desde 1882, funcionando al menos hasta 1910, obteniendo buenos resultados, es decir, vigorosos y tupidos cañaverales. Ahora bien, si se tuviese que reseñar en pocas palabras el significado profundo del porfiriato, este sería desde el punto de vista económico y social, siendo los principales: a) lo que ya se mencionó sobre la expansión de las exportaciones y de las inversiones extranjeras; b) los efectos de la red de ferrocarriles y de la abolición de las aduanas internas: integración del mercado nacional (no de manera total), consolidación de la Ciudad de México como un polo político y económico, mayores posibilidades de industrialización moderna (incidiendo negativamente en los sectores artesanales), vinculación directa con el mercado norteamericano; c) cambios técnicos de gran trascendencia: introducción de la red de electricidad como fuente de energía, tecnificación muy elevada de las actividades mineras, introducción de maquinaria industrial                                                              8 La importancia de F. Ruiz de Velasco está en la información que ha dejado sobre la hacienda de Zacatepec en su estudio Historia y revoluciones del cultivo de la caña y de la industria azucarera en el estado de Morelos, Su formación como ingeniero agrónomo la consiguió en Bélgica y estuvo en contacto con ingenieros que practicaban el drenaje para el saneamiento de los terrenos húmedos y posteriormente a su llegada a México puso en práctica sus conocimientos sobre el saneamiento del exceso de humedad de los terrenos. Ahí estuvo su principal aporte al ámbito agrícola de México, aunque, según consideraciones de él este método no se extendió solo por desconocimiento. Ver las cifras de producción de Zacatepec en: Ruiz de Velasco; 1937. El administrador de Zacatepec, consideraba junto con otros agrónomos que era lamentable que el drenaje en México no era lo suficientemente conocido y por eso la diferencia en cuanto a las grandes construcciones de drenaje a gran escala realizadas en Europa; que les permitían obtener el mayor aprovechamiento de los terrenos., Véase, Felipe Ruíz de Velasco, Historia y evoluciones del cultivo de la caña y de la industria azucarera en México hasta el año de 1910. Editorial Cultura, México 1937, p. 380.   19    perfeccionada (posibilitado, por la capacidad de importar, por el auge en las exportaciones). d) de las profundas contradicciones sociales y económicas del periodo porfiriano: por la persistencia de “arcaísmos” a la par de novedades de peso; disparidades regionales violentas; por una tremenda concentración del ingreso garantizada por altos niveles de represión; crisis coyunturales en las que se manifestaron las contradicciones más que en los periodos de bonanza económica, culminando en la fase decisiva de los años de 1907- 1910; e) por una monetización de la economía, y por el desarrollo de las estructuras financieras y bancarias. Esto implicó un tipo de crecimiento volcado hacia el exterior en cuanto al destino del grueso de las ganancias, y también al hecho de que se dinamizaron mucho más aquellos sectores de la infraestructura y de la producción ligados directamente a la exportación. Por eso se puede decir, que en este nivel como en todos los demás, el crecimiento porfiriano fue extremadamente heterogéneo y contradictorio. Considerando en primer lugar, a los hombres vistos como fuerza productiva. En este sentido la demografía mexicana, luego de seis décadas de crecimiento muy lento, volvió a dinamizarse, aunque no de forma espectacular: ya que la población pasó de unos nueve a cerca de quince millones de habitantes entre 1877 y 1910. 9 El aumento relativamente rápido y sostenido de la población significó potencialmente, un incremento de las fuerzas productivas, y también del mercado interno. Sí bien durante el porfiriato, México había tenido un fuerte crecimiento hacia afuera, a partir de 1900 las exportaciones comenzaron a bajar. En un                                                              9 El Colegio de México (ed.) Estadísticas económicas del porfiriato fuerza de trabajo y productividad económica por sectores, México, El Colegio de México, s. f. p.323. 20    principio la crisis internacional fue favorable para México, pues hubo demanda de productos nacionales, pero a la larga la industria nacional se vio afectada por la depresión internacional de 1907 y muchas empresas pequeñas tuvieron que cerrar al no resistir las consecuencias de la contracción. La crisis generalizada cerró el siglo y una época más de la historia de México. A partir de ese momento, la coyuntura internacional empezó a afectar cada vez más al país y contribuyó a agudizar las contradicciones que se venían gestando de tiempo atrás; la masa de obreros desempleados que se provocó con la contracción, las protestas siempre insatisfechas del campesinado y la nueva burguesía deseosa de poder, fueron el caldo de cultivo para que se gestara la revolución de 1910. 10 Después de 10 años de intensa lucha armada, aún en medio de disputas por el poder central y de un ambiente económico y social inestable, nuestro país entró en una etapa que puede considerarse de transición, pues de 1920 a 1934, aproximadamente, se fueron gestando las bases para el crecimiento económico y la diversificación de la sociedad. Dentro de estas bases destacó la germinación de un Estado “para todos” que, en adelante, tendría participación fundamental en la conducción del desarrollo económico y social. Este periodo se caracterizó por la reconstrucción nacional y por la reformulación de la estructura de dominación política para toda la sociedad, que incluyó principalmente la quiebra del modelo oligárquico en el ámbito económico y de un conjunto de acciones destinadas a restructurar, en el plano interno, las relaciones de un nuevo tipo de desarrollo nacional con la economía internacional.                                                              10 Leticia Reina, Las rebeliones campesinas en México, 1819-1906, México, ed. Siglo XXI América Nuestra, p. 29. 21    Entre 1920 y 1934 los rasgos principales de la economía mexicana fueron un crecimiento débil e inestable, la continuación de una precaria integración nacional del mercado interno y de la vulnerabilidad con respecto al exterior, una presencia dominante de la producción agro-minera exportadora y un incipiente desarrollo industrial. Ese panorama era parte de la herencia porfirista, cuyas inercias continuaron. La situación del país correspondía con la estructura económica predominante y su forma de funcionar. Al mismo tiempo, la composición de las exportaciones y el ritmo de crecimiento del producto en relación con el comportamiento del comercio exterior reditaban la dependencia de la economía mexicana del sector externo, que prevaleció en la etapa anterior a la Revolución. Además de la estrecha vinculación de las actividades económicas nacionales con el comportamiento de los mercados internacionales se dejó sentir a lo largo del periodo, pero fue claramente patente en los últimos años, cuando la economía mundial vivió la llamada “Gran Depresión (1929-1933)”. Durante este periodo la balanza comercial presentó, en términos generales, saldos negativos originados, sobre todo, por el deterioro continuo de las exportaciones, las cuales se vieron agravadas durante el periodo de depresión mundial. Se puede decir que para este periodo, la acción general del Estado se orientó hacia su reorganización política, jurídica y administrativa y, en el ámbito de la economía, hacia la reconstrucción y la infraestructura física destruida durante el movimiento armado (comunicaciones, riego, etc.) Para superar la difícil situación económica nacional, los distintos gobiernos del periodo destinaron parte de sus esfuerzos a la búsqueda de una modernización 22    económica e institucional que hiciera posible un crecimiento más estable sostenido y con un mayor respaldo popular. La nueva política económica surgió junto con el remozamiento y la creación de instituciones en los campos político, financiero y fiscal. Esta renovación requirió de la presencia de un “gobierno fuerte”, capaz de influir en la economía, de fortalecer la vida institucional y, en general, de crear las bases para una “articulación social”, 11 que, por un lado, contara con un sistema político estable y, por el otro, desarrollara una estructura económica menos vulnerable a las variaciones de la economía mundial. 3. Su población y principales pueblos Morelos es uno de los estados más poblados de la República en cuanto a su densidad por kilómetro cuadrado. En 1869, año de su creación, tenía una población de 142,114 habitantes, el censo de 1900 12 dio 160,115 y el de 1910 13 una cifra de 179,394 habitantes, lo que da un promedio de 36.57 habitantes por kilometro cuadrado. Como efecto de la Revolución, su población disminuyó, pues para 1920 se registraron sólo 103,440 habitantes; advirtiéndose un proceso de recuperación en los años siguientes como lo dejarán ver los datos del censo de 1930, donde se asienta la existencia de                                                              11 Esta es una noción de Alain de Janvry, que intento establecer un puente de interpretación entre el plano de la expresión política y el de los patrones de crecimiento, pudiéndose utilizar el concepto, para escudriñar las formas particulares de entrelazarse del régimen político y el patrón de crecimiento económico nacional. En la perspectiva histórica del estudio, el concepto de “articulación social” – y su contrario, de desarticulación –, se proyecta tanto sobre la estructura de los sistemas productivos nacionales como en los ámbitos político, social, espacial e incluso cultural. En Alain de Janvry, Historia de la Desarticulación social en América Latina, editores, K.S. Kim y D.F. Ruccio, Dept. and Develoment in Latin America. Notre Dame: University, Notre Dame, Press. 1985 p.108-109. 12 13 Censo de 1910, Secretaría de Agricultura y Fomento, p. 19. Ídem. 23    131,789 personas. 14 Respecto de la lengua, predomina el español en todas las ciudades y en la mayor parte de los pueblos; el náhuatl o mexicano, se conserva muy puro en casi todas las poblaciones del norte de Cuernavaca, principalmente en la región de Tepoztlán, estimado en alrededor de 26 mil personas que hablan todavía la armoniosa lengua mexicana. En cuanto a las etnias (razas) existen la blanca y la indígena, la primera representada por los criollos y mestizos, y la indígena por los descendientes de las tribus originarias que poblaron el territorio. En la parte sur aún se encuentran mulatos, descendientes de los negros traídos a raíz de la conquista. Entre las principales poblaciones se encuentran: Cuernavaca, capital del Estado, situada a los 18°54´52´´ latitud norte y 99°14´13´´ longitud oeste de Greenwich, con una altura de 1,542 metros sobre el nivel del mar. Se cree que fue elevada a la categoría de ciudad por Decreto del 14 de octubre de 1834, en 1869 formó la capital del nuevo Estado de Morelos. Cuautla, ciudad heroica por el sitio de 1812, fue también capital del Estado. Yautepec, Jonacatepec, Jojutla y Tetecala, cabeceras del mismo nombre, son poblaciones de importancia. El Estado de Morelos era una de las 28 entidades que conformaban la República Mexicana de esa época. La Constitución política que lo regía fue promulgada el 20 de noviembre de 1930. Adopta para el régimen interior la forma de gobierno republicano, representativo y popular, y tiene como base de la organización política y administrativa, el Municipio Libre. El Estado se divide en 30 municipios, dentro de los cuales, para esa fecha Zacatepec tenía el                                                              14 Gildardo Magaña, Emiliano Zapata y el agrarismo en México, en Revolución obras fundamentales, Instituto Nacional de Estudios Históricos de la Revolución Mexicana, Tomo I. p 9-80.   24    rango de ayudantía municipal, adquiriría el rango de Cabecera Municipal en el año de 1939. Zacatepec dentro de la región cañera Zacatepec es una palabra náhuatl que está constituida por los vocablos zacatl ‘zacate’ tepe-tl ‘cerro’, Así, Zaca-tepe-c puede entenderse como cerro del zacate. Su localización geográfica es como sigue: al norte 18°41´, al sur 18°37´ de latitud norte; al este 99°14´longitud oeste, a una altura media de 910 metros sobre el nivel del mar; con una superficie de 28,531 kilómetros cuadrados, que representa el 0.5% del total del Estado. Zacatepec cuenta con un clima cálido sub-húmedo regular con una temperatura media anual de 24.5° centígrados tiene una estación seca de noviembre a mayo y una de lluvias de junio a octubre. La precipitación pluvial en el municipio es de 960 milímetros anuales en promedio, con un máximo de lluvias en los meses de julio y agosto, siendo muy comunes las tormentas eléctricas durante el verano por la influencia del clima cálido y el relieve. Los meses más cálidos del año son abril y mayo que corresponden a la primavera, alcanzando temperaturas de hasta 40° centígrados; en contraste los meses más fríos son diciembre y enero cuando las temperaturas descienden hasta los 6° centígrados por la madrugada. En resumen, las primaveras son soleadas y calurosas con poca humedad; los veranos suelen ser húmedos y más agradables, con lluvia usualmente por las noches; el otoño (septiembre-diciembre) suele ser más benigno, terminando la temporada de lluvias a finales de octubre y comenzando el frio a principios de noviembre; y por último, el invierno que suele ser más seco, con temperaturas muy agradables durante el día y frías por la noche. Son comunes los fuertes vientos y tolvaneras entre febrero y marzo por la influencia de los frentes fríos 25    provenientes del Golfo de México. El territorio de Zacatepec se encuentra en su totalidad dentro de la provincia fisiográfica de la Sierra Madre del Sur y la depresión del río Balsas. Casi la totalidad del territorio municipal es un valle salpicado por algunos cerros como el del Venado, ubicado entre la comunidad de Galeana y Tequesquitengo, y el Cerro de la Tortuga, que se localiza en la comunidad de Tetelpa. Lugar afamado por poseer diferentes especies de plantas típicas de la selva baja, así como diferentes especies medicinales y fauna silvestre como conejos, ardillas, tlacuaches, iguanas entre muchas otras. Las alturas de estos cerros no superan los 1300 metros sobre el nivel del mar. El municipio de Zacatepec se ubica en la parte más alta de la cuenca del río Balsas, inmerso en la sub-cuenca del río Apatlaco y en la parte central del valle de Zacatepec, presentando una inclinación ligeramente hacia el sur, por lo que favorece escurrimientos fluviales importantes siendo atravesado de norte a sur por el río Apatlaco que nace en las estribaciones de la Sierra del Ajusco y recorre los municipios de Huitzilac, Cuernavaca, Temixco, Xochitepec y Puente de Ixtla en donde a su paso se le unen varias barrancas. Siguiendo en importancia la barranca de Poza Honda, la que tiene su nacimiento en las cercanías de la comunidad de San Miguel 30 en el municipio de Tlaltizapán, recorriendo varias colonias hasta desembocar en el río Apatlaco. Actualmente, aproximadamente, Zacatepec cuenta con 33,318 habitantes en una superficie de apenas 28.5 km2, por lo que esa condición lo convierte en el municipio más pequeño del Estado, en cambio su densidad de población es elevada (más de 1,190 habitantes por kilometro cuadrado), superado únicamente por tres municipios que forman parte del área 26    metropolitana de Cuernavaca, siendo estos los de Jiutepec, Cuernavaca y Emiliano Zapata respectivamente. Además, Zacatepec tiene en la actualidad una zona conurbada con las poblaciones del Mirador, Otilio Montaño, Santa Rosa 30 y Amador Salazar, del municipio de Tlaltizapán, lo que en conjunto hace una población de 45,000 habitantes. Respecto a la comunicación, cabe apuntar que dos vías férreas atraviesan al estado: la del Ferrocarril Central y la del Interoceánico. La primera, entre la ciudad de México y el río Balsas, en Guerrero, pasa por la capital del Estado, y corre de norte a sur, por la cañada de Cuernavaca, y toca sus principales haciendas, teniendo una extensión dentro del Estado de 126 kilómetros. El otro, el Ferrocarril Interoceánico parte también de la capital de la República y entra al Estado de Morelos cerca de la Estación de la Cascada, pasa por las ciudades de Cuautla, Yautepec y Jojutla y termina en Puente de Ixtla, estación también del Central. El Interoceánico tiene un ramal de Puebla a Cuautla y el desarrollo total de sus líneas, en el Plan de Amilpas, es de 195 kilómetros (actualmente en uso parcial). La Carretera de México a Acapulco atraviesa al Estado de Norte a Sur, entra por la Cruz del Marqués, monumento antiquísimo, construido, según parece, por el propio Hernán Cortés, y baja por las pintorescas estribaciones de los montes de Huitzilac, pasando por Cuernavaca, Xochitepec, Puente de Ixtla y Amacuzac, cruza el río del mismo nombre y entra al Estado de Guerrero para terminar en el puerto de Acapulco (años después, autopista MéxicoCuernavaca, actualmente llamada autopista del Sol). La capital del Estado se 27    encuentra unida por buenas carreteras con Yautepec y Cuautla, quedando también comunicada por este rumbo con la ciudad de México. Casi todas las poblaciones del Estado tienen caminos más o menos buenos; pero se puede asegurar que la red de carreteras de Morelos es importante y se encuentra en condiciones de dar fácil comunicación a todas sus poblaciones. 28    CAPITULO II UN NUEVO MARCO LEGAL Y LA REFORMA AGRARIA EN MORELOS 1.-El Artículo 27 de la Constitución de 1917 No pocas fueron, no obstante el cortísimo lapso de un mes y medio apenas, las jornadas memorables en que el Congreso Constituyente de 1916-1917 acometiera la patriótica a la vez encomiable tarea de construir al país, y de las que habría de brotar, ya, y en toda su magnificencia ese constitucionalismo social por el que tanto se hubo que luchar siempre, y que no en vano vino a dar a México la legítima gloria de haber “parido” la primera Carta constitucional político-social del mundo. Y en efecto, sólo un movimiento revolucionario tan profundo como lo fue el nuestro – y valga ello para afirmar los tintes marxistas de la Revolución mexicana – podría hacer sustituir al constitucionalismo puramente político que privara desde el Decreto Constitucional de Apatzingán hasta la Carta de 1857, el constitucionalismo social de 1917. 15 Finalmente, el nuevo concepto de la constitucionalidad iría surgiendo conforme iba analizándose el proyecto; de aquí que hayan resultado más que interesantes los debates que en torno a él tuvieran lugar; y entre los que se destacaron los que fueron motivados por las materias que más preocupaban a aquellos legisladores constituyentes: la libertad de enseñanza, las relaciones Estado-Iglesia, la libertad económica en                                                              15 Alberto Trueba Urbina, La primera Constitución político-social del mundo .p. 41.   29    materia de trabajo y la propiedad de la tierra; que concretamente dieran lugar a la aparición del constitucionalismo social, y que a la postre habrían de configurar los artículos 3°, 27, 123 y 130: verdaderas columnas que sirvieron de apoyo a nuestra Carta Magna. 16 Y en efecto, la historia de México parece estar nutrida del problema más añejo que han enfrentado los mexicanos: el de la tierra y las diversas tentativas que a lo largo de ella se han hecho para tratar de solucionarlo. La cuestión agraria llegaría a conformar la evolución misma del pueblo y a matizar definitivamente la trayectoria histórica de México, al grado de que con toda certidumbre se puede decir que en el meollo de nuestras luchas existenciales se ha hallado siempre el problema de la tierra, y no sería sino éste, pues, el que fundamentalmente diera lugar a la Revolución mexicana. De ahí, que la presentación del artículo 5° del “Proyecto de la Primera Jefatura” produjo una intensa conmoción en la Cámara por encontrarlo insuficiente para satisfacer las ansias populares, el artículo 27, que se refería a la propiedad de las tierras y los derechos del poseedor, causó mayor desconsuelo entre los constituyentes porque sólo contenía innovaciones de interés secundario sobre el artículo vigente de la Constitución de 1857, sin atacar ninguna de las cuestiones vitales cuya resolución exigía una revolución que había sido provocada e impulsada por la necesidad de una renovación absoluta en el régimen de la propiedad rústica.                                                              16 Es, Necesario apuntar que en el año de 1967, con motivo del cincuentenario de La Carta Magna, la Biblioteca Nacional de Estudios Históricos de la Revolución Mexicana publico un volumen en el que recoge hasta 50 destacadas intervenciones efectuadas en el seno de la referida asamblea constituyente, para abundar datos se remite al propio Diario de los Debates.   30    Esos motivos hacían que la resolución del problema agrario fuera de más urgencia y de mayor necesidad para el país, que la resolución del problema obrero, pues en aquel estaba vinculada, no sólo la prosperidad de las clases trabajadoras, sino la constitución orgánica de la nacionalidad misma en su base fundamental, que es la tierra, “la madre universal que da la vida”. Por otra parte, el obrero, por imposibilidad material, nunca ambicionó poseer la fábrica mientras que el campesino sí concibió desde el primer momento que su redención estaba en poseer la tierra. 17 Por consiguiente, el enunciado del citado artículo del proyecto era casi enteramente igual al contenido en el Artículo 27 también de la Carta de 1857, y si desde aquel entonces fue duramente combatido en pos de un liberalismo social que a la postre hubo de sucumbir ante el liberalismo individualista que preconizaba la filosofía política y económica imperante en el mundo entero, ahora que esta había cambiado radicalmente, resultaba ya caduca la posición que pretendía conferirle un papel que ya no podía representar. Nuestro liberalismo social estaba logrando romper al fin las cadenas que le habían impedido constitucionalizarse; válidamente se juzgaba que después del triunfo que significó la adopción del artículo 123 en materia obrera, la cuestión agraria se hallaba muy lejos de ser remediada con base en pautas tan pobres como las que le trazaba el proyectado artículo 27. Las modificaciones que proponía el señor Carranza 18 (decía Pastor Rouaix) eran importantes para contener abusos y garantizar el cumplimiento                                                              17 Pastor Rouaix, Génesis de los 27 y 123 de la Constitución Política de 1917, p. 8788.   