L`o Sse Rvator E Romano

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Número suelto € 1,00. Número atrasado € 2,00 L’OSSERVATORE ROMANO EDICIÓN SEMANAL Unicuique suum Año XLV, número 9 (2.304) EN LENGUA ESPAÑOLA Non praevalebunt Ciudad del Vaticano 3 de marzo de 2013 Sencillamente un peregrino El pontificado de Benedicto XVI finaliza A tres horas de que se hiciera efectiva su renuncia y diera inicio el período de la sede apostólica vacante, el jueves 28 de febrero —pasadas las 17 horas— Benedicto XVI dejó el Vaticano. En helicóptero, llegó al palacio apostólico de Castelgandolfo, desde cuyo balcón, unos cuarenta minutos después, saludó a la multitud que le esperaba. Estas fueron las palabras que pronunció espontáneamente en el último momento público de su pontificado. ¡Gracias! ¡Os doy las gracias! Queridos amigos: estoy feliz de estar con vosotros, rodeado de la belleza de la creación y de vuestra simpatía que me hace mucho bien. Gracias por vuestra amistad, vuestro afecto. Sabéis que este día mío es distinto de los precedentes; ya no soy Sumo Pontífice de la Iglesia católica: hasta las ocho de la tarde lo seré todavía, después ya no más. Soy sencillamente un peregrino que inicia la última etapa de su peregrinación en esta tierra. Pero desearía to- davía, con mi corazón, con mi amor, con mi oración, con mi reflexión, con todas mis fuerzas interiores, trabajar por el bien común y el bien de la Iglesia y de la humanidad. Y me siento muy apoyado por vuestra simpatía. Vamos adelante con el Señor por el bien de la Iglesia y del mundo. Gracias; os imparto ahora con todo el corazón mi bendición. Que nos bendiga Dios omnipotente, Padre, Hijo y Espíritu Santo. Gracias, ¡buenas noches! A todos vosotros, ¡gracias! De modo nuevo GIOVANNI MARIA VIAN na extraordinaria y conmovedora audiencia general y el encuentro con los cardenales han sido los últimos grandes momentos públicos del pontificado de Benedicto XVI. Un pontificado que, por primera vez en la historia, se concluye quietamente, sin el drama de la muerte del obispo de Roma, sin las conmociones que llevaron a las renuncias papales del pasado, tan lejanas en el tiempo y tan distintas que no pueden considerarse precedentes reales. Ahora, de un «modo nuevo», el Romano Pontífice permanece junto al Señor en la cruz, jamás abandonado en el curso de una vida larga y extraordinariamente fructífera. Que se abre, desde hoy más que antes, al espacio reservado a la oración y a la meditación. Sí: Benedicto permanece en la Iglesia, cerca del sucesor de Pedro U que sea elegido por los cardenales. Un grupo de hombres, cierto, pero que de manera misteriosa es vivificado por el soplo del Espíritu y está motivado por un sentido de responsabilidad único, que el colegio ha demostrado saber honrar, como la historia demuestra, sobre todo desde finales del siglo XVIII. Por esto Joseph Ratzinger volvió de alguna forma a su elección al encontrar, en el último día del pontificado, a ese colegio —jamás tan numeroso hasta entonces— que el 19 de abril de 2005 le votó en pocas horas, aunque él no había buscado el papado en modo alguno. «La Iglesia nunca muere», escribía en el medioevo el teólogo Egidio Romano, teorizando que «durante la vacancia de la sede la potestad papal permanece» en los cardenales reunidos para elegir al Pontífice. SIGUE EN LA PÁGINA 16 L’OSSERVATORE ROMANO página 2 Audiencia de Benedicto XVI al presidente de la República italiana domingo 3 de marzo de 2013, número 9 Comunicado de la Secretaría de Estado Libertad del Colegio de los cardenales El 23 de febrero, sábado, por la mañana, Benedicto XVI recibió en un encuentro de despedida al presidente de la República italiana, Giorgio Napolitano, acompañado de su esposa. El encuentro fue particularmente intenso y cordial, dada la gran estima recíproca y la ya larga familiaridad de los dos ilustres interlocutores. El presidente Napolitano manifestó al Papa no sólo la gratitud del pueblo italiano por su cercanía en tantos momentos cruciales, así como por su altísimo magisterio religioso y moral, sino también el afecto con el que seguirá acompañándole en los próximos años. Por su parte el Pontífice volvió a expresar al presidente y a su esposa la gratitud por su amistad y los mejores deseos por el bien de Italia, especialmente en estos días y en este tiempo de decisiones que comprometen. La libertad del Colegio cardenalicio, al cual corresponde proveer, según norma del derecho, a la elección del Romano Pontífice, siempre se ha defendido infatigablemente por la Santa Sede como garantía de una elección que se basara en valoraciones orientadas únicamente al bien de la Iglesia. En el curso de los siglos los cardenales han tenido que afrontar múltiples formas de presión —ejercidas sobre los electores individualmente o sobre el Colegio mismo— que tenían como fin condicionar sus decisiones, plegándolas a lógicas de tipo político y mundano. Mientras que en el pasado fueron las denominadas potencias, o sea, los Estados, quienes buscaban hacer valer el proprio condicionamiento en la elección del Papa, hoy se intenta poner en juego el peso de la opinión pública, fre- cuentemente sobre la base de valoraciones que no perciben el aspecto típicamente espiritual del momento que la Iglesia está viviendo. Es deplorable que, con la aproximación del tiempo en que tendrá inicio el cónclave y los cardenales electores deberán, en conciencia y ante Dios, expresar en plena libertad su propia elección, se multiplique la difusión de noticias a menudo no verificadas, o no verificables, o incluso falsas, hasta con grave perjuicio de personas e instituciones. En estos momentos como nunca los católicos se concentran en lo que es esencial: oran por el Papa Benedicto, oran para que el Espíritu Santo ilumine al Colegio de cardenales, oran por el futuro Pontífice, confiados en que el destino de la barca de Pedro está en las manos de Dios. Audiencia al copríncipe de Andorra Mensaje del secretario de Estado a los monasterios de todo el mundo Un llamamiento a la oración de los contemplativos El cardenal Tarcisio Bertone, secretario de Estado, ha dirigido un mensaje —fechado el 23 de febrero— a los distintos monasterios de vida contemplativa del mundo para llamarles especialmente a la oración en este período particular para la vida de la Iglesia. Publicamos la versión en lengua española del texto. Reverendo padre, reverenda madre: Os dirijo este mensaje mientras toda la Iglesia sigue con emoción los últimos días del luminoso pontificado de Su Santidad Benedicto XVI, y espera al Sucesor que los eminentísimos cardenales reunidos en el Cónclave elegirán, guiados por la acción del Espíritu Santo, después de haber escrutado juntos los signos de los tiempos en la Iglesia y el mundo. El llamamiento que Su Santidad Benedicto XVI ha dirigido a todos los fieles, de acompañarlo con la oración en el momento de entregar el ministerio petrino en manos del Señor, y esperar confiados al nuevo Pontífice, se hace particularmente apremiante para esos miembros elegidos de la Iglesia que son los contemplativos. Su Santidad Benedicto XVI está segu- L’OSSERVATORE ROMANO EDICIÓN SEMANAL Unicuique suum EN LENGUA ESPAÑOLA Non praevalebunt 00120 Ciudad del Vaticano [email protected] TIPO GRAFIA http://www.osservatoreromano.va VATICANA EDITRICE «L’OSSERVATORE ROMANO» ro de poder obtener de vosotros, de vuestros monasterios femeninos y masculinos diseminados por todo el mundo, la valiosa aportación de esa fe orante que a lo largo de los siglos acompaña y sostiene el camino de la Iglesia. El próximo Cónclave se apoyará de modo especial en la límpida pureza de vuestra oración y alabanza. Su Santidad Benedicto XVI que, después de haber gobernado la Barca de Pedro en medio de los avatares de la historia, ha optado por dedicarse sobre todo a la oración, a la contemplación del Altísimo y a la reflexión, nos ofrece el ejemplo más significativo de esta elevación espiritual, que manifiesta la dimensión más auténtica y profunda de todo acto eclesial, la del Espíritu Santo que guía a la Iglesia. El Santo Padre, a quien he comunicado los sentimientos expresados en esta carta, ha manifestado su agrado, pidiéndome que os dé las gracias de su parte y os haga llegar el amor y la estima que os tiene. Me uno a vuestra oración y os saludo con afecto cristiano. GIOVANNI MARIA VIAN director Carlo Di Cicco subdirector Marta Lago redactor jefe de la edición don Sergio Pellini S.D.B. director general El miércoles 27 de febrero, en la Sala Clementina, el Papa recibió en audiencia a monseñor Joan Enric Vives Sicilia, copríncipe de Andorra, arzobispo-obispo de Urgel (España) Comunicado de la Oficina de información de la Santa Sede Actas del proceso «El Santo Padre ha recibido en audiencia esta mañana a los señores cardenales Julián Herranz, Jozef Tomko y Salvatore De Giorgi, de la comisión cardenalicia de investigación sobre la fuga de noticias reservadas, acompañados del secretario, el padre Luigi Martignani, capuchino». De ello dió noticia el lunes 25 de febrero un comunicado de la Oficina de información de la Santa Sede en el que se lee: «Al concluir el encargo, Su Santidad ha querido agradecerles el provechoso trabajo realizado, expresando satisfacción por Redacción via del Pellegrino, 00120 Ciudad del Vaticano teléfono 39 06 698 99410 fax 39 06 698 81412 Servicio fotográfico [email protected] Publicidad: Il Sole 24 Ore S.p.A System Comunicazione Pubblicitaria Via Monte Rosa 91, 20149 Milano [email protected] los resultados de la investigación. Ésta, de hecho, ha permitido advertir, junto a límites e imperfecciones propios de la componente humana de toda institución, la generosidad, rectitud y entrega de cuantos trabajan en la Santa Sede al servicio de la misión encomendada por Cristo al Romano Pontífice». «El Santo Padre —concluye el comunicado— ha decidido que las actas del proceso, de cuyo contenido sólo Su Santidad está en conocimiento, estén a disposición únicamente del nuevo Pontífice». Tarifas de suscripción: Italia - Vaticano: € 58.00; Europa (España + IVA): € 100.00 - $ 148.00; América Latina, África, Asia: € 110.00 - $ 160.00; América del Norte, Oceanía: € 162.00 - $ 240.00. Administración: 00120 Ciudad del Vaticano, teléfono + 39 06 698 99 480, fax + 39 06 698 85 164, e-mail: [email protected]. En México: Arquidiócesis primada de México. Dirección de Comunicación Social. San Juan de Dios, 222-C. Col. Villa Lázaro Cárdenas. CP 14370. Del. Tlalpan. México, D.F.; teléfono + 52 55 5594 11 25, + 52 55 5518 40 99; e-mail: [email protected], [email protected]. En Argentina: Arzobispado de Mercedes-Luján; calle 24, 735, 6600 Mercedes (B), Argentina; teléfono y fax + 2324 428 102/432 412; e-mail: [email protected]. En Perú: Editorial salesiana, Avenida Brasil 220, Lima 5, Perú; teléfono + 51 42 357 82; fax + 51 431 67 82; e-mail: [email protected]. número 9, domingo 3 de marzo de 2013 L’OSSERVATORE ROMANO página 3 En la plaza de San Pedro, el 24 de febrero, el último Ángelus del pontificado de Benedicto XVI Llamado a subir al monte no, a la acción. «La existencia cristiana —escribí en el Mensaje para es¡Gracias por vuestro afecto! ta Cuaresma— consiste en un contiHoy, segundo domingo de Cua- nuo subir al monte del encuentro resma, tenemos un Evangelio espe- con Dios para después volver a bacialmente bello, el de la Transfigura- jar, trayendo el amor y la fuerza que ción del Señor. El evangelista Lucas de ahí se derivan, a fin de servir a pone particularmente de relieve el nuestros hermanos y hermanas con hecho de que Jesús se transfiguró el mismo amor de Dios» (n. 3). mientras oraba: es una experiencia Queridos hermanos y hermanas, profunda de relación con el Padre esta Palabra de Dios la siento dirigidurante una especie de retiro espiri- da a mí, de modo particular, en este tual que Jesús vive en un alto monte momento de mi vida. ¡Gracias! El en compañía de Pedro, Santiago y Señor me llama a «subir al monte», Juan, los tres discípulos siempre presentes Continuaré sirviendo a la Iglesia en los momentos de la manifestación divina con la misma entrega y el mismo amor, del Maestro (Lc 5, 10; pero de una forma más acorde 8, 51; 9, 28). El Señor, a mi edad y a mis fuerzas que poco antes había preanunciado su muerte y resurrección (9, 22), ofrece a los discípulos un antici- a dedicarme aún más a la oración y po de su gloria. Y también en la a la meditación. Pero esto no signifiTransfiguración, como en el bautis- ca abandonar a la Iglesia, es más, si mo, resuena la voz del Padre celes- Dios me pide esto es precisamente tial: «Este es mi Hijo, el Elegido, es- para que yo pueda seguir sirviéndola cuchadlo» (9, 35). La presencia lue- con la misma entrega y el mismo go de Moisés y Elías, que represen- amor con el cual he tratado de hatan la Ley y los Profetas de la anti- cerlo hasta ahora, pero de una forma gua Alianza, es muy significativa: to- más acorde a mi edad y a mis fuerda la historia de la Alianza está zas. Invoquemos la intercesión de la orientada a Él, a Cristo, que realiza Virgen María: que ella nos ayude a un nuevo «éxodo» (9, 31), no hacia