Pounca - Hemeroteca Digital

Transcript

Martes 23 de Abril de i872. Afte XX.-~Número 476t>. Primera edUien DIARIO LIBERAL PUNTOS DE SUSORIOION. PRECIOS DE SUSCRICION. •., - o ^«=.*.o Wn tnña. la Península: snscricion directa, 6 pesetas tñ.^rrPo'ÍSLrar6-¡írtrLt\" S ^ ' P - t a s 60 céntimos trimestre. K í H ^ * B c í ' i r ¿ t " ; Í l r S ; a . - P a i a e B con quienes E.paüa no ha celebrado FUNDADOR: D. PEDRO CALVO ASENSIO. "Tots^eSs^Slírín^impo^^^ Anuncios, á precios convencionales.-Oomnmcados de 1 á 5 pesetas linea. pouncASIN MISÜBICOBDIA. ¡Otra vez la sublevación, ot ra vez los carlistas! ¿Cuándo acabaremos? ¿Cuándo se dirá de España que ha entrado en un período da paz inalterable? ¿Cuándo estaremos todos convencidos de que es imposible causar efecto con ridiculas bravatas? Cuando los ccnculcadores de la ley no tengan otra esperanza que la ley sola, la ley inapelable. Dos amnistías tras dos sublevaciones, esfuerzos da inmensa prudencia, indultos diarios, y los carlistas otra vez: esto sencillo resumen sugiere á la opinión publica las palabras que á todas horas y enérgicamente repite, las palabras que encabezan este artículo, las palabras que la prudencia dicta: «Sin misericordia.» La tranquila vida de provincias es una agitación continua á estas horas; todos preguntan en Madrid por las noticias de las partidas, y cuando la Representación vá á hablar, cuando las Cortes abren ancho campo á la ordenada lucha de todos los partidos, una bandería repugnante, una idea qua con sólo manifestarse ofende al libre albedrio del hombre quiere imponer y amedrentar y busca un triunfo imposible pisoteando lo más sagrado, que es la paz y la libertad de la patria. Es necesario no hacerse ilusiones: los carlistas no tienen ninguna esperanza de victoria, pero saben que la lucha trastornará poco 6 mucho; confian en un perdon más ó menos lato, y con toda tranquilidad los indultados de hoy continuarán mañana desacreditando con sus alborotos la causa de la libertad española. Son los mismos que salieron gananciosos del Convenio de Vergara; son los qua en 1848 fueron perdonados, los indultados en 1854, los amnistiados en 1869 y en 1870; y sin embargo, ¡otra vez la sublevación, otra vez los carlistas! Cesen, pues, y para siempre, las contemplaciones; sirva la ley para todo, y la energía, sólo la energía supla á una clemencia que alienta al culpable. Si se ha de afianzar lajlibertad en este país, hagamos que todos la respeten y que la tema quien no quiera respetarla. Ellos lo han querido; pues sea, y sea sin misericordia. Concluyase la comedia de imbéciles é ilegales Gobiernos; muestra el Gobierno de Amadeo I que fuera de la ley no hay clemencia, no hay consideración que valga, y pruebe de una vez y para siempre que la Revolución de setiembre nos dio con la libertad y la honra la paz indestructible de las naciones civilizadas. Alégrense los verdaderos liberales cuando sepan que ha atravesado la frontera uno de esos asainetados personajes condenados á eterna emigración; regocíjense cuando vean que ni uno de sus ridículos enemigos deja de manifestar su rencor y odio, pues todos pueden estar convencidos de que ha llegado la hora del castigo justo y severo, del castigo que la ley impone, sin distinción, á todos los enemigos del decoro nacional. Gobierno español, así lo espera de tu energía y de tu amor á la ley la nación indignada, que á una voz repite señalando á sus enemigos: iSin tnisericordial Gomo nuestros lectores verían en la tUltima hora» de nuestro número de ayer, los carlistas han respondido al llamamiento de su amo d<.u Carlos de Borbon, presentándose en algunas provincias en pié de guerra. No tiene gran importancia hasta este momento la ridicula farsa de los constantes enemigos de la paz de España; pero no cabe duda que muchos incautos ó alucinados seguirán la conducta de los facciosos desenmascarados ya, y procurarán dar al alzamiento carlista las proporciones necesarias para justificar, como de costumbre, la inversión de lo^ fondos recibidos, mejor dicho, estafados al necio pretendiente de Ginebra, cuyas farsas están siendo la irrisión de todas las personas sensatas. En vista de lo ya sucedido y de las probabilidades de que el carlismo haga el ú'timo esfueizo, si no para vencer, porque esto no es posible, al menos para quedar bien con su esplotado amo, el país debe estar alerta, como lo está el Gobierno, y no dejar impune ni el más leva atontado de los facciosos á la Soberanía nacional. Nuestro valiente ejército, el bizarro ejército español, que no sabe permanecer arma al brazo cuando llega á su noticia que los enemigos de España se presentan en ademan hostil, ha roto ya el fuego sobre los carlistas. A la Milicia Nacional, á ese benemérito cuerpo de patriotas que tantos dias de gloria tiene dados á la libertad toca ahora pisotear á los carlistas y hacerles ver que en esta país ejército y pueblo, nobles y plebeyos, ricos y pobres odian de muerte ¿ los asesinos de nuestros padres y están dispuestos á empuñar nuevamente el fusil con que éstos diezmaron hace treinta años á los fanáticos partidarios de un ambicioso vulgar que pomposamente se apellidaba Carlos Y. Es tal la confianza que el Gobierno tiene en el ejército y en el pueblo armado, que, á pesar de todo cuanto la prensa de oposición vocifera diariamente, el poder ejecutivo no ha tomado una sola medida estrema, como las leyes le autorizan. El Gobierno sabe que puede estar tranquilo cuando el ejército y el pueblo velan, fraternizando, por la causa de su libertadj; conoce el espíritu da que todos nos hallamos animados; comprende el odio de España hacia la causa carlista, y valando sólo, como es su deber, para qua nada falte á los dignos patriotas que persiguen al carlismo, se entrega como en tiempos normales á perfeccionar la administración de nuestro país, y se ocupa en preparar los trabajos qua haa de ser objeto da la discusión de las futuras Cortes. Como prueba de la verdad de cuanto decimos podemos presentar á nuestros lectores la prisión de los señores que forman la Junta central da los carlistas. El Gobierno no ha intervenido para nada en este asunto. Los tribunales de justicia son los que han creído del caso intervenir en la asonada carlista, y de ellos proceden los auto3 da prisión contra los que con su proceder habrían dado pié á otro Gobierno.Sal del señor Ruiz Zorrilla, por ejemplo, para saltar por encima de los derechos individuales, adoptar medidas de fuerza y presentarse luego al Parlamento en demanda de un bilí de indemnidad ó á escuchar la sentencia de los representantes del pueblo. El movimiento carlista ha comenzado; prepárase el pueblo para recibirlo, y, créannos el ejército y la Milicia, cuanto más enérgicos se muestren en la lucha, más acreedores se harán al agradecimiento de la patria. Las guerras civiles, si desda el principio encuentran, como hoy sucede en España, un sentimiento general de repulsión, nunca llegan á tomar incremento; persígase sin tregua ni descanso á los carlistas allí donde se presenten; hágaseles morder el polvo cuando organicen defensa contra las fuerzas liberales; no se les dé un momento da tregua, y la justificación de los fondos estafados al Terso costará á los carlistas más de lo que sa creen. Tratándose de otro partido que no fuera el carlista, nosotros seriamos los primaros en aconsejar al país y 125 enfermo. Ha llegado tan de repente, qae todos le creían corriendo todavía por el camino de Borgoña. —Continuad. ¿Qué ha hecho? ¿Qué ha dicho? —Dos horas después de su llegada,—Jijo el conde recorriendo con la vista otro periódico, —fué sin escolta al palacio del Directorio, I aunque se hundió de propósito dentro dsl coche para qae nadie le viese, fué reconocido por la guardia cuando echó |pié á tierra y en seguida se oyeron frenéticos vivas. Eldia 25 fué el señalado para la recepción oficial. —¡Y yo no estaré á su lado! ¡Oh! ¡Quisiera verle... quisiera... pero nó, nó, quiero morir! Y luchando con las correas que le tenían prisionero, tuvo uno de los frecuentes accesos de delirio, muy semejantes á raptos de locura, durante los cuales creía ver á su esposa y que le llamaba, terminando siempre por fuertes convulsione?. En aquel momento resonó un redoble de tambor en la pieza inmediata; Mauricio se calmó rápidamente y esclamó: —¡El general! Pero fué el doctor Corvisart quien apareció, seguido de Gringoire. —¡No es él!—dijo Mauricio rechinando los dientes.—Quiero mor... —«Ayer 25,—interrumpió el conde leyendo en otro periódico,—recibió en audiencia solemne el Directorio al general Bonaparte.» Mauricio calló y escuchó atentamente. Aproximóse Corvisart, haciendo una seña ai conde jkfiode que continuase U lectura. P ^ ° ^ ^ ' / ' ^ ' ? Í « ' ? * " ° ' Í ° T ' ^ ? í - ^ ^ Í S ^ ^ ^ f ' ' ' Í " ^ T ° ' ' ' ^^-y ««> todas lasUbrerias. PEovníciAS: Oficinas de LA IBERIA, girando directamente ó en casa de naestros comisionados. Cuba: Habana, Charlain y Fernandez,—í'iZtpinaí, Administración del Diario de Manda.—Lisboa, D. Juan de la Torre, librería Española, rúa Áurea, 48. Paris librería Deuné Schaite, rae Favart, 2.-Lóndre», A. Serrano, 3, Guilford, Place'BussU square, yi. G.