18 A este respecto, el artículo establecía que la declaración de utilidad pública sería hecha por la autoridad administrativa correspondiente, “quedando sólo a la autoridad judicial la facultad de intervenir para fijar el justo valor de la cosa de cuya expropiación 31    las leyes del derecho de propiedad; pero no atacaban el problema fundamental de la distribución de la propiedad territorial que debía estar basada en los derechos de la nación sobre ella y en la conveniencia pública. Por este motivo, el debate del artículo 27 se había estado posponiendo indefinidamente, porque, al comprender su deficiencia, se esperaba que pudiera ser presentado con toda la amplitud indispensable, para dar satisfacción completa al problema social más vasto y más trascendental, que tenía enfrente la Revolución, en aquellos momentos condensada y representada por el Congreso de Querétaro. Tradicionalmente vino considerándose a la propiedad como uno de los clásicos derechos del hombre; el derecho de propiedad como derecho natural, anterior y superior al Estado; concomitante al hombre mismo; que en materia civil llegó a ser considerado absoluto e inviolable para usar y disponer libremente de las cosas, dando origen a tanta injusticia y desigualdad. Finalmente, el artículo 27de nuestra Carta de 1917 rompió con toda esa caracterización del derecho de propiedad, reconociendo a ésta su verdadera naturaleza de función social, que tiene por objeto hacer una distribución equitativa de la riqueza pública y cuidar de su conservación. La singular concepción ha hecho del derecho de propiedad desembocar en una serie de declaraciones que, derivadas de una realidad propia y venida de muy atrás, trastocan por completo la concepción que sobre el derecho de propiedad habían tenido todas las legislaciones hasta la de 1917. El primer párrafo del artículo 27 distingue dos clases de propiedad: originaria y derivada. Originalmente la propiedad corresponde a la nación, la que al trasmitir el dominio de ella a los particulares constituye la propiedad                                                                                                                                                                                se trata”. Se establecía, asimismo, la prohibición que hacían las Leyes de Reforma sobre la incapacidad del clero para adquirir y administrar bienes raíces. 32    privada; luego entonces la propiedad privada y la propiedad social son un derecho derivado que pierde, en consecuencia, sus antiguos caracteres “jusnaturalistas”. Ya no sería el derecho de propiedad, en efecto, un derecho natural concomitante al hombre mismo, como recitaba la Declaración francesa de 1789; tampoco será un derecho exclusivo, ni mucho menos eterno; será, por el contrario, un derecho derivado y temporal, que viene a llenar una función social; de ahí también el empleo de la palabra nación y no Estado. Nótese, al respecto, que el texto constitucional de referencia expresamente deposita el derecho de propiedad en la nación ya, y no en el Estado. Y aunque ambas palabras acostumbran emplearse sinónimamente, es bien sabido que el término Estado encierra, esencialmente, una concepción política, frente al carácter eminentemente económico-social del vocablo nación. Con ello quiso subrayarse, sin duda, la finalidad socioeconómica del derecho de propiedad. La propiedad privada está delimitada constitucionalmente en su extensión: por ello se considera afectable todo predio cuyo propietario tenga una superficie que exceda en conjunto a límites establecidos en la norma: 100 hectáreas de riego o humedad de primera, ó 200 hectáreas de temporal, ó 150 hectáreas de tierra dedicada al cultivo de algodón, ó de 300 hectáreas en plantaciones. En el caso de la ganadería, el límite es el que no excede de la superficie de agostadero necesaria para mantener hasta 500 cabezas de ganado mayor o su equivalente en ganado menor. En este punto la ley permitió que las mejoras territoriales que aumentaron la calidad de los predios, no modificaran su situación de inafectibilidad, aunque se hubiesen rebasado los máximos señalados. 33    Para acceder al derecho constitucional de solicitar tierra en propiedad social, los núcleos agrarios formados por 20 campesinos como mínimo, a título gratuito de las tierras excedentes de la propiedad privada o terrenos nacionales, para constituirse en el ejido, que se formaliza mediante una Resolución Presidencial. De donde, el ejido es una sociedad de interés social integrada por campesinos mexicanos por nacimiento, con un patrimonio social inicial constituido por las tierras, bosques y aguas que el Estado les entrega gratuitamente en propiedad inalienable, intransmisible, inembargable e imprescriptible. Sujeto su aprovechamiento y explotación a las modalidades establecidas en la ley, bajo la orientación del Estado en cuanto a la organización de su administración interna, basada en la cooperación y la democracia económica, y que tiene por objeto la explotación y el aprovechamiento integral de sus recursos naturales y humanos, mediante el trabajo personal de sus socios en su propio beneficio. Por otro lado, la comunidad es el núcleo de población con personalidad jurídica y es titular de derechos agrarios, reconocidos por Resolución Presidencial restitutoria o de confirmación sobre sus tierras, pastos, bosques y aguas, y que como unidad de producción, cuenta con órganos de decisión, ejecución y control, que funcionan de acuerdo a los principios de democracia interna, cooperación y autogestión conforme a sus tradiciones y costumbres. 2.-La cuestión agraria en Morelos El caso del estado de Morelos constituye un ejemplo más temprano de una reforma agraria radical en una región de cultivo de plantación. La industria 34    azucarera se encontraba en 1920 completamente destruida por los efectos de la guerra, la quema de los cañaverales, el robo de la maquinaria de los ingenios azucareros por las fuerzas de ocupación de Pablo González e, inclusive por la emigración de trabajadores calificados. 19 Los campos de riego, indispensables para el cultivo de la caña de azúcar se hallaban inutilizados por los daños a la infraestructura hidráulica de obras mayores y el azolve de la mayoría de los canales de distribución – apantles – o canal de riego. La posibilidad de una rápida recuperación de la industria – finalmente como se dio en la cercana región de Izucar de Matamoros, Puebla, por la acción del empresario azucarero Jenkins – se vio clausurada por el reparto agrario que pospuso por dos décadas la rehabilitación de los cañaverales. Varios proyectos se esbozaron, sin embargo, al respecto: en 1919 el ingeniero Domingo Díez planteaba la necesidad de recuperar la actividad azucarera. 20 Y en los tres lustros posteriores en forma reiterada se volvió sobre el asunto, en especial después de la fundación de Azúcar S.A. en 1932 – desde ese momento erigido como órgano rector de la industria azucarera nacional – El reparto agrario en Morelos comenzó con las acciones efectuadas por el propio caudillo del sur Emiliano Zapata en el transcurso de su movimiento, y fue una fuente de constantes preocupaciones para los gobiernos posteriores de León de la Barra, Madero, la dictadura de Huerta y Carranza. En algunos casos los campesinos posicionados de las fincas de las haciendas cultivaron caña de azúcar en pequeña escala para poder operar algunos                                                              19 John Womack Jr. Zapata y la Revolución Mexicana., Traducción de Francisco González Aramburo, 4ª. edición, XXI siglo veintiuno editores,sa. México, 1972 p. 255256. 20 Domingo Díez, El cultivo e industria de la caña de azúcar: el problema agrario y los monumentos históricos del estado de Morelos, Imprenta “Victoria”, 1919. 35    ingenios, destinados por el jefe agrarista a elaborar azúcar, con cuyo producto se podrían financiar algunas de las necesidades más apremiantes que la lucha ocasionaba, aunque las dificultades de la misma cancelaron casi de inmediato esta alternativa. 21 Asesinado el dirigente campesino en 1919 y ocupado el estado por las fuerzas carrancistas, el zapatismo parecía haber llegado a su fin. Sin embargo, la alianza tejida entre la dirección sobreviviente y Álvaro Obregón lo colocó nuevamente en una posición de fuerza, a tal punto que el Partido Nacional Agrarista se constituyó, como se sabe, en uno de los soportes fundamentales de su presidencia. En el estado, Genovevo de la O – uno de los dirigentes sobrevivientes – fue nombrado comandante de operaciones militares, y el antiguo médico de Zapata, José G. Parres, tomó posesión de la gubernatura del estado el 22 de julio de 1922. 22 Y en los pueblos se constituyeron casi de inmediato comités agrarios que solicitaron restitución de tierras, validación de los repartos efectuados por el general Zapata o, más simplemente, la legalización de las ocupaciones de hecho de los territorios de las haciendas. La labor de Parres y de los zapatistas que controlaban la Comisión Nacional Agraria fue canalizar esta inquietud dentro de los marcos legales vigentes, negando en la mayor parte de los casos las restituciones y legalizaciones de las ocupaciones, transformándolas en acciones de dotación ejidal. Las acciones agrarias tuvieron un gran dinamismo y entre 1922 y 1927 se distribuyeron 112,885 hectáreas, de las 318,145 que poseían las haciendas en 1910. 23 De estas, 16,560 eran de riego; 40,592, de temporal; y 54,817, de                                                              21 J. Womack, op. cit., 231. 22 Ib., p. 361. 23 C. González H. y A. Embriz O., Op. cit., p. 298.   36    tipos no agrícolas. Los años de mayor ritmo en el reparto fueron 1922, 1926 y 1927, que absorbieron el 14.4% el 21.4% y el 41.3% del total dotado en el período, respectivamente. Las haciendas perdieron el 35.5% de su superficie total para la creación de ejidos durante este periodo, pero este porcentaje aumenta su significación si se observa que fueron distribuidas el 53.4% de sus tierras de riego y el 55.2% de su superficie de temporal. De ahí que la desintegración de las haciendas azucareras por la reforma agraria fue todavía más profunda que lo que hacen ver las cifras anteriormente expuestas. En primer lugar, el sobrante de tierras de riego lo eran solamente en forma potencial por la destrucción de la red hidráulica. Inclusive muchas de las tierras de riego distribuidas a los pueblos estaban en la misma condición. 24 Por otra parte, el reparto no fue un proceso homogéneo ni ordenado. La dotación de tierras a los pueblos destruyó la unidad de los campos cañeros y rápidamente fueron dedicados a otros cultivos, en especial al maíz y en algunos casos arroz. 25 El siguiente cuadro, muestra el proceso de afectaciones de las cuatro mayores haciendas del estado de Morelos, y es representativo de la forma en que el campo cañero morelense fue parcelado y perdió toda significación como tal. Los empresarios azucareros habían desaparecido, muchos hacendados traspasaron sus propiedades a la Caja de Préstamos para Obras de Irrigación y                                                              24 Un ejemplo, el “complejo” sistema de irrigación de las haciendas cercanas a Cuautla – El Hospital, Santa Inés y Cuahuixtla – es descrito como “completamente abandonado, con los canales “azolvados a reventar”, por informes de la reforma agraria a comienzos de la década de los veinte, cf. Anuario del Registro Agrario Mexicano (ARAM), Cuautla, exp. 49, Tramitación de dotación, f, 98. Otro caso, el de los canales de la hacienda Santa Bárbara Calderón, en (ARAM), Calderón, exp. 43, Ejecución de dotación, fs. 5-8. Para la hacienda El Hospital, (ARAM), El hospital, exp. 37, Tramitación de dotación. El canal de la Hacienda de San Gabriel destruido, ARAM, Chisco, exp. 80, Tramitación de dotación, f. 74.   25 En 1930, el 77% de la producción morelense de arroz fue obtenido en tierras ejidales, cf. Revista “México en cifras. Anuario estadístico 1934”, p.51-52.   37    Fomento de la Agricultura por medio del sencillo expediente de no pagar los créditos que adeudaban con esa institución, descargándose así de los costos del proceso agrario. 26 Otros optaron por parcelar lo que les quedaba después de las primeras dotaciones e ir vendiendo esos predios, y algunos cambiaron el carácter productivo de sus empresas, como fuel caso de Santa Ana Tenango. 27 En general, el capital azucarero morelense abandonó la región, trasladándose a otros estados donde sentía mayor seguridad, como fue el caso de Sinaloa y Veracruz. 28 CUADRO 1 LAS CUATRO HACIENDAS MAYORES, ESTADO DE MORELOS EN 1910 HACIENDA San Juan Chinameca TOTAL (hectáreas) 64486 % de la Superficie total Estado Haciendas 12.9 20.3 Riego Hectáreas 638 Temporal Hectáreas 4939 Otras 44881 Santa Ana Tenango 38697 7.8 12.2 1648 16679 20370 San Gabriel Las Palmas 31100 6.2 9.8 887 6215 17930 Santa Clara Montefalco 24480 5.9 9.3 2794 11247 15785 Totales 163763 32.9 51.5 5967 39080 98966 FUENTE: Horacio Crespo y Enrique Vega V. Tierra y propiedad, en el fin del porfiriato, Tomo I, cuadro 13. Nota: La suma de las cualidades es menor que el total de la superficie de la hacienda debido a que quedó tierra sobre la que no se pudo especificar su calidad.                                                              26 Entre otras: Hacienda de Calderón, Anuario del Registro Agrario Mexicano (ARAM). Calderón, exp. 43. Ejecución de dotación, fs. 5-8. Hacienda de San Vicente, (ARAM), Jiutepec, exp. 5, Tramitación de dotación, f. 35. Hacienda Temixco, (ARAM), Santa María Ahuacatitlán, exp. 146. Tramitación de restitución, fs. 40-44. Hacienda de Chinameca, (ARAM), Tepehuaje, exp. 185, Ejecución de dotación, f. 14. Hacienda de Oacalco, (ARAM), San Agustín (Amatlipac), exp. 148, Ejecución de dotación, fs. 2-3. 27 Laura Helguera R., “Tenango: metamorfosis campesina”, en Los campesinos de la tierra de Zapata, I, p. 136-138. 28 David Fisher, The Influence of the Agrarian Reform on the Mexican Sugar Industry, p. 28.   38    Como vimos, en el resto del país la industria azucarera casi no había resentido los efectos de la reforma agraria. Mientras que en Morelos, en 1930, el 40% de la propiedad de las haciendas había sido distribuido y cerca del 30% de la superficie total del estado era ejidal, mientras que en Veracruz las tierras ejidales sumaban solamente el 0.6% de la superficie del estado y el 4.7% de las áreas cultivables, con el 7.1% de su valor. Y en Sinaloa, sólo el 0.2% de la superficie del estado era ejidal, mientras que la propiedad en manos privadas significaba el 95% del valor total. 29 Por consiguiente, Morelos, que había marchado a la cabeza de la industria azucarera nacional hasta 1912, llegando a elaborar en sus 26 ingenios alrededor del 30% del total de la producción nacional, literalmente había desaparecido de dicha actividad. Con la destrucción de los ingenios y de los campos cañeros la economía del estado quedó sumida en la ruina total. El erario estatal pasó a depender enteramente de los subsidios federales y hacía 1925 la situación depresiva era tal que se pensó seriamente en los planes de reinstalación de la industria azucarera en el campo morelense. 30 De manera posterior, esta sería la base del impulso que el gobierno del general Cárdenas, para desarrollar y concebir lo que sería con los años por venir una de las principales obras, dentro de la industria azucarera nacional, en el periodo de mayor trascendencia para el estado de Morelos.                                                              29 Primer Censo Ejidal. 1935. Resumen General. D. Fisher, op. cit., p.32. R. Falcón, Op. cit., p. 17, 76-77. 30 Banco de México, La industria azucarera…, I, p. 21-22. 39    3.-La política económica durante el cardenismo En el lapso de 1934-1940 se amplió marcadamente la base de sustentación del régimen, los obreros y los campesinos adquieren un papel importante en la política a través de sus organizaciones de masas, cuya consolidación apoyó el propio Estado, al mismo tiempo que el ejército pierde importancia política y la institución presidencial se consolida. Lo anterior expresó sintéticamente el cambio en la vida política, que venía gestándose desde la década de 1920. Ello sin duda obligó al Estado a modificar su forma de intervención económica que pasó a ser más directa, extensa y diversificada, lo cual puede percibirse en la refuncionalización de las instituciones existentes y la creación de otras nuevas. Uno de los instrumentos principales que serían utilizados por el general Lázaro Cárdenas en su programa de gobierno, a partir de que toma posesión como presidente de la República, es el llamado plan sexenal, señalando a continuación como se ideó, quienes lo realizaron y la intención de la puesta en práctica. Inicialmente la hechura del plan le fue encargada a dos comisiones constituidas por personas muy afines al candidato oficial, (Cárdenas) que no de la generación de Calles. Ya que, en una de las comisiones figura el propio Cárdenas, Carlos Riva Palacio (presidente del PNR), Gabino Vázquez y varios legisladores, entre los que destacan Ezequiel Padilla y Genaro Vázquez En la comisión llamada técnica para distinguirla de la programática, figuraron los secretarios de Hacienda, de economía, de educación, de comunicaciones y de jefe del departamento de trabajo: es decir, muchos políticos prominentes todos de la nueva tendencia de 1915. Los comisionados para hacer el plan solo se reunieron en cuatro ocasiones. Enseguida una comisión dictaminadora de 40    diputados “enriquece la ponencia del comité ejecutivo nacional con el sentimiento vivo de las clases populares”. Léase el sentimiento de Graciano Sánchez en punto al agrarismo y el de Manlio Fabio Altamirano, en lo tocante a educación. Seguramente también el general Calles intervino en la elaboración del plan, pero los toques finales progresistas se los dio la convención del PNR, reunida en Querétaro del 3 al 6 de diciembre de 1933. 31 Seguramente solo una parte de la “elite” de la tendencia de 1915 intervino en la hechura del plan sexenal, pero al parecer otros miembros ilustres de esa tendencia no lo vieron con malos ojos. Y quizá al sector empresarial no le agradó, pero no dijo nada duro contra él. Sin embargo, las mayores críticas vinieron, como era de esperarse del sector tradicional católico. Los autores del plan de inspiración en los planes comunistas: lo vistieron con frases tomadas del socialismo soviético. Sin embargo, el plan mexicano quedó muy distante de la precisión de sus modelos, y poco, fuera de su fraseología, que era socialista a lo ruso. Marcó, en términos muy generales, el camino a seguir e hizo una mezcla de principios liberales y antiliberales. Su punto de partida no fue, como se dijo que iba a ser, la lección de las estadísticas y de la experiencia. El mencionado programa comenzó por dejar bien establecido que el estado interpondría como promotor y como el de controlador en las principales manifestaciones de la vida del país. En el orden económico pugnaría por un régimen progresivo de economía dirigida, por un creciente intervencionismo estatal, regulador de las relaciones que se dan en el proceso económico entre los diferentes factores de la producción. Lo que no significaba que tuviera que                                                              31 Partido Nacional Revolucionario “Plan sexenal del PNR”, México, 1934, p. III- XIII   41    hacer a un lado el quehacer de la empresa privada. Procuraría evitar los monopolios y devolver a los mexicanos los recursos del país en manos de extranjeros, mediante el patrocinio de la inversión nacional en la industria extractiva y la hechura de una industria metalurgia mexicana que pudiera poner sin mentir y con orgullo en los artículos fabricados por ella el sello de “Hecho en México” por mexicanos”. En suma, conforme al plan sexenal, el apoyar a los empresarios locales en su lucha contra los empresarios de fuera. En donde estuvo más radical el programa aprobado en Querétaro fue en la cuestión agraria. Sobre esta se dijo: “El problema de mayor importancia en nuestro país es, sin ningún género de duda, el relativo a la distribución de la tierra y a su mejor explotación desde el punto de vista de los intereses nacionales, vinculado íntimamente en la liberación económica y social de los grandes núcleos de los campesinos que directamente trabajan la tierra: por lo cual continuará luchando por convertirlos en agricultores libres, dueños de la tierra y capacitados, además, para obtener y aprovechar el mayor rendimiento de su producción …El límite único de las donaciones de tierras y aguas será la satisfacción de las necesidades agrícolas de los centros de población”…, - en este contexto, se ajusta al planeamiento de la fundación del ingenio de Zacatepec - , el plan expuso con toda energía la necesidad del rápido “fraccionamiento de los latifundios”. Para satisfacer prontamente las necesidades de los campesinos y simultáneamente – en una doble intención - , establecer en definitiva una situación de confianza en las explotaciones agrícolas, libres de afectaciones posteriores. 32                                                              32 Partido Nacional Revolucionario, Op. cit., p. 20-37.   42    Sin tener una gran experiencia en el tema agrario, se acordó que para dar una mayor solidez a la redistribución del agro, la modesta Comisión Nacional Agraria se convirtiese en un eficiente departamento agrario (D.A.), disolviendo así las comisiones locales agrarias para permitir la creación de comisiones agrarias mixtas, incluyendo a un número igual de representantes del DA, del gobierno de cada estado y de las organizaciones campesinas. Y una vez terminada la división de la tierra debería meterse mucho empeño en organizar a los ejidatarios para la producción, y en poner a su alcance métodos modernos de cultivo, semillas selectas, fertilizantes y maquinas. Al mismo tiempo habría que estudiar las posibilidades agrícolas del país, y ampliar un programa de riego, a costa de la federación. Las autoridades federales también se volverían tutoras de la fauna y de la flora. A fin de mantener y desarrollar la abundancia de los bosques, el plan dispuso: estricta vigilancia para prevenir la tala inútil; trabajos de reforestación; medidas “especificas” para cubrir de arboles zonas que nunca los habían tenido y, por último, aprovecharse de los bosques de manera racional y económica, no para hacer leña con ellos. A los campesinos se les atendería formalmente, mediante el reparto de tierras, cooperativas, sistemas de riego, créditos, maquinaria, escuelas, hospitales y muchos discursos. 33 En cambio, “por lo que se refiere a la política obrera – según Lorenzo Meyer el plan se quedó en generalidades”. “El PNR – dictaminó - , hará que sus miembros en el poder desarrollen una política francamente sindical, fomentando y estimulando por todos los medios posibles la organización de los trabajadores sin más límite que el señalado por las leyes”. “También insistió en                                                              33 Loc., cit.   43    la aplicación de un salario mínimo y en el fomento de los contratos colectivos de trabajo que deberían convertirse en la forma única, o por lo menos preponderante de poner en relación a los patrones y a los trabajadores”. 34 El plan sexenal empezó a ponerse en obra antes de iniciado el sexenio de Lázaro Cárdenas. En vísperas de que asumiera el poder, se promulgó un código agrario. 35 Y se echó a andar el departamento agrario. Simultáneamente se publicaron numerosos artículos y libros referentes a la cuestión agraria que permitían ver, entre otras diferencias, la existencias acerca de este punto entre los “veteranos” de la revolución y los “renovadores” o “agraristas”, es decir, entre la minoría rectora que iniciaba la refinada y la minoría rectora que entraba al ejercicio pleno del poder. Dentro del contexto de la aplicación práctica del plan sexenal, el general Lázaro Cárdenas inició la reforma agraria con diferentes matices, uno de ellos fue la orden de construcción del ingenio azucarero de Zacatepec, en Morelos. Cabe decir que desde las reformas a los estatutos del Partido Nacional Revolucionario que apoyaba su candidatura, pasando por sus discursos y su “Plan Sexenal”, hasta el momento en que llegó a gobernar al país, el general Cárdenas hablaba constantemente de la necesidad de apoyar al cooperativismo. Pese a defectos de contextura ideológica y de planeación técnica, nunca en su vida el cooperativismo había recibido un impulso más decidido y trascendental. Hasta el momento fue el general Cárdenas él Ejecutivo que realizó los más audaces ensayos que le permitieron las circunstancias. Ya desde 1931, en el seno del Partido Nacional Revolucionario, funcionaba una Escuela Técnica Cooperativa, dirigida por el Lic. Rafael                                                              34 Antonio Henríquez Filio, “Nueva economía social: plan sexenal mexicano, 19351940”. Talleres Linotipograficos Mexicanos, México, 1935. 