todos a seguir siempre al Señor Jela Tierra prometida como en el tiem- sús, en la oración y en la caridad acpo de Moisés, sino hacia el Cielo. tiva. La intervención de Pedro: «Maestro, ¡qué bueno es que estemos aquí!» Tras la oración mariana, Benedicto (9, 33) representa el intento imposi- XVI dirigió su saludo a los fieles y ble de detener tal experiencia místiperegrinos presentes en distintos ca. Comenta san Agustín: «[Peidiomas. dro]... en el monte... tenía a Cristo (en francés) En este domingo os income alimento del alma. ¿Por qué tuvo que bajar para volver a las fati- vito a continuar con valentía y detergas y a los dolores, mientras allí arri- minación vuestro itinerario de CuaQueridos hermanos y hermanas: ba estaba lleno de sentimientos de santo amor hacia Dios, que le inspiraban por ello a una santa conducta?» (Discurso 78, 3: PL 38, 491). Meditando este pasaje del Evangelio, podemos obtener una enseñanza muy importante. Ante todo, el primado de la oración, sin la cual todo el compromiso del apostolado y de la caridad se reduce a activismo. En Cuaresma aprendemos a dar el tiempo justo a la oración, personal y comunitaria, que ofrece aliento a nuestra vida espiritual. Además, la oración no es aislarse del mundo y de sus contradicciones, como habría querido hacer Pedro en el Tabor, sino que la oración reconduce al cami- resma, que es un tiempo espiritual de conversión y de retorno al Señor. Os agradezco de corazón vuestra oración y afecto que me demostráis en estos días. ¡Que Dios os bendiga junto a vuestras familias y comunidades! ¡Feliz domingo a todos! (en inglés) Agradezco a cada uno las numerosas muestras de gratitud, afecto y cercanía en la oración que he recibido en estos días. Al continuar nuestro itinerario cuaresmal hacia la Pascua, tengamos nuestros ojos fijos en Jesús el Redentor, cuya gloria fue revelada en la montaña de la Transfiguración. ¡Invoco para todos vosotros las abundantes bendiciones de Dios! (en alemán) Las palabras dirigidas a los apóstoles en el Evangelio de hoy sobre la Transfiguración del Señor son válidas también para nosotros: y una voz desde la nube decía: «Este es mi hijo amado, el Elegido, escuchadlo» (Lc 9, 35). El tiempo de Cuaresma nos invita de nuevo a escuchar a Cristo. Y a Él pedimos que nos nutra con su Palabra y que purifique los ojos de nuestro espíritu para ser capaces de ver y reconocer su gloria en medio de todas las tristezas del mundo (cf. Oración colecta). Jesús, el Señor, quiere transformarnos para hacernos entrar en la vida auténtica que sólo Él puede dar. Porque Él mismo es esta vida. Agradezco a todos los numerosos gestos de cercanía y afecto, sobre todo las oraciones que en este tiempo he recibido de manera especial. Que el Señor nos fortalezca a todos con su Palabra y su gracia. (en español) Saludo cordialmente a los peregrinos de lengua española, y a cuantos se unen a esta oración mariana a través de los medios de comunicación, agradeciendo también tantos testimonios de cercanía y oraciones que me han llegado en estos días. Jesús, nos dice el Evangelio de hoy, subió al monte a orar, y entonces se transfiguró, se llenó de luz y de gloria. Manifestaba así quién era Él verdaderamente, su íntima relación con Dios Padre. En el camino cuaresmal, la Transfiguración es una muestra esperanzadora del destino final al que lleva el misterio pascual de la pasión, muerte y resurrección de Cristo. Y también un signo de la luz que nos inunda y transforma cuando rezamos con corazón sincero. Que la Santísima Virgen María nos siga llevando de su mano hacia su divino Hijo. Muchas gracias, y feliz domingo a todos. (en portugués) Os agradezco vuestra presencia y todas vuestras manifestaciones de afecto y solidaridad, en particular por las oraciones con las que me estáis acompañando en estos días. ¡Que el buen Dios os colme de bendiciones! (en polaco) Os agradezco el recuerdo y la manifestación de benevolencia que recibo de vosotros en estos días y de modo particular vuestra oración. El Evangelio de hoy nos conduce al monte Tabor, donde Cristo ha manifestado ante sus discípulos el esplendor de su divinidad y ha dado la certeza de que a través del sufrimiento y la cruz podemos alcanzar la resurrección. Que sepamos vislumbrar Su presencia, Su gloria y Su divinidad en la vida de la Iglesia, en la contemplación y en los acontecimientos de cada día. Os bendigo de corazón. (en italiano) Sé que están presentes muchas diócesis, representantes de parroquias, asociaciones, movimientos e instituciones, como también numerosos jóvenes, ancianos y familias. Os agradezco el afecto y la participación, especialmente en la oración, de este momento particular para mi persona y para la Iglesia. Os deseo a todos un buen domingo y una buena semana. En oración siempre estamos cerca. En @Pontifex_es Últimos tuits de Benedicto XVI [24 FEB 13] En este momento particular, os ruego que recéis por mí y por la Iglesia, confiando como siempre en la Providencia de Dios [27 FEB 13] Quisiera que cada uno de vosotros experimentara la alegría de ser cristiano, de sentirse amado por Dios, que nos ha enviado a su Hijo [28 FEB 13] Gracias por vuestro amor y cercanía. Que experimentéis siempre la alegría de tener a Cristo como el centro de vuestra vida L’OSSERVATORE ROMANO página 4 domingo 3 de marzo de 2013, número 9 Motu proprio de Benedicto XVI sobre algunas modificaciones de las normas relativas a la elección del Romano Pontífice Normas nonnullas CARTA APOSTÓLICA EN FORMA DE MOTU PROPRIO SOBRE ALGUNAS MODIFICACIONES DE LAS NORMAS RELATIVAS A LA ELECCIÓN DEL ROMANO PONTÍFICE Con la Carta apostólica De aliquibus mutationibus in normis de electione Romani Pontificis, publicada en Roma, en forma de Motu proprio, el 11 de junio de 2007, en el tercer año de mi pontificado, establecí algunas normas que, abrogando las prescritas en el número 75 de la Constitución apostólica Universi Dominici gregis promulgadas el 22 de febrero de 1996 por mi predecesor el beato Juan Pablo II, restablecieron la norma, sancionada por la tradición, según la cual para la elección válida del Romano Pontífice se requiere siempre la mayoría de dos tercios de los votos de los cardenales electores presentes. Considerada la importancia de asegurar el mejor desarrollo de cuanto se refiere, si bien con diversa relevancia, a la elección del Romano Pontífice, y particularmente una interpretación y actuación más cierta de algunas disposiciones, establezco y prescribo que algunas normas de la Constitución apostólica Universi Dominici gregis así como lo que yo mismo dispuse en la Carta apostólica citada más arriba, se sustituyan con las normas siguientes: n. 35. «Ningún Cardenal elector podrá ser excluido de la elección, activa o pasiva, por ningún motivo o pretexto, quedando en pie lo establecido en los números 40 y 75 de esta Constitución». n. 37. «Establezco, además, que desde el momento en que la Sede Apostólica esté legítimamente vacante, se espere durante quince días completos a los ausentes antes de iniciar el Cónclave, aunque dejo al Colegio de los Cardenales la facultad de anticipar el comienzo del Cónclave si consta la presencia de todos los cardenales electores, así como la de retrasarlo algunos días si hubiera motivos graves. Pero pasados al máximo veinte días desde el inicio de la Sede vacante, todos los Cardenales electores presentes están obligados a proceder a la elección». n. 43. «Desde el momento en que se ha dispuesto el comienzo del proceso de la elección hasta el anuncio público de que se ha realizado la elección del Sumo Pontífice o, de todos modos, hasta cuando así lo ordene el nuevo Pontífice, los locales de la Domus Sanctae Marthae, como también y de modo especial la Capilla Sixtina y las zonas destinadas a las celebraciones litúrgicas, deben estar cerrados a las personas no autorizadas, bajo la autoridad del Cardenal Camarlengo y con la colaboración externa del Vicecamarlengo y del Sustituto de la Secretaría de Estado, según lo establecido en los números siguientes. Todo el territorio de la Ciudad del Vaticano y también la actividad ordinaria de las Oficinas que tienen su sede dentro de su ámbito deben regularse, en dicho período, de modo que se asegure la reserva y el libre desarrollo de todas las actividades en relación con la elección del Sumo Pontífice. De modo particular se deberá cuidar, también con la ayuda de los Prelados Clérigos de Cámara, que nadie se acerque a los Cardenales electores durante el traslado desde la Domus Sanctae Marthae al Palacio Apostólico Vaticano». n. 46, párrafo 1. «Para satisfacer las necesidades personales y de oficio relacionadas con el desarrollo de la elección, deberán estar disponibles y, por tanto, alojados convenientemente dentro de los límites a los que se refiere el n. 43 de la presente Constitución, el Secretario del Colegio Cardenalicio, que actúa de Secretario de la asamblea electiva; el Maestro de las Celebraciones Litúrgicas Pontificias con ocho Ceremonieros y dos religiosos adscritos a la Sacristía Pontificia; un eclesiástico elegido por el Cardenal Decano, o por el Cardenal que haga sus veces, para que lo asista en su cargo». n. 47. «Todas las personas señaladas en el n. 46 y en el n. 55, párrafo 2 de la presente Constitución apostólica, que por cualquier motivo o en cualquier momento fueran informadas por quien sea sobre algo directa o indirectamente relativo a los actos propios de la elección y, de modo particular, de lo referente a los escrutinios realizados en la elección misma, están obligadas a estricto secreto con cualquier persona ajena al Colegio de los Cardenales electores; por ello, antes del comienzo del proceso de la elección, deberán prestar juramento según las modalidades y la fórmula indicada en el número siguiente». n. 48. «Las personas señaladas en el n. 46 y en el n. 55, párrafo 2 de la presente Constitución, debidamente advertidas sobre el significado y sobre el alcance del juramento que han de prestar antes del comienzo del proceso de la elección, deberán pronunciar y subscribir a su debido tiempo, ante el Cardenal Camarlengo u otro Cardenal delegado por és- te, en presencia de dos Protonotarios apostólicos de Número Participantes, el juramento según la fórmula siguiente: Yo N. N. prometo y juro observar el secreto absoluto con quien no forme parte del Colegio de los Cardenales electores, y esto perpetuamente, a menos que reciba especiales facultades dadas expresamente por el nuevo Pontífice elegido o por sus Sucesores, acerca de todo lo que atañe directa o indirectamente a las votaciones y a los escrutinios para la elección del Sumo Pontífice. Prometo igualmente y juro que me abstendré de hacer uso de cualquier instrumento de grabación, audición o visión de cuanto, durante el período de la elección, se desarrolla dentro del ámbito de la Ciudad del Vaticano, y particularmente de lo que directa o indirectamente de algún modo tiene que ver con las operaciones relacionadas con la elección misma. Declaro emitir este juramento consciente de que una infracción del mismo comportaría para mí la pena de excomunión “latae sententiae” reservada a la Sede Apostólica. Así Dios me ayude y estos Santos Evangelios que toco con mi mano». n. 49. «Celebradas las exequias del difunto Pontífice, según los ritos prescritos, y preparado lo necesario para el desarrollo regular de la elección, el día establecido para el inicio del Cónclave, según lo previsto en el n. 37 de la presente Constitución, todos los Cardenales se reunirán en la Basílica de San Pedro en el Vaticano, o donde la oportunidad y las necesidades de tiempo y de lugar aconsejen, para participar en una solemne celebración eucarística con la Misa votiva Pro eligendo Papa. Esto deberá realizarse a ser posible en una hora adecuada de la mañana, de modo que en la tarde pueda tener lugar lo prescrito en los números siguientes de la presente Constitución». n. 50. «Desde la Capilla Paulina del Palacio Apostólico, donde se habrán reunido en una hora conveniente de la tarde, los Cardenales electores, en hábito coral, irán en solemne procesión, invocando con el canto del Veni Creator la asistencia del Espíritu Santo, a la Capilla Sixtina del Palacio Apostólico, lugar y sede del desarrollo de la elección. Participan en la procesión el Vicecamarlengo, el Auditor General de la Cámara Apostólica y dos miembros de cada uno de los Colegios de Protonotarios Apostólicos de Número Participantes, de los Prelados Auditores de la Rota Romana y de los Prelados Clérigos de Cámara». n. 51, párrafo 2. «Por tanto, el Colegio Cardenalicio, que actúa bajo la autoridad y la responsabilidad del Camarlengo ayudado por la Congregación particular de la que se habla en el n. 7 de la presente Constitución, cuidará de que, dentro de dicha Capilla y de los locales adyacentes, todo esté previamente dispuesto, incluso con la ayuda desde el exterior del Vicecamarlengo y del Sustituto de la Secretaría de Estado, de modo que se preserve la normal elección y el carácter reservado de la misma». n. 55, párrafo 3. «Si se cometiese y descubriese una infracción a esta norma, sepan los autores