~Neio-7ork, H. Bailliere, y en las principales librerías de todos los al ejército la benevolencia para con los ilusos; pero tratándose de los carlistas, de esos ingratos que no han recibido mis que beneficios de los partidos populares, y que á pesar da haber sido amnistiados dos veces por la Revolución de setiembre vuelven por tercera vez á levantarse contra ella, nosotros no podemos aconsejar más que rigor á todos, y especialmente á los llamados á perseguirlos por su investidura. Velemos todos arma al brazo, pueblo español; cuando suena la hora del combata cumplamos todos con nuestro deber. El úoico medio de concluir con los enemigos de la libertad y de la patria es inutilizar hasta la última semilla da donde han brotado y brotarán siempre los eternos trastornadoros del orden, tan hipócritas en la paz como cínicos y miserables en la guerra. La honra nacional, la libertad, los derechos dal ciudadano, la patria, la dignidad humana, todo quiere ponerlo en peligro una gavilla de seras degradados, vendidos al oro dal más ridículo de los pretendientes, que, ávidos del pillaje, han conseguido levantarse en armas, queriendo sembrar por todas partes la desolación y la ruina. La patria estaría con saj;uridad en inminente peligro, las libertades adquiridas dejarían de ser para dar paso á la más repugnante degradación humana, si la nación cayera por desgracia en manos de esos hipócritas foragidos que apellidándole españoles deshonran á España, llamándose hombres degradan á la humanidad, y envilecen i una religión santa haciéndola encubridora de sus maldades é inauditos crímenes. ¿Dónde están los que tanto han blasonado de albergar en sus corazones generosos sentimientos; los que con las sacratísimas palabras PATRIA y LIBXRTAD en sus labios conmovían al pueblo en momentos de paz y de reposo? ¿Qué hacen los que á todas horas, con ademán descompuesto y subido tono, atronaban los oídos de la multitud diciendo que sacrificaban en aras de la patria su vida y su fortuna; los conjurados, los que, reunidos en mal hora para maquinar planes tenebrosos, poniendo asechanzas á la libertad, proclamaron la COALICIÓN de todos los mezquinamente despechados, procurando unirse todos para salvarlo todot Los que emplearon cuantos medios estaban á su alcance para organizar las huestes que hablan de combatir rudamente el edificio social, ¿qué hacen, qué dicen? ¿No sa avergüenzan de su propia obra? El honroso título dd español, ¿no se revuelve contra ellos, lanzándoles al rostro su ignominia? ¿Qué responden á la enérgica voz de sus conciencias, si las tienen, incrapindoÍes sus criminales intentos? ¡Y se llaman españoles, y permanecen tranquilos ante la terrible amenaza, y no tiemblan al ver que los mártires de la libertad da España se levantan de sus tumbas corriendo en tropel y confundidos á salvar da nuevo la gloriosa enseña da ¡ Páfm y hibertadl... Nó, uo son españoles los que así proceden; no corre por sus venas la sangre de un pueblo qua produce Maldonados, Bravos y Padillas; no son españoles ni pueden serlo, porque la bandera nacional está enarbolada, reuniendo bajo sus pliegues á todos aquellos que están dispuestos á combatir los ímpetus del monstruoso aborto de tan iriitante coalición, y no son ellos los que acuden. El grosero absolutismo, alentado por la nefanda li ga, ha tremolado su pendón, tratando de hacer resonar por todas partes el desesperante grito. ¡YIVA LA INQUISICIÓN! ¡MUIRÁN LAS LIBERTADKS TODAS! es su lema, y saltando por cima de todo se han lanzado á la pelea, ansiosos de sangre y esterminio. Sea: el Gobierno de S. M., empuñada la sagrada enseña, se apresta decidido; los españoles todos acuden llenos de patrióticos sentimientos y ofrecen al Gabinete presidido por el señor Sagasta el concurso de todas sus fuerzas. ¡A la lucha, pues, seres envilecidos; la libertad está asegurada, y la inexorable rigidez de las leyes será sentida por los 124 tor,—el 24 vendimiario, y ha preguntado por el coronel Bellegarde.» —¡Mi general!—esclamó Mauricio calmándose súbitamente. Esta escena tenía lugar en casa de Bellegarde. El coronel estaba acostado sobre un lecho colocado en el centro de la sala, con pálido rostro, vista febril, labios de un rojo oscuro, con las facciones sumamente contraidas y demacrado rostro. Desde el día del duelo había envejecido Mauricio diez años y presentaba en su mirada cierta cosa de estraño y terrible que parecía revelar una perturbación violenta de los órganos del cerebro. Dos fuertes correas rodeaban el lecho por encima del cobertor, conteniendo la ropa, sin poder molestar al enfermo, pero colocándole en la imposibilidad absoluta de levantarse. Estaban tomadas todas las precauciones, de forma que la cama, aunque elegante, asemejaba á las que se vén en los hospitales da locos. Junto á la cama había unamesita llena de frascos y redomitas, y al lado de la segunda estaba sentado el conde de Adore, que era el lector, á la sazón rodeado de periódicos. Serian próximamente las dos de la tarde. —¿Conque ha preguntado por mí el general? Así dijo Mauricio, cuya mirada era en aquel momento inquisitorial. —Sí,—repuso el conde. —¿Tiene que darme órdenes? —Quiere veros; pero ya le han dicho que estáis rebeldes! La integridad nacional es atacada en nuestras Antillas; la honra de la nación se vé amenazada en España. ¡Al combate! El fétido absolutismo caerá para siempre á los pies de los nobles españoles: ¡España con honra! hemos proclamado en CáHíz, y preciso es qua la honra de España no se mancilla jamás. Anoche á las nueva tuvo lugar en el Sanado la reunión de la mayoría da los senadoras y diputados, con la asistencia de los señores siguientes: Diputados. Topeta.—Albareda. — Gervera.—Rutes Gutiérrez dalaYega.—Arias.—Torreblanca.—Aladro,—Rstés. González.—Romero Robledo.—Gisbart.—Malcampo. Ahumada.—C. M. de Barrero.—Rico,—Curial. Amat.—Font.—Clavijo.—López de Portilla.—Palanca. — Bas. — Parra,—Risueño.—Aviles.—Polanco,— Ortiz dfl Pinedo,—Romero Ortiz.—Estrada.—Capdepon.—Martino.—Santos.—Moreno Nieto.—Freach.— Montes.—Castroserna.—García Loma.—M-icheira.— Ríos Rosas.—Lasala. —Checa,—Cruzada.—Zimora.— Rey.—Bañon (don J).~Lafuente.—Zugasti.—Chapa. —Yillarroyo.—.Santa Cruz.—Sedaño.—Ayuso (don B). Ichuelo. —Bermudez.—Gullon — Martinez. — Gullon (don A).—Navarro Rodrigo (don A).—Marellas Yenero.—Villalba.—Rivas.—Quiroga.—P,rez.—B cerra Armesto.—Barrenechea.—Martin —Elduayen.—Villegas.—Aravaca.—León Barrera.—Quijano.— González Fiol.—Nuñez da Arce.—Ángulo.—Viilamnor—Bernando.—Alzugaray.—Bás,—Agrámente.—Guijarro.— Canelo Villaamil.—Tetuan.—González de la Peña.— Moreno Banitez, —Tsgle, —Castro.—Bustamante.— Sanz. —Morifan. —Gallostra. —Moreno Abadía. —Page. —Golmenaref.—Delgado.—Ortiz.—Muñir,—üsairgen. —Villapadierna. —Alonso Martínez .—Jiménez.—Ronceros. " Alau,—García Castor.—Duque da la Torra. Garrido.—Pisa Pajares.—Navarro Ochoteco.—Muñoz Barrera.—Maluquer,—Liado?,—Reig,—Fabr8. —López.—Pérez (don M).—Bañon (don F),—Carrillo,—Pérez (N.)—Quintana, - Pons.—Balaguer.—Sánchez Milla. —Teixidor.—Brau.—Marino. — Ayuso.—García Gómez.—Mansi.—Sagasta (don T).—Sepúlveda.—Ulloa. —Peñuelas.—Chico de Guzman.—De Blas.—López de Ayala.—López Domínguez.—Verde Soto.—La Boz. Gamazo,—Sagasta (don P).—Triviño.—Ferratge?.— Almina.—Cazurro.—Isasa. Senadores. Masadas.— Montejo.—Abascal —Santonja.—Camacho. — Cervino. —Lorenzana. —Santa Cruz.—López Ruiz.—Bjdmar. —Echagüe.—Concha.—(M, del D.)— RÍOS Rosas (don F.)—Rodrigur-z Leal.—Uüagon. —Valles Carmena.—Casariego.—Saraprun. —Aurioles.— Batza.— Quevedo.—Gioizard.—Mansi. — Bjredia.— García Pardo.—Junquera.—Zsvala.--Fernandez Cano. —Chacen.—García Gcm z.—Valera.—González (don Ambrosio).—Jovellar.—Ulloa (don J)—Fuente Alcázar.—Múdela.—Cuesta.—Ángulo.—Teruel.—Barroeta.—Alvarez.—íJassols.—Ulloa y Rey.—Velarda.-Quesada,—Conde de Cabezuelas.-Cantero.—Marqués de las Casas. Nombrado por aclamación presidenta el dignisfmo señor Topete, y luego qua é.te hubo ocupado su asiento , se designaron los individuos que habian da formar las comisiones nominadoras de las mesas del Congreso y Sanado y las auxiliares y permanentes de actas de ambos Cuerpos. Poeo tiempo después, los señores que habian recibido este encargo presentaron á la mesa los nombres que damos á continuación, y que fueron aprobados, previas algunas observaciones hechas por el señor Peñuelas, que fueron satisfactoriamente contestadas por los señores Gullon y ministro de Fomento. Las propuestas á que aludimos son las siguientes: Mesa del Congreso. Presidente: Rios Rosas. XV. EL CORONEL. «Et general en jefe del ejército de Egi pto, ese héroe cuyo nombre aclama la Francia entera, cuya gloria conmueve y del que (an orgullosa está la República, acaba de pisar con su pié vencedor el suelo patrio. Salió el 18 vendimiario de Frejus, y sucesivamente pasó por Ais, Avignon, Valence y Lyon. •Querer esplicar el entusiasmo estraordinario que ha esciíado en todas partes sa presencia, que ha puesto en movimiento lo mismo á los habitantes de las poblaciones que á los de la campiña, sería im • posible. »En todos les pueblos resonaban las campanas, en las ciudades han adornado todos los balcones, han hecho arcos deflores,coronas de laurel, y durante las altas horas de la noche se han hecho gigantescas fogatas para aclarar el camino del vencedor, sin que persona alguna baya tomado reposo á trueque U 6QIMA PK I ^ BUITRSS. II.—22 LA IBERIA. Vicepresidentes: Don Víctor Balaguor.—Elduayen.— Garrido.—Moreno Benitfz Sacretarios: Merellos.—Martínez (don Cándido). Comisión auxiliar de actas del Congreso. Elduayen.—Guriel y Castro.—Mansi.—Lafuente.— Casamayor.—Saoane.—Rico y García.—Gutierre* de la Vega. Permanente do actas. González (don Venancio).—Sánchez Wúh.—Isasa.— Gomis.—Bwmudez.—Reina.—González do la Peña.— Parra. Mesa del Senado. Presidente: Santa Cruz. Vicepresidentes: Montojo.—Ros da Olano.—Groizard.- P. Nolasco Marisi. Secretarios : Sintonja.—Abascal.—Ambrosio Gonzalf'Z. Comisión auxiliar de actas. Auriole?.—Ángulo.—Ríos Rosas (don Francisco).— Bergne» de las Casas.—Mirichaiar.—Palayo Cuesta.— García Gómez. Comisión permanente. Groizard.—Jovaüar.—Gómez.— Rodríguez Leal.