35 Diario de Debates de la Cámara de Diputados, 1° de septiembre de 1934. 44    Sánchez Lira, que otorgaba diplomas de organizador de cooperativas, funcionario cooperativista y maestro cooperativista. Esta formidable propaganda del general Cárdenas dio como resultado natural que le imitaran los gobernadores de los estados. La protección que el gobierno otorgaba a toda clase de organizaciones obreras o campesinas, hizo que éstas emprendieran prácticamente una carrera por el predominio de las ideas y planes que sostenían. En tanto el sindicalismo mostraba una fuerza cada vez más arrolladora, el movimiento cooperativo con la mayor premura que su sistema lo permitía, actuaba de modo decidido en todos los terrenos. Como la había ofrecido el presidente Cárdenas al segundo congreso cooperativo reunido en el Palacio de Bellas Artes en 1935, a principios del año de 1937, encargó al Lic. Enrique Calderón la elaboración de un proyecto de ley cooperativa que sería enviado por el Ejecutivo al Congreso de la Unión para ser discutido en su periodo ordinario de sesiones. La Liga Nacional Cooperativa, al tener conocimiento de los proyectos del Presidente de la República, convocó a sus mejores técnicos en la materia, los que, encabezados por el abogado Antonio Salinas Puente dieron prioridad a un magnifico proyecto que las organizaciones cooperativas presentarían al Congreso de la Unión como el único capaz de resolver los problemas cooperativos de la época. El objeto era tratar de que en la nueva ley se tomaran en cuenta los puntos de vista de los interesados; pero cuando notaron que el proyecto del Lic. Calderón era de tipo totalitario puesto que unía al movimiento cooperativo a la voluntad del Estado, resolvieron oponerse decididamente al proyecto del referido Lic. Enrique Calderón. 45    Históricos por demás fueron las discusiones públicas que tanto en la Cámara como en la prensa sostuvieron los partidarios del cooperativismo ortodoxo con los de la teoría comunista. Por primera vez y en forma resuelta, un movimiento popular se oponía a los propósitos de una corriente internacionalista comunista que se había infiltrado subrepticiamente en el régimen. La posición firme de la Liga, como la asumida por la comisión del general Iturbe, cobran, a distancia del tiempo, mayor valor, por haber sido sostenidas con valor inquebrantable. El resultado final fue que el proyecto del referido Lic. Enrique Calderón se modificó en tal forma que prácticamente quedó deshecho. En todo caso y para hablar en términos positivos, se puede afirmar que, aunque predominando la mayoría de los puntos de vista del proyecto original, muchas ideas de la Liga y de las sostenidas por el general Iturbe fueron incluidas en el proyecto de ley que fue finalmente aprobado. La ley fue publicada el 11 de enero de 1938. 36                                                              36 Cabe apuntar que la primera Ley de Cooperativas fue aprobada en diciembre de 1926. Siendo el general Plutarco Elías Calles presidente electo de México, se decidió a efectuar un viaje de estudio a Europa. En su recorrido por ésta, pasó por Alemania llamándole la atención las sociedades cooperativas de crédito rural fundadas desde hacía mucho tiempo por los incansables (Raiffeisen y Schultze-Delitch). Su interés fue marcado y se dedicó a recopilar datos respectivos del funcionamiento de las diferentes clases de cooperativas que visitó en Europa. Desde entonces, el general Calles sería el mayor convencido de la nobleza del sistema cooperativo. Por aquellos días (1925), era muy popular un manual de cooperativismo redactado en Jalapa, Ver., por el Lic. D. Luis Gorozpe, que de tiempo atrás había estudiado el cooperativismo con detenimiento, intitulado La Cooperación. Este libro llegó a manos del general Calles, e inmediatamente mando a buscar al autor, tan convencido estaba el general Calles, que le recibió diciéndole, “he leído íntegramente su obra” y después de esa breve charla, el general Calles comisionó al Lic. Gorozpe para que redactara una propaganda en folletos sobre cooperativismo. Los cuales serían repartidos gratuitamente por toda la República, como una labor preparatoria y de difusión, para establecer más tarde las sociedades cooperativas de todos tipos. Posteriormente se acordó redactar un Manual para los fundadores y administradores de cooperativas en México, del que se imprimieron 50 000 ejemplares que fueron repartidos gratuitamente. Preparado así el terreno, se formuló entonces un proyecto de Ley de Cooperativas por la entonces Secretaría de Industria y Comercio, el que fue enviado al Congreso de la 46    Cooperativas de producción Por la tendencia social de la revolución mexicana se ha ensayado en México el establecimiento de cooperativas agropecuarias, pero desafortunadamente sin mayor éxito: es verdad que algunas han logrado una gran prosperidad, pero la mayoría ha quedado rezagadas y otras más han desaparecido. Esto se debe a múltiples factores, como la desorganización, la falta de conciencia cooperativa de los afiliados, ausencia total y parcial de financiamientos oportunos, fallas en la comercialización, etcétera. Estas cooperativas que explotan la tierra en común producen maíz, frijol, arroz, frutas, legumbres. Desafortunadamente no existen datos confiables con respecto al volumen y el valor de la producción, el capital social, y el reparto de rendimientos. Las cooperativas agroindustriales fueron creadas como fruto de las disposiciones legales vigentes que se refieren a las cooperativas de participación estatal. El gobierno mexicano con objeto de crear fuentes de trabajo y levantar algunas áreas deprimidas del agro nacional, ha contribuido de modo decidido al establecimiento de este tipo de cooperativas, que si bien no todas han logrado la prosperidad deseada, otras han progresado y con ello han demostrado lo que se puede hacer cuando el Estado y los campesinos y obreros ensayan en grandes unidades productoras. En el ramo azucarero existen dos cooperativas de participación estatal: la de Obreros y Ejidatarios del Ingenio El Mante, en Tamaulipas; y la otra la de Obreros y Ejidatarios del Ingenio Emiliano Zapata, en Zacatepec, Morelos. La organización implantada en las zonas mencionadas consiste en la aportación                                                                                                                                                                                Unión, y aprobado en diciembre de 1926 y que se publicó el 10 de febrero de 1927. La que se denominó “Primera Ley de Sociedades Cooperativas”.   47    de caña de azúcar por los socios campesinos (ejidatarios y pequeños agricultores) a la fábrica operada por obreros y empleados, socios también de las cooperativas, bajo la dirección de un concejo de administración, elegido en asamblea general de representantes seccionales, y gerente general designado por el Estado. Los representantes referidos son designados, previamente, en asambleas seccionales, de campesino obreros y empleados. El hecho de que intervenga el Estado en la designación de los gerentes generales, se debe a que en todos los casos existe un contrato entre la cooperativa y el Estado, por el que éste, debido a las fuertes inversiones que realiza en el establecimiento y operación de esas grandes unidades productoras se reserva el derecho, pues es natural que tenga que cuidar la recuperación de dichas inversiones. Son de referirse los adelantos logrados en las cooperativas mencionadas – de la que nos ocuparemos de una en particular –, en donde los socios independientemente de los anticipos importantes que reciben por su trabajo, gozan de servicios sociales como hospitales, escuelas, campos deportivos, jardines de niños, etcétera, que indican el nivel de vida de los socios obreros y campesinos, superior a cualquier otro de los trabajadores asalariados que prestan sus servicios en las distintas empresas azucareras del país. No obstante lo dicho, es de lamentarse dos cosas: la primera consiste en que los socios no piensan en dejar la tutela del Estado, ahorrando para pagarle sus inversiones y manejar por su cuenta la empresa cooperativa: y la segunda, que tampoco el Estado promueve la educación cooperativa entre los socios, pues parece indicar que tampoco tiene proyectado que algún día los socios se 48    liberen de las deudas de las inversiones. Esta situación es la que hace pensar y creer a muchos de sus socios que el Estado es una especie de “Patrón generoso”; y a su vez éste, por conducto de sus gerentes, trata a los socios casi como asalariados, pues de cooperativismo sólo conocen la palabra. 4.- Las consecuencias políticas del cardenismo. Al inaugurar Cárdenas mediante la aplicación de políticas de orientación social una nueva era en México, se produjo una escisión en la sociedad mexicana. De una parte quedaron todos los beneficiados, de otra todos los perjudicados directamente, incluyendo a algunos grupos de campesinos y obreros que, no obstante pertenecer a los grupos sociales a los que se dirigían las políticas oficiales, no habían alcanzado beneficio alguno durante el sexenio. El efecto divisionista de esas políticas configuró una situación social y políticamente explosiva al hacer coincidir élites incongruentes con masas alienadas. Desde este punto de vista, la reforma agraria fue la medida que provocó los efectos más profundos, debido, sobre todo, a la rapidez en su ejecución. Si bien es cierto que el número de beneficiados fue impresionante –, poco más de un millón de ejidatarios – quedaban cerca de tres millones de campesinos con derechos ya reconocidos o expedientes instaurados para quienes no había tierras de buena calidad disponibles. Entre los primeros se encontraba la lentitud burocrática en los deslindes, paso previo a la adjudicación de la tierra. Si bien Cárdenas insistía en la rapidez en el reparto, llegando incluso a imponer como norma la entrega física de las tierras antes que la realización del trámite legal completo del procedimiento agrario y el fraccionamiento, la verdad es que 49    frente a la avalancha de solicitudes de dotación o ampliación de ejidos los organismos encargados de la reforma se encontraron imposibilitados para tramitar todas las peticiones. 37 físicamente En relación a las dificultades de índole política de la reforma agraria que contribuían a acentuar el temor y el recelo al gobierno, cabe recalcar las peculiaridades del movimiento agrarista, que en muchos lugares cobró una dinámica propia, entreverándose frecuentemente con intereses locales de personas o de grupo. Bajo la égida del reformismo agrario propiciado por las acciones del gobierno, los comités agrarios pronto se convirtieron en polos de atracción de campesinos sin tierras y en centros de acción para individuos ambiciosos, aspirantes a una carrera política o al predominio en el terruño. De esa confluencia de intereses entre la masa campesina que deseaba tierras y de políticos aspirantes, unida al juego de intereses de camarillas locales y a la corrupción de algunos funcionarios de la burocracia agraria, se derivó la multiplicación de peticiones de tierras sobre predios que según la ley no eran afectables. Así las cosas, la tensión en el campo aumentaba, dando lugar a buena parte de las quejas sobre inseguridad, proferidas a veces por intereses legítimos, otras por intereses políticos, y las más por terratenientes que no querían dejar de serlo. Pero los desajustes agrarios no se limitaban solamente a los expectantes peticionarios de tierras, alcanzaban también a los ya dotados; y el problema en estos casos era el monto de crédito y su orientación. Poco antes de tomar el poder el general Cárdenas se había creado, junto al Banco de Nacional de Crédito Agrícola, el Banco Nacional de Crédito Ejidal,                                                              37 Antonio J. Bermúdez y Octavio Véjar Vázquez, No dejarás crecer la hierba,… (El gobierno avilacamachista), Costa Amic, México, 1969; p. 137 y ss.   50    institución establecida para atender a un sector del campo que poco después aumentaría rápidamente pero hasta entonces al margen del crédito. Pronto los pequeños propietarios, temerosos siempre de una acción agraria legal o de hecho por parte de campesinos sin tierra, al ver disminuir los créditos oficiales, formaron un estruendoso grupo que tomaría la bandera de las rectificaciones a la política agraria. El tema incansablemente repetido por estos grupos sería la falta de seguridad en el campo. Sus representantes no dejarían de presionar al gobierno y ello indujo a Cárdenas a constituir una oficina especial para tramitar sus quejas. De la misma surgieron hasta mayo de 1940 cerca de 150 acuerdos que beneficiaban aproximadamente a 400 predios de pequeña propiedad, afectando en su favor poco más de 2000 hectáreas de riego y 30 000 de temporal. 38 Fue en realidad una medida de último momento, tomada por la actividad que venían realizando organismos como el Sindicato de Pequeños Agricultores o la Cámara Nacional de Economía que, en su búsqueda de adherentes, insistían en la inseguridad en la tenencia de la tierra y en la necesidad de rectificar el rumbo de la reforma agraria. Además, fue evidente que no sólo la reforma agraria había lastimado intereses creados; la política obrera también cosechó su cuota de descontentos. Frente al movimiento obrero, Cárdenas y su gobierno habían tratado de lograr un doble objetivo, político uno, económico y social el otro. Ya desde su campaña había instado a los obreros a formar un frente sindical único, y los disidentes de la CROM, con Vicente Lombardo Toledano a la cabeza, respondieron formando el Comité de Defensa Proletaria en los difíciles                                                              38 Secretaría de Gobernación, documento, p. 334. De esta obra es difícil derivar cifras absolutas porque las realizaciones del gobierno cardenista se ilustran en cuadros a base de símbolos y no de números.   51    momentos de la disputa Calles-Cárdenas, antecedente de lo que habría de ser la poderosa CTM. La coyuntura de su nacimiento fue política, pero también respondía a la idea cardenista de la organización de los diversos factores de la producción para lograr por la vía de su enfrentamiento, el equilibrio social. Por su origen e ideología – fuertemente marxista inspirada por Lombardo –, la CTM no se limitaba a ser una simple organización de defensa económica de sus agremiados; su incorporación al partido oficial reformado ya por Cárdenas, su divergencia ideológica, de tácticas e intereses frente a la CROM y la CGT, además de los éxitos primero en la lucha obrero-patronal, habrían de convertirla pronto en centro de gran influencia política y, por ello, en blanco favorito de los ataques de todos los que se sentían lastimados por el curso de las políticas oficiales. Además de favorecer la constitución y fortalecimiento de esta central, Cárdenas impulsó al movimiento obrero en general al adoptar una actitud benévola hacia el trabajador en los casos de conflictos obrero-patronales. Hubo durante su periodo especial preocupación por la organización sindical, que se manifestó en la divulgación oficial de las disposiciones legales sobre registro de asociaciones formas de organización, sus deberes y derechos – incluida la huelga que nunca se coartó por medios ilegales – Por último, más importante que el número de huelgas, fue la contratación colectiva, pues gracias a la organización de la fuerza obrera fue posible aumentar el número de los contratos colectivos de 435 en 1934 a 4321 en 1940. 39 Y en materia agraria, La Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio e Industria encontraba que la propiedad agrícola se había deshecho                                                              39 Secretaría de Gobernación, Op. cit., p. 385. 52    bajo el peso de la política revolucionaria, por haber “quitado a cada quien lo suyo, sin ponerlo en mejores manos”. 40 Por ello se declaraba a favor de la pequeña propiedad considerándola más fructífera que el ejido. 41 En un análisis publicado aparte, la confederación achacaba haber empobrecido a los campesinos al entregarles la tierra, pues según sus datos el ejidatario se encontraba con ingresos por debajo del jornal que percibían los peones hacia fines de los años treinta. Esto la llevaba a concluir que el resultado de la reforma agraria había sido el empobrecimiento de los antiguos dueños – por no haberse pagado la deuda agraria – y una mayor penuria para los campesinos al convertirlos en propietarios nominales, sin que todo ello hubiera aprovechado en nada a la agricultura del país. 42 Lo cierto es que los dos programas que puso en marcha el general Cárdenas, fueron ejemplos de su modelo de unidades de producción, las cooperativas obrero-ejidales para producción de azúcar, y que con el tiempo quedarían como los cimientos de un “edificio nunca terminado”: el Emiliano Zapata, en Zacatepec, Morelos; y El Mante, en Tamaulipas. Hablaremos de uno de esos pilares. El Ingenio Emiliano Zapata, levantado en Zacatepec, en un sitio muy cercano al de la vieja hacienda – la que analizamos aquí – Porfirista de ese nombre, que había obtenido la marca histórica de producción de azúcar de Morelos en su zafra 1908/09, fue el único central azucarero planeado íntegramente por el gobierno de Cárdenas, y era un proyecto por el que el Presidente experimentaba un especial orgullo. En su construcción se utilizaron generosamente los recursos del estado federal,                                                              40 Carta Semanal 69, 14 de mayo, 1938, p. 1 41 Carta semanal 105, 28 de enero, 1939, p. 3. 42 Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio e Industria, Análisis económico nacional, 1934/1940, s/e, México, 1940, p. 99-100. 53    invirtiéndose casi catorce millones de pesos manejados bajo el control directo del propio secretario de Hacienda, Eduardo Suárez. Desde un principio fue planeado como una industria cooperativa integrada en forma conjunta por los ejidatarios y los trabajadores de la fábrica, quienes elegirían al gerente de una terna propuesta por la Secretaría de Hacienda. Este central materializaba la idea del presidente Cárdenas de que los ingenios modernos de propiedad y administración ejidal serían el futuro de la industria azucarera nacional. 43 Un año después de haber ocupado la presidencia, Cárdenas ordenó el inicio de los estudios para el establecimiento de un gran ingenio, que se radicaría en Morelos como base para el renacimiento de la industria azucarera de ese estado arrasada por la Revolución. Algunos estudios de morelenses muy destacados, como Felipe Ruiz de Velasco, habían insistido en la necesidad de restaurar la capacidad azucarera de la región, y esta idea era fuertemente alentada también por el ingeniero León Salinas, gerente de Azúcar S. A. 44 Otra versión indica que el Zacatepec fue el resultado de una demanda efectuada por Rubén Jaramillo al general Cárdenas por medio de su tío político, el ingeniero Antonio Solórzano, como retribución al apoyo otorgado a su candidatura presidencial por los grupos agraristas radicales del estado. 45                                                              43 Lázaro Cárdenas, Apuntes, México, UNAM. 1972, vol. I, p. 385-388. 44 Felipe Ruiz de Velasco, Historia y evoluciones… op. Cit. p. 5-9, 487-504. 45 Rubén Jaramillo, Autobiografía y asesinato, p. 31-33. Vale decir que el 9 de enero de 1932 se constituyo Azúcar, S.A. En su consejo de administración estaban representados los principales ingenios y zonas productoras de azúcar del país con serie de acciones A, B, y C, que correspondían a las fábricas grandes, medianas y pequeños respectivamente. Los primeros elegían cinco delegados, los segundos dos y las últimas tres. Las acciones de tipo D, suscritas por el banco azucarero. Respaldaban la acción del presidente, que decidía en caso de empate y que no podía representar a ninguna de las otras series. Se pensó esta estructura para impedir la hegemonía de los mayores hacendados o de la coalición, más difícil, del resto. Los dos principales problemas a que se enfrentó la organización fueron el control de toda la producción para poder manejar el mercado interno y las eventuales exportaciones, y la limitación de la oferta con el sistema de cuotas por región y por ingenio. En ambos casos, la presión estatal, la influencia del general Plutarco Elías Calles y, en menor 54    El lugar de la construcción del ingenio fue escogido por que era el centro de una región con tradición secular del culto de la caña por las haciendas, ahora convertidas en ejidos, que podrían abastecerlo de materia prima con                                                                                                                                                                                medida de los gobernadores de Veracruz y Michoacán, generales Abelardo Tejada y Lázaro Cárdenas, y aun de los de Jalisco y Oaxaca, fueron decisivas para impedir que las divergencias y conflictos entre hacendados hicieran naufragar el intento. Finalmente, la constitución de Azúcar SA significo la definitiva cartelización de todos los productores azucareros mexicanos. En lo que respecta a la comercialización, la diferencia sustantiva en todas las organizaciones empresariales anteriores fue la “obligatoriedad” para los asociados de entregar su producción total a la empresa para su manejo y venta. Cada uno firmaba ahora el llamado “contrato tipo suministro”, que obligaba explícitamente a ello. Como afirmo Aarón Sáenz, el éxito de la operación dependía “del absoluto control” de la oferta y comercio del dulce. El proceso no fue fácil y para disciplinar a los hacendados fue necesaria toda la fuerza persuasiva de estado que, tanto la coacción apenas velada, como descarado ejercicio del “dumping” por parte de Azúcar SA para cortar cualquier intento de operación libre. También los banco s que disponían de edulcorante por garantías hipotecarias eludían la referida regulación, por lo que se les amenazo con entregarles en 48 horas todo el producto que tenían bajo su control la compañía en carácter de aval prendario de los créditos recibidos, con lo que el problema de toda su comercialización y el derrumbe resultante de los precios seria su responsabilidad, y así se logro que cooperasen. Es más, Sáenz propuso una política radical de “dumping” que aceleraría el fortalecimiento del cartel y doblego de esta manera a los disidentes. En cuanto a sistema de financiamiento de la industria azucarera mexicana moderna, surgida de la crisis de 1931, fue un elemento. Esencial la del ordenamiento del sector y del éxito de su cartelización. Fue el instrumento por el que los empresarios se comprometieron en un acuerdo básico con el estado, que con algunas restricciones y modificaciones operativas estuvo vigente hasta la década de 1960, y por el que aceptaron la regulación oficial del precio del dulce a cambio de obtener crédito, barato, suficiente y oportuno para el funcionamiento del negocio. Para el estado, el otorgamiento del financiamiento azucarero fue inicialmente la herramienta decisiva mediante la cual logro imponer la corporatización empresarial en uno de los sectores más importantes de la economía del país. El cartel constituyo el vehículo para que el gobierno pudiera hacer afectiva y viable la política de estabilización de la producción de acuerdo a las necesidades del consumo interno, resolviendo una crisis cuyos efectos económicos y sociales pudieran haber tenido alcances desastrosos. Pero más allá de la coyuntura crítica de 1931-1933, paulatinamente la administración fue ampliando su capacidad de regulación en particular en la cuestión de los precio en el mercado interno, lo que le permitió convertir al azúcar e un bien salario de bajo costo, esencial para la provisión energética de amplias capas de la población. Dentro de la estrategia de crecimiento industrial establecida durante el mandato del general Lázaro Cárdenas (1934-1940) y fortalecida en los siguientes sexenios presidenciales. Véase Memoria de los primeros cincuenta años de UMPASA, México UMPASA, 1981, p. 21-22, M. Hamilton, México. Los límites de la autonomía del estado, México, Ediciones Era, 1983. P. 271-272.   