que estarán sujetos a la pena de excomunión latae sententiae reservada a la Sede Apostólica». n. 62. «Abolidos los modos de elección llamados per acclamationem seu inspirationem y per compromissum, la forma de elección del Romano Pontífice será de ahora en adelante únicamente per scrutinium. Establezco, por lo tanto, que para la elección válida del Romano Pontífice se requieren al menos los dos tercios de los votos, calculados sobre la totalidad de los electores presentes y votantes». n. 64. «El procedimiento del escrutinio se desarrolla en tres fases, la primera de las cuales, que se puede llamar pre-escrutinio, comprende: 1) la preparación y distribución de las papeletas por parte de los Ceremonieros —llamados al Aula junto con el Secretario del Colegio de los Cardenales y con el Maestro de las Celebraciones Litúrgicas Pontificias— quienes entregan por lo menos dos o tres a cada Cardenal elector; 2) la extracción por sorteo, entre todos los Cardenales electores, de tres Escrutadores, de tres encargados de recoger los votos de los enfermos, llamados por brevedad Infirmarii, y de tres Revisores; este sorteo es realizado públicamente por el último Cardenal Diácono, el cual extrae seguidamente los nueve nombres de quienes deberán desarrollar tales funciones; 3) si en la extracción de los Escrutadores, de los Infirmarii y de los Revisores, salieran los nombres de Cardenales electores que, por enfermedad u otro motivo, están impedidos de llevar a cabo estas funciones, en su lugar se extraerán los nombres de otros no impedidos. Los tres primeros extraídos actuarán de Escrutadores, los tres segundos de Infirmarii y los otros tres de Revisores». SIGUE EN LA PÁGINA 5 número 9, domingo 3 de marzo de 2013 Normas nonnullas VIENE DE LA PÁGINA 4 n. 70, párrafo 2. «Los Escrutadores hacen la suma de todos los votos que cada uno ha obtenido, y si ninguno ha alcanzado al menos los dos tercios de los votos en aquella votación, el Papa no ha sido elegido; en cambio, si resulta que alguno ha obtenido al menos los dos tercios, se tiene por canónicamente válida la elección del Romano Pontífice». n. 75. «Si las votaciones a las que se refieren los números 72, 73 y 74 de la mencionada Constitución no tuvieran resultado positivo, dedíquese un día a la oración, a la reflexión y al diálogo; en las sucesivas votaciones, observado el orden establecido en el número 74 de dicha Constitución, tendrán voz pasiva solamente los dos nombres que en el precedente escrutinio hayan obtenido el mayor número de votos, sin apartarse de la norma de que también en estas votaciones se requiere para la validez de la elección la mayoría cualificada de al menos dos tercios de los sufragios de los Cardenales presentes y votantes. En estas votaciones los dos nombres que tienen voz pasiva carecen de voz activa». n. 87. «Realizada la elección canónicamente, el último de los Cardenales Diáconos llama al aula de la elección al Secretario del Colegio de los Cardenales, al Maestro de las Celebraciones Litúrgicas Pontificias y a dos Ceremonieros; después, el Cardenal Decano, o el primero de los Cardenales por orden y antigüedad, en nombre de todo el Colegio de los electores, pide el consentimiento del elegido con las siguientes palabras: ¿Aceptas tu elección canónica para Sumo Pontífice? Y, una vez recibido el consentimiento, le pregunta: ¿Cómo quieres ser llamado? Entonces el Maestro de las Celebraciones Litúrgicas Pontificias, actuando como notario y teniendo como testigos a dos Ceremonieros, levanta acta de la aceptación del nuevo Pontífice y del nombre que ha tomado». Esto decido y establezco, no obstante cualquier disposición contraria. Este documento entrará en vigor inmediatamente después de su publicación en L’Osservatore Romano. Dado en Roma, junto a San Pedro, el 22 de febrero del año 2013, octavo de mi pontificado. BENEDICTUS PP XVI L’OSSERVATORE ROMANO Las palabras de Benedicto XVI página 5 al término de los ejercicios espirituales en el Vaticano Creer es tocar la mano de Dios Gracias por haber llevado conmigo el peso del ministerio petrino Benedicto XVI concluyó el sábado 23 de febrero por la mañana, en la capilla Redemptoris Mater, la semana de ejercicios espirituales cuyas meditaciones propuso el cardenal Gianfranco Ravasi, presidente del Consejo pontificio para la cultura. El Papa pronunció en italiano las siguientes palabras al término de la última meditación. Queridos hermanos, queridos amigos: Al final de esta semana espiritualmente tan densa sólo queda una palabra: ¡gracias! Gracias a vosotros por esta comunidad orante en escucha, que me ha acompañado en esta semana. Gracias sobre todo a usted, eminencia, por estas «caminatas» tan bellas en el universo de la fe, en el universo de los Salmos. Hemos quedado fascinados por la riqueza, por la profundidad, por la belleza de este universo de la fe y estamos agradecidos porque la Palabra de Dios nos ha hablado de modo nuevo, con nueva fuerza. «Arte de creer, arte de orar» ha sido el hilo conductor. He recordado el hecho de que los teólogos medievales tradujeron la palabra «logos» no sólo con «verbum», sino también con «ars»: «verbum» y «ars» son intercambiables. Sólo en las dos juntas Carta de agradecimiento del Papa al cardenal Ravasi Para un testimonio claro de fe Al venerado hermano cardenal GIANFRANCO RAVASI presidente del Consejo pontificio para la cultura Deseo con todo el corazón, venerado hermano, manifestarle mi profunda gratitud por el servicio que ha prestado, a mí y a la Curia romana, proponiendo las meditaciones de los ejercicios espirituales. Al inicio de la Cuaresma, la semana de los ejercicios constituye un tiempo aún más intenso de silencio y de oración, y el tema de este año —precisamente el diálogo entre Dios y el hombre en la oración sálmica— nos ha sido de particular ayuda: en cuanto entramos, por así decirlo, en el desierto tras las huellas de Jesús, hemos podido beber de la fuente de agua purísima y abundante de la Palabra de Dios, que usted nos ha orientado a sacar del libro de los Salmos, el lugar bíblico por excelencia en el que la Palabra se hace oración. Rico de su ciencia y de su experiencia, usted ha propuesto un itinerario sugestivo a través del Salterio, siguiendo un doble movimiento: ascendente y descendente. Los Salmos, de hecho, orientan ante todo hacia el Rostro de Dios, hacia el misterio en el que la mente humana naufraga, pero que la misma Palabra divina permite percibir según los diversos perfiles en los que Dios mismo se ha revelado. Y, al tiempo, precisamente en la luz que emana del Rostro de Dios, la oración sálmica nos hace mirar hacia el rostro del hombre, para reconocer en verdad sus alegrías y sus dolores, sus angustias y sus esperanzas. De este modo, querido señor cardenal, la Palabra de Dios, mediada por el ars orandi antiguo y siempre nuevo del Pueblo judío y de la Iglesia, nos ha permitido renovar el ars credendi: una exigencia solicitada por el Año de la fe y que se hace más necesaria todavía por el particular momento que yo personalmente y la Sede apostólica estamos viviendo. El Sucesor de Pedro y sus colaboradores están llamados a dar a la Iglesia y al mundo un testimonio claro de fe, y esto es posible sólo gracias a una inmersión profunda y estable en el diálogo con Dios. A los muchos que también hoy preguntan: «¿Quién nos hará ver la dicha?» (cf. Sal 4, 7), pueden responder cuantos reflejan en su rostro y con su vida la luz del rostro de Dios. El Señor sabrá, venerado hermano, recompensarle por este compromiso que usted ha cumplido tan brillantemente. Por mi parte le aseguro el recuerdo siempre agradecido en la oración por su persona y por su servicio eclesial, mientras con afecto le renuevo la bendición apostólica, extendiéndola con gusto a sus seres queridos. Vaticano, 23 de febrero de 2013 aparece, para los teólogos medievales, todo el significado de la palabra «logos». El «Logos» no es sólo una razón matemática: el «Logos» tiene un corazón, el «Logos» es también amor. La verdad es bella, verdad y belleza van juntas: la belleza es el sello de la verdad. Y con todo usted, partiendo de los Salmos y de nuestra experiencia de cada día, también ha subrayado fuertemente que el «muy bello» del sexto día —expresado por el Creador— resulta permanentemente contradicho, en este mundo, por el mal, por el sufrimiento, por la corrupción. Y parece casi que el maligno quiere permanentemente ensuciar la creación, para contradecir a Dios y hacer irreconocible su verdad y su belleza. En un mundo tan marcado también por el mal, el «Logos», la Belleza eterna y el «Ars» eterno, debe aparecer como «caput cruentatum». El Hijo encarnado, el «Logos» encarnado, está coronado con una corona de espinas; y sin embargo precisamente así, en esta figura doliente del Hijo de Dios, comenzamos a ver la belleza más profunda de nuestro Creador y Redentor; podemos, en el silencio de la «noche oscura», escuchar sin embargo la Palabra. Creer no es otra cosa que, en la oscuridad del mundo, tocar la mano de Dios y así, en el silencio, escuchar la Palabra, ver el Amor. Eminencia, gracias por todo y sigamos haciendo «caminatas», ulteriormente, en este misterioso universo de la fe, para ser cada vez más capaces de orar, de rezar, de anunciar, de ser testimonios de la verdad, que es bella, que es amor. Al final, queridos amigos, desearía daros las gracias a todos vosotros, y no sólo por esta semana, sino por estos ocho años en los que habéis llevado conmigo, con gran competencia, afecto, amor, fe, el peso del ministerio petrino. Queda en mí esta gratitud y aunque ahora termine la «exterior», «visible» comunión —como ha dicho el cardenal Ravasi—, permanece la cercanía espiritual, permanece una profunda comunión en la oración. En esta certeza sigamos adelante, seguros de la victoria de Dios, seguros de la verdad de la belleza y del amor. A todos vosotros, gracias. L’OSSERVATORE ROMANO página 6 Benedicto 2005 19 DE ABRIL Es elegido Papa en menos de 24 horas en el cónclave más numeroso de la historia —los cardenales presentes son 115— y toma el nombre de Benedicto XVI. 24 DE ABRIL Inicio solemne del ministerio de pastor universal de la Iglesia. 28 DE ABRIL Dispensa de los términos prescritos para el inicio de la causa de beatificación y canonización de Juan Pablo II, al que después beatifica personalmente el 1 de mayo de 2011. 14 DE MAYO Primeras beatificaciones con el restablecimiento de la práctica anterior a 1971, según la cual el Papa no preside las ceremonias de beatificación —celebradas en general en las distintas diócesis— sino sólo las de canonización para la proclamación de nuevos santos, que tienen lugar en San Pedro el 23 de octubre de 2005, el 15 de octubre de 2006, el 11 de mayo de 2007 (excepcionalmente en São Paulo, Brasil), el 3 de junio de 2007, el 12 de octubre de 2008, el 26 de abril de 2009, el 11 de octubre de 2009, el 17 de octubre de 2010, el 23 de octubre de 2011 y el 21 de octubre de 2012. 29 DE MAYO Visita a Bari, al concluir el vigésimo cuarto congreso eucarístico nacional. 24 DE JUNIO Visita oficial en el Quirinal al presidente de la República italiana Carlo Azeglio Ciampi. 28 DE JUNIO Motu proprio para la aprobación y la publicación del Compendio del Catecismo de la Iglesia católica. 18-21 DE AGOSTO Viaje a Colonia para la XX Jornada mundial de la juventud. 20 DE SEPTIEMBRE Entrevista a la televisión estatal polaca. 24 DE SEPTIEMBRE Encuentro con el teólogo Hans Küng. 2-23 DE O CTUBRE Preside la XI Asamblea general ordinaria del Sínodo de los obispos sobre «La Eucaristía: fuente y culmen de la vida y de la misión de la Iglesia», donde por primera vez se introduce el de- Arriba: septiembre de 2010, el Papa llega a Hyde Park en Londres para presidir la vigilia de oración por la beatificación del cardenal John Henry Newman; a la derecha, en Fátima (Portugal) en mayo del mismo año, en la capilla de las apariciones depone una rosa de oro a los pies de María bate libre y sobre cuya base se publica la exhortación apostólica postsinodal «Sacramentum caritatis» (22 de febrero de 2007). 18 DE DICIEMBRE Durante el Adviento, primera visita a una parroquia romana. Las demás se tienen, durante los tiempos litúrgicos de Cuaresma y Adviento, el 26 de marzo y el 10 de diciembre de 2006, el 25 de marzo y el 16 de diciembre de 2007, el 24 de febrero y el 30 de noviembre de 2008, el 29 de marzo de 2009, el 7 de marzo y el 12 de diciembre de 2010, el 20 de marzo y el 11 de diciembre de 2011, el 4 de marzo y el 16 de diciembre de 2012. 22 DE DICIEMBRE Discurso a la Curia romana sobre el Concilio Vaticano II. 25 DE DICIEMBRE Encíclica «Deus caritas est» sobre el amor cristiano. 2006 24 DE MARZO Primer consistorio para la creación de 15 cardenales. Siguen otros cuatro: el 24 de noviembre de 2007 (crea 23 cardenales), el 20 de noviembre de 2010 (crea 24 cardenales), el 18 de febrero de 2012 (crea 22 cardenales) y el 24 de noviembre de 2012 (crea 6 cardenales). 25-28 DE MAYO Viaje a Polonia (Varsovia, Częstochowa, Cracovia, Wadowice, Auschwitz, Birkenau). domingo 3 de marzo de 2013, número 9 XVI 8-9 DE JULIO Viaje a Valencia, España, para el quinto Encuentro mundial de las familias. 