— Fuente A'c4zar.—Ramírez (don Teodoro José).—Valera. Designado quo fui el señor Rios Rosas para presidente dol Congreso , ol insigue orador y patricio pronunció uno de los discursos mis elocuentes quo lo hemos escuchado. Dijo el señor Rios Rosas quo puestos como el do presidente dol Congreso, ú nunca se dosean, jamás deben tampoco rehusarse, y mucho menos en las circunstancias presentes, en que la Cámara tiene que funcionar cuando los enemigos de la libavtad y du la dinastía se alzan on armas para derruir lo existente. La vibrante voz dol orador parlamentario entu-iasmó á los circunstantes, quienes al terminar aquel hicieron resonar una salva da calurosos aplausoi, dirijida al tribuno que tan bien había sabido iaterprotar las sentimientos de la mayoría. Levantase acto continuo el señor Sagasta para decir cuáles eran los propósitos del Gobierno on esta ocasión. El presidente del Consejo, con elocuente frase, maní-festd á la mayoría la necesidad de una fraternal y constante unión entre ios elementos dinásticos y liberales. • Con esta unión,—anadia ol señor Ssgasla,-—nada debemos temer do los facciosos que hoy so sublevan para volvemos á tiempos que pnra siempro pasaroit, ni do los demagogos qno puedan subluvarse mañana para traer el cftos y la anarjuía sobro nuestro país: firmes con nuestras conviccioaes,—continuó ol orador,—y teniendo por lera a constante de nuestra bandera la dinastía que la Revolución trajo y la libertad que ccn la Revolución conquist.-imos, nada podomcs temer, nada debemos temer, no tomemos ni nos intimida nada, y aseguro al país quo los vencidos de la guerra de siete años, vencidos volverán A sor hoy, y vencidos, y tan enérgicamente castigados, quo lis do phsar mucho tiempo antes de quo puedan darso cuenta de su derrota.» Pocas veces ha estado ol ssiior Sagasta tan oportuno y tan enérgico al tratar de defender los principios quo han sido la norma do su vida entera: el orador fiaba en la sensatez y en ol valor del país, y ol país no dejará de responder al llamamiento , demostrando una vez más quo esta tierra, regada con tanta y tau g.inerosa sangre liberal, no cousiouto quo modro on ella el despotismo y la tiranía. E! general Sarraoo, oi vencodor da Alcolea tomó después la palabra, y con la sencillez da ionguaje que le es propia expuso qua ¡a insurrección carlista que hoy se inicia en ol país era coiisacuencia evidenie de la magnanimidad qua so había empleado en diferentes ocasiones con los mismos quo, mal arrepentidos, crefn que aquella lenidad era temor. «La culpa es nuestra^—decía el general Sarrano,—• por no obrar en aquellas circunstancias con la energía que las mismas circunstancias aconsejaban; pero ol Gobierno veía con dolor á unos cuantos estraviados. alucinados con falaces promesas, pedir perdón y prometer arrepeatimiento, y el Gíbiorno, oyendo sólo la voz de la humanidad, perdonó, amnistió y abrió una y otra vez las puertas de la patria á los proscritos, sin acordarse siquiera de que podia llegar un día en que esos mismos arrepentidos volvieran contra quien los perdonaba sus armas homicidas. Pero nó,—esc'amaba el ilustro duque de la Torre;— basta ya de contemplaciones, y de hoy más procederemos, á pesar nuestro, con el vigor, con la entereza que la salud de la patria aconsejan; escarmentaremos do una vez y para mucho tiempo á los rebeldes, y de una vez y para siempre acabaremos de aplastar la cabeza de esa hidra de discordia que hipócritamente ha venido alimentándoso al calor de la Revolución y da la libertad. No hay aquí entre nosotros procedencias ni divisiones de ninguna especie,—añadía el ilustra orador:— todos somos unos, un solo partido, dispuesto como un solo hombre á verter nuestra sangre y á combatir en defensa de la libertad y de la dinastía, qua sacaremos triuníant s y consolidaremos para siempre en el país, pese á quien pese y cuesta lo que cueste.» Inútil creemos decir que, tanto las palabras del señor Sagasta como las del duque de la Torro, fueron acojidas con indecib'e entusiasmo, levantándose la sesión después de acordar que se propusiera á la Cámara la adopción del reglamento da 1847, excluyendo lo que hace referencia al juramento. Eran las doce. Un indigno y miserable faccioso que profanaba los hábitos de un religioso santo mandando una partida de foragidos en Navarra ha caído en poder de la Guardia civil que le ha trasladado á Pamplona, entregándole á los tribunales de justicia. Si un liberal hubiera caído on manos de los carlistas, ¿qué hubieran hecho con él los defensores del Terso? Tan asendereada y descompuesta anda la gente cim-' bria, que es necesario suponerla en gravísima alteración del sentido común al considerar lo que dice. Oigan ustedes á EZ Imparcial: «Los ministeriales se mostraban ayer tarde disgusladisimos, porque el Gobierno no habia recibido parte ninguno de haber estallado la sublevación carlista.» Se necesita ser completamente tonto para abrigar la duda siquiera de que pueda haber un Gobierno, cualquiera que fuere, á quien le disguste superlativamente carecer de noticias que revelen alteración grave ni leve del orden público. Lo que podría con más fundamento juzgarse, á propósito del parrafillo de ^lImparciil, seríí el disgusto de los raiceros viendo] al] Gobierno fuerte , y en ridículo una vez más á los carlistas, que al fin y al cabo, co-mo coaligados de la víspera, toniráa y deben tener necesariamente la simpatía de sus compañeros de hostilidad á lo existente. Pero aun no basta. El mismo poriólico, ei mismo Imparcial, que con tan loable rectitud habla «¡fe lo disguttadisírn,OS qua se mostraban ayer tarde los ministeriales, porque el Gobierno no habia recibido parte ninguno de haber estallado la sublevación carlista,» escribe y publica en la misma hoja todas y cuantas noticias tiene el Gobierno y por él le han sido convidas esplicitamente soore la sublevación. Lo que seguramente sucede en EJ Imparcial es qua la redacción está dividida en dos grandes secciones, encargada especialmente la una do escribir desmintiendo lo que dice la otra. Verán Vds., verán Vds. cómo el señor Martos, en su afán de dividir, acaba por dividirse á sí propio, y hay qua cantarlo aquella coplilla: La prensa nea se presenta insolente hasta la repugnancia, y en toda ella no se vé sino un insulto sostenido al nobla pueblo español. Si los lectores para quienes escriba tienen valor para sostener en sus manoj ni un segundo siquiera tan denigrantes impresos, preciso es convenir que ni en unos ni en oíros queda un adarme de sentimientos digaos, de amor á la propia consideración. Verdad es de todos conocida que los partidarios del imbécil Torso, los lucífugos, los que no pueden consentir var al hombre regenerado y libre, los que desho.nran á las religiones todas, los hipócritas da siempre, sin pudor y sin decoro, que quieren encadenar ai ser humano hasta llevarle á la hoguera en la plaza pública; verdad es, decimos, que los carlistas no pueden considerarse con relación á la patria como españoles, ni cou referencia á la humanidad como hombres: los carlistas han merecido siempre ol más soberano desprecio de todos, y no existo un f olo individuo que se gloríe da ser español que no sienta en estos momentos la más justa indignación al ver á tales entes levantarse en armas para producir ol luto en nuestra noble patria. Los periódicos naos insultan y provocan al pueblo con un cinismo mayor aun que el que caraciariza al célebre Nocedal: los diarios carlistas escitan las iras do íoios los españoles, y justo es que concluyan para siumpre, librándose el país de semejante plaga. En Valls la cabeza, Si los tersistas y sus aliados vieran las adhesiones y Y el cuerpo en Tolón: protestas contra el movimiento da los coalígados que ¡Ay, qué re-partido reciba el Gobierno da lodas partes, da todos los centros Que está este señor! y corporaciones y da miles da ciudadanos, líenos da Chiminí, cominí, ¡Ay don Simón!» vergü3üza abandonarían el país cuya deshonra anhelan, huyendo á remotas regiones á llorar su propia degrada, cien. Se nos ha dicho, y algunos periódicos da la noche sa L% prensa nea debe contener sus ímpetus, y si conti- hacen eco de la noticia, qua el militar nombrado por núa publicáudosa, preciso es quo respeto y considero don Carlos psra ponerse al frente de sus ejércitos cual se merece al pueblo que la tol- ra. flamantes es un oficial francés llamado Cathelineau. Ignoramos el fundamento da la noticia; pero si fuera cierAyer se presentaron al presidenta dol Consejo da ta, era la ú'tima vergüenza que los quedaba que realiministros unos jóvenes, al parecer obrero?, ofreciéndo- zar á los carlistas, psrmitir que el chiquillo mal criado le, para un caso necesario, organizar compañías movi- do Ginebra les impusiera un jef j francés. El nombre lizadas y salir á protejer las vías férreas y formar, sí Cathelineau es célebre en 'os analos de las discordias conveniente fuese, rondas y contrapartidas. civiles de la vecina República. Ua Cathelineau fué el Digno de todo elogio os este rasgo de amor patrio, y primero que levantó partido y organizó los tercios reano podamos resistir al deseo da consignar tan patrióti- listas da la Vendea en los tiempos da la primera Reca conducta en nuestras columnas, dando á todos la pública francesa. A^'d ese señir no conseguirá hacer ni la milésima parte de lo que en Francia hizo su antepamás cordial enhorabuena. sado. Sa lo aseguramos, y le compadecemos de veras, Muchos voluntarios da la Libertad de las provincias porque si se coloca al lado de los carlistas llevará su han pedido al Gobierno qua se les movilice para perse- merecido. guir y batir á las partidas carlistas. Los dignos