55    facilidad, beneficiando a la vez a los núcleos campesinos de una zona que había sido el corazón del zapatismo. 46                                                              46 J. Balmaceda, La industria azucarera mexicana, p. 193. 56    CAPÍTULO III LA FUNDACIÓN DEL INGENIO EMILIANO ZAPATA 1.- Fundación y creación de la Cooperativa Ejidal, del Ingenio de Zacatepec, Morelos. El proceso de la fundación fue consecuencia de la aplicación de las políticas públicas en el sector azucarero de los años treinta. Porque tras la superación de la crisis más profunda de su historia que conllevó también la fundación de un modelo económico, social e institucional de la industria azucarera en la década de 1930 que se fue consolidando en la siguiente y perfeccionando en los dos últimos años del gobierno del general Lázaro Cárdenas (1938-1940) y durante el de su sucesor, Manuel Ávila Camacho, quien debió sortear las dificultades acarreadas por la Segunda Guerra Mundial. Además, el contenido fundamental del proyecto azucarero construido como réplica programática a la crisis de 1931 fue la cartelización de la industria, consolidando una estructura monopolista de control y regulación del mercado interno. Como se puede ver, el acuerdo fue trabajoso y difícil, y necesitó de una permanente actualización en torno a las formas más complejas: el reparto de las cuotas de producción entre las fábricas, que automáticamente se reflejaba en los de venta, en una primera etapa y, luego su participación en la expansión del gran negocio azucarero, particularmente en el periodo de la segunda posguerra mundial. Y el instrumento clave de esta política y, en definitiva, del éxito de la integración corporativa fue que la asociación resolvió el problema secular de la industria: la disponibilidad de crédito seguro, oportuno y barato, proporcionado por los instrumentos financieros del Estado federal mexicano. 57    Las razones de esa intervención respondieron a múltiples factores. La primera y más coyuntural fue la importancia del problema económico social y político que implicaba la crisis azucarera. El estado mexicano, en segundo lugar, encontró en la asociación empresarial un instrumento idóneo para discutir y diseñar políticas en un sector de tanta significación socio-económica como el azucarero, lo que era además coherente con las tendencias corporativas que se desarrollaban por entonces en el país. Y en tercer lugar, utilizó la herramienta decisiva del crédito para participar de forma cada vez más determinante en las decisiones, proceso que culminó en 1938, cuando Azúcar S.A. se convirtió en la Unión Nacional de Productores de Azúcar S.A. – conocida ampliamente como UNPASA – , y los representantes públicos en su consejo de administración obtuvieron el derecho de veto. De esa manera el acuerdo entre gobierno y empresarios supuso la paulatina delegación de la capacidad de decisión de éstos en la política y economía azucarera, a cambio de seguridad crediticia y protección de todo el sector. Y coincidiendo con el fortalecimiento de su intervención en la corporativizacion empresarial azucarera, el Estado impulso también una política agrarista, la Reforma Agraria del gobierno cardenista que tuvo como efecto la eliminación del modelo de plantación que integraba verticalmente bajo una misma dirección la producción de caña y de azúcar – el modelo predilecto de Calles – remplazándolo en el campo con unidades ejidales de pequeños propietarios rurales, que quedaron a cargo del suministro de materia para los ingenios. La imposibilidad, por el veto estadounidense, de extender el sistema de grandes unidades agroindustriales dirigidas por cooperativas de obreros y campesinos, impuesto en las grandes centrales de Zacatepec, Morelos., y El Mante, 58    Tamaulipas respectivamente, las dos principales y más radicales realizaciones de Lázaro Cárdenas, en el sector, determinó la construcción de una estructura que se denomina de “asociación subordinada” de los cultivadores a los hacendados, sometida al arbitraje público, por la cual se garantizaba la provisión de la caña a cada fábrica, obligando a los primeros a plantar en su “zona de abastecimiento”, dando facultades a los segundos de inspección y control técnico de las cosechas, obligándoles el manejo del crédito agrario estatal asociado a los sembradores en el 50% del ingreso obtenido por zafra. Este fue el resultado de los llamados “decretos cañeros” de 1943 y 1944 del presidente Ávila Camacho, dictados en las urgencias del abastecimiento de la época de guerra y del desorden producido de la citada reforma agraria, pero que luego quedaron como modelo de organización de la industria del dulce hasta mediados de la década de 1970. El peso de esta estrategia fue soportado en gran medida y toda la primera etapa que se extendió hasta mediados de la década de 1970, por los productores cañeros, a través del citado mecanismo de la fijación de la cotización de la caña en función del precio final del azúcar. La experiencia mexicana de asociación corporativa en la industria azucarera es, en términos corporativos, una de las más profundas y duraderas de la historia azucarera mundial y uno de las más exitosos ejemplos de integración funcional del sector en la economía nacional. Por un prolongado periodo, sin embargo, como política económica distó de ser original. Al contrario, la cartelización de los productores privados y la intervención gubernamental en distintas actividades económicas fue una práctica común de importancia creciente internacionalmente hablando desde la 59    década de 1930, como respuesta a la depresión. En los años posteriores a la segunda guerra mundial fue vista con marcado recelo como una costumbre reprobable, teñida con los principios fundamentales de la libre competencia, como una amenaza poco transparente para los intereses de los consumidores y también como una conducta enemiga de la democracia y que había tenido mucha relación como el ascenso del fascismo totalitario al poder en varios países durante la etapa de entreguerras. 47                                                              47  Estas reflexiones provienen de uno de los principales estudios de los carteles de la época, E. Hexner, Carteles internacionales, México, FCE., 1950 (1° ed. En Ingles, International Cartels, Chapell Itill North Carolina Univ. Press. 1945), cap.I. en el mismo libro, cap. II. P. 227-235, analiza el caso, del dulce, incluyendo entre tales practicas los sucesivos convenios de la década de 1930, y afirma de modo contundente que (el carácter del comercio mundial del azúcar es una caricatura de proposiciones como la ley de la oferta y la demanda, el principio de la ventaja relativa del comercio internacional, el postulado de la división del trabajo entre naciones y las teorías tradicionales acerca del mercado de costos y precios, p.229). o sea, todos los principios de la teoría clásica. Dicho mercado se siguió rigiendo en el siguiente medio siglo por reglas que acentuaron aun más la referida caricatura. Además podemos señalar que el desarrollo económico- social de México, a partir del régimen cardenista, o sea del año de 1934 observaremos que dicho desarrollo registra aceleraciones y retrasos, encontrando períodos de un vigoroso impulso y otros de verdadero estancamiento, pero lo que destaca principalmente y despierta preocupaciones es que la tasa de desarrollo va de más a menos mostrando una tendencia claramente descendiente en el período señalado de 1934 a 1973. Hay varias explicaciones que pueden aclarar este fenómeno; siendo tres los factores más importantes: el fuerte aumento de la población, el lento crecimiento del mercado interno por el retraso de la agricultura con relación a la industria y el papel menos dinámico que desempeñaba el comercio exterior en la economía mexicana. También puede afirmarse que el crecimiento industrial es satisfactorio y que la industrialización hasta ese momento representaba la fuerza más poderosa del desarrollo, con algunas fallas que se debieron corregir en el corto plazo, para no correr el riesgo de enfrentarse a un mercado interno reducido por la falta de competitividad industrial. Dentro de un marco de capitalismo mixto con muy poca planificación y sometido casi enteramente a las leyes del mercado. La falla se encuentra precisamente en la falta de aquellas instituciones necesarias para redistribuir el ingreso, mismo que se ha concentrado en los sectores de la población más prósperos y más beneficiados por el desarrollo en perjuicio de los grandes sectores donde apenas llegan los beneficios del progreso. Véase, México desarrollo con pobreza (nueva edición corregida y aumentada), Enrique Padilla Aragón, XXI, siglo veintiuno editores, México, 1974, cap. II, p. 23-25. 60    Por consiguiente, también la política monetaria y la estructura financiera de México sufrieron modificaciones importantes en este periodo. La transición del esquema de crecimiento sustentado en las fuerzas externas hacia uno con eje en la economía nacional, sustituyó los recursos externos (inversión extranjera, exportaciones, deuda externa) que habían sido soportes de ese modelo. En este contexto la banca extranjera, que había creado un circuito propio, pierde importancia y la banca privada nacional, que se relacionaba con la agricultura y la minería, fue restructurada. Ambos sistemas bancarios disminuyeron su importancia en el financiamiento al desarrollo nacional. En el área financiera fue importante el aumento de instituciones “superestructurales” que ampliaron y profundizaron el control público sobre los movimientos financieros. De hecho, en los años treinta, se creó, con excepción de algunos bancos establecidos en la década anterior, todo el sistema oficial de fomento bancario. En efecto, se crearon el Banco Nacional de Crédito Ejidal para apoyar al ejido, quedando el Banco Nacional Agrícola para atender a los pequeños y medianos propietarios; los Almacenes Nacionales de Depósito, S.A., cuya función consistía en almacenar la producción agrícola, conceder créditos con base en las reservas y ayudar a los productores a conseguir mejores precios para su producción; el Banco Nacional Hipotecario Urbano y de Obras Públicas, fundado en 1933; el Banco Nacional Obrero de Fomento Industrial, establecido en 1936 con la finalidad de otorgar créditos al movimiento cooperativo en las distintas ramas de la industria, el Banco Nacional de Comercio Exterior, creado en 1937 para financiar la producción de bienes exportables, así como la importación de bienes necesarios para el 61    desarrollo del país. Paralelamente, entre 1935 y 1938 se modificaron y crearon nuevas leyes que redefinieron el papel del Banco de México en la economía. Estas modificaciones legislativas provocaron un cambio en la dirección y el control de las políticas de crédito y monetaria, de las exportaciones de oro y plata y de regulación del tipo de cambio. A diferencia de los años inmediatos a su creación, (cuando el gobierno suplantaba sus funciones), el Banco de México asumió verdaderamente su papel de institución central. El Banco de México, a partir de 1935, tuvo el monopolio completo de la emisión de billetes e incluso controles efectivos sobre los bancos comerciales; financió los crecientes déficit fiscales y más que dedicarse a sus viejas funciones, fue un instrumento de fomento al desarrollo que reclamaba el país. Las instituciones financieras especializadas en fomento daban cuenta del nuevo espíritu para impulsar sectores específicos, más allá de lo que podía hacer la banca privada. Estos apoyos se dedicaron a la agricultura, la construcción, el comercio exterior y a la nueva empresa publica. 48                                                              48  Se vivían nuevas funciones para el Estado, entre las que se encontraba la modulación de la acumulación misma, a través de la gestión de la fuerza de trabajo y monetaria. Así, no sólo era centralizada la moneda sino también la posibilidad de formular políticas de salarios y precios. Los cambios en la política económica norteamericana (mayor gasto público, seguros al desempleo, etc.), eran un ejemplo de las nuevas funciones que asumía el Estado para salvar al capitalismo. En el ámbito económico se puso en práctica una serie de medidas conocida como el New Deal y que se concentro fundamentalmente en la producción agrícola, la industria, la gestión de la fuerza de trabajo, de la moneda y del sistema financiero. En este marco externo se inscribieron las transformaciones cardenistas. Que, además se caracterizaron por un crecimiento dinamizado gracias al gasto público y los recursos financieros de largo plazo (que la banca de fomento estatal proporcionó en forma abundante); ocurrió un proceso sustitutivo de importaciones de productos agrícolas de plantación a nuevos productos agrícolas. Sin embargo, el valor de las importaciones no se recuperó en toda la década de los treinta y su ingreso no fue suficiente para impulsar y estimular la actividad económica como antaño. Las modificaciones en el ámbito económico tuvieron en la centralidad de la emisión y gestión de la moneda un instrumento fundamental para el financiamiento al desarrollo y su canalización a actividades prioritarias, particularmente al financiamiento del gasto público, creador de 62    Esta nueva acción obedeció a los cambios internos y externos. Las modificaciones en el sistema monetario y financiero norteamericano llevaron a la necesidad de cambiar nuestro sistema, de tal forma que se supliera al anterior que obedecía a otro patrón de crecimiento. Para poder formular un juicio certero respecto a la situación del cooperativismo, durante el régimen cardenista. Dos hechos saltan a la vista, puesto que han sido estudiados en muchos aspectos: el primero y que mencionaremos al principio, es el que se refiere al impulso dado por el régimen al cooperativismo y que jamás recibió en otros pasados. El presidente Cárdenas hasta donde sus compromisos políticos se lo permitan cumplía su palabra de fomentar el sistema cooperativo en la República mexicana, no obstante que para ello tuviera que quebrantar muchos intereses creados. Quizás el mismo presidente no llegó a sospechar jamás que el sistema cooperativo tuviese su dinámica y sus metas propias y por la misma razón, considerando sólo que era un movimiento emancipador le apoyó decididamente. La afirmación del impulso vigoroso que recibió el cooperativismo en la época citada se puede citar con las siguientes cifras: al principiar el año de 1941(en el anterior había finalizado el régimen cardenista) existían en total 1,715 cooperativas de diversas ramas, que agrupaban a 163,501 cooperativistas que tenían un capital suscrito de $ 15.266,271.67. Es decir, en seis años de gobierno, se habían fundado 937                                                                                                                                                                                infraestructura física y humana. Véase Estado y desarrollo, “La formación de la economía mexicana (1920-1982), José Ayala Espino, FCE., SEMIP., col. Industria Paraestatal en México. 63    cooperativas, con 131,739 socios que habían pagado un capital de $ 13.742,732.67. 49 Así pues, fue notorio el apoyo otorgado por el gobierno, al movimiento cooperativista mexicano. En el siguiente apartado referiremos, los principales artículos, de la “Ley General de Sociedades Cooperativas”, que de acuerdo a nuestra investigación tiene que ver con la organización de la cooperativa del Ingenio “Emiliano Zapata” de Zacatepec, Mor. Con el propósito de darles viabilidad práctica, al proyecto cardenista de Reforma Agraria, donde el régimen buscaba, la integración total de los Sectores campesinos y obreros, por la vía de organizarlos en cooperativas, el gobierno federal procedió a modificar las leyes existentes en la materia, comenzando por actualizar la Ley General de Sociedades Cooperativas, vigente, por la nueva ley, denominada, Ley Cooperativa de 1938. La que explicaremos de manera sucinta; Llevando como nombre; Ley General de Sociedades Cooperativas; con cinco títulos, V capítulos, 87 artículos, V artículos transitorios. De los cuales sólo citaremos, los que tienen relación directa con la organización y operación de la cooperativa de Zacatepec., de donde el artículo 1° refiere que serán sociedades cooperativas, aquellas que reúnan las siguientes condiciones: a).- Estar integradas por individuos de la clase trabajadora que aporten a la sociedad su trabajo personal cuando se trate de cooperativas de productores, o se aprovisionen a través de la sociedad o utilicen los servicios que ésta                                                              49  En éste, como en los casos anteriores, cuando hablamos de capital nos referimos exclusivamente a los certificados de aportación o “acciones” de los socios, y no al capital disponible – difícil de calcular – de las sociedades cooperativas. 64    distribuye cuando se trate de cooperativas de consumidores; b).- Funcionar sobre principios de igualdad en derechos y obligaciones de sus miembros; c).Funcionar con números variables de socios nunca inferior a diez; d).- Tener capital variable y duración indefinida; e).- Conceder a cada socio un solo voto; f).- No perseguir fines de lucro; g).- Procurar el mejoramiento social y económico de sus asociados mediante la acción conjunta de éstos en una obra colectiva; h).- Repartir sus rendimientos a prorrata entre los socios en razón del tiempo trabajado por cada uno, sí se trata de cooperativas de producción: y de acuerdo con el monto de operaciones realizadas con la sociedad en las de consumo. Del artículo 2° que dice: sólo serán sociedades cooperativas las que funcionen de acuerdo con esta Ley y estén autorizadas y registradas por la Secretaría de la Economía Nacional; del artículo 3° que contiene las prerrogativas, que en las sociedades cooperativas no podrá concederse ventaja o privilegio a los iniciadores, fundadores y directores, ni preferencia a parte alguna del capital ni exigirse a los socios de nuevo ingreso que suscriban más de un certificado de aportación, o que contraigan cualquiera obligación económica superior a la de los miembros que ya forman parte de la sociedad. De un artículo 4° que ordena: queda prohibido que las sociedades o individuos no sujetos a las disposiciones de esta Ley usen en su razón social las palabras “cooperativa”, “cooperación”, “cooperadores” u otras similares que pudieran inducir a creer que se trata de una sociedad cooperativa; el artículo 5° que dice. Las sociedades cooperativas pueden adoptar los regímenes de su responsabilidad limitada o suplementada de sus socios, debiendo expresar en su denominación el régimen adoptado, así como el número de su registro 65    oficial. Para los efectos de la presente ley, la responsabilidad es suplementada, cuando los socios respondan a prorrata por las operaciones sociales, hasta por una cantidad fija, determinada en el acta constitutiva o por acuerdo de la asamblea; el artículo 6° que menciona que la autorización para el funcionamiento de las cooperativas no contiene otras prerrogativas que las expresamente establecidas por la Ley, y en consecuencia, ni la fijación de un determinado campo de operaciones, ni la de actividades concretas que la sociedad pueda realizar, conceden a ésta o a sus miembros derechos de exclusividad; el artículo 7° que refiere que cuando sólo se trate de concesión, permiso, autorización, contrato o privilegio que otorgue legalmente la autoridad respectiva, podrán provenir derechos de exclusividad; el artículo 8° manifiesta que las sociedades cooperativas no deberán desarrollar actividades distintas a aquellas para las que están legalmente autorizadas, ni se les autorizarán actividades conexas. Para las actividades complementarias o similares necesitarán autorización expresa de la Secretaría de la Economía Nacional, la que se otorgará siempre que no se perjudiquen intereses colectivos. La denominación de las sociedades no podrá sugerir un campo de operación mayor que aquel que haya sido autorizado; el artículo 9° manifiesta que todas las sociedades cooperativas podrán establecer secciones de ahorro que concedan préstamos a sus miembros, de acuerdo con lo que establezca el reglamento de la ley vigente; el artículo 10° que dice que las relaciones del asalariado con la cooperativa a la que preste sus servicios en los casos de excepción que señala el artículo 62, se regirán por las Leyes del Trabajo; el artículo 11°, manifiesta que los extranjeros no podrán desempeñar puestos de dirección o de administración general en las sociedades cooperativas; el 66    artículo 12° que habla de prohibición y dice: Las sociedades cooperativas no deben pertenecer a las cámaras de comercio ni a las asociaciones de productores, y por último, el artículo 13°, el cuál es relativo a las cooperativas escolares, que no tiene relevancia para nuestro tema. Con un apartado II que habla de la Constitución y Autorización Oficial de la cooperativa de que se trate. Con el artículo 14° que dice: La constitución de las sociedades cooperativas deberá hacerse mediante asamblea general que celebren los interesados, levantándose acta por quintuplicado, en la cual, además de las generales de los fundadores y los nombres de las personas que hayan resultado electas para integrar por primera vez consejo y comisiones, se insertará el texto de las bases constitutivas. La autenticidad de las firmas de los otorgantes será certificada por cualquiera autoridad, notario público, corredor titulado o funcionario federal con jurisdicción en el domicilio social. Además contiene tres artículos que hablan de los contenidos de las Bases Constitutivas, en referencia a la autorización oficial. El artículo 15° se refiere al contenido de las Bases Constitutivas: a).Denominación y domicilio social de la sociedad; b).- Objeto de la sociedad, expresando concretamente cada una de las actividades que deberá desarrollar, así como las reglas a que deban sujetarse aquéllas y su posible campo de operaciones; c).- Régimen de responsabilidad que se adopte; d).- Forma de constituir o incrementar el capital social; expresión del valor de los certificados de aportación, forma de pago y devolución de su valor así como la valuación de los bienes y derechos en caso de que se aporten; e).