1 DE SEPTIEMBRE Visita a Manoppello en Los Abruzos. 9-14 DE SEPTIEMBRE Viaje a Baviera (Munich, Altötting y Ratisbona, donde el 12 tiene una lectio magistralis en la universidad). 19 DE O CTUBRE Visita a Verona para la cuarta asamblea nacional de la Iglesia italiana. 28 DE NOVIEMBRE-1 DE DICIEMBRE Viaje a Turquía (Ankara, Éfeso, Estambul). 2007 16 DE ABRIL Publicación del primer volumen del Jesús de Nazaret. El segundo volumen se publica el 10 de marzo de 2011 y el tercero, y último, el 21 de noviembre de 2012. 21-22 DE ABRIL Visita a Vigévano y Pavía, donde ora ante las reliquias de san Agustín. 9-14 DE MAYO Viaje a Brasil. El 13 abre en Aparecida la V Conferencia general del episcopado latinoamericano y del Caribe. 27 DE MAYO Carta a los católicos chinos. 11 DE JUNIO Motu proprio con el que restablece la norma tradicional sobre la mayoría requerida en la elección papal. 17 DE JUNIO Visita a Asís. 7 DE JULIO Motu proprio «Summorum pontificum» sobre la liturgia romana anterior a la reforma de 1970. 1-2 DE SEPTIEMBRE Visita a Loreto. 7-9 DE SEPTIEMBRE Viaje a Austria (Viena, Mariazell, Heiligenkreuz). 23 DE SEPTIEMBRE Visita a Velletri. 21 DE O CTUBRE Visita a Nápoles. 30 DE NOVIEMBRE Encíclica «Spe salvi» sobre la esperanza cristiana. 2008 16 DE ENERO Se publica el discurso preparado para una visita a la universidad de Roma «La Sapienza» a la que tiene que renunciar por la oposición de una pequeña minoría de docentes y estudiantes. 5 DE FEBRERO Publicación del nuevo «Oremus et pro Iudaeis» para la edición del «Missale Romanum» de 1962. 15-21 DE ABRIL Viaje a Estados Unidos (Washington y Nueva York, donde el 18 habla a la Asamblea ge- neral de la organización de las Naciones Unidas). 17-18 DE MAYO Visita a Savona y Génova. 14-15 DE JUNIO Visita a Santa María de Leuca y Brindis. 28 DE JUNIO Apertura de un «Año paulino», concluido el 28 de junio de 2009. 12-21 DE JULIO Viaje a Sydney para la XXIII Jornada mundial de la juventud. 7 DE SEPTIEMBRE Visita a Cágliari. 12-15 DE SEPTIEMBRE Viaje a Francia (París, donde el 12 tiene un discurso en el «Collège des Bernardins», y Lourdes, en el 150° aniversario de las apariciones marianas). 4 DE O CTUBRE Visita oficial en el Quirinal al presidente de la República italiana Giorgio Napolitano. 5-26 DE O CTUBRE Preside la XII Asamblea general ordinaria del Sínodo de los obispos sobre «La Palabra de Dios en la vida y en la misión de la Iglesia», sobre cuya base se publica la exhortación apostólica postsinodal «Verbum Domini» (30 de septiembre de 2010). 19 DE O CTUBRE Visita a Pompeya. 2009 21 DE ENERO Revocación de la excomunión a los cuatro obispos consagrados en 1988 por el arzobispo Marcel Lefebvre sin mandato de la Santa Sede, a la que sigue el 10 de marzo una carta a los obispos de la Iglesia católica. 17-23 DE MARZO Viaje a Camerún y Angola. 28 DE ABRIL Visita a Los Abruzos azotados por un grave terremoto. 8-15 DE MAYO Viaje a Tierra Santa (Jordania, Israel, Palestina). 24 DE MAYO Visita a Cassino y Montecassino. 19 DE JUNIO Apertura de un «Año sacerdotal», concluido el 11 de junio de 2010. 21 DE JUNIO Visita a San Giovanni Rotondo. 29 DE JUNIO Encíclica «Caritas in veritate» sobre el desarrollo humano integral. 2 DE JULIO Motu proprio «Ecclesiae unitatem» con el que la Pontificia comisión «Ecclesia Dei» se integra en la Congregación para la doctrina de la fe. 6 DE SEPTIEMBRE Visita a Viterbo y Bagnoregio, donde venera las reliquias de san Buenaventura. número 9, domingo 3 de marzo de 2013 L’OSSERVATORE ROMANO página 7 En Jerusalén, en mayo de 2009, la visita a la basílica del Santo Sepulcro. Abajo, en Sydney (Australia) en la Jornada mundial de la juventud en julio de 2008 26-28 DE SEPTIEMBRE Viaje a la República Checa. 4-25 DE O CTUBRE Preside la segunda asamblea especial del Sínodo de los obispos para África, sobre cuya base se publica la exhortación apostólica postsinodal «Africae munus» (19 de noviembre de 2011), entregada a los episcopados africanos durante el viaje a Benín. 4 DE NOVIEMBRE Constitución apostólica «Anglicanorum coetibus» sobre la institución de ordinariatos personales para anglicanos que entran en la plena comunión con la Iglesia católica. 8 DE NOVIEMBRE Visita a Brescia y Concesio. 21 DE NOVIEMBRE Encuentro con los artistas en la Capilla Sixtina. 2010 17 DE ENERO Visita a la comunidad judía de Roma. 15-16 DE FEBRERO Encuentro con los obispos irlandeses sobre la cuestión de los abusos sexuales, seguido por una carta a los católicos de Irlanda publicada el 19 de marzo. 14 DE MARZO Visita a la parroquia luterana de Roma. 17-18 DE ABRIL Viaje a Malta. 1 DE MAYO Comunicado sobre la visita apostólica a los Legionarios de Cristo. 2 DE MAYO Visita a Turín para la ostensión de la Sábana Santa. 11-14 DE MAYO Viaje a Portugal (Lisboa, Fátima, Oporto). 4-6 DE JUNIO Viaje a Chipre. 4 DE JULIO Visita a Sulmona. 26-31 DE JULIO Entrevista con el periodista alemán Seewald sobre el pontificado, la Iglesia y los signos de los tiempos para el volumen «Licht der Welt» («Luz del mundo»), publicado el 22 de noviembre de 2010. 5 DE SEPTIEMBRE Visita a Carpineto Romano. 16-19 DE SEPTIEMBRE Viaje al Reino Unido. El 17 en Londres habla en Westminster Hall y el 19 en Birmingham proclama beato al cardenal John Henry Newman. 21 DE SEPTIEMBRE Motu proprio «Ubicumque et semper» con el que se instituye el Consejo pontificio para la promoción de la nueva evangelización. 3 DE O CTUBRE Viaje a Palermo. 10-24 DE O CTUBRE Preside la asamblea especial del Sínodo de los obispos para Oriente Medio, sobre la cual se publica la exhortación apostólica postsinodal «Ecclesia in Medio Oriente» (14 de septiembre de 2012), entregada a los episcopados de la región durante el viaje a Líbano. 18 DE O CTUBRE Carta a los seminaristas. 6-7 DE NOVIEMBRE Viaje a España (Santiago de Compostela y Barcelona, donde el 7 de noviembre preside la dedicación del templo de la Sagrada Familia). 30 DE DICIEMBRE Motu proprio para la prevención y la lucha contra las Ocho años de pontificado actividades ilegales en campo financiero y monetario. 2011 17 DE MARZO Mensaje al presidente de la República italiana Giorgio Napolitano por el 150° aniversario de la unidad de Italia. 27 DE MARZO Visita al mausoleo de las Fosas ardeatinas. 7-8 DE MAYO Visita a Aquileya y Venecia. 4-5 DE JUNIO Viaje a Croacia. 19 DE JUNIO Visita a la diócesis de San Marino-Montefeltro. 24 DE JUNIO Carta con ocasión del 150° aniversario de «L’O sservatore Romano». 29 DE JUNIO Celebra el sexagésimo aniversario de ordenación sacerdotal. 18-21 DE AGOSTO Viaje a España para la XXVI Jornada mundial de la juventud. 11 DE SEPTIEMBRE Visita a Ancona, al concluir el vigésimo quinto congreso eucarístico nacional. 22-25 DE SEPTIEMBRE Viaje a Alemania (Berlín, Erfurt, Etzelsbach, Friburgo). El 22 de septiembre habla al Parlamento federal en el Reichstag de Berlín. 9 DE O CTUBRE Visita a Lamezia Terme y Serra San Bruno. 11 DE O CTUBRE Con el Motu proprio «Porta fidei» se convoca —en el quincuagésimo aniversario del inicio del Concilio Vaticano II (11 de octubre de 1962)— un «Año de la fe» del 11 de octubre de 2012 al 24 de noviembre de 2013. 27 DE O CTUBRE Visita a Asís para una jornada de reflexión, diálogo y oración por la paz y la justicia en el mundo con representantes de diversas confesiones cristianas, de otras religiones y del mundo laico en el vigésimo quinto aniversario del encuentro convocado por Juan Pablo II (27 de octubre de 1986). 18-20 DE NOVIEMBRE Viaje a Benín. 18 DE DICIEMBRE Visita a la cárcel romana de Rebibbia, donde responde a las preguntas de algunos reclusos. 2012 23-29 DE MARZO Viaje a México y a Cuba (León, Guanajuato, Santiago de Cuba y La Habana, donde el 28 de marzo se encuentra con Fidel Castro). 25 DE ABRIL Constitución de la Comisión cardenalicia encargada de in- dagar sobre la divulgación de documentos reservados y a la que luego recibió en audiencia el 16 de junio, el 26 de julio, el 17 de diciembre y el 25 de febrero de 2013, al concluir su misión. 10 DE MAYO Canonización equivalente de santa Hildegarda de Bingen, proclamada luego doctora de la Iglesia junto a san Juan de Ávila el 7 de octubre. 13 DE MAYO Visita a Arezzo y Sansepolcro. 1-3 DE JUNIO Visita a Milán para la conclusión del VII Encuentro mundial de las familias. 26 DE JUNIO Visita a las zonas afectadas por el terremoto de Emilia Romaña. 9 DE JULIO Visita a la casa de los misioneros verbitas en Nemi. 15 DE JULIO Visita a Frascati. 14-16 DE SEPTIEMBRE Viaje a Líbano (Beirut, Harissa, Baabda, Bzommar, Bkerké, Charfet). 4 DE O CTUBRE Visita a Loreto a los cincuenta años de la peregrinación realizada por Juan XXIII para invocar la protección de María sobre el Concilio Vaticano II. 7-28 DE O CTUBRE Preside la XIII Asamblea general ordinaria del Sínodo de los obispos sobre la nueva evangelización. 11 DE O CTUBRE Abre en la plaza de San Pedro el «Año de la fe» en el 50° aniversario del inicio del Concilio Vaticano II. 10 DE NOVIEMBRE Motu proprio «Lingua latina» para la institución de la Pontificia Academia de Latinidad. 11 DE NOVIEMBRE Motu proprio «Intima Ecclesiae natura» sobre el servicio de la caridad. 12 DE DICIEMBRE Al final de al audiencia general lanza su primer tuit en ocho lenguas, a las cuales el 20 de enero se agrega el latín. 22 DE DICIEMBRE Visita en la cárcel a su ex mayordomo —arrestado el 23 de mayo, luego procesado y condenado el 6 de octubre a tres años de reclusión (reducidos a un año y seis meses) por la sustracción de documentos reservados— a quien comunica la concesión de la gracia. 29 DE DICIEMBRE Oración en la plaza de San Pedro con los participantes en el Encuentro europeo de la Comunidad de Taizé. 2013 6 DE ENERO Ordena obispos a cuatro prelados, entre ellos a su secretario particular Georg Gänswein, nombrado prefecto de la Casa pontificia el 7 de diciembre. 11 DE FEBRERO Al final del consistorio ordinario público anuncia la decisión de renunciar al pontificado. 22 DE FEBRERO Motu proprio «Normas nonnullas» que sustituye algunas normas relativas a la elección papal y que entra en vigor el 25 de febrero. 28 DE FEBRERO A las 20.00 se concluye el pontificado. L’OSSERVAT número 9, domingo 3 de marzo de 2013 En Nun La última audiencia general del pontificado de Benedicto XVI fue una experiencia arrolladora de alegría cristiana. Permeada de intensa conmoción por la despedida. No menos de 150.000 personas acudieron a dar su abrazo ideal al Papa, obispo de Roma, el 27 de febrero por la mañana en la plaza de San Pedro, víspera de su partida a Castelgandolfo y del final de su ministerio petrino. Las palabras del Santo Padre, cuya traducción ofrecemos a continuación, fueron interrumpidas diecisiete veces por los aplausos de una multitud que no dejó de manifestarle su cariño también con aclamaciones y con los carteles que desplegaron en tantos idiomas con una palabra en común: gracias. Venerados hermanos en el episcopado y en el presbiterado, distinguidas autoridades, queridos hermanos y hermanas: Amar a la Iglesia significa también tener el valor de tomar decisiones difíciles, sufridas, teniendo siempre delante el bien de la Iglesia y no el de uno mismo Os doy las gracias por haber venido, y tan numerosos, a ésta que es mi última audiencia general. Gracias de corazón. Estoy verdaderamente conmovido y veo que la Iglesia está viva. Y pienso que debemos también dar gracias al Creador por el buen tiempo que nos regala ahora, todavía en invierno. Como el apóstol Pablo en el texto bíblico que hemos escuchado, también yo siento en mi corazón que debo dar gracias sobre todo a Dios, que guía y hace crecer a la Iglesia, que siembra su Palabra y alimenta así la fe en su Pueblo. En este momento, mi alma se ensancha y abraza a toda la Iglesia esparcida por el mundo; y doy gracias a Dios por las «noticias» que en estos años de ministerio petrino he recibido sobre la fe en el Señor Jesucristo, y sobre la caridad que circula realmente en el Cuerpo de la Iglesia, y que lo hace vivir en el amor, y sobre la esperanza que nos abre y nos orienta hacia la vida en plenitud, hacia la patria celestial. Siento que llevo a todos en la oración, en un presente que es el de Dios, donde recojo cada encuentro, cada viaje, cada visita pastoral. Recojo todo y a todos en la oración para encomendarlos al Señor, para que tengamos pleno conocimiento de su voluntad, con toda sabiduría e inteligencia espiritual, y para que podamos comportarnos de manera digna de Él, de su amor, fructificando en toda obra buena (cf. Col 1, 910). En este momento, tengo una gran confianza, porque sé, sabemos todos, que la Palabra de verdad del Evangelio es la fuerza de la Iglesia, es su vida. El Evangelio purifica y renueva, da fruto, dondequiera que la comunidad de los creyentes lo escucha y acoge la gracia de Dios en la verdad y en la caridad. Ésta es mi confianza, ésta es mi alegría. Cuando el 19 de abril de hace casi ocho años acepté asumir el ministerio petrino, tuve esta firme certeza que siempre me ha acompañado: la certeza de la vida de la Iglesia por la Palabra de Dios. En aquel