milicianos da 3Iadrid han ofrecido tamSegún sadocia ayer, algunos individuos de !a mayobi.oa al Gobierno sus esfuerzos para sostener el orden y ría, apenas sa abran las Cortes, pressntarán una propocastigar á los enemigos de las instituciones. sición para qua el CDngreso sa declara en sesión perEsta 0.S la conducta que deben seguir los amantes de manente hasta quedar definitivamente constituido. la libertad. La necesidad de quo la proposición se apruebe en ol Felicitamos á las fuerzas ciudadanas de todos los acto es todo su elogio; no puida ser más apremiante. pueblos y capitales da España con toda la efusión de A pasar de la actitud de ciertas oposiciones, debemos nuestra aima. creer y creemos que anta la gravedad de las circunstancias el patriotismo las impedirá oír la voz de partido, Según un diario de la noche, parece que el canóni- y todos los diputados contribuirán á apresurar la necego Milla, uno da los carlistas no hace mucho indultados, saria constitución de la Cámara. se ha puesto al frente da una partida en León. Está visto: ciertas gantes son indignas de lástima. Decía SI Imparcial da anteayer: «Gomo habiamos anunciado, el Gobierno dio ayer cuenta Anoche á última hora se comentaban en todos los al rey del discurso de la corona. S. M. parece que ha aprobacírculos políticos los magníficos discursos pronunciados do dicho documento sin hacer observación alguna.» en la reunión da la mayoría por nuestros amigos los Y escribía ayer el mismo diario: señores Rios Rosas, Sagasta y Serrano. «Parece que el rey ha ¡ntrodncido algunas modificaciones En general, los mayores elogios brotaban de todos en el proyecto de discurso de la corona que le habia presenlos labios; y no es estraño que esto sucediera, porqua tado el Gobierno. Por consecuencia de estas modificaciones, en el discurso habrá una frase declarando que «el Gobierno nosotros, dasposeidos da todo apasionamiento, debemos se propone mantener en toda su integridad la Constitución.» consignar que jamás habíamos oido nada tan elocuente, Como decimos en otro lugar, el diario del señor tan patriótico y tan enérgico. Gasset tiene dividida sü redacción en dos grupos: uno Secunde la mayoría los deseos de esos eminentes pa- da ellos es el encargado da escribir las noticias, y el otro tricios, y^uo tema el país perturbaciones da ningún gé- el do desmentirlas. nero. Si es esto hacer política seria , que venga Dios y lo vea. No en balda los suscritores del colega van retirán- 12'i de no dejar de ver áBonaparte, siquiera sólo fuese á a luz de las hogueras. «EnLyoD, sobre todo, el entusiasmo producido por la presencia del jóvea héroe es tal, que no liay ejemplo en la historia de semejante emoción popular. »I'uede asegurarse, y es necesario que los venideros lo crean, que el viaje de Frejus á Lyon ha sido una ovación coatínua é inusitada. »lte todas las bocas salia el mismo grito, repelido rou frenética alegría: «¡Oé ahí al salvador de la Francia! «Ignoramo.s ia grandeza y el brillante deslino que en lo porvenir está reservado al general Bonaparte; pero desde luego le retamos á que, sea cualquiera la elevación á que llegue, jamás olvide estos dias para él tan llenos de gloria, ea los quo todo el mundo espontáneamente ha corrido sólo para verle un momento, y los enteros departamentos le han aclamado, bendiciendo su nombre.» \}n suspiro interrumpió al que leía, el cual preguntó: —¿Sufrís mucho, Mauricio? —Nó: lloro... de emoción, pero... continuad; continuad... el escucharos rae hace mucho bien... ¡Ohl Mi general... ¡Todos le aman como él merece ser amado! —El periódico dá pocos detalles; pero oid lo que después dice: íTanto creció el entusiasmo, y se hizo tan espansivo, que e! general comprendió la imposibilidad de dole su cooperación para suscribirse á periódicos serios. El partido federal está dando cada día más pruebai de unidad y de buen sentido. A pesar de haberse reunido muchas veces su Junta directiva para acordar la línea de conducta que han de seguir en el próximo período parlamentario, esta es la bendita hora que no se ha decidido nada. La opinión da los santones del federalismo está profundamente dividida. Uaos quieren acudir á la Cámara. Otros defienden la idaa.del retraimiento. Ciertos federales opinan que la minoría debe concurrir al Congreso cuatro días y presentar una proposición para que se anulen sesenta actas en globo, retirándose del santuario de la leyes si se desecha. (El procedimiento es nuevo en ios anales parlamentarios.) Otros sostienen la idea de que la minoría no se presente. En fin , como de costumbre, los federales no se entienden. Si llega en á un acuerdo, cosa difícil, lo pondremos en conocimiento da nuestros lectores. Una noticia para concluir: un periódico nos dice que el señor Casteiar está en Aranjuez. Si en Madrid hubiera ocurrido algún cocflicto, como algunos pro;alaban, la idea de que uro de nuestros primeros oradores no corría peligro hubiera tranquilizado á los federales de provincias. Nuestro querido amigo el señor don Jerónimo Izquierdo y M'irtinoz, por tí y á nombra de otros viajeros de los quo conducia el tren de Andalucía detenido por los bandoleros da la Mancha entre las estaciones de Manzanares y Valdepeñas, nos escribe una cariñosa carta rogándonos felicitemos al Gobierno por el merecido ascenso con que ha distinguido al bizarro teniente don José Manuel de Lalama, quo tan valerosamente acometió á los bandidos en el acto de la detención del tren, y que hagamos llegar á noticia del referido valiente oficial la satisfacción con que todos sus compañeros de viaja han recibido la noticia de su ascenso. Complacemos con mucho gusto á nuestro amigo, uniendo á las suyas nuestras sinceras felicitaciones. Llamamos la atención del señor don Justo Delgado, director general de Comunicaciones, á fin de que consagre f u atención á correjir ciertos descuidos en sus subordinados , escitando el celo da todos hacia el mejor servicio en el importante ramo de Correos. Nuestros sufcritores nos dirijan reclamaciones de números que no reciben, y en esto momento tenem-s á la vista una carta de Vilches en que se nos dice que desde e H 5 de marzo pasado sólo han recibido cinco números. No dudamos que nuestra observación será tenida en cuenta, y el servicio de correos se verá más escrupulosamente atendido. El señor don Juan Manuel Martínez nos dirije un comunicado qua ha enviado á La Lucha de Gerona rectificando lo dicho por Cite periódico en el artículo que, con el epígrafe de «Acuérdate,» publicó dias pasados refiriendo los sucesos de Tarragona en 1869, de los cuales fué víctima el desgraciado Reyes. El señor Martínez dice que no es cierto que hubiera salido da la capital en aquel triste día para ir á pasar un día da campo; pues, según asegura, salió para tratar asuntos urjentes del servicio y con ánimo de volver por la tarde. Dice también el señor Martínez que no es exícto quo jurara nada anta el mutilado cadáver del señor Reyes. Gomo estos son los dos únicos puntos del artículo i que sa refiere el comunicado, que nosotros copiamos de Ei Debate cuando asta colega lo tomó de La Lucha, hacemos esta rectificación como cumple á nuestra buena fé y en desagravio del señor Martínez. La Esperanza de ayer nos regaló una insolencia en cambio do las acusaciones que á su partido dirijimospor ella venimos en conocimiento da que la buena educación no pelea por la causa de Carlos VIL No necesitaba, sin embargo, La Esperanza demostrarnos una cosa que ya teníamos nosotros por indudable. Como anunciamos anteayer, el domingo llegaron á esta corte los diputados catalanes s t o r e s Quintana, Reig, Ratés, Madorell y Teixidor, y el senador seflor Bergnes da las Gasas. El señor Quintana ha dimitido su destino de gobernador civil de la provincia de Huesca, donde ha sabido capta se las simpatías de todos los hombres honrados sin distinción de partidos. A última hora nos aseguran que los federales esperan, para decidirse á auxiliar á los carlistas, que éstos 153 continuar su camino con la velocidad que deseaba. »Lo5 mismos correos que le precedían para mandar preparar los relevos de caballos eran detenido?, aclinwdos y f slejado'. En más de diez leguas no habia libre un palmo de terreno, porque estaba el camino lleno de los habitantes de las poblaciones, que deseaban anticiparse el placer de ver antes al general. La Borgoña entera era presa de un verdadero delirio. ^Trataban los bo rgoñones nada menos que de eliminar los caballos y arrastrar á brazo la silla de posta en que iba el general, hasta París. «Pero como el joven héroe necesita llegar cuanto antes á la capital, adoptó el partido de cambiar el Itinerario y viajar de incógnito para sustraerse á la ovación provocada ^'or el amor de la nación entera.» —•Esto esplica el por qué madame Bonaparte no ha encontrado al general. —Sin duda. —¡Oh! ¡Cómo le habrá sorprendido el encontrar desierta su casa de Parí», cuando debia... ¡Dios mío!... ¡Cuánto sufrol —¡Mauricio! —Quisiera morir, pero... morir al momento; y si tuviera una pistola, una espada... un puñal... pero me habéis quitado las armas, porque sois falsos ami gos y... no me queréis. Repilo que quiero morir, y... al menos, muriendo, volveré á veda... ¡sí, veré á mi Lucila.' «El general ha llegado á Parí?,—continuó el lec- L:—«En uno de esos lacónicos discursos que sólo e general Bonaparte sabe pronunciar, dijo que después de haber consolidado el establecimiento de su ejército en Egipto por las victorias de Monte-Thabor y Aboukir, y de haber encomendado sus tropas á un general digno del mando, habia volado para auxiliar á la Repüblica, á quien creia perdida.» Mauricio escuchabaanhelaDte y como si pendiente estuviese de los labios del lector. Parecía no tener conciencia de lo que en su derredor pasaba, y n» aun demostrabi habe r reparado en lo que Corvjsart hacía, el cual dijo á Gringoire: —Haced que pase Dupnytren. Ambos doctores llamaron al conde para enterarse del estado del enfermo, y Gringoire se encardó de continuar la lectura. — «Jamás,—esclamó;el general empuñando la espada,—la sacaré sino para defender y dar gloria á la patria.» —Está la herida en el mejor estado,-dijo Du • puylren;-la carne toma consistencia, la cicatrización avanza rápidamente. -¡Oh!