- Requisitos para la admisión, exclusión y separación voluntaria de socios; f).- Forma de constituir 67    los fondos sociales, su monto, su objeto y reglas para su aplicación; g).Secciones especiales que vayan a crearse y reglas para su funcionamiento; h).- Duración del ejercicio social, que no deberá ser mayor de un año; i).Reglas para la disolución y liquidación de la sociedad; j).- Forma en que deberá caucionar su manejo el personal que tenga fondos y bienes a su cargo; k).Las demás estipulaciones, disposiciones y reglas que se consideren necesarias para el buen funcionamiento de la sociedad, siempre que no se opongan a las disposiciones de la Ley vigente. El artículo 16° que mandata que, todos los ejemplares del acta a que se refiere el articulo 14° citado, en el apartado II, deberán remitirse a la Secretaría de la Economía Nacional, directamente o por medio de la agencia más cercana, por conducto de la autoridad que deba otorgar la consecución, permiso, autorización, contrato o privilegio que se trate de explotar en el caso de las cooperativas de intervención oficial o por conducto del Banco Nacional Obrero de Fomento Industrial, en el caso de las cooperativas de participación estatal. En los dos últimos casos, la autoridad correspondiente, o el banco enviarán los ejemplares del acta a la Secretaría de la Economía Nacional, acompañándolos de su opinión fundada acerca de la autorización que se solicite o de las modificaciones que deban hacerse. Y el artículo 17°, que manifiesta que no podrá ser autorizada ninguna cooperativa de intervención oficial, sino cuando la autoridad que corresponda exprese que ha llegado en principio con los fundadores de la sociedad a un acuerdo para concederles derechos de explotación. Tampoco se otorgará autorización a las cooperativas de participación estatal, si el Banco Nacional Obrero de Fomento Industrial no manifiesta que, en principio, existe acuerdo 68    con sus fundadores para dar en administración a la sociedad los elementos necesarios para la producción por parte del propio Banco o de la autoridad correspondiente. La autoridad correspondiente y el Banco, en su caso, deberán remitir a la Secretaría de la Economía Nacional, en un término no mayor que quince días, las actas a las que se refiere el artículo 16°, con los acuerdos respectivos. Además, contiene un apartado III que habla del Funcionamiento y la Administración de la cooperativa de que se trate. De igual manera cita tres artículos, que dicen: Artículo 21, La dirección, administración y vigilancia de las sociedades cooperativas estará a cargo de; a).- Una asamblea general; b).- Un consejo de administración; c).- Uno de vigilancia, y d).- Las comisiones que establezca la Ley vigente en la materia y las demás que designe la asamblea general. Artículo 22, La asamblea general es la autoridad suprema y sus acuerdos obligan a todos los socios, presentes o ausentes, siempre que se hubieren tomado conforme a las bases constitutivas y a la Ley en la materia y su reglamento. Y por último el artículo 23 que dice que la asamblea resolverá sobre todos los negocios y problemas de importancia para la sociedad y establecerá las reglas generales que deben normar el funcionamiento social. Además de las facultades que le concedan las bases constitutivas y la Ley vigente, la asamblea general deberá conocer de: a).- Aceptación, exclusión y separación voluntaria de socios; b).- Modificación de las bases constitutivas; c).- Cambios generales en los sistemas de producción, trabajo, distribución y 69    ventas; d).- Aumento o disminución del capital social; e).- Nombrar y remover, con motivo justificado, a los miembros de los consejos de administración y vigilancia y comisiones especiales; f).- Examen de cuentas y balances; g).Informes de los consejos y de las comisiones; h).- Responsabilidad de los miembros de los concejos y de las comisiones para el efecto de pedir la aplicación de las sanciones en que incurran o hacer la consignación correspondiente; i).- Aplicación de sanciones disciplinarias a los socios; j).Aplicación de los fondos sociales y forma de reconstituirlos, y; k).- Reparto de rendimientos. Los acuerdos sobre los asuntos a que se refieren los incisos a y e, del apartado III en cuestión, deberán tomarse por mayoría de votos en asamblea general en que estén presentes, por lo menos, las dos terceras partes de los miembros de la sociedad. Salvo en los casos en que expresamente fija esta ley el número de votos, las bases constitutivas pueden establecer mayoría especial para los acuerdos que se tomen para otros asuntos. Hasta aquí, los artículos citados, forman la parte principal de la Ley de Sociedades Cooperativas de 1938. Por último describiremos, del título segundo el IV apartado que nos habla de las Sociedades Cooperativas de Participación Estatal, que al final fue donde la Cooperativa del Ingenio de Zacatepec se ubicó. Resulta importante resaltar el siguiente apartado de la Ley, dado que las dos únicas cooperativas que funcionaron bajo este régimen fueron las más exitosas de su tiempo, al menos dentro del ámbito de la industria azucarera mexicana, en referencia a el apartado IV, de la ley, que habla de las 70    Sociedades de Participación Estatal, queda integrado por seis artículos, un Titulo Quinto, que contiene un solo artículo, que trata de la Vigilancia Oficial y de las Sanciones y con cinco Transitorios. Que a continuación describiremos. El artículo 66, que dice: serán sociedades de participación estatal las que exploten unidades productoras o bienes que les hayan sido dados en administración por el Gobierno Federal o por los gobiernos de los estados, o territorios, por el Departamento del Distrito Federal, por los municipios o por el Banco Nacional Obrero de Fomento Industrial. Del artículo 67, manifiesta: las sociedades de participación estatal tienen la misma preferencia que concede el artículo 64 a las sociedades de intervención oficial para que se les otorguen derechos de explotación. Del artículo 68, habla de que es aplicable lo dispuesto en el artículo 65 (están obligadas a llevar contabilidad conforme a las especificaciones dadas por la autoridad correspondiente), a las sociedades de participación estatal que exploten servicios públicos. Del artículo 69, afirma: en las sociedades de participación estatal se constituirá un fondo de acumulación destinada a mejorar la unidad productora y a ensanchar su capacidad. El fondo es irrepartible, no podrá ser limitado y estará constituido con un porcentaje de los rendimientos. Las mejoras que se hagan quedarán en beneficio de la unidad productora. Del artículo 70, que habla de la obligatoriedad. En el contrato que las sociedades de participación estatal celebren con el Banco Nacional Obrero de Fomento Industrial o con la autoridad que les otorgue la administración se 71    estipulará la parte que al Banco o a la autoridad corresponda en la administración y funcionamiento de la cooperativa. Bajo la tutela de la Secretaría de la Economía Nacional se designará, a su vez, un representante, pudiendo delegar su representación en los que designe el Banco o la autoridad, con derecho a voz en las asambleas generales y consejos y a vetar las resoluciones que tomen. Las resoluciones vetadas podrán recurrirse ante el C. secretario de la Economía Nacional, quien resolverá en definitiva. Y por último, el artículo 71 dice: en el contrato a que se refiere el artículo anterior se estipulará, además la participación que el Banco o la autoridad que les entregue la administración deba tener en los rendimientos; las materias en las que sólo pueda resolver el banco, o la autoridad; el modo de constituir los fondos de reserva, de previsión social, de acumulación, y los demás que se considere necesario establecer; las causas de rescisión y las otras cláusulas que se juzgue conveniente incluir para normar las relaciones entre la autoridad o el banco y la sociedad. En cuanto a las sanciones, a las que se refiere el Titulo Quinto, lo manifiesta el artículo 82, donde se afirma que la Secretaría de la Economía Nacional tendrá a su cargo la vigilancia que se requiera para hacer cumplir esta ley y sus reglamentos. A este efecto, las sociedades cooperativas, las federaciones y la Confederación Nacional están obligadas a proporcionar cuantos datos y elementos se necesiten o se estime pertinentes, y mostrarán sus libros de 72    contabilidad y documentación a los inspectores designados, permitiendo su acceso a las oficinas, establecimientos y demás dependencias. Y con referencia a los Transitorios, refiere lo siguiente; Primero.- Esta Ley estará en vigor el día de su publicación en el Diario Oficial de la Federación; Segundo.- Se concede un plazo de seis meses contados a partir de la fecha de publicación de esta ley, para que las sociedades cooperativas que actualmente se encuentran funcionando, se organicen conforme a las disposiciones de la misma, y soliciten en la Secretaría de la Economía Nacional, con intervención de la autoridad correspondiente en los casos de las que deban ser consideradas como de intervención oficial y participación estatal, la ratificación de su autorización para funcionar; Tercero.Vencido el plazo a que se refiere el artículo, automáticamente quedarán canceladas las autorizaciones no ratificadas, se ordenará la disolución y liquidación de la sociedad y se aplicarán las sanciones que correspondan; Cuarto.- Las cantidades depositadas a la fecha en el banco de México, por concepto de cancelación y liquidación de las sociedades cooperativas, pasarán al Banco Nacional Obrero de Fomento Industrial, para aplicarse al Fondo Nacional de Fomento Cooperativo; Quinto.- Se derogan la Ley General de Sociedades Cooperativas de 12 de mayo de 1933 y las demás disposiciones legales que se opongan a la presente Ley. 50                                                              50  Cabe señalar, que además del acta Constitutiva de la Cooperativa de que se trate, esta deberá contener todos los datos señalados en el artículo 14 de la ley en vigor, y del Reglamento de la Ley general de Sociedades Cooperativas, con la indicación del número de certificados de cada uno de los miembros suscriba y la cantidad exhibida al constituirse la sociedad, cuando las aportaciones no se hagan en trabajo. Si por algún motivo, cualquiera de los fundadores no supiera firmar, el acta será suscrita por otro de los socios en su nombre. Además deberá certificar, la autenticidad de las firmas un funcionario el cual hará constar tal circunstancia. Siendo cualquier funcionario local o 73    Del acto de fundación. En este contexto se da el acto de fundación de la Cooperativa Ejidal del Ingenio de Zacatepec, Morelos. para dar fundamento y legalidad de la Sociedad Cooperativa Ejidal, del Ingenio “Emiliano Zapata”, S.C.S., se reunieron en la ciudad de Cuernavaca, capital del Estado de Morelos, el día diecinueve de febrero de mil novecientos treinta y ocho, a las quince horas. En la Escuela “Revolución”, con domicilio, en la esquina de las calles de Rayón y Comonfort, los ejidatarios de la zona cañera tributaria del ingenio de Zacatepec y los trabajadores azucareros cuyos nombres se expresan enseguida, con objeto de constituir una sociedad cooperativa que se encargue de la explotación del expresado Ingenio, según citatorio girado por los Bancos Nacional Obrero de Fomento Industrial y Nacional de Crédito Ejidal; teniendo como resultado de tal reunión la aceptación de la mencionada iniciativa por                                                                                                                                                                                federal que de acuerdo con las disposiciones legales que rijan su actuación tenga competencia para certificar en cualquier materia, deberá intervenir en la certificación a solicitud de los fundadores. La certificación deberá hacerse precisamente en las hojas donde consten las firmas de los otorgantes, y sí éstas fueran varias, la certificación se hará en cada hoja. Además de las estipulaciones señaladas expresamente en el artículo 15 de la ley referida, las bases constitutivas contienen las siguientes observaciones: La sumisión de los socios de nacionalidad extranjera a las leyes del país, en los términos de la legislación orgánica de la fracción I del artículo 27 constitucional. También los requisitos que deben satisfacer las personas que en el futuro soliciten su ingreso en la sociedad, los que en ningún caso deberán contrariar las disposiciones de la ley o su reglamento. Incluidos el plazo en que se deba cubrir el certificado inicial de aportación y la determinación precisa del límite de la responsabilidad personal de los socios cuando se haya adoptado el régimen de responsabilidad suplementada y fijación de la mayoría necesaria para que la asamblea modifique ese limite. Contener también el domicilio de las sociedades cooperativas, que será el del lugar donde tengan el mayor volumen de sus negocios. Agregándole al nombre de la sociedad además del número de registro correspondiente, las letras S.C.L. (sociedad cooperativa limitada) o S.C.S. (sociedad cooperativa suplementada). De acuerdo al régimen de responsabilidad que se adopte. En buena medida, todas estas condiciones se cumplieron, en la conformación y organización de la fundación de la Cooperativa Ejidal del Ingenio “Emiliano Zapata”, de Zacatepec, Morelos. Véase, Tratado de cooperativismo mexicano, en Rosendo Rojas Coria. “El cooperativismo contemporáneo” México, Fondo de Cultura Económica, p. 464-544. 74    todos los presentes, posteriormente se procedió a designar Mesa Directiva de la Asamblea, resultando electos por mayoría de votos los señores Licenciado Eduardo Suárez, Secretario de Hacienda y Crédito Público; Licenciado Enrique González Aparicio, Gerente General del Banco Nacional Obrero de Fomento Industrial; Ingeniero Francisco García Robledo, representante del Banco Nacional de Crédito Ejidal y Licenciado Daniel Salgado Vasconcelos, representante de la Secretaría de la Economía Nacional. Discutido el asunto que motivó la reunión, se acordó que el objeto de la cooperativa fuera el cultivo y compra de la caña de azúcar, para lo cual el Gobierno Federal dará a la Cooperativa en Administración el Ingenio de Zacatepec, en las condiciones que se estipulan en el contrato que al efecto se celebre y que la cooperativa se denominará: Sociedad Cooperativa de Ejidatarios y Obreros del Ingenio “Emiliano Zapata”, S.C.S.”, con domicilio en el pueblo de Zacatepec, Morelos. Para reunir el capital de la cooperativa, se acordó que los socios suscriban “certificados de aportación” por valor de (CIEN PESOS) cada uno, pudiendo los socios suscribir el número de certificados que creyeren conveniente. Estos certificados de aportación fueron suscritos en la siguiente forma:      NOMBRE CERTIFICADOS DE APORTACIÓN SUSCRITOS CANTIDAD EXHIBIDA EN EFECTIVO EN EL ACTO   1- Mateo I. Ortiz, mayor de edad Mexicano, ejidatario, con Domicilio, en Acatlipa, Mor. 1 $10.00 2- Mariño Ortega, mayor de edad Mexicano, ejidatario, con Domicilio en Acatlipa, Mor. 1 $10.00 3- Manuel Morales, mayor de edad Mexicano, ejidatario, con Domicilio en Acatlipa, Mor. 1 $10.00 75    4- Jesús Valdés, mayor de edad Mexicano, ejidatario, con Domicilio en Acatlipa, Mor. 1 $10.00 5- Gregorio Navarro, mayor de Edad, mexicano, ejidatario, con Domicilio, en Acatlipa, Mor. 1 $10.00 Y así sucesivamente de un total de 460 socios iniciales, de los cuales los primeros veinte integrantes eran del poblado de Acatlipa; trece del pueblo de Bonifacio García; Tres de Cuachichinola; 26 del pueblo de Chiconcuac; 37 del Higuerón; y 351 de la zona cañera, (Tlaquiltenango, Zacatepec y Jojutla) dando un total de 460 socios fundadores, que aportaron un capital inicial, exhibido en el acto de $4,600 pesos m/n. 51 Mismos que nombraron y eligieron un Consejo de Administración que se integró de la siguiente manera, resultando electos: como Presidente, Diego Álvarez; Secretario, Gonzalo Olea; y como Tesorero, Donato Villano. Además de dos Comisionados: uno para la organización de la Producción, Rubén Jaramillo; y el otro para Educación y Propaganda, Enrique Guillaumin. Y nombraron también al Consejo de Vigilancia, quedando integrado de la siguiente manera: Presidente, Cliserio Pacheco; Secretario, Eugenio Estrada; y tres Consejeros: Primero, Pedro Rueda; Segundo, Carlos López S; Tercero,                                                              51  Cabe aclarar que además, se adicionaron posteriormente varias hojas con los nombres, las firmas y en algunos casos huellas digitales, calzan dichas actas, por parte de los Comisariados Ejidales de los pueblos de Temilpa, Juan Aguilar, rubrica; Tezoyuca, Ceferino Pedroza, rubrica y de la Sociedad local de San Miguel Treinta, quienes certificaron que las firmas y las huellas son autenticas de estos socios. Y que calzaron el acta pre-inserta son de dichos pueblos, certificando, “Sufragio Efectivo No Relección”, Zacatepec, Morelos a 26 de enero de 1939, el presidente del Consejo Municipal, José C. Alarcón, con sello del Secretario y rubrica del mismo. Acta y Bases Constitutivas, de la Sociedad Cooperativa Ejidal del Ingenio “Emiliano Zapata”, AGN. Dirección de Archivo Histórico Central, grupo documental, Sociedad Cooperativa Ejidal, Zacatepec, Mor., vol. I, caja C-1, legajo 01, expediente 494-P 3/F, fojas 6. Galería 5. 76    Narciso Cuellar; y los respectivos Suplentes: Pedro Peña, Fernando Reyes, Mario Cabrera, José Leyva y Mayolo Alcázar. También en esa misma reunión, se acordó elegir una Comisión de Conciliación y Arbitraje, quedando constituida de la manera siguiente: Presidente, Román Luna; Secretario, Juan Solórzano; Consejero, David Serdán; y un Comité Provisional de Trabajo, que tendría la obligación de ejercer las atribuciones que el artículo 60 de la Ley le otorga en la Comisión de Control Técnico y formular el Reglamento Interior de Trabajo. Dicho comité quedó integrado por un representante de cada una de las secciones que forman esta cooperativa y técnicos nombrados por el Consejo, habiendo quedado constituido de la manera siguiente: por el Comité Provisional de Trabajo, un representante del Consejo de Administración, Ricardo Aldaz; un representante de Fábrica, Guillermo Uribe; un representante de Crédito y Servicio Administrativo, Rafael Terán; un representante de Transportes, Alfredo Navarrete; y un representante de Campo, Alfredo Arenal. Con la consideración de que las personas designadas durarán en sus funciones, y no les es revocado su nombramiento, hasta que la Asamblea General Ordinaria, que deberá celebrarse en el mes de octubre de 1940, y elija a los que deban remplazarlos. Finalmente, se acordó enviar a la Secretaría de la Economía Nacional, por conducto del Banco Nacional Obrero de Fomento Industrial, para su autorización, cinco ejemplares de esta Acta y Bases Constitutivas, debidamente firmadas por los presentes que supieran hacerlas valer y certificadas por la autoridad municipal, según lo dispone la Ley General de Sociedades Cooperativas. 77     Relativo a las Bases Constitutivas de la Cooperativa. Donde el Capítulo primero habla de la denominación, domicilio, duración, régimen de responsabilidad y objeto de la sociedad. Con las siguientes Bases; La Primera.- que dice, la Sociedad Cooperativa de Ejidatarios y Obreros del Ingenio “Emiliano Zapata”, S.C.S. tiene el carácter de Cooperativa de Participación Estatal y se regirá por la Ley General de Sociedades Cooperativas, por la Ley Constitutiva del Banco Nacional Obrero de Fomento Industrial en cuanto les sea aplicable, por lo previsto en las presentes bases y por las disposiciones de su reglamento interior. El nombre de la sociedad será; “Sociedad Cooperativa de Ejidatarios y Obreros del Ingenio “Emiliano Zapata”, S.C.S. La Segunda.- que la Sociedad tendrá por objeto: a).- El cultivo y compra de la caña de azúcar, para explotación del Ingenio de Zacatepec, de acuerdo con el contrato celebrado con el Banco Obrero; b).- La producción de azúcar; c).- La producción de los derivados de la caña de azúcar; d.- La venta de azúcar y de los derivados; e).- La producción de alcohol. La Tercera.- Se considerará como domicilio de la Sociedad, para todos los efectos legales, a Zacatepec, Morelos. La Cuarta.- La duración de la Sociedad será por tiempo indefinido. La Quinta.- La Sociedad adopta el régimen de responsabilidad suplementaría, por tanto, los socios son personalmente responsables hasta por una cantidad equivalente al doble de su certificado de aportación. 78    La Sexta.- La duración del Ejercicio Social será por un año, que principiará a contarse del primero de enero al 31 de diciembre del año próximo. Dichas Bases, refieren también un capítulo segundo, que contiene lo relativo a los Socios, su condición y sus atribuciones legales, que se consignan de la siguiente manera: La Séptima.- La Cooperativa estará constituida por los ejidatarios que se dediquen al cultivo de la caña de azúcar y la aporten a la cooperativa, así como por los obreros industriales del Ingenio “Emiliano Zapata”, sean o no ejidatarios. La Cooperativa no tendrá más asalariados que los que señalan los incisos del artículo 62 de la Ley General de Sociedades Cooperativas. La Octava.- Los trabajadores industriales del Ingenio, se designarán de preferencia de entre los ejidatarios que carezcan de parcela y que están capacitados para desempeñar los puestos asignados.- Al efecto, la Gerencia General del Ingenio de acuerdo con los representantes legales de la Cooperativa, formulará la relación de los puestos que deban cubrirse con ejidatarios y los que deben cubrirse por obreros clasificados, asignándose los puestos de aprendices a hijos de ejidatarios. La Novena.- Para ser admitido como socio se requiere: a).-Presentar una solicitud por escrito al Consejo de Administración; b).- Estar dedicado actividades de la misma naturaleza de aquellas que constituyen el objeto social; c).- Ser ejidatarios conforme a la Ley, si es campesino; d).- Ser mayor de 16 años; e).- Comprometerse a aceptar las disposiciones que emanen de la Asamblea General y del Consejo de Vigilancia; f).- Ser aceptado en definitiva por mayoría de votos de la Asamblea General, y del acatamiento expreso para 79    que, de haber lugar a ello, se la apliquen responsabilidades que adeude a la Cooperativa por concepto de créditos. Finalmente, con fecha de 25 de septiembre de 1939 son enviados al C. Secretario de la Economía Nacional por parte del banco Nacional Obrero de Fomento Industrial, dicha entidad formó parte y estuvo presente en las reuniones de la fundación de la Cooperativa, fue la encargada de hacer los tramites legales, que se hacen mención. 52                                                              52  En referencia con lo dispuesto por los artículos 16 y 17 de la Ley General de Cooperativas, se permiten enviar nuevamente por quintuplicado, Acta y Bases Constitutivas de la Sociedad Cooperativa de Participación Estatal de Ejidatarios y Obreros del Ingenio “Emiliano Zapata”, con las correcciones que el Departamento de Fomento Cooperativo solicitó, con la consideración de que con estas correcciones se encuentren ajustadas a las disposiciones legales relativas, suplicándole al Departamento de Fomento Cooperativo de esa Secretaría lleve a cabo el registro a la mayor brevedad posible. Por otra parte le manifestaban que también el Banco tenía celebrados acuerdos con los miembros de la Cooperativa de Ejidatarios y obreros del Ingenio, para los efectos de proporcionarles los elementos económicos y técnicos necesarios para poner en estado de producción la fábrica en mención y que el Banco administra. Referido en el documento número 35758, del Archivo General de la nación, AGN. 80    Con relación a la autorización del acta y las bases. Se tuvo a la vista, un Documento de Autorización y número de expediente 623(754-9) 1-118. 