momento, como ya he expresado varias veces, las palabras que resonaron en mi corazón fueron: Señor, ¿por qué me pides esto y qué me pides? Es un peso grande el que pones en mis hombros, pero si Tú me lo pides, por tu palabra echaré las redes, seguro de que Tú me guiarás, también con todas mis debilidades. Y ocho años después puedo decir que el Señor realmente me ha guiado, ha estado cerca de mí, he podido percibir cotidianamente su presencia. Ha sido un trecho del camino de la Iglesia, que ha tenido momentos de alegría y de luz, pero también momentos no fáciles; me he sentido como San Pedro con los apóstoles en la barca en el lago de Galilea: el Señor nos ha dado muchos días de sol y de brisa suave, días en los que la pesca ha sido abundante; ha habido también momentos en los que las aguas se agitaban y el viento era contrario, como en toda la historia de la Iglesia, y el Señor parecía dormir. Pero siempre supe que en esa barca estaba el Señor y siempre he sabido que la barca de la Iglesia no es mía, no es nuestra, sino que es suya. Y el Señor no deja que se hunda; es Él quien la conduce, ciertamente también a través de los hombres que ha elegido, pues así lo ha querido. Ésta ha sido y es una certeza que nada puede empañar. Y por eso hoy mi corazón está lleno de gratitud a Dios, porque jamás ha dejado que falte a toda la Iglesia y tampoco a mí su consuelo, su luz, su amor. Estamos en el Año de la fe, que he proclamado para fortalecer precisamente nuestra fe en Dios en un contexto que parece rebajarlo cada vez más a un segundo plano. Desearía invitaros a todos a renovar la firme confianza en el Señor, a confiarnos como niños en los brazos de Dios, seguros de que esos brazos nos sostienen siempre y son los que nos permiten caminar cada día, también en la dificultad. Me gustaría que cada uno se sintiera amado por ese Dios que ha dado a su Hijo por nosotros y que nos ha mostrado su amor sin límites. Quisiera que cada uno de vosotros sintiera la alegría de ser cristiano. En una bella oración para recitar a diario por la mañana se dice: «Te adoro, Dios mío, y te amo con todo el corazón. Te doy gracias porque me has creado, hecho cristiano...». Sí, alegrémonos por el don de la fe; es el bien más precioso, que nadie nos puede arrebatar. Por ello demos gracias al Señor cada día, con la oración y con una vida cristiana coherente. Dios nos ama, pero espera que también nosotros lo amemos. Pero no es sólo a Dios a quien quiero dar las gracias en este momento. Un Papa no guía él solo la barca de Pedro, aunque sea ésta su principal responsabilidad. Yo nunca me he sentido solo al llevar la alegría y el peso del ministerio petrino; el Señor me ha puesto cerca a muchas personas que, con generosidad y amor a Dios y a la Iglesia, me han ayudado y han estado cerca de mí. Ante todo vosotros, queridos hermanos cardenales: vuestra sabiduría y TORE ROMANO páginas 8/9 n su última audiencia general el abrazo de Benedicto XVI a la Iglesia universal nca me he sentido solo vuestros consejos, vuestra amistad han sido valiosos para mí; mis colaboradores, empezando por mi Secretario de Estado que me ha acompañado fielmente en estos años; la Secretaría de Estado y toda la Curia Romana, así como todos aquellos que, en distintos No abandono la cruz, sino que permanezco de manera nueva junto al Señor Crucificado. En el servicio de la oración permanezco en el recinto de San Pedro ámbitos, prestan su servicio a la Santa Sede. Se trata de muchos rostros que no aparecen, permanecen en la sombra, pero precisamente en el silencio, en la entrega cotidiana, con espíritu de fe y humildad, han sido para mí un apoyo seguro y fiable. Un recuerdo especial a la Iglesia de Roma, mi diócesis. No puedo olvidar a los hermanos en el episcopado y en el presbiterado, a las personas consagradas y a todo el Pueblo de Dios: en las visitas pastorales, en los encuentros, en las audiencias, en los viajes, siempre he percibido gran interés y profundo afecto. Pero también yo os he querido a todos y cada uno, sin distinciones, con esa caridad pastoral que es el corazón de todo Pastor, sobre todo del Obispo de Roma, del Sucesor del Apóstol Pedro. Cada día he llevado a cada uno de vosotros en la oración, con el corazón de padre. Desearía que mi saludo y mi agradecimiento llegara además a todos: el corazón de un Papa se extiende al mundo entero. Y querría expresar mi gratitud al Cuerpo diplomático ante la Santa Sede, que hace presente a la gran familia de las Naciones. Aquí pienso también en cuantos trabajan por una buena comunicación, y a quienes agradezco su importante servicio. En este momento, desearía dar las gracias de todo corazón a las numerosas personas de todo el mundo que en las últimas semanas me han enviado signos conmovedores de delicadeza, amistad y oración. Sí, el Papa nunca está solo; ahora lo experimento una vez más de un modo tan grande que toca el corazón. El Papa pertenece a todos y muchísimas personas se sienten muy cerca de él. Es verdad que recibo cartas de los grandes del mundo —de los Jefes de Estado, de los líderes religiosos, de los representantes del mundo de la cultura, etcétera. Pero recibo también muchísimas cartas de personas humildes que me escriben con sencillez desde lo más profundo de su corazón y me hacen sentir su cariño, que nace de estar juntos con Cristo Jesús, en la Iglesia. Estas personas no me escriben como se escribe, por ejemplo, a un príncipe o a un personaje a quien no se conoce. Me escriben como hermanos y hermanas o como hijos e hijas, sintiendo un vínculo familiar muy afectuoso. Aquí se puede tocar con la mano qué es la Iglesia —no una organización, una asociación con fines religiosos o humanitarios, sino un cuerpo vivo, una comunión de hermanos y hermanas en el Cuerpo de Jesucristo, que nos une a todos. Experimentar la Iglesia de este modo, y poder casi llegar a tocar con la mano la fuerza de su verdad y de su amor, es motivo de alegría, en un tiempo en que tantos hablan de su declive. Pero vemos cómo la Iglesia hoy está viva. En estos últimos meses, he notado que mis fuerzas han disminuido, y he pedido a Dios con insistencia, en la oración, que me iluminara con su luz para tomar la decisión más adecuada no para mi propio bien, sino para el bien de la Iglesia. He dado este paso con plena conciencia de su importancia y también de su novedad, pero con una profunda serenidad de ánimo. Amar a la Iglesia significa también tener el valor de tomar decisiones difíciles, sufridas, teniendo siempre delante el bien de la Iglesia y no el de uno mismo. Permitidme aquí volver de nuevo al 19 de abril de 2005. La seriedad de la decisión reside precisamente también en el hecho de que a partir de aquel momento me comprometía siempre y para siempre con el Señor. Siempre —quien asume el ministerio petrino ya no tiene ninguna privacidad. Pertenece siempre y totalmente a todos, a toda la Iglesia. Su vida, por así decirlo, viene despojada de la dimensión privada. He podido experimentar, y lo experimento precisamente ahora, que uno recibe la vida justamente cuando la da. Antes he dicho que muchas personas que aman al Señor aman también al Sucesor de San Pedro y le tienen un gran cariño; que el Papa tiene verdaderamente hermanos y hermanas, hijos e hijas en todo el mundo, y que se siente seguro en el abrazo de vuestra comunión; porque ya no se pertenece a sí mismo, pertenece a todos y todos le pertenecen. El «siempre» es también un «para siempre» —ya no existe una vuelta a lo privado. Mi decisión de renunciar al ejercicio activo del ministerio no revoca esto. No vuelvo a la vida privada, a una vida de viajes, encuentros, recepciones, conferencias, etcétera. No abandono la cruz, sino que permanezco de manera nueva junto al Señor Crucificado. Ya no tengo la potestad del oficio para el gobierno de la Iglesia, pero en el servicio de la oración permanezco, por así decirlo, en el recinto de San Pedro. San Benito, cuyo nombre llevo como Papa, me será de gran ejemplo en esto. Él nos mostró el camino hacia una vida que, activa o pasiva, pertenece totalmente a la obra de Dios. Doy las gracias a todos y cada uno también por el respeto y la comprensión con la que habéis acogido esta decisión tan importante. Continuaré acompañando el camino de la Iglesia con la oración y la reflexión, con la entrega al Señor y a su Esposa, que he tratado de vivir hasta ahora cada día y quisiera vivir siempre. Os pido que me recordéis ante Dios, y sobre todo que recéis por los Cardenales, llamados a una tarea tan relevante, y por el nuevo Sucesor del Apóstol Pedro: que el Señor le acompañe con la luz y la fuerza de su Espíritu. Invoquemos la intercesión maternal de la Virgen María, Madre de Dios y de la Iglesia, para que nos acompañe a cada uno de nosotros y a toda la comunidad eclesial; a Ella nos encomendamos, con profunda confianza. Queridos amigos, Dios guía a su Iglesia, la sostiene siempre, también y sobre todo en los momentos difíciles. No perdamos nunca esta visión de fe, que es la única visión verdadera del camino de la Iglesia y del mundo. Que en nuestro corazón, en el corazón de cada uno de vosotros, esté siempre la gozosa certeza de que el Señor está a nuestro lado, no nos abandona, está cerca de nosotros y nos cubre con su amor. Gracias. L’OSSERVATORE ROMANO página 10 domingo 3 de marzo de 2013, número 9 Significado de un acto extraordinario, el ejercicio más alto de la función petrina en la abnegación personal por el bien de la Iglesia Cuando se renuncia para servir VALERIO GIGLIOTTI* ubertino de Casale, en su Arbor vitae crucifixae Jesu (1305), incluso a casi diez años de distancia de la más célebre renuncia papal voluntaria, la de Celestino V, definía el gesto del Pontífice ermitaño una «novedad horrenda», contestando su legitimidad teológica y jurídica, seguido por buena parte del movimiento de los espirituales franceses, por Iacopone de Todi y por los cardenales Giacomo y Pietro Colonna, tenaces opositores de Bonifacio VIII, sucesor del Papa ermitaño. En realidad, la renuncia papal, técnicamente renuntiatio o resignatio, aunque podía resultar un hecho traumático para la vida de la Iglesia, ciertamente no era nuevo y contaba, entre los casos más o menos documentables en las fuentes, con cerca de diez Papas renunciantes entre los siglos I y XII. Problema: ¿estaba permitido al sucesor de Pedro abandonar el propio «oficio»? La cuestión se había planteado, tanto desde el perfil jurídico como teológico, relativamente tarde: el derecho canónico regulaba las renuncias de los «oficiales eclesiásticos» inferiores (abades, párrocos, obispos) en presencia de una justa causa de renuncia y previa aceptación de ésta por parte del superior jerárquico del eclesiástico renunciante. En el caso excepcional del Papa, sin embargo, se presentaban dos obstáculos principales: él no tiene superiores jerárquicos en la Iglesia, sino Dios mismo, y está unido a la Iglesia universal por un vínculo de matrimonio espiritual, que se perfecciona con la aceptación del ministerio petrino. Ante las pocas e indirectas normas que regulaban la materia en el Decreto de Graciano (hacia 1142), los primeros juristas decretistas reconocieron inmediatamente la posibilidad de que el Papa renunciara: Baziano (hacia 1190) admite como causas el deseo de abrazar la vida religiosa (migratio ad religionem), la enfermedad y la vejez; Huguccio de Pisa, en su Summa decretorum (1188-1190), las confirma, pero introduciendo una ulterior cláusula «revolucionaria»: el acto de renuncia del Papa habría sido admisible sólo si se hubiera demostrado útil para el bien de la Iglesia universal confiada a él; en caso contrario, el acto habría constituido pecado grave (si expediret, alias peccaret). Sucesivamente, con la promulgación de las primeras colecciones de decretales, la renuncia del Pontífice se define por analogía con la de los obispos, por lo cual Inocencio III (1198-1216), Papa jurista y teócrata, H redactó la decretal Nisi cum pridem (1206), para reglamentar los casos de traslado y renuncia de los obispos, pero extensible por analogía también al obispo de Roma. En la disposición se indican seis causas legítimas de renuncia: la debilidad física, debida a enfermedad o vejez, la falta de cualidades intelectivas, la certeza de haber cometido un crimen, la irregularidad de la elección, la maledicencia del pueblo, el escándalo. Se desalentaba, en cambio, la renuncia por motivos de ascesis (zelum melioris vitae) que, sin embargo, estando muy difundida entre los obispos que deseaban entrar (o volver a entrar) en el monasterio (entre estos, la renuncia de 1057 de san Pedro Damián, cardenal obispo de Ostia, «cuando fue llamado y (1298), que afirmaba, no sin crear un fuerte debate en la doctrina, que el Papa «puede renunciar libremente», sin necesidad de la aceptación del Colegio cardenalicio. La cuestión política y jurídica que en el ámbito de las universidades hizo intervenir en defensa de la tesis de la legitimidad a teólogos refinados como Pietro di Giovanni Olivi, Jean Quidort, Egidio Romano y Agostino Trionfo, y a juristas expertos como Guido da Baisio, Jean Lemoine