-añadió Corvísart.-Si estuviese hbre la imaginación... —«El presidente.-continuó el lector,-dio la enhorabuena al general por sus triunfos y su feliz llegada, y el abrazo fraternal.» —iContinúan las crisis?—preguntó Dapujtren. —liguen lo mismo,—respondió el conde. Acabaron los dos facultativos de colocar el vendaje, y pusieron las hebillas á las correas, sin que el LA IBERIA. consigan sostenerse en armas contra el Gobierno quince i Si El Imparcial no sabe leyes, estudíelas: por su j puesto que en el mismo articulo dá un bofetón horribíe ó veinte dias. Esta noticia concuerda perfectamente con las espe- á sus más autorizados correligionarios, pues algunos de ranzas de Eí Pensamiento Español de que nos ocupa- ellos, el señor Martos por ejemplo, haa sostenido en público no hace mucho tiempo que los diputados ó mos en otro lugar. senadores electos no pueden considerarse como tales Los periódicos estracjaros reprueban enérgicamente hasta que el Cuerpo colegislador á que pertenecen los planes del carlismo y hacen responsables de la san- apruebe su acta. gre que se vierta en España á los consejeros de Carlos Pero repetimos que no es esta el momento de discusiete, que sólo tratan de comprometer á unos cuantos tir el asunto, y sólo sí de dar á El Imparcial una l e c ilusos para esponerlos á todo género de peligros, mien- ción para que no habla nunca da memoria. tras ellos en nada se comprometen. Si, como se decía anoche, el artículo que acabamos Traslado á Nocedal, Manterola, y al mismo Carlos de contestar es debido á la pluma do uno da los j u r i s consultos más distinguidos da la cimbrería, hay que el obtuso. _ confesar que la situación de su partido le tiene p e r Sin duda los periódicos carlistas, entre ellos El Pen- turbado. satniento Español, creen el triunfo de su causa tan Conque no lo olvido SI Imparcial para otra vez: seguro, que ya comienzan á dirijir la opinión para el artículo .% de la Constitución de la Monarquía e s fácil planteamiento do su absurdo sistema legislativo. pañola. Hemos hecho mal al consignar esta frase, porque los neos no podrán dar jamás leyes, en atención á que Los diarios neos , que niegan obstinadamente el l e para esto es preciso ser y tener lo que los carlistas ni vantamiento cariista, procuran al mismo tiempo fomentienen ni son,; pero comprendida nuestra idea, deja- tarlo de la manera indirecta que puodoa apreciar n u e s mos la palabra. Lo cierto que el órgano de los jesuítas tros benévolos lectores. ha dado principio en su núoiero do anoche á una serie Por ejemplo, dico El Pensamiento Sspañol: de artículos relativos á los Diesmos y primicias á la «Cuéntase que han dicho algunos federales que si durase quince dias el alzamiento de que se habla, podrán ayudar muIglesia de Dios, ornen. Cada cual pensará de esta asunto lo que quiera; mas cho con sus huestes.» Sin duda pensará El Pensamiento carlista haber de seguro que si los lucífugos triunfaran no faltarían quitado toda sospecha al añadir esa apéadica de que se diezmos y primicias, ni dejaríamos de tener loquisieion, y frailes, y jeí-uitas, y farsantes con llagas, y lan- habla: para nosotros la cuestión es siempre idéntica; zadas, y resplaudore?, etc., > te. Por lo demás, e a r t i - el levantamiento neo exista de hecho : ahora bien ; si lo culista se prepara, y hemos da confesar que su trabajo ayudan los federales, tanto mejor, pues quien derrotó está magníficamente hocho, abundando en citas histó- I á la coalición en las urnas volverá á derrotarla en el ' campo con la fuerza da las armas. No tengan sobre ello ricas y en palabras de la Sagrada Escritura. la menor duda carlistas y republicanos, ya que de n u e Nosotros lo aconsejamos que no se dé tanta prisa, vo , y según p a r e c e , intentan identificar sus principios pues es conveniente esperar el resultado de las p a r t i y aspiraciones, luchando los primeros en pro da la fededas que capitanean los curas compañeros y hermanos ral y los segundos por el Papa y el absolutismo. en el iSeñor del párroco de Noain (Navarra), que acaEsta tortilla política será verdaderamente r e p u g n a n ba de habérselas en descomunal batalla con los b r a to, y no hay quion pueda digerirla. vos defensores de la libertad y de la patria. El discurso de nuestro amigo fué tan levantado, que en Moníeagudo (Navarra), y quevá mandada por lísmon Odc será difícil se borra de la manta da ios iMpresontajues Sil, (¡i) el Cordonero, se ciiijia ayer mañana hacia Tarragona del pueblo reunidos en la presidencia del Cjr teje. Eu Oñate se Jevanlo en la niüdriigada de ayer una partid; Felicitamos con toda sinceridad al ex-regenta del de 5ü hombres, eu cuya oersecucion salió una pequeña fuerzí. reino. del ejército. A las difz de la cocha hemos recibido noticias del aizamionto carlista en Navarra. Aguardamos á la última hora para confirmarlas. En aquella teccion encontrarán nuestros lectores la verdad de ios te'égramas recibidos, tanto en los cantros oficiales como eu los particulares. Fieles á la promesa que hemos hecho á nuestros lectores, nos hemos propuesto publicar todas las üoticias con anterioridad á todos, y lo haremos, aunquo t e n gamos que cerrar el número más tarde de lo r e gular. Los alarmistas de oficio empiezan ya á hacar do las suyas, propalando á su sabor los más absurdos y r i dículos rumores con la sana intención do hacer creer al país precisamento lo que no ha sucedido, y aun sospechamos os impo.-ibla que suceda. Ayer, por ejemplo, oimos quo un famoso cabecilla so habia apoderado do Morella, llave estratégica del Maestrazgo , entrando en la plaz* á ia cabeza do cinco mil (!¡!) carlistas y proclamando rroy al niñ) Torso. Dijéronnos también personas qua en cioito círculo lo habían aprendido, qua Cabrera habia protestado contra el levantamiento carlista sólo coa la idea da d e s orientar al Gobierno, y qua tai vez á estas horas estaría el antiguo caudillo al lado de don Carlos para hacer con ésta la entrada on España. Postonormante loamos on cierto periódico que el puente d í Aranjuez habia sido cortado, y nuestro asombro fué tauto mayor, cuanto después hemos sabido que el puanta en cuestión, si cortado fué (?), fué también taa pronta y tan perfectamanta compuasto, quo hoy por hoy ostá otra vez como si nada la hubiera sucedido. Inocentísimas aunque pérfidas son talas noticias , y si no fuera par lo quo al pronto suelen sorprender al público, nos foíicitaríamos de que sus autoras no dejaran de elaborarlas, siquieri por el p'acar de ver cómo gozan algunos pobres hombres creyando como auto de fé ío propio qua i'iVsnUQ con la r é -.ia asparanza do que pueda suceder. Esto qua decimos p m i b i q.ia aua vivaa, para dicha nuestra, los célebres ojuiaterot da Oaate. Apenas so conoció en provincias el proyectado alzamiento de los seides del carlismo, se ascitó en aquellas da una manera tal la indignación pública, que ya e m p(zimos á recibir cartas da suscritores y amigos nuestros manifestándonos deseos da que los facciosos seau pront'i y enérgicamente castigados allí donde pretendan encender la guerra civil. Entre dichas correspondencias podemos citar espeComparando nuestro apreciable colegí L i Inderencialmente dos, una procedente da las Provincias Vasdencta Española los hombres qua contaba el carlismo congadas, y de la Mancha la otra, en las qua se nos do los pasados tiempos con los quo hoy íieno eu su.s asegura que el espíritu público se halla eu abierta o p o filas, sü asprasa do este modo: sición con los planes de os perturbadoras, y pueblos y «Porque es preciso decirlo: en el partido carlista no se Ajuntamientos dispuestos á rechazarlos sin tregua ns encuentran actualmente aquellos miiiíares que dieron impulso cuartel. y carácter ala guerra civil; aquellos guerrilleros que.,'coino CaVienen á corroborar estos asertos los telegramas n u - brera y Merino, hicieron tan notables servicios á don Carlos, merosos que el Gobierno recibe, y en los qua todas las que por espacio de mucho tiempo impidieron que la guerra terminara en las Provincias Vascongadas. Hoy las miserias autoridades y los valientos voluntarios de las provin- de la política y el fanatismo de una parte del clero, tan estúcias se ofrecen á pelear denodadamente por la causa de \ pida como incivil, son las que llevan su cnnlin^eritc de fuerla libertad, simbolizada en el moiiarca qua gobierna zas al nieto del hermano de Fernando VII, y es inútil por ^ • —• tanto decir que ni sienten los unos ia causji que sosiieaen , ni nuestros destinos. Parece,—escribía anochi un periódico radicalísimo, los otros concurren á ella guiados por otro móvil que el de Bien esperábamos estas patrióticas demostraciones un mezquino interés. —que ha mediado entre los señores Sigasta y Montejo por parte da la inmensa mayoría del pueblo español; y No son los que, como ¡Nocedal y Taraayo, vivieron del un ígrio altercado, de cuyas resultas, etc., e t c . . . . Parece que có; pero detrás de un parece se pueden en nombra de la idea liberal que tan bien saba aquel presupuesto casi toda su vi Ja, y á la libertad y al Parlamento compraíider, sóanos permitido dar un voto da gracias á deben su posición social y su fortuna, los que pueden levanocultar grandísimas tonterías. bandera para sostener la causa del absolutismo, sin oculesos denodados voluutarios, hijos del pueblo, que ya tar Y no lo decimos por el periódico aludido. tar el rostro bajo una máscara de hierro.» han manifestado en muchísimas localidades deseos de Tien» mucha razofi tú colega; esos hombre s están completamente desautorizados aute la opiuion p ü EZ Uhivtrsal, que siempre que se ocupa del señor movilizarse para combatir á la facción. Con ellos y con la noble emulación del ejército, que blica. Rivero tiene una chispa admirable, se hacía ayer cargo de que á dicho señor iban á darle sus amigos una sere- á estas fechas ya ha medido sus armas invencibles con algunas gavillas de facinerosos, no es difícil augurar En la reunión qua celebraron anocha los diputados y nata. que muy pronto el territorio español se verá purgado senadoras de la mayoría, pronunció un enérgico discu.