6-12672. Que al calce cita: Que es de concederse la autorización que solicita la Sociedad Cooperativa de Ejidatarios y Obreros del Ingenio “Emiliano Zapata”, S.C.S... dado en la ciudad de México, Distrito Federal, a 28 de noviembre de 1939, por parte de la Secretaría de la Economía Nacional, y dirigida al jefe del Departamento de Fomento Cooperativo, sr. Rafael Mallen; quien comenta lo relativo. “Se recibió en este Departamento, en solicitud de autorización, la documentación de la Sociedad Cooperativa de Participación Estatal de Ejidatarios y Obreros del Ingenio “Emiliano Zapata”, S.C.S. Dicha documentación satisface todos los requisitos exigidos a cooperativas de ese tipo por la Ley General de Sociedades Cooperativas y su Reglamento”. Del informe que proporciona el Banco Nacional Obrero de Fomento Industrial, según oficio número 26942 de fecha de marzo último, se desprende lo siguiente: 1- Que todos los asociados son individuos de la clase trabajadora que aportan a la cooperativa su trabajo personal; 2- Que la Sociedad ofrece suficientes perspectivas de viabilidad por las condiciones económicas en que se encuentra, además de que el mismo Banco ya tiene celebrados acuerdos con los miembros de la expresada Cooperativa para los efectos de proporcionarle todos los elementos económicos y técnicos para poner en estado de producción la fábrica que actualmente administra la organización; 81    3- Y que con su funcionamiento no se lesionan intereses de alguna otra agrupación similar debidamente autorizada. “En tal virtud, el suscrito se permite emitir su opinión en el sentido de que es de concederse la autorización de la Sociedad Cooperativa de Ejidatarios y Obreros del Ingenio “Emiliano Zapata”, S.C.S., atentamente, el jefe de la Oficina, Juan Heredia Herrerías, rúbrica. Secretaría de la Economía Nacional, Departamento de Fomento Cooperativo. Que dando registrado bajo el número 494-P a fojas 329-330 del volumen I del libro de inscripciones del Registro Cooperativo Nacional. Dado en México, D.F. 6 de diciembre de 1939, autoriza el jefe del Registro Cooperativo Nacional, E. Mayoral Pardo, rubrica.” En este mismo sentido y para continuar con la narración de los hechos, por la vía de la consulta de diversos documentos de archivo que dan fe de que los mismos sucedieron en la forma y contexto en que se dieron, como resultado de la investigación citaremos el acta constitución, oficios de acuse de la autorización de las bases constitutivas de la cooperativa, y los documentos legales de la contratación de créditos para la operación y producción industrial del ingenio “Emiliano Zapata”, que a continuación se citan: Teniendo a la vista el acta de autorización, que dice: En la parte superior, Estados Unidos Mexicanos con número de expediente. 27/625 (724.9) /115 y con registro número. 494-P. Secretaría de la Economía Nacional. “Esta Secretaría de acuerdo con lo previsto por el artículo 19 de la Ley General de Sociedades Cooperativas, determina autorizar el funcionamiento de la 82    Sociedad Cooperativa de Ejidatarios y Obreros del Ingenio “Emiliano Zapata”, S.C.S., con domicilio en Zacatepec, Morelos.” Que llevará a cabo la (s) actividad (es) siguiente: El cultivo y compra de caña de azúcar para la operación del Ingenio “Emiliano Zapata”, de Zacatepec, Morelos. De acuerdo con el contrato celebrado con el Banco Nacional Obrero de Fomento industrial, la producción, en el citado Ingenio, de azúcar, alcohol y demás derivados de la caña; así como la venta de todos los productos de la cooperativa. SUFRAGIO EFECTIVO, NO REELECCIÓN. México, D.F., a 6 de diciembre de 1939. El jefe del Departamento de Fomento Cooperativo, Rafael Mallen, rubrica y el Secretario de la Economía Nacional, Efraín Buenrostro, rubrica. 53                                                              53  Datos consultados de documentos, del Archivo General de la Nación, (AGN) Dirección de Archivo Histórico Central, grupo documental, Sociedad Cooperativa Ejidal, Zacatepec, Mor., vol. I, caja C-1, legajo 01, expediente 494-P 3/F, fojas 6, galería 5. 83    Así mismo, el oficio de comunicación a la Cooperativa; Asunto: que con la fecha que se expresa quedaron inscritos en el Registro Cooperativo Nacional, el Acta y Bases Constitutivas de esa sociedad. Dado en México, D.F. a 7 de diciembre de 1939. Y dirigido al Presidente del Consejo de Administración de la Sociedad Cooperativa de Ejidatarios y Obreros del Ingenio “Emiliano Zapata”, S.C.S., de Zacatepec, Mor. De conformidad con lo preceptuado en el artículo 19 de la Ley General de Sociedades Cooperativas vigente, con fecha 6 del mes en curso y bajo el número 494-P, quedaron inscritas en el Registro Cooperativo Nacional, el acta y bases constitutivas de la Sociedad Cooperativa que preside. Se le remite, anexo al presente, un tanto de la documentación de que se trata, así como la autorización correspondiente. Sufragio Efectivo, No Relección el jefe del Departamento, Rafael Mallen, rubrica. Y le signan copias, al Agente General de la Economía Nacional en Cuernavaca, Morelos, y al Gerente del Banco Nacional Obrero de Fomento Industrial, cito en Venustiano Carranza número 44, México, D.F. 54                                                              54  Véase documento del Banco Nacional Obrero de Fomento Industrial, Departamento de Fomento Cooperativo, Sección, Registro Cooperativo Nacional, número de oficio. 87/VI, 11149, expediente 623 (724.9) /-118. 12672-C. 84    En cuanto a la celebración de los contratos de Créditos Refaccionario, el representante legal del Banco Nacional Obrero de Fomento Industrial, dirige al jefe del Departamento de fomento Cooperativo, dependiente de la Secretaría de la Economía Nacional, que a la letra dice: “De fecha 29 de enero de 1940, manifiesta que la Cooperativa de Ejidatarios y Obreros del Ingenio “Emiliano Zapata”, de Zacatepec, Morelos a la que este Banco viene refaccionando en sus operaciones industriales, va a proceder a celebrar contratos de avío con sus Socios Ejidatarios, a fin de facilitarles los medios económicos necesarios para la siembra, cultivo y recolección de la caña de azúcar que dichos socios ejidatarios se encuentran obligados, en virtud de las estipulaciones relativas de las Bases Constitutivas de la Cooperativa, a aportar a esta Sociedad”. Hasta aquí la primera parte del documento manifiesta su intención de proporcionar los créditos referidos. Haciendo una aclaración posterior, mediante una consulta de opinión, cita: “La cooperativa de referencia va a proceder, por lo tanto, a abrir crédito a los socios ejidatarios, para hacer posible sus labores agrícolas- industriales, y como esta función económica de dicha Sociedad no se encuentra especialmente puntualizada en la clausula relativa de las Bases Constitutivas de la Cooperativa del Ingenio de Zacatepec, Morelos. Nos estamos dirigiendo a usted, atentamente, para consultarle si es necesario que la Asamblea General de la Sociedad proceda hacer la modificación relativa de las Bases constitutivas de la Cooperativa, adicionándolas en el sentido de que uno de los objetos de la Sociedad será el de refaccionar a los socios ejidatarios para la 85    producción de la caña de azúcar, o si en concepto de usted no es necesaria tal modificación, ya que según lo dispuesto en el artículo 86, fracción II del Reglamento de la Ley General de Sociedades Cooperativas, las cooperativas de producción se encuentran facultadas para proceder a efectuar operaciones de crédito con sus socios, y sin que haya necesidad, por lo tanto, de hacerlo constar expresamente en las Bases, entre las finalidades o actividades que forman el objeto de la Cooperativa. Por último nos permitimos aclara, que la Cooperativa expresada tiene la imperiosa necesidad de otorgar a sus socios los citados créditos, pues de lo contrario, el Ingenio que explota la sociedad, carecería del azúcar que indefectiblemente requiere para su funcionamiento; de tal suerte, que de no realizar tales operaciones que se encuentran íntimamente ligadas con el objeto de la Sociedad, se perjudicarían hondamente los intereses de ésta. Suplicamos a usted encarecidamente sea muy servido de resolver la presente consulta a la mayor brevedad posible, a fin de que nuestro Departamento Legal este en condiciones de proceder a formular los contratos de avío relativos. Por el Banco Nacional Obrero de Fomento Industrial, el representante del Servicio Legal, rúbrica (ilegible)”. 55                                                              55  Véase documento de referencia, 5-41589 del Banco Nacional Obrero de Fomento Industrial de fecha 29 de enero de 1940. Registrado con el número 1745, p. 1-2. 86    Como resultado de la consulta hecha al jefe del Departamento de Fomento Cooperativo, referido en párrafos anteriores. Por parte del representante legal del banco Nacional Obrero de Fomento Industrial. Se derivó lo siguiente: “Por la vía de una convocatoria se citó al Sector Ejidal y al Sector Obrero que integran la Cooperativa a una Asamblea General Extraordinaria que se celebró el 12 de julio de 1940 a las 8.00hrs. En Zacatepec, Morelos. Con el siguiente orden del día. UNICO PUNTO; discusión del Proyecto para reformar los Estatutos de la Cooperativa y aprobación, en su caso, del mismo o modificaciones que la Asamblea proponga. Convocaron; el Presidente del Consejo de Administración, Lic. Enrique González Aparicio, rubrica. El Presidente del Consejo de Vigilancia, Alfredo Muñoz, rubrica. El Secretario del Consejo de Administración, Ernesto Rivera, rúbrica.” 56                                                              56  En referencia al documento 260, pend./dto.324, 2ª modificación y ampliación de funciones y atribuciones. De las Bases, ya mencionadas. 87    Hecho el trámite correspondiente ante las autoridades competentes, (Secretaría de la Economía Nacional), emite a través de su Dirección General de Fomento Cooperativo, el siguiente acuerdo: Asunto: Autorización de las modificaciones a las cláusulas 1ª, 2ª, 27ª, 29ª, 30ª, 57ª, 58ª y 64ª., de las Bases Constitutivas de la Sociedad Cooperativa de Ejidatarios y Obreros del Ingenio “Emiliano Zapata”, S.C.S. Dado en la ciudad de México, Distrito Federal, el 4 de febrero de 1941. Que a la letra dice: “Esta Secretaria , de conformidad con lo establecido por el artículo 35 del Reglamento de la Ley General de Sociedades Cooperativas vigente, determina autorizar las modificaciones a las cláusulas, 1ª, 2ª, 27ª, 29ª, 30ª, 57ª, 58ª, y 64ª. De las Bases Constitutivas, de la Sociedad Cooperativa de Ejidatarios y Obreros del Ingenio “Emiliano Zapata”, S.C.S., Registro número 494-P, de seis de diciembre de mil novecientos treinta y nueve, las que quedaron redactadas de la forma siguiente”, BASE PRIMERA. - Se constituye una Sociedad Cooperativa de Ejidatarios y Obreros del Ingenio “Emiliano Zapata”, de Zacatepec, Mor., la que tendrá el carácter de Cooperativa de participación estatal y se regirá por la Ley General de la materia, por la Ley Constitutiva del Banco Nacional Obrero de Fomento Industrial en cuanto le sea aplicable, por lo previsto en las presentes Bases y por las disposiciones de su Reglamento Interior. El nombre de la Sociedad será: “Sociedad Cooperativa de Ejidatarios y Obreros del Ingenio “Emiliano Zapata”, de Zacatepec, Mor., S.C. de P.E., de R.S.” 88    BASE SEGUNDA. - La Sociedad tendrá por objeto: a).- El cultivo y compra de la caña de azúcar para explotación del Ingenio de Zacatepec. b).- La producción de azúcar. c).- La producción de los derivados de la caña de azúcar. d).- La venta de azúcar y de los derivados. e).- Producción de alcohol. BASE 27ª.- La Asamblea General tiene las siguientes atribuciones; a).- La aceptación, exclusión y separación voluntaria de los socios. b).- La modificación de las Bases Constitutivas. c).- Los cambios generales de los sistemas de producción, trabajo y distribución de ventas. d).- Aumento y disminución del capital social. e).- El nombramiento y remoción con causa justificada de los miembros de los Consejos de Administración, de Vigilancia y de las Comisiones. f).- El examen de cuentas y balances. g).- El examen de los informes de los Consejos y las Comisiones. h).- La constitución de la responsabilidad de los miembros y de los Consejos y de las Comisiones, para el efecto de pedir la aplicación de las sanciones en que incurran y hacer la consignación correspondiente. i).- La aplicación de sanciones disciplinarias. j).La ampliación de los fondos sociales y la forma de reconstituirlos. k).- El reparto de las utilidades. l).- Todas las demás atribuciones que estas Bases o la Ley les señalen. BASE 29ª.- El Consejo de Administración será el órgano ejecutivo de los acuerdos y resoluciones de la Asamblea General y tendrá a su cargo la administración de los negocios y bienes de la cooperativa, debiendo integrarse por cinco miembros, los cuales tres serán ejidatarios y dos obreros. Los consejeros no ejercerán actos directos de administración. 89    BASE 30ª.- El Consejo de Administración estará integrado por un Presidente, un Secretario, un Tesorero, un Comisionado de Contabilidad e Inventarios y un Vocal. BASE 37ª.- La elección de los miembros de los Consejos se hará en Asamblea General por votación nominal, en los términos del artículo 31de la Ley General de Sociedades Cooperativas vigente. Los miembros de los Consejos durarán en su cargo dos años y no podrán ser relectos para el período siguiente sino hasta pasado un período igual. BASE 57ª.- En el contrato que habrá de celebrarse entre la Cooperativa por conducto de su Consejo de Administración y el Banco Nacional Obrero de Fomento Industrial, se establecerán las Bases conforme a las cuales se da el Ingenio a la Cooperativa en propiedad o en administración. BASE 58ª.- La Secretaría de la Economía Nacional designará a su vez un representante en los términos del artículo 70 de la Ley General de Sociedades Cooperativas vigente. BASE 64ª.- En las sesiones del Consejo de Administración el cual estará integrado de acuerdo con lo indicado en la cláusula 29ª. el representante del Banco Nacional Obrero de Fomento Industrial y el de la Secretaría de la Economía Nacional, tendrán solamente voz informativa.” Reafirmando lo anterior, de la siguiente manera; 90    SUFRAGIO EFECTIVO NO RELECCIÓN. El Secretario de la Economía Nacional, Francisco Javier Gaxiola Jr. Rubrica, el Director General de Fomento Cooperativo, Francisco Preciado, rúbrica. 57 Como se puede constatar, con la descripción de hechos anterior, mismos que dieron, el sustento legal para la fundación de la cooperativa, del Ingenio Ejidal de Zacatepec, Morelos. Sucesos que no se dieron de manera sencilla, ya que tuvieron que sortear cientos de tramites legales y políticos, que se opusieron al proyecto cardenista de reforma agraria, que incluía la restructuración general de la Industria Azucarera Nacional, con la fundación y creación de Ingenios y Cooperativas ejidales, como fue el caso de Zacatepec, Morelos y El Mante en Tamaulipas. En este contexto referiremos un documento que es de suma importancia, para nuestra investigación. Ya que involucra a otras entidades relacionadas en el ámbito cooperativo.                                                              57  Además de la reafirmación por parte de los dos funcionarios citados, en la parte final del documento y que firmaron al calce del mismo, consúltese, documento de la Dirección General de Fomento Cooperativo, dependiente de la Secretaría de la Economía Nacional, sección, Sector de Producción. Mesa III, número de oficio 32-III, expediente, 623.2 (724.9) /-2. 91    Documento dirigido al sr. Francisco Preciado, Director General de Fomento Cooperativo, de la Secretaría de la Economía Nacional, cita; “…De conformidad con la disposición del sr. Secretario de la Economía Nacional relativa a la intervención directa de usted en la reforma de las Bases Constitutivas de la Cooperativa de Ejidatarios y Obreros del Ingenio “Emiliano Zapata”, S.C. de P.E. de R.S., así como en la elaboración del Proyecto de Contrato de compra-venta o Administración, que celebrarán entre el Gobierno Federal y nuestra asociada, nos permitimos someter a la consideración de usted los puntos de vista de la cooperativa comprendidos en el Proyecto de Contrato que adjuntamos al presente, y que había sido apoyado por el Banco Nacional Obrero de Fomento Industrial. En consecuencia, esperamos que se digne usted elaborar un Proyecto en el cual sus cláusulas se ajusten a la situación de la Cooperativa, la reforma de sus Bases y el Acuerdo Presidencial que se relaciona con las Cooperativas de Participación Estatal a fin de discutir sobre el citado Proyecto.” Firmado al calce, con la leyenda siguiente: Fraternalmente: “Por el Progreso de Cooperativista de México, México, D.F. a 16 de mayo de 1941, por el Consejo de Administración, el Secretario de Conflictos, J. Alberto Bobadilla, rúbrica; el Secretario de Organización y Propaganda, P. Ernesto Colín Enríquez, rubrica y por la Cooperativa de Ejidatarios y Obreros del ingenio “Emiliano Zapata”,. La Comisión, Jesús Sosa H. y Juan Ramírez, rúbricas. 58                                                              58  Como parte fundamental, del proceso de organización la cooperativa, pasó por varios ajustes y revisiones a sus Bases Constitutivas con el objeto de mejorar las condiciones de operación y que a su vez se encuadrarán dentro del marco legal de la 92    Dichos ajustes y revisiones, pasaron por la modalidad que la propia Cooperativa, por desconocimiento y falta de comprensión de la Ley General de Cooperativas, tuvieron que experimentar varios modelos de organización que fueron desde “cooperativa de consumo”, en sus inicios, “cooperativa de productores”, hasta finalmente organizarse y constituirse como una Cooperativa de Producción de participación Estatal. Como referencia a lo anterior, citaremos el siguiente documento: “Con referencia al atento oficio número 27-111-7456, expediente 623(724.9)/115, de fecha 16 de agosto último, en el que se previene que la Sociedad Cooperativa de Consumo “Emiliano Zapata”, de Zacatepec, Mor., está funcionando sin autorización correspondiente de esa Secretaría, haciendo operaciones con el público en general. Estando en la actualidad organizando la cooperativa de que se trata, pues ésta está funcionando solamente como Sección de Consumo, atentamente ruego a esa Secretaría, se sirva conceder que siga operando con el público en general por un plazo de seis meses. Atentamente el jefe de la Oficina de Cooperativas de Consumo del Banco Nacional Obrero de Fomento Industrial, José M. de Legarreta, rúbrica.” 59                                                                                                                                                                                propia Ley vigente. Consúltese, documento de la Asociación de Cooperativas, del Sistema de Crédito del Banco Nacional Obrero de Fomento Industrial, con oficinas en Aquiles Serdán núm. 12, México, D.F.. REF. oficial. 1393/41. Expediente 11, con número de registro, 6555. 59  Véase, documento membretado con el nombre, Cooperativa Central Ejidal, “Emiliano Zapata”, Zacatepec, Mor., de septiembre 25 de 1939, dirigido a la Secretaría de la Economía Nacional, Departamento de Fomento Cooperativo, Sección, Sector de Consumo, con número de registro, 13008. 93    Como resultado de todas las revisiones y ajustes, finalmente, la Sociedad Cooperativa modifica su estatuto legal, cancelando sus propias Bases Constitutivas que le dieron origen y sustento como Sociedad Cooperativa Ejidal, en sus inicios. Y con fecha 4 de mayo de 1950, inician una nueva modificación a sus Bases Constitutivas, quedando en los siguientes términos: “Asunto. Autorización de las modificaciones a las Bases Constitutivas de la Sociedad Cooperativa de Ejidatarios y Obreros del Ingenio “Emiliano Zapata”, S.C. DE P.E. DE R.S.-609-M. Esta Secretaría de conformidad con lo que disponen los artículos 20 de la Ley General de Sociedades Cooperativas en vigor y 35 de su reglamento, determina autorizar las Modificaciones a las bases Constitutivas de la Sociedad Cooperativa de Ejidatarios y Obreros del Ingenio “Emiliano Zapata”, S.C. DE P.E. DE R.S., registrada con fecha 6 de diciembre de 1939, bajo el número 494-P. De acuerdo con las reformas citadas, las Bases Constitutivas de la Cooperativa de referencia, quedarán redactadas en los siguientes términos: SUFRAGIO EFECTIVO NO REELECCIÓN.- MÉXICO, D.F. a 30 de Marzo de 1950.- P. O. del C. SECRETARIO.- EL SUB-SECRETARIO.- LIC. MANUEL SANCHEZ CUEN.-CONFORME.-EL DIRECTOR DE FOMENTO COOPERATIVO.-LIC. JOSÉ ANTONIO COBOS.- Rubricados. Con un Capitulo Primero, que contendrá; La denominación, domicilio, duración, régimen de responsabilidad y objeto de la sociedad. 94    Cláusula Primera.- La Sociedad se denominará: Sociedad Cooperativa de Ejidatarios, Obreros y Empleados del Ingenio “Emiliano Zapata”, S.C. de P.E. de R.S. Cláusula Segunda.- El domicilio de la Sociedad, para todos sus efectos legales, es el poblado de Zacatepec, Municipio del mismo nombre, del Estado de Morelos. Cláusula Tercera.- La duración de la Sociedad será por tiempo ilimitado sin perjuicio del plazo fijado en la Cláusula XXVII del Contrato de Administración que se tiene celebrado con la NACIONAL FINANCIERA, S.A. Cláusula Cuarta.- El objeto de la Sociedad será: a).- La explotación del Ingenio “Emiliano Zapata”, de Zacatepec, Morelos, propiedad del Gobierno Federal, de acuerdo con el Contrato de Administración celebrado con la “NACIONAL FINANCIERA”, S.A. b).- El cultivo y compra de caña de azúcar para la explotación de dicho Ingenio, en la forma que establezca la Administración de la Cooperativa. c).- El cultivo de arroz, de acuerdo con el plan que se elabore para este efecto, así como los demás cultivos que también tengan por objeto el mejoramiento de las tierras. d).- La elaboración de azúcar y todos los derivados y subproductos de la caña y su industrialización. e).- Constituir una Sección de Ahorros en los términos de la Ley, y f).- Constituir una Sección de Consumo en los términos de la Ley. 60                                                              60  Reformada por acuerdo de Asamblea General celebrada el día 17 de enero de 1953. 95    Cláusula Quinta.- La Sociedad adopta el régimen de Responsabilidad Suplementada y la duración del ejercicio social será de un año, contado del primero de julio al treinta de junio del año siguiente. Cláusula Sexta.- Los certificados de aportación tendrán un valor de $100.00 (cien pesos) cada uno y podrán ser pagados en efectivo, derechos, bienes o trabajos a juicio de la Asamblea General. Los certificados para garantizar la Suplementación tendrán igualmente un valor de cien pesos. De un Capitulo Segundo, que manifiesta lo relativo, al Capital social y los Certificados de Aportación: Cláusula Séptima.- El Capital de la Sociedad será ilimitado y estará representado: a).- Por el valor de los Certificados de Aportación que suscriban los socios, así como el importe total de los certificados constituidos para garantizar la Suplementación de la Responsabilidad. b).- Por los donativos que reciba o hubiere recibido la Sociedad; pero éstos no serán repartibles. c).