y Giovanni D’Andrea (canonista amigo de Petrarca). Sin embargo, era solamente una de las cuestiones. La otra, más silenciosa, fue la del pueblo en procesión a Castelnuovo, que exhortaba al Papa a no renunciar, o que iba a visitar la ermita, Última audiencia general de Benedicto XVI, el 27 de febrero arrastrado al capelo, que sólo de mal contribuyendo a atribuir a Pietro de en peor se pasa», Paraíso, XXI, 124- Morrone la fama de santidad que le 126), indujo a Tomás de Aquino a valió la canonización por parte de legitimarla con tal de que hubiera Clemente V en 1313, con el título de una justa causa y la renuncia favore- san Pedro Confesor. Es él, el Papa ciera el bien de la Iglesia. El fatídico angélico, quien (lo canta un himno 13 de diciembre de 1294 serán por litúrgico celestino) «prefirió al cetro tanto estas causas (vejez, escasa preparación, «Quien gobierna el mundo es Dios, deseo de ascesis) las que leerá Celestino V no nosotros. Nosotros le ofrecemos nuestro ante los cardenales reuservicio sólo en lo que podemos y nidos en consistorio, en hasta que Él nos dé fuerzas». la primera fase de su compleja renuncia, seAsí lo escribía Benedicto XVI ya en gún el consejo de los su primera encíclica cardenales juristas Benedicto Caetani (su sucesor con el nombre de Bonifacio y a las riquezas de la tierra la parte VIII), Juan Lemoine y Gerardo Bianmejor (cf. Lucas 10, 42), como ensechi, presentes en Castelnuovo. ñaba el maestro veraz: así, haciéndoEn realidad, a esta pronunciación se pequeño, es considerado más siguió, muy probablemente, la redac- grande que muchos en lo alto del ción formal de un acto jurídico que cielo», reconocido «santo» y contradisciplinaba la renuncia papal de modo exhaustivo, y que a nosotros puesto a la figura ya de suyo excephasta ahora no nos ha llegado sino cional de Benedicto Caetani, hombre en forma indirecta a través de la de gobierno y protagonista durante constitución Quoniam aliqui de Boni- ocho años de la política europea de facio VIII, recogida en el Liber Sextus finales del siglo XIII. Diferente valor jurídico —considerada uno de los tres modos de recomposición del Cisma— tuvo en cambio la renuncia (cessio es el término técnico) de Papas y antipapas en el período de la lucha conciliar, que concluyó en 1449 precisamente con la renuncia en favor de Nicolás V por parte del último antipapa, Amadeo VIII de Saboya-Félix V, cuyo gesto puso fin al pequeño Cisma, reunificando la cristiandad occidental. El vigente Código de derecho canónico (332 § 2), recogiendo la normativa celestino-bonifaciana, reconoce la legitimidad de la renuncia papal sin necesidad de ninguna justa causa, requiriendo sólo para la validez del acto que «se realice libremente» y que «sea manifestada convenientemente». Benedicto XVI, como ya Celestino V, el 11 de febrero eligió como sede para declarar la propia decisión el Consistorio de los cardenales, a quienes en cambio no compete aceptar o no la renuncia. Acontecimiento extraordinario y fuertemente simbólico, la renuntiatio ha mostrado a lo largo de los siglos, siendo elegida o no, la fuerza intrínsecamente mística del ejercicio más alto de la función petrina con total abnegación de sí mismo por el bien de la Iglesia. La naturaleza gémina, doble, de la persona del Sumo Pontífice, hombre y vicario de Cristo, se desvela en el carácter excepcional de un acontecimiento que irrumpe en la historia e interrumpe, con un acto individual y supremo de la voluntad, en el orden natural de la sucesión apostólica, que se abre por regla general con la muerte física del Papa. Ya la normativa canónica medieval recordaba, sin embargo, con dos brocardos muy difundidos, el principio de estabilidad del papado y de inmortalidad de la Iglesia, sacramento de salvación, guiada por Cristo en la historia y fundada en la tierra sobre su vicario: «el Papa pasa, el papado permanece estable» y «la Iglesia no muere». El individualismo y el subjetivismo contemporáneos, sin embargo, amenazan con tergiversar la lectura de este acontecimiento, dejando entender que es la voluntad privada de la persona la que rompe el sello de responsabilidad que la aceptación del ministerio petrino había constituido antes. La renuncia, al contrario, es un acto no sólo jurídico sino intrínsecamente pastoral, que se inscribe en un orden eclesiológico excepcional, pero constructivo para la vida de la Iglesia. El ejercicio supremo de la voluntad, en la negación del más alSIGUE EN LA PÁGINA 11 número 9, domingo 3 de marzo de 2013 L’OSSERVATORE ROMANO Significado de un acto extraordinario eso contribuye al bien de mis hermanos», Romanos 9, 3) la historia de to ministerio de dirección de la la salvación en Cristo pasa a través Iglesia, se convierte en signo de re- de la mística del servicio. conocimiento de la fecunda debiliEl pontificado de Benedicto XVI dad humana, petición de olvido de lleva a término, el 28 de febrero, el sí mismo que se abre al último y su- programa comenzado hace ocho premo acto de humildad y servicio: años con la primera encíclica, Deus caritas est, y la tarea que se le confió en el tiempo y en la historia: «Esta tarea es gracia. Cuanto más se empeña uno por los demás, mejor comprenderá y hará suya la palabra de Cristo: “Somos siervos inútiles” (Lucas 17, 10). En efecto, reconoce que no actúa fundándose en una superioridad o mayor capacidad personal, sino porque el Señor le concede este don. A veces, el exceso de necesidades y las limitaciones del propio obrar le harán sentir la tentación del desaliento. El Papa Joseph Ratzinger en su última Pero precisamente entonaudiencia general, la víspera de la renuncia ces le aliviará saber que, en definitiva, él no es más «Si alguno quiere ser discípulo mío, que un instrumento en manos del deberá olvidarse de sí mismo, car- Señor; se liberará así de la presungar con su cruz y seguirme» (Mateo ción de tener que realizar —algo 16, 24). Un gesto total, oblativo, ca- siempre necesario— en primera persi un vaciamiento (una kénosis, Fili- sona y solo, la necesaria mejora del penses 2, 7) interior que tiene prece- mundo. Hará con humildad lo que dentes ilustres en san Juan de la le es posible y, con humildad, conCruz y san Francisco, y que se abre fiará el resto al Señor. Quien gobiera la dimensión sacrificial del servi- na el mundo es Dios, no nosotros. cio, supremo ejercicio del ministe- Nosotros le ofrecemos nuestro servirio, de ser minus respecto a la gra- cio sólo en lo que podemos y hasta vedad del cargo que se le confía (el que Él nos dé fuerzas. Sin embargo, Papa es «siervo de los siervos de Dios»): «si alguno quiere ser grande, que se ponga al servicio de los demás; si alguno quiere ser principal, que se haga servidor de todos. Porque así también el Hijo del hombre no ha venido para ser servido, sino para servir y dar su vida en pago de la libertad de todos» (Marcos 10, 44-45). También Pablo VI, el 1 de septiembre de 1966, conmemorando en Fumone a Celestino V, en continuidad con el espíritu de renovación con el que hacía poco había concluido el Concilio Vaticano II, quiso destacar el papel de la humildad de quien, «convirtiéndose en el Papa Celestino V por obediencia y renunciante por conciencia», en una época de contrastes y contradicciones, sin embargo supo ser fiel a la propia vocación, renunciando a un oficio que no estaba capacitado para ejercer «no por vileza, sino por honradez». Una teología del servicio y de la humildad, la de la renuncia; un ejercicio de la realeza que pasa —lo recuerda una vez más Fénelon en el siglo XVII meditando nuevamente sobre Tomás— a través del escondimiento de sí mismo para servir a un bien superior: «el reino no está he- hacer todo lo que está en nuestras cho para el rey, sino el rey para el manos con las capacidades que tenereino». mos, es la tarea que mantiene siemEs la esencia misma de la realeza pre activo al siervo bueno de Jesucrística, una realeza de la debilidad cristo: “Nos apremia el amor de y de la renuncia, al servicio de la Cristo” (2 Corintios 5, 14)». salvación. De Moisés («pero te ruego que les perdones su pecado; si no lo haces, bórrame del libro don- *Investigador de historia del derecho de nos tienes inscritos», Éxodo 32, medieval moderno en la Universidad 32) a san Pablo («con gusto acepta- de estudios de Turín, de historia de ría convertirme en objeto de maldi- las instituciones y profesor de historia ción, separado incluso de Cristo, si del derecho europeo. VIENE DE LA PÁGINA 10 página 11 Encomendadas por Benedicto XVI para 2014 Intenciones del Apostolado de la oración Publicamos el texto español de las intenciones —universal y para la evangelización— que, para 2014, ha confiado el Papa al Apostolado de la oración, como es costumbre. Por la evangelización: Para que Europa reencuentre sus raíces cristianas a través del testimonio de fe de los creyentes. JULIO Universal: Para que la práctica del deporte sea siempre ocasión de fraternidad y crecimiento humano. Por la evangelización: Para que el Espíritu Santo sostenga el servicio de los laicos que anuncian el Evangelio en los países más pobres. AGOSTO ENERO Universal: Para que se promueva un desarrollo económico auténtico, respetuoso de la dignidad de todas las personas y todos los pueblos. Por la evangelización: Para que los cristianos de las distintas confesiones caminen hacia la unidad deseada por Cristo. FEBRERO Universal: Para que la sabiduría y la experiencia de las personas mayores sean reconocidas en la Iglesia y en la sociedad. Por la evangelización: Para que sacerdotes, religiosos y laicos colaboren generosamente en la misión de evangelización. MARZO Universal: Para que todas las culturas respeten los derechos y la dignidad de la mujer. Universal: Para que los refugiados, obligados a abandonar sus casas por causa de la violencia, sean acogidos con generosidad y sean respetados en sus derechos. Por la evangelización: Para que los cristianos en Oceanía anuncien con alegría la fe a todos los pueblos del continente. SEPTIEMBRE Universal: Para que los discapacitados mentales reciban el amor y la ayuda que necesitan para llevar una vida digna. Por la evangelización: Para que los cristianos, inspirados en la Palabra de Dios, se comprometan al servicio de los pobres y de los que sufren. O CTUBRE Universal: Para que el Señor conceda paz a las regiones del mundo más afectadas por la guerra y la violencia. Por la evangelización: Para que numerosos jóvenes acojan la invitación del Señor a consagrar sus vidas al anuncio del Evangelio. Por la evangelización: Para que el Día mundial de las misiones despierte en cada cristiano la pasión y el celo por llevar el Evangelio a todo el mundo. ABRIL NOVIEMBRE Universal: Para que los gobernantes promuevan el cuidado de la creación y la justa distribución de los bienes y recursos naturales. Universal: Para que las personas que sufren la soledad sientan la cercanía de Dios y el apoyo de los hermanos. Por la evangelización: Para que el Señor Resucitado llene de esperanza el corazón de quienes sufren el dolor y la enfermedad. Por la evangelización: Para que los seminaristas, religiosos y religiosas jóvenes tengan formadores sabios y bien preparados. MAYO DICIEMBRE Universal: Para que los medios de comunicación sean instrumentos al servicio de la verdad y de la paz. Universal: Para que el Nacimiento del Redentor traiga paz y esperanza a todos los hombres de buena voluntad. Por la evangelización: Para que María, Estrella de la evangelización, guíe la misión de la Iglesia de anunciar a Cristo a todos los pueblos. JUNIO Universal: Para que los desempleados reciban el apoyo y el trabajo que necesitan para vivir con dignidad. Por la evangelización: Para que los padres sean auténticos evangelizadores, transmitiendo a sus hijos el don precioso de la fe. Vaticano, 1 de febrero de 2013 L’OSSERVATORE ROMANO página 12 Colegio episcopal Representaciones pontificias Mons. Samuel Jofré, obispo de Villa María (Argentina) Mons. Dagoberto Sosa, obispo de Tlapa (México) RENUNCIAS: El Papa ha aceptado la renuncia al gobierno pastoral de la archidiócesis de San Andrés y Edimburgo (Escocia) que el cardenal KEITH MICHAEL PATRICK O’BRIEN le había presentado en conformidad con el canon 401 § 1 del Código de derecho canónico. Keith Michael Patrick O’Brien nació en Ballycastle, diócesis de Down and Connor, el 17 de marzo de 1938. Recibió la ordenación sacerdotal el 3 de abril de 1965. Juan Pablo II lo nombró arzobispo metropolitano de San Andrés y Edimburgo el 30 de mayo de 1985; recibió la ordenación episcopal el 5 de agosto sucesivo. El mismo Papa lo creó cardenal del título de San Joaquín y Santa Ana en la Tuscolana en el consistorio del 21 de octubre de 2003. El Papa ha aceptado la renuncia al gobierno pastoral de la diócesis de Vitebsk (Bielorrusia) que monseñor WŁADYSŁAW BLIN le había presentado en conformidad con el canon 401 § 2 del Código de derecho canónico. Władysław Blin nació en Świdwin, diócesis de Koszalin-Kołobrzeg (Polonia), el 31 de mayo de 1954. Recibió la ordenación sacerdotal el 25 de mayo de 1980. Juan Pablo II lo nombró obispo de Vitebsk el 13 de octubre de 