-Pero lió, no es esto lo que quiere decir Eí Unide gantes levantiscas y por la ambición asalariadas, pa- so nuestro querido amigo el señor Sagasta. versal. gando unos con la vida sus imprudencias, y huyendo Los espontáneos eplnisos que lo iritarrumpian contiEl Universal quiere decir que el Gobierno no dio otros á país estranjero para no sufrir el escarmiento do nuamente era la mejor prueba da que el señor Sagasta la correspondiente autorización para la fiesta, y q u e . . . que se han hecho acreedores. ha sabido interpretar con fidelidad la voluiilad del Pero tampoco es esto. pais. Esté, pues, tranquilo el país, que la legalidad exisParticipa al público E( Univertal que no fué el G o tente será por todos respetada. Ya en otras ocasiones lo Le f dicitamos con toda la efusioa de, n u c s i a alma, bierno el que hizo eso; la negativa la insinuó (nada más) un ofícial, delegado del gobernador civil, y hemos repetido: el Gobierno de S. M. no violará la haciéndonos it.térpretas da los sexitimiantos da todos los luego... I ley; á ella tan sólo arreglará la norma de su conducta; liberales, cuy^ bandera sostiene con tanta decisión el Tampoco es este el pensamiento de Bl Universal. pero con la fuerza que esa misma ley le suministra está presidente dal Consejo da ministros. Este colega afirma por üitJmo que el gobernador civil dispuesto á ser esta vez severo con los culpables que autorizó la serenata al señor Rivero, con cuyo p e r m i - tan pronto han olvidado h lenidad con que en no lejanas ocasiones fueron tratados. so la... R o s u l t a d o d e la r e c a u d a c i ó n del a r b i t r i o s o b r e a r Esparen ustedes: resumiendo, ó reasumiendo, si i tioulos d e comer, b e b e r y a r d e r o b t e n i d a e n el Decia E? Universal en su número da ayer, y en su JSl universal le gusta más; resumiendo, decimos, se día de anteayer: artículo de fondo, por más señas : Tiene á parar en que la tal serenata, que no veía con PONTOS DB RECAUnAClOF, PTAS. CENTS. «Ellevantamiento carlista, anunciado como espantable y gusto el Gobierno, según el colega, que después desnunca visto suceso por los asustadizos ministeriales, ha queToledo.. autorizó un empleado subalterno, y que más tarde per- dado reducido á la aparición de tres pequeñas partidas de afi2.227-72 Segavía. mitía el gobernador civil; esa serenata tan zarandeada y cionados, al mando de un presbítero, y á algunos insignifiAtocha. 2.7i9:5ü poco serena, según se vé, al fin quedó en agua de bor- cantes destrosos en las lineas férreas de las Provincias VasAlcalá ó carretera de Aragón 51012 congadas, íjavarra y Toledo.» rajas, por oponerte á ello «la voluntad espresa del seBilbao 825-79 Áñidia Eí Univertal en su espresado número, y en ñor Rivero,» como dice muy bien Eí Universal. Estación del Mediodía. 0.5751;.") uno de los sueltos de fondo; Y aquí tienen ustedes cómo se escribe la historia por Ídem del Norte =.. 2 5Ü7H «Esta tarde se dec¡a que el movimiento carlista, lejos de ciertas plumas cimbrias. Diligencias y correos 12 00 disiuinuir, crecía y tomaba incremento.» Matadero.—Arbitrio sobre las carProcura anta todo el bueno del colega ponerse de 7.ti8i'09 nes Es verdaderamente sensible que continuamente nos acuerdo, y sepan por boca da aquel los ministeriales si veamos precisados á ensenar á El Imparcial las leyes Total. 25.8ib'tíl la insurrección tespantable» se compone de tres pequevigentes en nuestro país; pero no nos queda otro remo- ñas partidas, ó si, por el contrario, crece y toma incredio si, como es de nuestro deber, queremos que la o p i - mento. Ayer estuvieron á ofrecer sus servicios al ministro de la nión pública no se estravíe ni le hagan el blanco de sus Conque ¿somos ó no somos asustadizos, como á E í Guerra en defensa de las instituciones producto de la Kevopatrañas los políticos interesados en que el ouehln cclucion el capitán general de ejército don José de la Concha, Universal se le ocurre llamarnos? marqués de la Habana; los tenientes generales don Fernando pañol no sepa nunca á qué atenerse sobre la marcha Fernandez de Córdova y don Francisco de Mata y Alós, y los de los acontecimientos. Ahora que el movimiento cariista ha estallado se mariscales de campo don Juan Acosla, don llomualdo Crespo En su afán de conceder una vela á San Miguel y otra convencerán los diarios cimbrios da cuan injustas han y otros. Sil diablo, como ya indicamos , el periódico de la p l a - sido sus declamaciones propalando como propalaban El dia 20 se reconcentró en Murcia la Guardia civil, alozuela de Matute nos dice que respeta el auto judicial que nuestras noticias reconocían sólo por objeto vanos jándola en el ediílcio-teatro, y la autoridad local, entreoirás por el que se ha decretado la prisión de algunos indi- deseos de alarmar al país. disposiciones, mandó establecer un retén en el Principal de voluntarios. viduos de la Junta carlista; pero á renglón seguido, y Dasde que empezamos á publicar noticias referentes ilasta el presente, sin embargo, nada ha ocurrido; sólo ha para evitar, según dice, que el Gobierno se propase á carlistas hemos procuí^ado decir la verdad, y sólo la habido la alarma que producen las noticias de sublevaciones, (como si el Gobierno tuviera que ver algo con los t r i - verdad. Esta conducta la seguiremos siempre. mayormente cuando al referirlo de unos á otros se aumentan bunales de justicia), se estiende en muchas consideraHasta la hora en qua estas líneas esoribimos no p o - las proporciones del suceso. ciones absurdas y advierte al juez del distrito del Cen- demos adelantar á nuestro:; lectores sino que las cscitatro que uno ó dos de los detenidos carlistas tienen su ciones de la opinión y de la prensa han encontrado eco A unas 30 partidas asciende el número do las levantadas hasta hoy por los carlistas en diferentes puntos de la Penínacta de diputados de la nación. en el Gobierno, el cual, ahogando sus sentimientos de sula, según las noticias que se reciben de todas las provinLo primero que se le ocurre preguntar á cualquiera benevolencia, se propone sor muy enérgico con los s u - cias. que lee el artículo del colega es dónde ha estudiado blevados y conseguir quo, voncidos, no se levanten ya leyes El Imparcial, y á qué santo viene la diputación Se ha dicho que en las próximas Cortes habrá un grupo de radicales menos intransijentes con la situación, y que tendrán de esos señores; pero el colega no so para en barras y Duro, muy duro con los carlistas, repetimos nueva- por jefe al señor Uuiz Gómez. sigue divagando á su capricjio. raoíite al Gobierno, y adola.uo con la bandera do la l i ¿Conoce El Imparcial la Constitución? ¿Nó? Pues bertad. El espíritu do los pueblos de esta provincia, según los escuche: en nuestro país rije un Código fundamental partes que se reciben constantemente en el gobierno civil, es proclamado por unas Cortes Constituyentes, el cual Ahora que el movimiento carlista ha estallado, ¿com- altamente favorable á la causa del orden y do la libertad, vi • ellos mismos por medio de patrullas que han organiestán obligados á conocer todos los españoles; euj este prenden Eí Imparcial y demás diarios cimbrios por guando zado al efecto. Código hay un artículo 36 que el colega debe tomarse qué el Gobierno habia reconcentrado la Guardia civil la molestia de leer: cuando lo haya laido comprenderá en algunos puntos de sus provincias? ¿Lo comprenden Por el ministerio de Fomento se han pedido datos á las ofique con su artículo de ayer ha dado una gran pitada, ellos, que tanto gritaban y parecían querer que ios cinas de Obras públicas de las provincias raaritimas para demostrando su ignorancia en ciertos asuntos. carlistas encontrasen armamento on lus parejas do organizar lo más pronto posible el servicio do auxilios marítimos, tan importante y necesario en nuestro pais. Este serviNo siendo este el momento do discutir si los diputa- Guardia civil diseminadas en los caminos? cio lo prestarán los conocidos botes salvavidas. dos deben considerarse como tales antes de tener aprobado el acta, porque no es del caso, y también porque El esforzado general Serrano , el vop.ceilor en AleoLas noticias recibidas ayer de las Provincias Vascongadas para el asunto es indiferente, sepa el colega que el juez lea ofreció anoche, entra los «plausos entusiastas do la presentan á aquel territorio en un estado grande de escitaestá autorizado por la Constitución para procesar y mayoría, su prestigio y su brazo, cuanto os y cuanto cion. En muchos pueblos y caseríos los mozos se reunían en detener á un diputado ó senador cuando las Cortes vale para combatir en todos terrenos