- Por el diez por ciento de los rendimientos que se destinen a incrementar el Capital Social. Cláusula Octava.- Cada socio, al ser admitido deberá exhibir por lo menos el 10 por ciento en efectivo del valor de los Certificados que hubiere suscrito y el saldo lo cubrirá en un plazo que no excederá del ejercicio social. Cláusula Novena.- Los Certificados de Aportación serán nominativos e indivisibles y de valor inalterable; se expedirán al quedar íntegramente cubierto 96    su importe y solamente podrán transferirse en las condiciones previstas por el artículo 11 del Reglamento de la Ley General de Sociedades Cooperativas. Cláusula Décima.- En caso de devolución del valor de los Certificados de Aportación ésta se hará al finalizar el ejercicio social y después de practicar el Balance General, salvo el caso en que la Asamblea General acuerde que se haga la devolución inmediata y las condiciones económicas de la Sociedad así lo permitan. Cláusula Décima primera.- Cuando la Asamblea General acuerde reducir el capital que juzgue excedente, podrá hacer la devolución a los socios que posean mayor número de certificados de aportación o a prorrata, si todos los poseedores de igual número de certificados, teniendo en cuenta la representación de los intereses del Gobierno Federal y la opinión de la Secretaría de la Economía Nacional. Cuando el acuerdo sea en el sentido de aumentar el Capital, todos los socios quedarán obligados a suscribir el aumento en la forma y términos que lo acuerde la Asamblea General. Con el capitulo Tres, que se relaciona con los Socios de la cooperativa, con el siguiente orden: Cláusula Décima segunda.- Para ser miembro de la Cooperativa se requiere, además de los requisitos que se contienen en el artículo 9º. Del Reglamento de la Ley General de Sociedades Cooperativas, los siguientes: a).- Ser ejidatario productor de caña, obrero o empleado, en alguna de las actividades del Ingenio, en los términos que expresa el Reglamento para el Registro y Control de Socios. b).- Prestar a la Sociedad su trabajo personal. c).- Suscribir por lo 97    menos un certificado de aportación. d).- Presentar certificado de buena salud expedido por el Jefe del Servicio Médico de la Sociedad. Cláusula Décima tercera.- Son causas de exclusión de un socio, además de las contenidas en el artículo 16 del Reglamento de la Ley General de Sociedades Cooperativas, las siguientes: a).- Causar por negligencia, descuido, notoria incompetencia, o dolosamente, perjuicios graves en los bienes de la Sociedad, o de los que tenga ésta en Administración. b).- Faltar al desempeño de su trabajo sin previo aviso o causa justificada por más de tres días al mes. c).Faltar en cualquier forma al cumplimiento de las obligaciones que le imponen la Ley General de Sociedades Cooperativas, su Reglamento, las presentes Bases o los Reglamentos Interiores de la Sociedad. d).- Si es ejidatario, que abandone, rente o descuide sus siembras, salvo los casos exceptuados por las leyes respectivas. e).- Hacer labor de disolución social comprobada, entre los miembros de la Cooperativa contra el régimen Cooperativista. Cláusula Décima cuarta.- Para la exclusión de socios deberá procederse en los términos del artículo XVII del Reglamento de la Ley General de Sociedades Cooperativas. Cláusula Décima séptima.- En caso de fallecimiento de un socio, la persona que se haga cargo total o parcialmente de quienes dependan económicamente del socio fallecido, tendrán derecho a formar parte de la Sociedad si satisfacen los requisitos que establecen la Ley citada y su reglamento, las presentes Bases y el Reglamento para el Registro de Control de Socios. 98    Finalmente el Capitulo Sexto, que tiene que ver con el Funcionamiento de la Sociedad Cooperativa, en el siguiente orden: Cláusula Vigésima sexta.- La dirección, Administración y Vigilancia de la Sociedad, estará a cargo de: a).- La Asamblea General. b).- El Consejo de Administración. c).- El Consejo de Vigilancia. d).- El Gerente General. e).- La comisión de Previsión Social. f).- Comisión de Conciliación y Arbitraje. g).Comisión de Escalafón. h).- Comisión de Conflictos de Fábrica. i).- Comisión de Conflictos de campo. Y j).- Las demás Comisiones señaladas por la Ley de la materia. Cláusula Vigésima séptima.- La Asamblea General es la autoridad suprema y sus acuerdos obligan a todos los socios presentes o ausentes, siempre que dichos acuerdos se tomen conforme a lo que establecen la Ley General de Sociedades Cooperativas, su Reglamento y las presentes Bases. Cláusula Vigésima novena.- De acuerdo con el artículo 27 de la Ley General de Sociedades Cooperativas, la Sociedad adopta el sistema de Asamblea por Delegados en virtud de que sus socios pasan de 500 y residen en localidades distintas de las en que se celebran las Asambleas Generales. Cláusula Trigésima.- Por cada sociedad de Ejidatarios de la Cooperativa, habrá un Delegado para cada Asamblea General el cual será designado por mayoría de votos; un Delegado por el Sector Obrero y otro por el de los Empleados. Cada Delegado deberá presentarse a la Asamblea con la credencial respectiva y el mandato expreso de sus representados la cual estará autorizada por el Representante de la Secretaría de la Economía Nacional y por el respectivo 99    representante que designe el Consejo de Administración de la Cooperativa para cada junta en que se designen los Delegados. Cláusula Trigésima primera.- Las Asambleas serán ordinarias y extraordinarias; las primeras se celebrarán dos veces al año; una el 15 de octubre y la otra dentro de los treinta días siguientes a la de la fecha de la terminación del Balance General de cada ejercicio; y las extraordinarias cada vez que las circunstancias lo requieran. Cuando el Consejo de Administración acepte provisionalmente el ingreso de nuevos socios, se ajustará al procedimiento señalado en el artículo 60 Fracción V de la Ley General de Sociedades Cooperativas. Cláusula Trigésima segunda.- Las Convocatorias para la celebración de las Asambleas Generales Ordinarias o Extraordinarias, se entregarán a los socios con diez días de anticipación ya sea personalmente o por correo certificado. Cláusula Trigésima novena.- La elección de los Consejos de Administración y Vigilancia y sus respectivos suplentes, se hará por Sectores en la siguiente forma: CONSEJO DE ADMINISTRACIÓN.- SECTOR CAMPESINO: Presidente y Secretario.- SECTOR OBRERO: Tesorero.- CONSEJO DE VIGILANCIA: SECTOR CAMPESINO: Presidente.- SECTOR EMPLEADOS: Secretario.SECTOR OBRERO: Vocal. Cláusula Cuadragésima.- El Consejo de Administración estará integrado por tres miembros que desempañarán los cargos de Presidente, Tesorero y Secretario a quienes se les designarán sus respectivos suplentes.- Será el 100    Órgano Ejecutivo de la Asamblea General y tendrá la representación de la Sociedad y el uso de la firma social. 61                                                              61  Por acuerdo de Asamblea general de fecha 7 de agosto de 1956, fueron aprobadas las reformas a las Bases Constitutivas, consistentes en la creación de la Sección de Consumo, siendo Gerente General de la cooperativa el sr. Eugenio Prado, representando a la Secretaría de Economía el Lic. José Luis Teja y estando integrados los Consejos de la siguiente manera: Consejo de Administración: Presidente, José Tapia R.; Secretario, Juan Castillo B.; Tesorero, Jorge Luis Tovar.- Consejo de Vigilancia: Presidente, Álvaro Mendoza; Secretario, Luis A. Lamas; Vocal, Rafael González. Fueron registradas en el Registro Cooperativo Nacional, las reformas a las Bases Constitutivas, bajo el número, 893-M, según oficio número, 32-VI-07092 de fecha 17 de octubre de 1956, girado por la Secretaría de Economía y firmado por el Lic. José Luis Teja O., Director. Al margen izquierdo, un sello que dice: Poder Ejecutivo Federal.- Estados Unidos Mexicanos.- México, D.F.- Secretaría de Economía:-2880.- Dependencia: Dirección General de Fomento Cooperativo.- Oficina de Cooperativas de Producción.- Sección: V.- Mesa:- número del oficio Expediente: 623.2(724.9)/-2- ASUNTO: Autorización de las reformas a la Cláusula Septuagésima quinta de las Bases Constitutivas de la Sociedad Cooperativa de Ejidatarios y Obreros del Ingenio “Emiliano Zapata”, S.C. de P.E. de R.S.- 893-M.- México, D.F., a 29 de septiembre de 1956.- esta Secretaría, de conformidad con lo dispuesto por el artículo 35 del Reglamento de la Ley General de Sociedades Cooperativas vigente, determina autorizar la reforma a la Cláusula Septuagésima quinta de las Bases Constitutivas de la Sociedad Cooperativa de Ejidatarios y Obreros del Ingenio “Emiliano Zapata”, S.C. de P.E. de R.S., que en lo sucesivo quedará redactada en los siguientes términos:- “CLÁUSULA SEPTUAGÉSIMAQUINTA:- La Sección de Consumo a que se refiere el inciso “F” de la Cláusula Cuarta, se dedicará: a).- A la compra y distribución de toda clase de artículos que necesiten los socios y sus familiares y a la producción por cuenta propia de tales artículos, para cumplir con la finalidad indicada;- b).- A la prestación de servicios consistentes en la realización de labores agrícolas en los campos de los mismos socios”.- México, D.F. a 29 de septiembre de 1956.- Sufragio Efectivo No Relección.El oficial Mayor, Lic. Ricardo Torres Gaytán.- (Firmado).- El Director General de Fomento Cooperativo, Lic. José Luis Teja O.- (Firmado). Publicadas, Las Bases Constitutivas de la Sociedad Cooperativa de Ejidatarios Obreros y Empleados del Ingenio “Emiliano Zapata”, S.C. de P.E. de R.S., con registro 494-P., en Zacatepec, Mor. a 28 de diciembre de 1956. Por El Consejo de Administración, el Presidente, José Tapia R. y el Secretario, Juan Castillo. 101    2.- EL ESTADO DEL RECURSO Y EL DESARROLLO TECNOLÓGICO Proceso de elaboración del azúcar, su formación original en la caña. El complejo proceso que permite a las plantas utilizar la energía que sobre para fabricar azúcar a partir del gas carbónico del aire y del hidrógeno disuelto en el agua de la atmósfera y del suelo, se llama “Fotosíntesis”, que significa construir en la luz. Además, para que se efectúe la reacción bioquímica que representa la, fotosíntesis se necesita, la intervención de un pigmento localizado en las partes verdes del vegetal, llamado clorofila, que tiene la propiedad de absorber las radiaciones luminosas y de transformarlas en energía química. La primera reacción de la fotosíntesis es la fijación de la energía solar por la clorofila. El papel de la clorofila es esencial en la fotosíntesis. Ella toma del sol las energías calóricas necesarias para romper las moléculas del gas carbónico y de agua de donde se desprenden el oxigeno y el azúcar. Una parte de los azucares fabricados en la planta se consumen por la misma en la medida en que lo exijan sus necesidades. Bien en la alimentación de su actividad respiratoria, bien los dirigen hacia las células donde se elabora el tejido leñoso que sostiene y forma el tallo de la planta. El excedente se almacena en los órganos de reserva: tallo de la caña, raíz de la remolacha, tubérculo de la papa, grano de los cereales, etc. El almacenaje por si constituye una operación bioquímica compleja. Bajo la forma de almidón, los azúcares fabricados por la fotosíntesis se acumulan provisionalmente en las hojas. En el curso de la fase obscura, el almidón se transforma en glucosa. Esta, que es soluble, puede mediante osmosis 102    atravesar el tejido duro para descender “a la corriente de la savia” hacia los lugares de almacenamiento. En estos “graneros” los almidones son insolubles: se concentran y constituyen en si las reservas. El proceso descrito se refiere a la formación de una sola molécula de azúcar. Este fenómeno se repite millares de veces en el grano clorofílico verde de la planta. Pero pocas plantas, como la caña de azúcar, la remolacha, el arce y el maple acumulan este azúcar, como “sacarosa” en cantidades importantes. En la mayoría de las plantas se acumula en otra forma por ejemplo como glucosa. Empero, ya que la caña de azúcar y la remolacha azucarera almacenan azúcar más abundantemente, que las demás plantas, han llegado a constituir las fuentes principales del abasto mundial. Los procesos de extracción y refinación no hacen más que separar las sustancias no “sacarinas” del azúcar que la naturalizada fábrica en la planta. Sea obtenida de la caña de azúcar, de la remolacha azucarera, del dátil, del arce o del néctar de las flores, la sustancia es el mismo azúcar; la sacarosa. 62 Proceso de elaboración del azúcar en los Ingenios. Para una mejor comprensión del proceso que siguen los ingenios en la elaboración del azúcar, describiremos, las principales etapas, de la secuencia operativa, desde la recepción de la caña en el “Batey” del ingenio hasta que finalmente sale el saco de azúcar a la bodega, donde se almacena para su distribución comercial en el mercado.                                                              62  Alfonso García Espinosa, Glosario de Términos de Campo y Fábrica de la Agroindustria Azucarera. Cía. Editora del Manual Azucarero, México, 1999, p. 294295. 103    Batey. Al llegar la caña al batey o patio del ingenio se pesa en las básculas de plataforma al entrar el vehículo y al salir se vuelve a pesar vació (destare) y por diferencia se obtiene el peso de la caña: del peso bruto (camión y carga) se descuenta el peso del destare (camión) y se obtiene el peso neto de la caña. Parte de la caña que llega al batey se descarga en las mesas de alimentación a través de los “volteadores de hilo” o en algunos ingenios con grúas viajeras o auto estables y otra espera turno en los camiones o vehículos que la transportan haciéndose necesario tener adyacente o cercano al batey un estacionamiento para los camiones cargados con caña para la molienda nocturna, ya que por lo general no es conveniente el almacenamiento en “tongas” en batey ya que se requiere, en tal caso, la doble maniobra para alimentar de caña al Ingenio. La Preparación. De las mesas de alimentación la caña cae a los conductores de caña, en los cuales se encuentran los niveladores o gallegos que uniforman el “colchón de caña” para que pase por el juego de cuchillas picadoras que puede ser uno o dos, para continuar a la desfibradora, que es un equipo con martillos que desfibra la caña sin extraer su jugo. Los juegos de cuchillos y la desfibradora son impulsados por lo general por turbinas, sin embargo, en algunos ingenios su movilización es con motores eléctricos. Durante la preparación de la caña no se le extrae el jugo y del grado de eficiencia con que se verifique dicha preparación dependerá la buena operación de los molinos, es decir, que 104    extraigan una mayor cantidad de jugo y consecuentemente una mayor cantidad de la sacarosa que tiene la caña. Molienda. Consiste en la extracción del jugo (guarapo) mediante la compresión de la caña entre cilindros metálicos ranurados de gran tamaño llamados “mazas”, contando cada molino, con mayor frecuencia, con tres mazas: “la cañera”, donde entra la caña, “la bagacera”, donde sale la caña como bagazo y “la superior”, que se encuentra arriba de ambas y es flotante, de tal manera que se desplaza de arriba hacia abajo y viceversa dependiendo del grueso del colchón de caña con que está alimentado; esta misma maza está sujeta a una presión hidráulica regulada que se ajusta a las necesidades del molino. En esta forma, la caña va siendo exprimida en las unidades de molienda que van teniendo ranuras menores y trabajando a mayor presión pasando del primer, molino al segundo y así sucesivamente hasta el último del “tándem” que puede ser de cinco, seis o inclusive siete unidades. Los mejores procedimientos de molienda logran extraer, en forma de jugo, más del 96% del azúcar, que contiene la caña. Porcentaje llamado “extracción de sacarosa” o más sencillamente: “La extracción”. El jugo que sale delos molinos pasa a un colador de “bagacillo primario” llamado pachaquil o caballito, del cual se ingresa el bagacillo atrás del primer molino y el jugo pasa a los coladores llamados “DSM” que es un separador con tamiz del bagacillo más fino, este bagacillo cae al pachaquil y de ahí se envía después al primer molino. Al salir de los coladores el jugo se bombea a las básculas de guarapo donde es pesado automáticamente, siendo vital e importante este pesaje, ya que con esta información el laboratorio de fábrica establece la contabilidad de la 105    sacarosa que está entrando al proceso de elaboración de la fábrica, cuantificando su recuperación, así como las pérdidas que se tienen durante las etapas del proceso. Clarificación. Al entrar el jugo a elaboración, el personal de este departamento es el responsable de recuperar la mayor cantidad posible de azúcar contenida en el jugo, en forma de cristales que satisfagan las de Normas de Calidad establecidas para que su venta sea más fácil y rentable. Además del azúcar, el jugo contiene proporciones variables de sólido no azúcares (impurezas) en solución y en suspensión que deben eliminarse para obtener cristales de azúcar más puros, exentos de solidos no azucares ocluidos de coloraciones mínimas lo que se logra con una purificación apropiada del guarapo con lo cual disminuye también la viscosidad y la de los Licores Madre obtenidos durante las cristalizaciones progresivas a las que posteriormente son sometidas. El objetivo básico y medular de la clarificación es la eliminación máxima posible del jugo de las impurezas suspendidas, coloidales y en solución, lo que se logra en gran parte con la “alcalinización” o adición del Cal (Ca (OH)2) con este ajuste del PH se disminuye el riesgo de la descomposición de azucares cristalizables por inversión en la clarificación. Evaporación. Ya eliminadas las impurezas del jugo en la clarificación, al jugo claro se le tendrá que reducir gran parte de su contenido de agua, a través de la 106    evaporación, la cual elimina una cantidad de agua que corresponde al 85%, un peso, del jugo, efectuándose en dos pasos: 1. Evaporación continúa mediante sistemas de múltiples efectos, evaporando con esto, alrededor del 75%en peso, del agua con tenida en el jugo. 2. Evaporación intermitente mediante evaporadores de Simple Efecto. Llevándose hasta la sobresaturación de las soluciones azucaradas, para la formación o crecimiento de los cristales de azúcar, correspondiendo el agua evaporada en los “Tachos” a un 10% aproximadamente del peso del jugo claro. La meladura recibida por los tachos está preparada para la extracción de la sacarosa por cristalización mediante su evaporación controlada en los evaporadores de simple efecto que son los tachos. Centrifugación. El centrifugado o “purga” es básicamente la separación de los cristales de azúcar de la meladura o “licor madre”, que se realiza en equipos llamados “centrifugas”, formadas por una “canasta” metálica que gira aproximadamente a 1,200 revoluciones por minuto, contando en la parte interna de la canasta, con una tela finalmente perforada, de tal material no cristalizado y que se encuentra en estado líquido, por efecto de la fuerza centrífuga pasa a través de los orificios de la tela y por su mayor tamaño el cristal es retenido. La miel que se separa se le nombra “purga de A” y el azúcar obtenido “azúcar A”. Las centrifugas cuentan además con un sistema de lavado automático con agua que se programa para lavar el azúcar “A” conforme el proceso lo requiera, 107    este lavado además de lograr una mayor blancura, disuelve un poco más el grano y en forma automática, la centrifuga verifica un cambio de descarga de “purga A”, que es la miel que no se alcanzó a cristalizar y el agua de lavado de alta pureza. El material así tratado, pasa a unos coladores, después a un tanque donde se ajusta el PH y de ahí al Tanque de Reposo, de donde se envía a la refinería. – si se trata de obtener azúcar refinada y no estándar –. Refinería. Ya en esta etapa del proceso, el azúcar disuelta con agua caliente, que es el Licor fundido, se trata con ácido fosfórico y sosa y cuando las condiciones del proceso lo exigen, se usa cal, hasta llegar a un pH de 7.4 a 7.6 y se hace pasar a un tanque llamado de “azúcar de tratado”, de donde se envía a los calentadores con diseño similar a los de clarificación, llevándose aproximadamente a 96° C y se la inyecta aire para formar una emulsión y se envía a los clarificadores (tipo “Lima”) – en algunos ingenios - , en donde por diferencia de densidades se eliminan las impurezas como sucede en los clarificadores de Guarapo, sólo que a la inversa, ya que en lugar de irse al fondo los sólidos, con la ayuda del aire emulsionado en forma de burbujas, al flotar, por su menor densidad a la superficie, arrastra las impurezas junto con ellas, formando una “calabaza” en la superficie del material, la que se elimina en forma mecánica y periódica, ya que la cachaza tiene una densidad menor lo que la hace flotar a la superficie, siendo por lo tanto esta clarificación por flotación. Y por medio de vasos comunicantes el Licor Clarificado se descarga a un tanque en forma regulada según lo ameriten las necesidades, llamándosele “tanque de azúcar clarificado” calentándose nuevamente, haciéndolo pasar a una serie de calentadores y descargado en unos depósitos 108    llamados “mezcladores” donde se le adiciona la tierra de infusorios “Decalite” formando una capa brillante en los “autofiltros” donde se filtra el licor, reteniendo partículas muy finas, obteniéndose un licor bastante claro, y de ahí se envía a las columnas de decoloración, en las cuales se encuentra un carbón granular que tiene la particularidad de absorber el color, presentándose dos fenómenos físicos similares: la absorción (penetración) y la adsorción (Adherirse a la superficie) de las impurezas y una vez saturado de color dicho carbón, se regenera en un horno para ser usado nuevamente. El material que sale de las columnas de carbón pasa a una segunda filtración, que se lleva a cabo en los autofiltros y de ahí a un tanque almacenador para su envío a los tachos de refinado. Y así siguiendo el trabajo propio del tacho, se sobresatura el producto: y en ese preciso momento se introduce al tacho un poco de azúcar finamente molida que rompe el equilibrio de la solución y se inicia una cristalización en cadena. El cristal va creciendo y cuando se llena el tacho, de una manera similar sucede en los tachos de crudo (templos), quita vapor, corta vacío y descarga la masa a un mezclador para alimentar las centrifugas de refinado. Finalmente, el azúcar que se obtiene de las centrifugas de refinado cae a un gusano transportador que lo lleva a un elevador de cangilones, el que descarga en una tolva de ahí se alimenta al granulador, que es prácticamente un secador, por lo general diseñado con un tambor metálico horizontal giratorio, al que se le hace pasar por su interior una corriente de aire caliente y el azúcar húmedo, por medio de unos cucharones repartidos en todo el interior del tambor, para que al girar éste eleven el azúcar a la parte superior y caiga “en cascada” haciendo un recorrido diametralmente, formando así una “cortina de azúcar” en su interior, quitándole la humedad que lleva, saliendo ya seco y 109    caliente a una tolva que conecta, en forma automática la caída del azúcar a las basculas de envase, las que pesan porciones exactas de azúcar de cincuenta kilogramos, los que se envasan en sacos, que pasan por una maquina cosedora que finalmente los pasa a otra banda que los lleva a los transportadores de donde para su almacenamiento en las bodegas de azúcar que se tienen en los ingenios, o bien a “carga directa” a los camiones o a los vagones de ferrocarril para su despacho a los clientes que adquieren el azúcar para si distribución en el mercado. 