1999; recibió la ordenación episcopal el 20 de noviembre del mismo año. El Papa ha aceptado la renuncia al gobierno pastoral de la archidiócesis de Liverpool (Inglaterra) que monseñor PATRICK ALTHAM KELLY le había presentado en conformidad con el canon 401 § 2 del Código de derecho canónico. Patrick Altham Kelly nació en Morecambe, diócesis de Lancaster, el 23 de noviembre de 1938. Recibió la ordenación sacerdotal el 16 de febrero de 1962. Juan Pablo II lo nombró obispo de Salford el 9 de marzo de 1984; recibió la ordenación episcopal el 3 de abril del mismo año. El Papa lo promovió a arzobispo de Liverpool el 21 de mayo de 1996. El Papa ha aceptado la renuncia al gobierno pastoral de la diócesis de Villa María (Argentina) que monseñor JOSÉ ÁNGEL ROVAI le había presentado en conformidad con el canon 401 § 1 del Código de derecho canónico. José Ángel Rovai nació en Córdoba el 19 de octubre de 1936. Recibió la ordenación sacerdotal el 15 de agosto de 1963. Juan Pablo II lo nombró obispo titular de Abaradira y auxiliar de la arquidiócesis de Córdoba el 13 de agosto de 1999; recibió la ordenación episcopal el 1 de noviembre del mismo año. Benedicto XVI lo nombró obispo residencial de Villa María el 3 de octubre de 2006. El Papa ha aceptado la renuncia a la función de auxiliar de la archidiócesis de Armagh (Irlanda) que monseñor GERARD CLIFFORD, obispo titular de Geron, le había presentado en conformidad con los cánones 411 y 401 § 2 del Código de derecho canónico. Gerard Clifford nació en Lordship, archidiócesis de Armagh, el 24 de junio de 1941. Recibió la ordenación sacerdotal el 18 de junio de 1967. Juan Pablo II lo nombró obispo titular de Geron y auxiliar de Armagh el 25 de marzo de 1991; recibió la ordenación episcopal el 21 de abril del mismo año. EL PAPA domingo 3 de marzo de 2013, número 9 HA NOMBRAD O: —Obispo de Villa María (Argentina) al presbítero SAMUEL JOFRÉ. Samuel Jofré nació en Córdoba el 8 de junio de 1957. Recibió la ordenación sacerdotal el 8 de diciemSIGUE EN LA PÁGINA 14 El Santo Padre ha nombrado nuncio apostólico en El Salvador a monseñor LEÓN KALENGA BADIKEBELE, arzobispo titular de Magneto, hasta ahora nuncio apostólico en Ghana. Léon Kalenga Badikebele nació en Kamina (República democrática del Congo) el 17 de julio de 1956. Recibió la ordenación sacerdotal el 5 de septiembre de 1982, incardinado en la diócesis de Luebo. Es doctor en derecho canónico. Entró en el servicio diplomático de la Santa Sede el 27 de febrero de 1990. Benedicto XVI lo nombró arzobispo titular de Magneto y nuncio apostólico en Ghana el 1 de marzo de 2008; recibió la ordenación episcopal el 1 de mayo del mismo año. El Papa ha nombrado arzobispo titular de Vittoriana y nuncio apostólico en Colombia a monseñor ETTORE BALESTRERO, hasta ahora subsecretario de la sección para las Relaciones con los Estados de la Secretaría de Estado. Ettore Balestrero nació en Génova (Italia) el 21 de diciembre de 1966. Recibió la ordenación sacerdotal el 18 de septiembre de 1993, incardinado en la diócesis de Roma. Obtuvo el doctorado en derecho canónico. Entró en el servicio diplomático de la Santa Sede el 1 de julio de 1996 y ha trabajado en las representaciones pontificias en Corea, Mongolia y Países Bajos, y en la sección para las Relaciones con los Lutos en el episcopado —Monseñor PEDRO LISÍMACO DE JESÚS VÍLCHEZ VÍLCHEZ, obispo emérito de Jinotega (Nicaragua), falleció el 19 de febrero. Había nacido en Jinotega el 19 de mayo de 1929. Era sacerdote desde el 6 de febrero de 1955. Juan Pablo II erigió la prelatura territorial de Jinotega y lo nombró prelado de dicha sede el 18 de junio de 1982. Lo elevó a la dignidad episcopal el 19 de julio de 1984; recibió la ordenación episcopal el 8 de septiembre del mismo año. El Papa elevó dicha circunscripción eclesiástica al rango de diócesis y lo nombró obispo residencial de la misma el 30 de abril de 1991. Benedicto XVI aceptó su renuncia al gobierno pastoral de dicha sede el 10 de mayo de 2005. —Monseñor NORBERT M. D ORSEY, C.P., obispo emérito de Orlando (Estados Unidos), falleció el 21 de febrero. Había nacido en Springfield, Massachusetts, el 14 de diciembre de 1929. Era sacerdote desde el 28 de abril de 1956. Juan Pablo II lo nombró obispo titular de Mactaris y auxiliar de Miami el 10 de enero de 1986; recibió la ordenación episcopal el 19 de marzo sucesivo. El mismo Papa lo nombró obispo residencial de Orlando el 10 de marzo de 1990 y aceptó su renuncia al gobierno pastoral de dicha diócesis el 13 de noviembre de 2004. —Monseñor GIOVANNI D’ASCENZI, obispo emérito de Arezzo-Cortona-Sansepolcro (Italia), falleció el 26 de febrero. Había nacido en Valentano, diócesis de Viterbo, el 6 de enero de 1920. Era sacerdote desde el 19 de junio de 1943. Pablo VI lo nombró obispo de SovanaPitigliano-Orbetello el 7 de octubre de 1975; recibió la ordenación episcopal el 7 de diciembre de dicho año. Juan Pablo II lo nombró obispo de Arezzo, de Cortona y de Sansepolcro el 11 de abril de 1983. El 30 de septiembre de 1986, con la unficación de las diócesis italianas, pasó a ser el primer obispo de la nueva diócesis de ArezzoCortona-Sansepolcro. El Santo Padre aceptó su renuncia al gobierno pastoral de dicha sede el 8 de junio de 1996. Estados de la Secretaría de Estado, donde era subsecretario desde el 17 de agosto de 2009. El Papa ha nombrado arzobispo titular de Otricoli y nuncio apostólico en Liberia a monseñor MIROSŁAW ADAMCZYK, consejero de nunciatura. Mirosław Adamczyk nació en Gdansk (Polonia) el 16 de julio de 1962. Recibió la ordenación sacerdotal el 16 de mayo de 1987. Obtuvo el doctorado en derecho canónico. Entró en el servicio diplomático de la Santa Sede el 1 de julio de 1993 y ha trabajado en las representaciones pontificias en Madagascar, India, Hungría, Bélgica, Sudáfrica y Venezuela. El Santo Padre ha nombrado arzobispo titular de Memfi a monseñor MICHAEL W. BANACH, hasta ahora representante permanente de la Santa Sede ante la Agencia internacional de la energía atómica (A1EA), ante la Organización para la seguridad y la cooperación en Europa (OSCE) y ante la Comisión preparatoria del Tratado de prohibición total de pruebas nucleares (CTBTO), así como observador permanente de la Santa Sede ante la Organización de las Naciones Unidas para el desarrollo industrial (ONUDI) y ante la Oficina de las Naciones Unidas en Viena, encomendándole al mismo tiempo el cargo de nuncio apostólico. Michael W. Banach nació en Worcester (Estados Unidos) el 19 de noviembre de 1962. Recibió la ordenación sacerdotal el 2 de julio de 1988. Es doctor en derecho canónico. Entró en el servicio diplomático de la Santa Sede el 1 de julio de 1994 y ha trabajado en las representaciones pontificias en Bolivia y en Nigeria, y en la sección para las Relaciones con los Estados de la Secretaría de Estado. Benedicto XVI lo nombró representante permanente de la Santa Sede ante la A.1.E.A., ante la O.S.C.E. y ante la CTBTO, así como observador permanente de la Santa Sede ante la ONUDI y ante la Oficina de las Naciones Unidas en Viena el 22 de enero de 2007. El Papa ha nombrado arzobispo titular de Suelli a monseñor BRIAN UDAIGWE, consejero de nunciatura, encomendándole al mismo tiempo el cargo de nuncio apostólico. Brian Udaigwe nació en Tiko (Camerún) el 19 de julio de 1964. Recibió la ordenación sacerdotal el 2 de mayo de 1992, incardinado en la diócesis de Orlu. Es doctor en derecho canónico. Entró en el servicio diplomático de la Santa Sede el 1 de julio de 1994 y ha trabajado en las representaciones pontificias en Zimbabue, Costa de Marfil, Haití, Bulgaria, Tailandia y Gran Bretaña. L’OSSERVATORE ROMANO número 9, domingo 3 de marzo de 2013 página 13 Ha fallecido el cardenal Julien Ries Una vida de estudios dedicada al hombre y a lo sagrado El cardenal Julien Ries falleció el sábado 23 de febrero en Tournai, Bélgica, como consecuencia de una grave insuficiencia cardíaca. Dentro de dos meses habría cumplido 93 años. Había nacido en Fouches, en el distrito de Hachy (actualmente Arlon), diócesis de Namur, el 19 de abril de 1920. Recibió la ordenación sacerdotal el 12 de agosto Cursó la educación primaria en Fouches y en 1933 ingresó en el seminario de Bastogne, donde estudió humanidades y filosofía. Desde 1941 hasta 1945, en pleno tiempo de guerra, realizó los estudios eclesiásticos en el seminario mayor de Namur. Recibió la ordenación sacerdotal el 12 de agosto de 1945. Luego continuó sus estudios en la Universidad católica de Lovania, donde en 1948 se doctoró en teología y en 1949 en filosofía e historia oriental. Durante el período universitario colaboró pastoralmente en la diócesis de Namur. Fue largo y brillante su itinerario académico en la Universidad católica de Lovaina, donde en 1960 fue nombrado profesor encargado y en 1968 pasó a ser profesor de historia de las religiones en la Facultad de teología y en el Instituto de estudios orientales, cargo que desempeñó hasta 1991. Su actividad en el ateneo se caracterizó por una atención especial a las religiones orientales, en particular a las figuras de Mitra y de Zaratustra, y luego al hinduismo, al budismo y al islam. Se especializó también en el estudio de las religiones del Egipto faraónico, del agnosticismo, del maniqueísmo y de las antiguas religiones germánicas y escandinavas. Fundó el Centro de historia de las religiones y creó y dirigió cuatro colecciones de publicaciones de historia de las religiones: Homo Religiosus, Collection Cerfaux-Lefort, Information et Enseignement y Conférences et Travaux. En 1969, durante el traslado de la universidad francófona y su reconstrucción en Louvain-la-Neuve, se encargó de la institución del Centro Cerfaux-Lefort, con el fin de reorganizar la biblioteca universitaria. Permaneció en dicho Centro hasta 2011, ocupándose de las grandes colecciones de libros y revistas . de 1945. Benedicto XVI le nombró arzobispo titular de Belcastro el 6 de enero de 2012 y recibió la ordenación episcopal el 11 de febrero sucesivo. El Santo Padre le creó cardenal de la diaconía de San Antonio de Padua en al circunvalación Appia en el consistorio del 18 de febrero de 2012. Fue presidente del Instituto de estudios orientales de Louvain-la-Neuve y consultor del Secretariado para los no cristianos. Participó en nuemerosas ocasiones en el Meeting para la amistad entre los pueblos en Rímini, Italia. Recibió muchos reconocimientos y condecoraciones. Entre otros, la Académie Française le otorgó el premio Dumas Millier por sus publicaciones sobre el tema de lo sagrado. En 2010 recibió el doctorado honoris causa en filosofía y ciencias de la educación en la Universidad católica del Sacro Cuore, a la cual, el año anterior, había donado su biblioteca, todos sus escritos y la correspondencia mantenida con los historiadores de las religiones de todo el mundo. Con este vastísimo material se formó el Archivo Julien Ries. En 1991, cuando ya era profesor emérito, recibió un significativo homenaje de sus colegas: la obra en cuatro volúmenes de Festschriften, miscelánea de estudios en su honor. Sus publicaciones científicas son muchísimas. Entre ellas se recuerda Lo sagrado en la historia religiosa de la humanidad (1982) y Tratado de an- Audiencias pontificias EL SANTO PADRE HA RECIBID O: Sábado 23 de febrero —Al cardenal Gianfranco Ravasi, presidente del Consejo pontificio para la cultura, predicador de los ejercicios espirituales. —Al presidente de la República italiana, honorable Giorgio Napolitano, con su esposa. Lunes, día 25 Erección de diócesis El Papa ha erigido la nueva diócesis de Gamboma (República del Congo) con territorio desmembrado de la diócesis de Owando, y la ha hecho sufragánea de la sede metropolitana de Brazzaville. La nueva diócesis tiene una extensión de 38.400 km² y cuenta con una población de 193.000 habitantes, de los cuales 110.000 son católicos. Están distribuidos en siete parroquias y son atendidos por trece sacerdotes diocesanos y dos sacerdotes religiosos. También desempeñan su misión en esa circunscripción eclesiástica dos religiosos y doce religiosas. En la actualidad hay 17 seminaristas mayores. —A los cardenales Julián Herranz, Jozef Tomko y Salvatore De Giorgi. —Al cardenal Marc Ouellet, prefecto de la Congregación para los obispos. P.S.S., Miércoles, día 27 —Al presidente de la República de Eslovaquia, Ivan Gašparovič. —A sus excelencias los señores Teodoro Lonferini y Denise Bronzetti, capitanes regentes de la República de San Marino. —Al presidente del Estado libre de Baviera, Horst Seehofer, con su esposa. —A monseñor Joan Enric Vives Sicilia, copríncipe de Andorra, arzobispo-obispo de Urgel (España). tropología de lo sagrado (1989-2009). Un centenar de textos se encuentran en el Diccionario de las religiones, editado bajo la dirección del cardenal Paul Poupard. Su Opera Omnia, subdividida en doce partes temáticas, está en proceso de publicación. Benedicto XVI, al recibir la noticia de la muerte del cardenal Julien Ries, se recogió en oración. Luego envió a monseñor Guy Harpigny, obispo de la diócesis belga de Tournai, el siguiente telegrama de pésame: Al recibir