á los enemigos de pequeños grupos y en ademán de lanzarse á la lucha. están carradas, las instituciones liberales. La partida de 150 hombres que se levantó anteayer noche Según anoche anunciaba ha Correspondencia, el ínclito don Cándido Nocedal se segrega del partido carlista por haberse éste colocado en condiciones escepcionales. ¡iV buena hora! Si el hecho es cierto, y lo creemos asi, don Cándido ha acabado de labrar su ya envidiable reputación. Esto se llama dejar á los pobres facciosos en las astas del toro, por más que para ello haya tenido en cuenta el ex-milicisno la consideración, siempre respetable y atendible, de que el número tino es antes que todo. —No me agradan ciertas eraocionef,—habrá pensado don Cándido. Y don Cándido, que no es siquiera virgen, no se ha conformado con ser mártir. ¿A. dónde llevará ahora su unidad sintética el célebre catHcaldos político? ¡Qué irrisión! lili mi MI — • -' Como resultado de ia libertad que concede la legislación vigente, se nota una esceaiva aciivnlad en las obras de puertos, promovidas por la iniciativa de particulares. Ayer tarde se dijo en el salón de conferencias que el Gobierno habia recibido noticias de que eu las inmedlaeioues de Irun se haDiau reunido como unos 9ü0 carlistas. üe todas las partidas levantadas hasta ayer tarde, la mayor parece que no pasa de 300 hombres. Ayer mañana salieron de Valladolid algunas tuerzas con dirección á las provincias de León y Patencia, con el fin de perseguir á los in.-u.i-rectos. En la provincia de León se levantaron ayer mañana tres partidas, una de iO hombres en Alcodo, otra de 28 hacia Sahagun y otra hacia Mansilla, de ocho hombres, de los que fueron aprehendidos dos por la fuerza que la persigue. La Diputación provincial de Sevilla anuncia que ha acorda do proveer por oposición la plaza de .^ofou.auui restaurador uc de cuadro cuadros , 1 . 1 «f • • -,-• • _,.._„ ' del Museo de la provincia, dotada con 2 500 pesetas anuales. LüS soliciiu , .„^ „„^ 'üS solicitudes deben presentarlas los aspirantes en la secrclaria de aquella corporación antes del !) del próximo mayo. En Barcelona se ha descubierto una fábrica de moneda falsa, Entre los utonsili os oncontr.'ídos se ha visto un volante antiguo, en e¡ cual habia el anverso del cuño de monedas de dos cuartos. El reverso del cuño estaba al pié del volante, y lo que más estrañeza causó una moneda decimal de las nuevas que se fabrican en la Casa de la Moneda de aquella capital' y no puestas aun en circulación eu Barcelona. Deberá quedar vacante muy pronto en el Instituto de segunda enseñanza de la provincia de Málaga la cátedra de economía política y legislación mercantil, y en su consecuencia se anuncia la provisión interinamente, adviniéndose que está dotada con el haber anual de 1.500 pesetas y que deben presentarse para obtenerla las respectivas solicitudes documentadas en la secretaría de dicho Instituto hasta el dia 30 del corriente mes. El dia 20, á cosa de las diez y cuarto de la mañana, cayeron al agua, según nos dicen de Bdbao, tres marineros que se ocupabaii en levar un anclote, á causa de haberse ido á pique el bote que moutaban. Dos de ellos consiguieron salir en seguida, pero el tercero recibió sin duda algún golpe y se suiaerjió, sienilo estraido del fondo por medio de varios vicheros al cabo do unos diez minutos. Aunque sin esperanza ninguna, fué auxiliado sin perder momento, y por fortuna se consiguió volverle á ia vida. En la madrugada del dia 20, un soldado del batallón do cazadores de Alba de Tormos, i!e guarnición en Bilbao, se arrojó ó se cayó desde una de las ventanas del último piso del edificio contiguo al hospital civil, en que se halla establecido el departamento militar. Un carabinero, de servicio en Achuri, oyó algunos quejidos, y acercándose, halló á este desgraciado, quo espiró á los pocos inomenios. El señor Emilio Girardiu ha intentado demandado divorcio contra su esposa laI condesa de Tilfeiibach. Los fitranceses propietarios en los territorios anexionados á 1.0S Alemania se desimceu de sus lincas. Sólo^en Metz está anunciada la venia de trescientas casas. Seguii una estadística, la clase obrera de Patis es actualmente de 45l).0u0 personas. El dia It'"' •'""'"='"'*ano del naciüMenio del señor Thíers tuví» una , ,„,,,.„ r p ridadexclusivameuie.iviracanV ,' i. ?i ' " ' ' ' " í ' ' * ' "don "" Carlos toda vpy n, . , i " "!',• - r o - #».";>•> 53, 50 y 4a. Pequeños: 27-00, 27-10, 26-50, 55 y 60 Parece que han sido presas las Juntas carlistas de la mayor Don Alfonso de I! jrbon y de Este contiiuiaba ayer en Mar • Renta perpetua esterior al 3 por 100, puniicado, 31-70; parte de las provincias de España, á consecuencia de provi- sella, á causa, según se dice, de una ligera indisposición. Hoy se pondrá en escena en el teatro Español la comedia j no publicado, 31-60 p. dencia judicial. nueva en tres actos Amar á ciegas. Deseamos á su joven é in- j Deuda d«l personal, publicado, 0000. teligente autor un éxito completamente satisfactorio. Se dice que las partidas carlistas de Navarra quieren diri Billetes hipotecarios del Banco de España, 2. serie, publiAyer fué trasladado á las orisioaes de San Francisco, desd^ jirse á Roncesvalles para protejer la entrada del duque de cado, 000 00 y 00. su casa, el propietario de La Esperanza señor La Iloz y Li- Madrid. Bonos del Tesoro de á 2.000 rs., 6 por 100 interés anual, Señalamientos para hoy. — Caja de Depósitosí!—Intereses niers, individuo de la Junta central carlista. publicado,76 00, 75-35, 30, 75-00 y 75-10; á plazo, fin corde resguardos al portador, números 726 á 750 de sorteo. El Ayuntamiento de Ciudad-Real, que era carlista, ha reriente voL, 75-23. Don Francisco de Mobellan, comandante de carabineros del nunciado á su cargo. ídem en cantidades pequeñas, publicado, 75 20. puesto de Embun, acaba de prestar otro notable servicio, acoULTIMA HORA. Resguardos al portador, de la Caja de depósitos, publimetiendo con un pelotón de carabineros á cuádruple número Entre los prisioneros hechos en Navarra se cuenta el cura c?do, 81-25. de contrabandistas, con quien sostuvo una reñida refriega en del Cano, que mandaba una de las partidas, y un compañero A las noticias publicadas por nuestros colegas de la los Pirineos, dando por resultado haberh-s cojido quince pri- suyo. De otra partida han sido cojidos siete. noche sólo podemos añadir q u e las partidas dd NavarESPECTÁCULOS. sioneros y los fardos que conducían, con los que entró en ra se han unido, replegándose hacia Roncesvalles. £ a Embun el dial7 del actual. ESPAÑOL. A las ocho y media: Amar á ciegas.—El buSeis son las partidas que, aunque pequeñas, se han alzado total componen una fueiza de unos seiscientos h o m - ñuelo. en Navarra, pero dos han sido ya batidas. ZARZUELA. A las ocho y media : Norma. bres, y parece que tratan de protejer la entrada de a l En Meca se han presentado 39 casos de cólera desde el 27 CIRCO (plaza del Rey). A las ocho y media, á beneficio gún personaje importante, quizá do su pobre monarca. de febrero hasta e\ 3 de marzo, continuando la salud pública Anteayer habia unos 700 alistados para el ejército espedidel primer actor don Juan Casañer: La vox del corazón.—El La persecución es activa, y los partidarios carlistas en el puerto ite Djedda sin novedad, á pesar de estar en reía - cionario á Filipinas. reí/ y el aventurero. cion diaria con la mencionada ciudad. están desesiieranzados. TEATRO CIRCO DE MADRID. A las ocho y media: iíoPor el ministerio de Fomento se ha espedido ya el título Las mejores hazañas son del tenor siguiente: en herto il DiuVolo. VARIEDADES. A las ocho y media, á beneficio del priEl coronel señor Del Amo , primer jefe del regimiento in- administrativo á los catedráticos del Instituto de Toledo, por Bello los facciosos de Calamocha asesinaron por liiefantería de Luehana , salió ayer de Madrid para Vitoria, donde haberles aumentado su sueldo la Diputación á 3 000 ¡pesetas, ruli don Juan José Catalán, soaretario que habia sido mer actor cómico don Juan José Lujan : Dumont y compañía. conforme al decreto de 4 de julio de 1870. —Don Robustiano.—El amante prestado. se encuentra dicho regimiento. del gobierno civil de Teruel. Con tal motivo, no p o d e ALHAMBRA. A las ocüo y media: El fuego del convenio. Baile. En Huesca también ha aparecido alguna partida. Hasta mos dar la enhorabuena á los liberales coaligados. Se ha aprobado definitivamente el peRsamiento de cerrar la ahora los detalles acerca de las bandas alzadas en armas son A las nueve y media: Bruno el tejedor.—Bule. En resumen: la agitación está circunscrita á las P r o boca del O sie IIH la concha de San Sebastian, prestando con escasos, porque los partes sólo dan cuenta de los hechos A las diez y media: Segundo acto de la misma.—Baile. vincias Vascongadas, Navarra, Aragón y León; es d e esto gran seguridad á los buques que fondean en dicha principales. Pero estos hechos conürman lo que se habia A las once: Don ñanjon.—Baile. cir que la ú tima intentona carlista so reduce á unas concha. anunciado y las fundadas razones en que las autoridades y el TEATRO-CAFE DE CAPELLANES. A las ocho: Lagartijo Gobierno apoyaron sus anuncios y las medidas adoptadas veinte partidas diseminadas que hacen impotentes e s - y frascueío.—Gran ean-can. fuerzos para resucitar lo que ya está hasta olvidado. A las nueve: La revista de Madrid.—Gran can-can. No es cierto, como dice un periódico, que exista entre el para estar dispuestos á todo. capitán general de este distrito y el general segundo cabo diA las diez: La pastora del DaWe.