63                                                              63  Alfonso García Espinosa, op. Cit. p. 297-309. 110    3.- EL IMPACTO SOCIAL. La creación del Municipio de Zacatepec. En este apartado, daremos cuenta de la formación del nuevo municipio de Zacatepec y de la creación de las principales instituciones que le permitieron crecer de una manera importante y ordenada, y así contribuir al desarrollo económico y social de la región y el estado. Meses después de la inauguración del ingenio, en febrero de 1938, se crea el municipio de Zacatepec, Morelos, el 25 de diciembre de 1938. Desde su comienzo el ingenio constituye una fuente trascendente de empleo, además de la importante derrama económica y social, no sólo del municipio, sino de toda la región sur del estado de Morelos. 64 En esta nueva etapa se inicia la concepción del sistema educativo, que daría vigencia a los anhelos de la población del naciente municipio. Con la fundación de las dos primeras primarias de Zacatepec, “La Escuela Primaria Federal Urbana, Revolución Agraria” (varones), y la Escuela Primaria, Lic. Ramón                                                              64  Cabe señalar que, el 5 de febrero de 1938, el presidente Lázaro Cárdenas inauguró, en lo que fuera el casco de la Antigua Hacienda, las nuevas instalaciones del ingenio de Zacatepec, que el mismo había mandado a construir, “con fines sociales para mejorar las condiciones económicas de los ejidatarios y trabajadores de la fábrica”. Dentro de este contexto nació la decisión de elevar a la categoría de Municipio a Zacatepec; la idea tan meritoria del presidente, debía de ser respaldada con un signo político de gran magnitud, no debe olvidarse, tampoco, que muy cerca se encuentra Xoxocotla, comunidad por la que Cárdenas mostró siempre señalada simpatía. De este modo, el 25 de diciembre de 1938, el Gobernador del Estado, sr. Elpidio Perdomo, promulgó el Decreto No. 17 por el que: Artículo 1°.- Se crea el Municipio de Zacatepec, Morelos, que quedará formado por con la extensión que comprende las ayudantías de Tetelpa, Galeana (la antigua Hacienda de San Nicolás), y Zacatepec, siendo esta última la Cabecera Municipal y conservando cada una de ellas la denominación y limites que actualmente tienen. Siendo su primer presidente Municipal, el sr. Andrés López González, para el período 1939-1940. 111    Beteta, (mujeres), y con posterioridad la apertura de la Escuela Primaria Vespertina Rodríguez Cano. Como un logro de los afanes e inquietudes del pueblo que procura mejorar su condición cultural y de la preocupación constante de las autoridades de la Secretaría de Educación Pública, así como la naciente Dirección General de Educación Superior. Y en el año de 1956, siendo gerente general de la cooperativa del ingenio “Emiliano Zapata”, el señor D. Eugenio Prado. Se solicitó a la Secretaría de Educación Pública la creación de un centro educativo donde pudieran continuarse los estudios pos primarios, así como la creación de un centro de capacitación para obreros. Para que se iniciaran de inmediato las construcciones de las instalaciones del centro educativo – ya se sabía que sería un Instituto – se firmo un convenio el 20 de febrero de 1957 con el Comité Administrador del Programa Federal de Construcción de Escuelas (CAPFCE). Tanto el costo de la construcción como los gastos para su sostenimiento, se harían al 50% entre la Dirección General de Enseñanzas Tecnológicas Industriales y Comerciales y la Cooperativa del Ingenio Emiliano Zapata. Se concertó una entrevista con el Ing. Alejandro Guillot S., Director General de Enseñanzas Tecnológicas Industriales y Comerciales, que tuvo lugar el 11 de enero de 1960, para tratar y precisar las condiciones educativas sobre las que se desarrollarían las diversas enseñanzas que en su primera etapa abordaría el Instituto de nueva creación (Tecnológico Regional). Pero en virtud de encontrarse atrasadas las construcciones, se adelanto su inició, denominándolo Instituto Tecnológico “Presidente Adolfo López Mateos, A.C. “, 112    abrió sus puertas el 11 de abril de 1961, bajo la dirección del Ing. Alonso Blackaller Valdez, principiando sus labores con cuatro grupos de primer año de secundaria – 11, 12, 13 y 14, éste último de mujeres exclusivamente – siendo gerente general de la cooperativa el ing. Jesús Merino Fernández. El día 15 de septiembre del mismo año, se hizo cargo de la Dirección del Instituto, el ing. Apolinar Valladares Rebolledo; y en el mes de noviembre tuvo lugar la inauguración oficial del Plantel que fue hecha por el C. Presidente de la República, Lic. Adolfo López Mateos. Y el 15 de enero de 1964, se hizo cargo de la Dirección del Instituto el ing. Federico Indalecio Peña Aguirre; iniciándose la segunda etapa del Instituto, con la creación de un grupo de primer año de vocacional con el Bachillerato de Ingeniería y Ciencias Físico-Matemáticas. Y al iniciarse los cursos en febrero de 1966, siendo gerente general de la cooperativa, el Lic. Marco Antonio Muños T. y Director General de Enseñanzas Tecnológicas el QBP. Héctor Mayagoitia Domínguez, se creó la carrera de Técnico Agropecuario con un grupo de primer año. Finalmente, al considerarse que había concluido la segunda etapa, por contar ya con sus laboratorios y talleres y trabajando el ciclo de Secundaria Técnica con 5-4-3 grupos de (primero, segundo y tercer años); 4-2-1, de primero, segundo y tercer grados de Técnico Industrial; así como 1-1-1, de primero, segundo y tercer años de Técnicos Agropecuario; se acordó poner en liquidación la Secundaria, eliminando el Primer Grado y creando en éste mismo 113    año escolar de 1970/71 los dos primeros grupos del primer semestre de la carrera de Ingeniería Industrial. 65 La asistencia social. Se inicia con los servicios médicos-asistenciales que otorga la cooperativa a sus socios, de los cuales hacemos una referencia, en el marco de su creación: denominados a través de un Reglamento para el funcionamiento de los Servicios Médicos y Hospital de la Sociedad Cooperativa de Ejidatarios y Obreros del Ingenio “Emiliano Zapata”, S.C. de P. E. de R. S. registro 494.P. La cual se da a conocer en el informe del Consejo de Administración de la cooperativa antes mencionada, a su Asamblea General de Socios, reunida en Zacatepec, Morelos El día 25 de octubre de 1944. Mediante oficio recibido de aprobación, de la entonces Secretaría de la Economía Nacional, que cita. Que derivado del estudio del Reglamento del Servicio Medico y Hospital de la Sociedad Cooperativa en mención se desprende que no contraviene a las disposiciones contenidas en la Ley General de Sociedades Cooperativas vigente y su reglamento. Por tal motivo se aprueba el reglamento de referencia, ratificando así lo manifestado a esa propia sociedad en oficio número 11871, del 20 de diciembre de 1944. Atentamente – Sufragio Efectivo No Relección – P. O. del Secretario, El Oficial Mayor, Manuel Martínez Sicilia. Rubrica. Para tal fin se emitió un reglamento, que a la letra dice:                                                              65  Véase Secretaría de Educación Pública, Subsecretaría de Educación Media Técnica y Superior, Dirección General de Educación Superior, Instituto Tecnológico Regional N° 9., Zacatepec, Morelos, Boletín Informativo, p. 1-13. 114    REGLAMENTO PARA EL FUNCIONAMIENTO DE LOS SERVICIOS MÉDICOS DE LA COOPERATIVA DEL INGENIO DE ZACATEPEC.               Con un capitulo Primero que se refiere a la Organización del Servicio Médico y Hospital, de la manera siguiente:           Artículo 1- El Servicio Médico de la cooperativa está destinado exclusivamente a impartir atención médica y quirúrgica a los socios de la misma, ejidatarios, obreros, empleados y trabajadores eventuales y sus familiares, padres, esposa, hijos, hermanos que dependan económicamente del socio o trabajador y estén bajo su patria potestad. Artículo 2- El Servicio Médico será gratuito, y comprenderá las siguientes atenciones: I.- Consulta en los Servicios Médicos de Zacatepec, Xochitepec, Puente de Ixtla, Tlaltizapán, Tlaquiltenango y Jintepec. II.- La medicina recetada por los Médicos de los Servicios, que será surtida en las farmacias de la Cooperativa, o en las particulares que autorice el Jefe del Servicio, si se trata de medicinas que no se tengan en existencia. III.- Curaciones e inyecciones en los Servicios Médicos, durante las horas de servicio y días hábiles. IV.- Partos que serán atendidos preferentemente en los locales del Servicio destinados para ello. Sólo se atenderán a domicilio, los casos graves o imprevistos. 115    V.- Las consultas a domicilio, curaciones o inyecciones están reservadas exclusivamente para los enfermos que a juicio del Médico que los atienda, no puedan concurrir al Servicio a recibirlas, por la índole de sus padecimientos; pero estarán sujetas a las disposiciones que se contienen en este Reglamento. VI.- Este Servicio está reservado exclusivamente para aquellos enfermos cuyo padecimiento tenga remedio y en consecuencia, no serán admitidos enfermos crónicos o incurables. VII.- Servicio de Rayos X y Laboratorio, que será proporcionado a juicio del Médico que atienda al enfermo, con autorización del Jefe del Servicio Médico de la Cooperativa. Artículo 3°.- No se reconocerá ningún pago por concepto de atención médica o medicinas que se reciban fuera del Servicio Médico de la Cooperativa. Artículo 4°.- Todos los servicios a que se refiere el Artículo 2° de este Reglamento, estarán sujetos a los horarios especiales que se fijen. Artículo 5°.- Para tener derecho a esos servicios, se necesita: I.- Ser socio activo de la Cooperativa, en pleno uso de sus derechos. II.- Presentar su Credencial de identificación al solicitar cualquiera de los servicios que se imparten; III.- Ser familiar de algún Socio de la Cooperativa y estar considerado en la tarjeta de identificación expedida al mismo, invariablemente al solicitar atención médica; y que deberá presentar 116    IV.- Los trabajadores no Socios y sus familiares, presentarán la credencial de identificación que será extendida por el Jefe de la Sección de Personal. Artículo 6°.- Los anticipos sociales de los Socios enfermos que estén desempeñando trabajos en cualquiera de los Departamentos de la cooperativa, serán cubiertos de acuerdo con las disposiciones legales correspondientes, conforme al diagnostico del Médico que lo atienda, quien expedirá el certificado respectivo para que el Administrador del Hospital le expida la boleta de enfermo. Los trabajadores no Socios, estarán sujetos a esta disposición para el cobro de sus salarios, en caso de enfermedad. 66                                                              66 Datos consultados, del “Reglamento para el Funcionamiento de los Servicios Médicos y Hospital, de la Sociedad Cooperativa de Ejidatarios y Obreros del Ingenio “Emiliano Zapata”, S.C. de P.E. de R.S., con Registro 494-P. Aclarando, que el material de consulta se encontraba, en un pésimo estado de conservación, por lo que fue imposible obtener la información completa. Dándose a conocer por medio de un informe, del Consejo de Administración de la Sociedad Cooperativa de Ejidatarios y Obreros del Ingenio “Emiliano Zapata”, S.C. de P.E. de R.S., a la Asamblea General de Socios reunida en Zacatepec, Morelos, el día 25 de octubre de 1944. 117    CONCLUSIONES Esta investigación nos brinda la oportunidad de conocer más de cerca y con mucho más certeza, el imbricado transito de la industria azucarera nacional, a través de uno de los experimentos más audaces de los que se tenga memoria en el país. En todo caso diremos que la cuestión fundamental fue la posibilidad de funcionamiento de una industria que tradicionalmente había sido manejada sobre la base de una fuerte centralización, que requería financiamiento continuo, fuerte inversión de capital, conocimientos técnicos precisos y acumulados y cuya materia prima había sido producida secularmente en extensas plantaciones controladas desde el ingenio, ahora en manos de un conjunto de cooperativistas inexpertos y asentada sobre un atomizado campo de cultivo sujeto a una infinidad de decisiones por parte de los ejidatarios. Este asunto es de fundamental importancia e inclusive rebasaba la problemática de las cooperativas. El reparto agrario en las fincas azucareras alteró radicalmente el orden de cosas probadas y modificadas con el transcurrir de mucho tiempo. Mientras que con anterioridad a la reforma agraria el ingenio y las tierras cañeras para abastecerlo estaban consolidados en una sola propiedad (la antigua Hacienda de Zacatepec), las actividades agrícolas e industriales se encontraban controladas por decisiones centralizadas que más o menos garantizaban el acierto en un determinado nivel de resultados. Que una vez aplicadas las afectaciones territoriales a las haciendas azucareras, se multiplicaron los propietarios de la tierra que la sometían a la explotación individual y con muy diversos criterios. En el caso del Ingenio 118    “Emiliano Zapata”, la cuestión era todavía más compleja, dado que los ejidos a los que se encargó su abastecimiento habían sido formados cuando menos una década atrás, ajenos a cualquier planeación de una posible reanudación del cultivo cañero interrumpido desde 1912. En la mayoría de los casos los ejidatarios tenían poca o nula experiencia en el manejo de los cañaverales, carecían de adecuada dirección técnica y, aun más, de un eficiente sistema de crédito tan decisivo en el cultivo de la caña. No habiéndose creado aun el Sistema Oficial de Fomento Bancario y Agrícola Mexicano, (Banco Nacional de Crédito Ejidal, el Banco Nacional Agrícola, los Almacenes Nacionales de Depósito, el Banco Nacional Obrero de Fomento Industrial, el Banco Nacional de Comercio y el Banco Nacional Hipotecario Urbano y de Obras Públicas). Además de que, como norma general, los campesinos solo contaban con los conocimientos que algunos de ellos habían adquirido durante la época en que habían trabajado temporalmente en las haciendas porfiristas. Este conglomerado de problemas permite evaluar la situación inicial sobre la que despegó el nuevo Ingenio de Zacatepec. Los problemas no terminaron allí. Cuando el Banco Nacional de Crédito Ejidal comenzó a otorgar préstamos a los cañeros, la pobreza extrema de muchos de ellos los orilló a utilizarlos en su sobrevivencia. Asímismo, la capacidad de amortización de estos créditos fue escasa o nula. La triste realidad de ejidatarios empobrecidos y parcelas misérrimas conllevaba a la necesidad de implantar un enorme y costoso aparato asistencial por parte del Estado. – que debe contabilizarse dentro de los costos ocultos de la experiencia – Además el reparto agrario creó una importante población minifundista al dividir las tierras aritméticamente entre el número de sujetos con derechos agrarios, no 119    planteándose la viabilidad económica de la parcela ejidal como base del reparto, ni tampoco integrando la futura expansión demográfica que en el área de Zacatepec tuvo una notable fuerza. Todo esto impidió que pese al buen desempeño del ingenio y a los altos rendimientos de caña por hectárea los ingresos logrados por los cooperativistas fueran altos y que la industria azucarera significara un real cambio en los estándares de vida de los ejidatarios. Así pues el Proyecto cardenista de reforma agraria, buscó la total integración del campo cañero morelense principalmente de sus dos principales actores, el sector Campesino y el sector Obrero. Esto se logró organizando a los obreros y campesinos en un sistema de cooperativas agroindustriales que fueron creadas como fruto de las disposiciones legales vigentes en esa época. Que se refieren a las Cooperativas de Participación Estatal. Dado que el objetivo del gobierno mexicano era la creación de fuentes de trabajo y levantar algunas zonas deprimidas del agro nacional, contribuyendo de modo decidido al establecimiento de este tipo de cooperativas, que si bien no todas lograron la prosperidad deseada, otras como fue el caso de la cooperativa del Ingenio de Zacatepec, si alcanzaron tal prosperidad, por espacio de más de 50 años. Demostrando con ello lo que se puede hacer cuando el Estado y los campesinos y los obreros ensayan en grandes unidades productoras. 67                                                              67  Señalaremos que la organización implantada en la Cooperativa de Zacatepec, fue muy diferente al de otras organizaciones similares, ya que en esta, consistió en la 120    Finalmente, su proceso histórico es impresionante porque nos habla de un concepto de vida y desarrollo social, son de mencionarse los adelantos logrados por parte de la cooperativa de Zacatepec. Donde los socios, recibían anticipos importantes por su trabajo, gozando de servicios sociales como Hospitales, escuelas, campos deportivos, jardines de niños, etcétera, indicaban el nivel de vida de los socios obreros, campesinos y empleados, muy superior a cualquier otro de los trabajadores asalariados que prestaban sus servicios en las distintas empresas azucareras del país. El ingenio inicia operaciones en la zafra 1937/1938, bajo el esquema de Sociedad Cooperativa Ejidal, hasta la zafra de 1990/1991. Pasando a la quiebra, donde opera bajo el esquema de Sindicatura. Posteriormente en la zafra 1991/1992, pasa a la iniciativa privada, operado por el Grupo Xafra. En la zafra de 1993/1994 a 2001, opera con el Grupo Escorpión, y en la actualidad, a partir de la zafra, 2001/2002 a la fecha, siendo expropiado por el Gobierno Federal, trabaja bajo el esquema de un Fideicomiso. 68                                                                                                                                                                                aportación de caña de azúcar por los socios campesinos (ejidatarios y pequeños agricultores) a la fábrica operada por obreros y empleados, socios también de la cooperativa, bajo la dirección de un Consejo de Administración, elegido en Asamblea General de Representantes Seccionales, y con un Gerente General designado por el Estado. Además de afirmar que sobre estos aspectos, los resultados de esta investigación, confirman las tendencias generales, que otros autores han marcado en el desarrollo de la industria azucarera en México, particularmente las señaladas por Horacio Crespo y Doménico Sindico, acerca del proyecto cardenista con la fundación de las dos centrales azucareras, el Ingenio de Zacatepec en Morelos y El Mante en Tamaulipas. Que significaron la inserción de las innovaciones tecnológicas y de organización, dentro de la industria azucarera nacional. Véase Horacio Crespo, Historia del azúcar en México, tomo I, II. En la que participan, bajo su dirección Sergio Reyes Retana, Enrique Villanueva, Arnulfo Ambríz, Carlos Zolla, Carlos González Herrera, Alejandro Pinel y Beatriz Sharrer, especialistas sobre diversos aspectos y periodos de la industria azucarera en México; y la de Doménico Sindico, Azúcar y burguesía, Morelos en el siglo XIX. 68  Datos proporcionados, por la Gerencia General del Fideicomiso, Ingenio Azucarero “Emiliano Zapata”, de Zacatepec, Morelos. Ingeniero, Rodolfo Villanueva Zalapa, Gerente. 121      BIBLIOGRAFIA. Ayala Espino José, Estado y Desarrollo, La formación de la economía mixta mexicana (1920-1982), México, 1988, SEMIP., AZÚCAR S.A., UNAM., F.C.E. Bartra Roger, Campesinado y poder político en México, Colección Problemas de México, México, 1982, Ediciones Era. Cardozo Ciro, (Coordinador), “México en el siglo XIX (1821-1910), Historia Económica y de la Estructura Social, México, 1980. Editorial Nueva Imagen. 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Diciembre 2009, número 16. FUENTES DE DOCUMENTALES. AGN. Archivo General de la Nación, (Secretaría del Trabajo y Previsión Social), Departamento Central de archivo, Delegación de Archivo de la Dirección General de Fomento Cooperativo y Organización Social para el Trabajo, Legajo, 1, 1939, autorización 434-F, 6 de diciembre de 1939. Además de la Dirección de Archivo Histórico central, grupo documental, Sociedad Cooperativa Ejidal, Zacatepec, Morelos, volumen I, caja C-1, legajo 01, expediente 494-P 3/F, fojas 6-457, galería 5. 125    ANEXOS. Los cuadros, 2, 3, 4 y 5. (Producción, Rendimiento y Derivados). Cuadro 4. Datos de Produccion y Ren Produccion fecha Gerente Zafra Dias de zafra % de Tiempo Perdido inicio / fin SR. ANTONIO SOLORZANO 1937/1938 X X 86 64.52 LIC. ENRIQUE GONZALEZ 1938/1939 X X 158 46.87 SR. MAQUEO C. 1939/1940 X X 90 36.96 ING. EUGENIO CAMACHO 1940/1941 X X 111 27.83 ING. FRANCISCO ROBLEDO 1941/1942 X X 122 41.9 1942/1943 X X 192 32.73 1943/1944 X X 179 31.82 SR SEVERINO CARRERA SR SEVERINO CARRERA ING. RODRIGO DEL VALLE SR.MANUEL MATEOS SR. EUGENIO PRADO 1943/1944 X X 179 31.82 1944/1945 X X 151 36.22 1945/1946 X X 127 21.64 1946/1947 X X 182 19.33 1947/1948 X X 188 15.58 1948/1949 X X 154 12.96 1949/1950 X X 149 15.18 1950/1951 X X 172 10.26 1951/1952 23/11/1951 26/05/1952 185 5.02 1952/1953 01/11/1952 01/05/1953 182 5.15 1953/1954 10/11/1953 06/05/1954 177 3.3 1954/1955 21/11/1954 08/06/1955 200 9.47 SR. EUGENIO PRADO 1954/1955 21/11/1954 08/06/1955 200 9.47 1955/1956 30/11/1955 27/05/1956 200 9.06 1956/1957 09/11/1956 11/05/1957 184 13.88 1957/1958 23/11/1957 13/06/1958 203 17.65 ion y Rendimiento de la Cooperativa del Ingenio " Rendimiento Superficie cosechada p/Ha Total de Caña p/Ha Toneladas de Caña por Molienda Toneladas de Azucar Producida Rendimiento de Azucar % de Caña 714 83.807 59,838 6315 10.553 2514 79.603 200,122 22142 11.064 2836 46.818 132,777 16157 12.169 2191 81.175 170883 21509 12.094 2170 78.748 320542 20873 12.215 4083 78.506 317364 34270 10.691 5540 57.286 252821 34344 10.822 5540 57.286 252821 34344 10.822 3993 63.316 271185 26574 10.511 4191 64.66 351768 27090 9.989 5253 66.965 414203 33544 9.536 6758 61.047 397522 41722 10.073 5487 72.448 366017 42899 10.792 5081 72.036 432123 36865 10.072 5810 74.376 561889 44671 10.338 6640 84.622 595520 58278 10.372 6726 88.54 651887 59498 9.991 7060 92.335 723170 64058 9.827 7869 91.901 660231 74519 10.304 7869 91.901 660231 74519 10.304 8395 78.646 695341 64689 9.798 7800 89.146 757404 66686 9.59 8000 94.676 740756 69632 9.194 l Ingenio "Emiliano Zapata" de Zacatepec, Morelo Derivados Ton Mieles Finales a 85° BX Litros de Alcohol Producido Perdidas Totales % de Zacarosa en Caña Final Fabrica de Alcohol 2956 x x x x 8162 x x x x 5697 x x x x 8183 x x x x 8008 x x x x 17745 1182222 x x 4976.264 18657 4615155 x x 17595.32 18657 4615155 x x 17595.32 13570 3486615 x x 13282.654 16097 2559000 x x 10190.584 21838 931769 x x 13719.135 22123 1385244 x x 5870.134 15877 1348192 x x 5259.333 17989 1438670 x x 5966.41 20105 2129000 x x 9449.778 27221 3313475 x x 13840.794 29425 1307600 2.625 12.619 7344.43 31559 2337681 2.48 12.307 9349.855 33038 446843 2.536 12.841 17766.556 33038 446843 2.536 12.841 17766.556 31259 3928535 2.667 12.465 15609.575 32042 2791255 2.451 12.041 11003.884 38826 2995736 2.78 11973 14933.947 c, Morelos. Litros de Alcohol por Tonelada de Mieles Finales Litros de Petrolio por Tonelada de Caña x 76.789 x 71.676 x 58.078 x 68.168 x 72.309 237.572 67.225 262.294 63.09 262.294 63.09 262.494 73.359 251.114 66.044 67.917 71.404 235.982 67.114 256.343 60.485 241.128 68.934 225.296 65.755 239.399 59.83 178.04 58.127 250.023 57.865 250.293 62.822 250.293 62.822 251.675 14.265 253.661 22.24 200.599 24.474