—Gran cao-can. En Aimeris han sido presos el presidente é indivisid«ueia alguna; antes por el contrario, están en la mejor No se ha vuelto á saber nada de la partida de Calamocha duos de la Junta carlista, ocupándoseles cartas y docuA las once: La revista de Madrid.—Gran can-can. armonía. ni de la que se dijo ayer por la noche habia aparecido en To- mentos del llamado duque de Madrid y otros personaMADRID : ,1872.—Imp. de los Sres. Bojas, ledo. jes titulados generales carlistas referentes á la conspiraTudescos, 34, principal. Algunos cabecillas carlistas y federales que residían en San El general Iriarte, director del cuerpo de laválidos, estuvo ayer á cumplimentar á los reyes. SECCIÓN DE ANUNCIOS. INTERESANTE. iS'^SS'^ %W^ ^a 5P.2 ¿M-Sa taoos 8e invita á los duefios ó administradores de las casas que tienen alquil«dos locales para prevenciones civiles, se sirvan remitir las aefias de BU habitación á la calle Mayor, número 118, tercero izquierda , con el objeto de ponerse de acuerdo para gestionar donde convenga el pago de los alquileres que se les adenda. (9 . 10 o « mmm ADMINISTRADOR. m il I II ESíUDWS TioRicos-JURÍDICO-Miiimsi. Un Bugeto que ha sido empleado once aSos en una misma oficina, y POR que la ha deBempeñado fielmente, como lo puede acreditar, desaria 0. SERAFÍN OLABE, encontrar una ocupación dentro da esta corte, para lo cual pondría en Este folleto Be halla de venta en depósito la cantidad cjue so le designare. Darán rpzon, Arco de Santa Madrid , á 4 rs. ejemplar , en la María, 8, 3.» imprenta de los S r e s . BOJAS, calle deTadoBCOB, núm.34, prinoipaU LINIMIENTO BOTBR-HIGHBL PARA LOS CABALLOS. Contra la Itqaeea, HeTralgias, Afecciones aeniosas del Estomago. PILDORAS CLERET Al Yoduro de hierro y de quina, el mas actiTo de los ferruginosos, y de todos los productos el que mejor acierto tiene contra Us calenturas intermitentes reheldes, combate la causa de la intermitencia y restablece ias cualidades primiiifas de la sangre. (BoBCHiaooT), Profesor de Higiene en la facultad de Medicina de Paris. D E P O S I T O « É W É n A L EM ESPAÜIA : S»» Y FataBa y CU, Montera, 51, Madrid | - B«reel«aa, Boticas de la Estrella y de MoNsaaiiAT. ÜBUCB y A^oiiAa, plasa del Borne, 6; - ValeneU, Boticas de GaEDS, AKDKÍS y FABIA, CAÍAFONS y DeniNao, C r o n a , BÍSCAMA m OGAÑO. " s . ' p ' a . V K . I ^ ' ' * * ' '• " " " " « ' ^' ^ S^'-""'A,€.J.„. A. CLÍNICA MÉDICA OBRA PREMIADA POR LA REAL ACADEMIA DE MEDICINA. SEGUNDA EDICIÓN, CORREJIDA Y AUMENTADA. Esta obra teórico práctica, única original en su género publicada en nuestro país, y fundada en las observaciones recogidas en el trascurso de muchos alos en la CLÍNICA de que el autor es catedrático, 'consta de tres tomos de 500 á 600 páginas, en tamaño común y en buenos caracteres tipográñcoB. Acaba de publicarse el 1.", que contiene una INTRODUCCIÓN en que se exponen los principios generales de la ciencia, con la teoría y clasificación de los elementos morbosos, y las reglas del arte con el método del autor; y además los tratadoi particulares de FIBBRBS, con sus principales clasificaciones y la del autor, y de FLKGMAS'AS. En cada tratado precede la exposieion de casos prácticos, elegidos entre los más caracterizados ó interesantes, y sigue la parte doctrinal, en que se dilucidan con el criterio esperimental todas las cnestionea de importancia, etiológicas, patogénicas y de terapéutica, referentes á las enfermedades en ellas comprendidas, á la altura de los conocimientos actuales y teniendo á la rista las obras clínicas de mayor mérito tanto antiguas como modernas. Mientras concluye su publicación, que será en breve, cuyo coste total será de 72 rs. correspondiendo 25 al tomo 1.°, se admite suscricion por tomos en Madrid en las librerías de Bailly-Bailliere (antigua plaza de Santa Ana), de Moya y Plaza (calle de Carretas), y de Duran (Carrera de San Jerónimo); y en provincias en las principales librerías donde hay Escuela de Medicina, con dos reales de amnento en cada tomo, por cansa del porte. Se admitea tatnbien pedidos en casa del autor, calle del Caballero de Gracia, 31, principal, por carta qae esprese bien BU dirección y en que se incluya el importa en libranza ó sellos de franqueo. ' Por acuerdo del Consejo de Administración se ven len en pública y extrajndicial subasta, tres casas de propiedad de la Compañía sitas en esta corte, calles de Alcalá, números 17 y 19, y de la Aduana, número 26. La subasta tendrá lugar el dia 14 de mayo próximo, á las dos de la tarde, en las oficinas de la Dirección, calle del Soldado, núm. 1 principal, donde se hallan de manifiesto loa pliegos de condiciones' títulos y demás, correspondientes á las espresadaa casas. ' Madrid 14 de abril de t872.-£:¿ director general, RICARDO AYÜSO. SOCIEDAD ESPAÑOLA DK CRÉDITO COWERCIAL. OFICINAS: Calla de Claudio Coello, numero 15, RIFA de la casa del barrio de Salamanca de esta corte, sita en el boulemrd Serrano, núm, 54. Reemplaza el fuego sin dejar señal de su empleo.—-Casa Michel, farmacéutico en A i x (Provence.) Estracto d e la r e l a c i ó n h e c h a p o r l a Sociedad d e Ciencias I n d u s t r i a l e s d e P a r i s (20 de diciembre de 1862.) Cjmo noB está demostrado, señores, por un gran número do pruebas antént'cas, quo la acción terapéutica del L i n i m i e n t o B o y e r - M i c h e l constituye un medicamsnto heroico, consideramos la propagación do es'^e revulsivo como un servicio prestado á la agricultura, á la industria, al arta voterinario. Tenemos el honor de pediros para BU sabio autor una recompeuaa liicfna de su mérito. Depósito en Madrid: I. Ferrer y G.% Montera, 51, pral. y en casa de loB principales farmacéuticos de cada población. íll LA NACIÓN A CURADA! I.os cigarrillos do cannabis indica ¡cáñamo indianol, deGriniauli y C'», íainiaceúücos de Paris, son el medicamento mas nue\ü y i'ficii?. contra el asma, la tisis laríngea, la estincion de vo'^. la nincswn, las sofocaciones, el insomnio Y las neuraloias Caeia'i-s. á) PAULINIA CLERET PQ o ca DBL Esta preciosa obra que Be compone de dos tomos en 8.° mayor» de 400 páginas ca'la uno, letra muy compacta y clara, contiene 86 tiDR. D. TOAIÁS SANTERO Y MORENO, pos, y se vende al precio de 20 ra. en Madrid y 24 en provincias en todas las librerías. Los pedidos á Victoriano Suarez, Jacometrezo, 72, librería, Madrid C a t e d r á t i c o d e e s t a a s i g n a t u r a , c o n c a t e g o r í a d e t é r m i n o , e n la F a c u l t a d d e M e d i c i n a d e l a U n i v e r s i d a d C e n t r a l , e z acompañando BU importe. ' Consejero R e a l d e S a n i d a d d e l B e i n o , etc., e t c . EL ASMA Ai.-- jxj^ Contra las afecciones del Estomago, y de los intestinos, del Hígado y del Bato, dan inmejorables resultados en todas Us enfermedades que producen esceso da bilit y flegma, j en las enfermedades del Cutis, como herpes y Colección de cuadros dibujados á pluma por 51 literatos de mas fama. .,g titj ta.íar.áa,:»J GRAGEAS PURGATIVAS Y LAXANTES DE BAUDERON. Depositó» CM n « 4 r l d i ¡tidro Ftrrtr y CU, D*f 5i«M, 7 en l u priacípalM tunuáUé EL MEJOR TÓNICO Kl hierro y la quina son dos medicamentos de una.eficacia íierdica, el primero contra las enfermedades que provienen del eiupobrerimicnlo de la sangre, y el segundo como tónico y foriilicaiile. M. Grimaull ha prestado, pnes, un verdadero servicie á la niedirina, rcunu'ndolos limo el nombre áe Jarabe de quina fnrui/inoao, y esto csplicael éMlo inmenso que con él se obtiene coniia ^ los colores pálidos los dolores de estómago, el desgano, la inc- M guliiridad de la menstruación, el empobrccimienlo déla sai'iire, í^V sobre lodo, |iara facilitar el desarollo de las jóvenes. Esie mi.Miií niedieamenlo exisie bajo la forma de VlNODK QUINA FERHUGl UECHÜ CON MÁLAGA. - - X- "•-' t^' ^a m.r ¿aL>,^7^^ f!f.lx^.k¡S.áa.k¿}. DEPDRATITO AL YODURO DE POTASIO. -.^.s^ffiíM EL MAS PO TSNTK DEPURA TI YO DE LA SAN6RS Y DE LOS HUMORES .á il HOGG ^^ ROB CLERET o" .> » 5o Los señores Grimault v C'», farmacéuticos de Paris, preparan desde liaco 20 años el JARABE I)E mrOFOSFlTO DE CAL, que es la verdadera |)ai)acea para es(a terrible enfermedad. Bajo su influencia, la lüs se calma, lus sudores nocturnos cesan, la opresión desaparece y el enfermo recobra rápidamente la salud y las carnes. Como su eficacia ha dado lugar á numerosas imitaciones, debe el consumidor asegurarse do si lleva cada frasco la firma Grimaull y (;•". Téngase presente, pa:a distinguirlos de los otros, que este jarabe es siempre color de rosa. Depósitos: Bi rrel Hermanos, Simón, ülzurrun, I. Ferrer y C.*, Mon^ tera, 51, pral ."g *r N s at, U n R e m e d i o eficaz c o n t r a l a T i s i s v- , íí , »K«, RÜEMONTMARTRE, 151, P ARXS. h a> •-I ? £ P o S a a§•£•3 El aceite de hícjado de bacalao debe sus propiedades al iodo; pero este mcdicamenlo es tan repu£;nanle y lan difícil de digerir, que desde su aparición se empezó á buscar la manera de reemplazarle. Entre los producios propuestos al efecto hay uno que ha sobrevivido y que los médicos preconizan y recomiendan desde liacc veinte años: tal es el Jarabe de rábano yodado de Grimaull p^ y C», farmacéuticos de I'aris. Como el aceite de hígado de baca- t ^ iao, este jarabe contiene el iodo naturalmente, y ademas los jugos ominenlemenle depurativos y sulfurosos del rabana silvestre, la coc.learia y el berro. Es el mejor medicamento para las personas débiles del" pecho y el mas poderoso de cuantos depurativos pueden aconsejarles. — Los médicos de Paris le prescriben diariamenie á los iiifios pálidos y linlúlicos, para curar la infartacion de las glándulas del cuelloí y las diversas erupciones, sobre todo, las de la piel cabelluda. •-) '1 '••4 f:> t ^ ** ^ OÍ lü ® i.^T3 H