conmocionado la noticia de la muerte del cardenal Julien Ries, le expreso mi más sentido pésame a usted, a la familia del cardenal y a las personas más cercanas. Que el Señor acoja en la luz de la vida eterna a este eminente hombre de fe que sirvió fielmente a la Iglesia. A través de la enseñanza y la investigación, en particular en el campo de la historia de las religiones, del cual era un destacado experto, siempre se preocupó por testimoniar su fe entre sus contemporáneos con espíritu de diálogo. Como prenda de consuelo, le imparto una bendición apostólica especial, que extiendo a la familia del cardenal difunto, a las personas cercanas a él, a las religiosas de la «Famille de l’Oeuvre» que le han atendido, y a todas las personas que participarán en la celebración del funeral. Curia romana El Santo Padre ha nombrado subsecretario de la sección para las Relaciones con los Estados de la Secretaría de Estado a monseñor ANTOINE CAMILLERI, consejero de nunciatura en la misma Sección para las Relaciones con los Estados. Antoine Camilleri nació en Sliema (Malta) el 20 de agosto de 1965. Recibió la ordenación sacerdotal el 5 de julio de 1991. Es doctor en ciencias jurídicas y en derecho canónico. Ingresó en el servicio diplomático de la Santa Sede el 9 de enero de 1999 y ha trabajado en las representaciones pontificias en Papúa Nueva Guinea, Uganda y Cuba, y en la sección para las Relaciones con los Estados de la Secretaría de Estado. El Papa ha nombrado relator de la Congregación para las causas de los santos a monseñor CLAUDIO IOVINE, hasta ahora ayudante de estudio del mismo dicasterio. El Santo Padre ha nombrado miembros de la Comisión pontificia para América Latina al cardenal JORGE MARIO BERGO GLIO, S.J., arzobispo de Buenos Aires (Argentina), y a monseñor EMILIO CARLOS BERLIE BELAUNZARÁN, arzobispo de Yucatán (México). Relaciones diplomáticas Nombramientos pontificios La Santa Sede y la República de Sudán del Sur, deseosas de desarrollar relaciones de amistad recíproca, han decidido de común acuerdo establecer entre sí relaciones diplomáticas a nivel de nunciatura apostólica por parte de la Santa Sede y de embajada por parte de la República de Sudán del Sur. El Santo Padre ha nombrado consiliario eclesiástico general de la Universidad católica del «Sacro Cuore» (Italia) a monseñor CLAUDIO GIULIOD ORI, hasta ahora obispo de Macerata-Tolentino-Recanati-Cingoli-Treia. Enviado especial El Papa ha nombrado enviado especial suyo a Lituania, para las celebraciones que tendrán lugar el 5 de mayo próximo, con ocasión del VI centenario de la catedral de Kaunas, al cardenal STANISŁAV DZIWISZ, arzobispo de Cracovia (Polonia). El Papa ha nombrado miembros ordinarios de la Insigne Academia pontificia de bellas artes y letras de los virtuosos en el Panteón, a las siguientes personas: profesor MARIO BOTTA, profesora MARIA ANTONIETTA CRIPPA y profesor LORENZO BARTOLINI SALIMBENI para el sector de los arquitectos; PEDRO CANO para el sector de pintores y cineastas; GIUSEPPE DUCROT, MIMMO PALADINO y UGO RIVA para el sector de los escultores; LAURA BOSIO, LUCA D ONINELLI y VINCENZO CERAMI para el sector de literatos y poetas. L’OSSERVATORE ROMANO página 14 domingo 3 de marzo de 2013, número 9 Entrevista al Maestro de las Celebraciones litúrgicas pontificias Modificados los ritos para el inicio del pontificado GIANLUCA BICCINI El 18 de febrero, en la audiencia concedida al Maestro de las Celebraciones litúrgicas pontificias, monseñor Guido Marini, Benedicto XVI aprobó «con su autoridad apostólica» algunas modificaciones al Ordo rituum pro ministerii Petrini initio Romae episcopi y dispuso su publicación. Hemos pedido a monseñor Marini que nos explique estas modificaciones y su significado. Ante todo, ¿qué es el «Ordo rituum pro ministerii Petrini initio Romae episcopi»? Como dicen las premisas del propio Ordo en el n. 2, es el Ritual que «presenta las celebraciones previstas en tiempos diversos y en lugares vinculados a la sede episcopal en Roma con referencia a la solicitud pastoral de su obispo por toda la grey del Señor». Se trata, en otras palabras, del libro que contiene los textos litúrgicos utilizados en las celebraciones presididas por el nuevo Pontífice desde el momento del solemne anuncio de la Elección hasta la visita a la basílica de Santa María la Mayor. El Ordo fue aprobado por Benedicto XVI, con Rescripto Ex audientia Summi Pontificis, el 20 de abril de 2005, el día siguiente de su elección como Sumo Pontífice. Debo decir que en aquel tiempo la Oficina de las Celebraciones realizó, con competencia, un gran trabajo de estudio para la preparación y la redacción del Ordo. El Pontífice, con las mismas modalidades, ha aprobado ahora algunas modificaciones. ¿Cuál es el motivo de este acto? Creo poder identificar al menos dos. Ante todo el Santo Padre vivió en primera persona las celebraciones de inicio de pontificado en 2005. Aquella experiencia, con la reflexión que le siguió, probablemente sugirió alguna intervención orientada a mejorar el texto, en la lógica de un desarrollo armónico. En segundo lugar, con este acto se ha intentado proseguir en la línea de algunas modificaciones aportadas en estos años a las liturgias papales. O bien, distinguir mejor la celebración de la Santa Misa de otros ritos que no le son estrictamente propios. Me refiero, por ejemplo, al rito de canonización, al del resurrexit el Domingo de Pascua y a la imposición del palio a los nuevos arzobispos metropolitanos. Roma, el acto de «obediencia» será realizado por todos los cardenales presentes en la concelebración. De tal modo ese gesto que llevan a cabo los cardenales electores en la Capilla Sixtina inmediatamente después de la elección, vuelve a tener una dimensión también pública y queda Entre los primeros actos del nuevo Obispo de Roma están previstas las visitas a las dos basílicas papales de San Pablo Extramuros y de Santa María la Mayor. ¿Se ha dispuesto también alguna modificación al respecto? A diferencia de cuanto se indicaba en el Ordo, el nuevo Pontífice podrá realizarlas cuando lo considere más oportuno, también a un tiempo de distancia de la elección, y en la forma que juzgue más adecuada, ya sea una Santa Misa, la celebración de la liturgia de las Horas o un acto litúrgico particular como el actualmente prescrito. ¿Qué sucederá en concreto? Como he apuntado, tanto en la celebración por el inicio del ministerio del Obispo de Roma como en la celebración de toma de posesión de la cátedra de Roma en San Juan de Letrán, los ritos típicos se situarán antes y fuera de la Santa Misa, ya no dentro de la misma. Por lo que respecta a la celebración de inicio del ministerio del Obispo de abierto a todos los miembros del Colegio cardenalicio, asumiendo al mismo tiempo un carácter de catolicidad. No se trata de una novedad, pues todos recuerdan bien en el inicio del pontificado de Juan Pablo II el acto de obediencia realizado por todos los cardenales entonces presentes en la concelebración. Entre ellos basta con recordar las ya celebérrimas y conmovedoras imágenes del abrazo del Papa Wojtyła tanto con el entonces cardenal Joseph Ratzinger como con el cardenal Stefan Wyszyński. ¿Se contempla asimismo alguna novedad para la sección musical? El 24 de abril de 2005, a los cinco días de su elección al pontificado, Benedicto XVI preside la solemne celebración eucarística de inicio de su ministerio como Pastor universal de la Iglesia El actual Ordo, sin prever otras posibilidades, indica un repertorio musical en general nuevo, compuesto con ocasión de la redacción del Ordo mismo. Lo dispuesto por Benedicto XVI con el presente acto ofrece en cambio una mayor libertad en la elección de las partes cantadas, valorando el rico repertorio musical de la historia de la Iglesia. Colegio episcopal VIENE DE LA PÁGINA 12 bre de 1983. Se doctoró en derecho canónico en la Pontificia Universidad de la Santa Cruz de Roma. En su ministerio ha desempeñado los siguientes cargos: vicario parroquial, párroco; vicario judicial adjunto del tribunal interdiocesano de Córdoba, y juez del mismo Tribunal. —Obispo de Ischia (Italia) al presbítero PIETRO LAGNESE. Pietro Lagnese nació en Vitulazio el 9 de septiembre de 1961. Recibió la ordenación sacerdotal el 1 de mayo de 1986. Obtuvo la licenciatura en teología en la Facultad pontificia teológica de Italia Meridional en Nápoles. Ha sido párroco, secretario del Sínodo diocesano, director espiritual del seminario mayor diocesano, miembro del colegio de consultores y responsable regional de la pastoral familiar. —Obispo de Tlapa (México) a monseñor DAGOBERTO SOSA ARRIAGA, hasta ahora obispo titular de Gummi di Bizacena y auxiliar de Puebla. Dagoberto Sosa Arriaga nació en Aquixtla, archidiócesis de Tulancingo, el 15 de abril de 1955. Recibió la ordenación sacerdotal el 24 de abril de 1983. Benedicto XVI lo nombró obispo titular Gummi di Bizacena y auxiliar de Puebla el 24 de febrero de 2011; recibió la ordenación episcopal el 12 de abril del mismo año. —Obispo de Pointe-Noire (República del Congo) al padre MIGUEL ÁNGEL OLAVERRI ARRONIZ S.D.B. Miguel Ángel Olaverri Arroniz nació en Pamplona (España) el 9 de mayo de 1948. Ingresó en la Sociedad de San Francisco de Sales (salesianos), donde recibió la ordenación sacerdotal el 5 de mayo de 1976. Inició su ministerio como misionero en Gabón y en la República del Congo-Brazzaville; en 1993 lo eligieron superior de la provincia salesiana de África central; luego, en Pointe-Noire ha sido párroco y director diocesano para la catequesis y la pastoral juvenil; vicario foráneo y administrador apostólico, cargo que desempeñaba desde el 31 de marzo de 2011. Además, en la Conferencia episcopal era responsable de Caritas nacional, de la pastoral de los inmigrantes, de la comisión justicia y paz y presidente de la oficina nacional de comunicaciones sociales. S.D.B., —Obispo de la nueva diócesis de Gamboma (República del Congo) al presbítero URBAIN NGASSONGO. Urbain Ngassongo nació en Kinshasa el 15 de octubre de 1961. Recibió la ordenación sacerdotal el 20 de julio de 1996. Se doctoró en teología espiritual en la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma. Ha sido profesor y director espiritual del seminario mayor en Brazzaville, vicario parroquial y secretario de la Conferencia episcopal del Congo. —Obispo titular de Ottana y auxiliar de la diócesis de Siedlce (Polonia) a monseñor PIOTR SAWCZUK. Piotr Sawczuk nació en Puczyce, diócesis de Siedlce, el 29 de enero de 1962. Recibió la ordenación sacerdotal el 6 de junio de 1987. Se doctoró en derecho canónico en la Universidad Wyszyński de Varsovia. Ha sido juez del tribunal diocesano, notario de la curia y profesor en el instituto teológico y en el seminario, canciller, vicario general y presidente de la comisión del Sínodo. —Obispo titular de Gadiaufala y auxiliar de la diócesis de Xuân Lôc (Vietnam) a monseñor JOSEPH DINH DUC DAO. Joseph Dinh Duc Dao nació en Thuc Hoa, diócesis de Bui Chu, el 2 de marzo de 1945. Recibió la ordenación sacerdotal el 27 de marzo de 1971, incardinado en la archidiócesis de Saigón. Se doctoró en teología moral en la Pontificia Academia Alfonsiana de Roma y en misionología en la Pontificia Universidad Gregoriana. Ha desempeñado su ministerio como subdirector y, luego, director del Centro internacional de animación misionera (C.I.A.M.) de Roma; profesor en la Pontificia Universidad Urbaniana; miembro del Consejo internacional para la catequesis, de la comisión pastoral para el jubileo del año 2000 y de la Fundación Nostra Aetate del Consejo pontificio para el diálogo interreligioso; director de la Oficina de la Congregación para la evangelización de los pueblos para la coordinación del apostolado de los vietnamitas de la diáspora. En el último período era rector del seminario mayor de Xuân Lôc. —Administrador apostólico «sede vacante et ad nutum Sanctae Sedis» de la diócesis de Vitebsk (Bielorrusia) a monseñor FRANCISZEK KISIEL, hasta ahora vicario general de dicha sede. número 9, domingo 3 de marzo de 2013 L’OSSERVATORE ROMANO En la última audiencia del pontificado Benedicto XVI página 15 saluda al colegio cardenalicio La Iglesia se despierta en las almas Ya hoy prometo al futuro Papa mi incondicional reverencia y obediencia El jueves 28 de febrero por la mañana, último día de su pontificado, Benedicto XVI quiso encontrar en la Sala Clementina a los cardenales presentes en Roma para despedirse personalmente de cada uno. Estas fueron las palabras que pronunció. Venerados y queridos hermanos: Con gran alegría os recibo y expreso a cada uno mi más cordial saludo. Doy las gracias al cardenal Angelo Sodano, quien, como siempre, ha sabido hacerse intérprete de los sentimientos de todo el Colegio: Cor ad cor loquitur. Gracias eminencia de corazón. Y desearía decir —retomo la referencia a la experiencia de los discípulos de Emaús— que también para mí ha sido una alegría caminar con vosotros en estos años, en la luz de la presencia del Señor resucitado. Como dije ayer ante los miles de fieles que llenaban la plaza de San Pedro, vuestra cercanía y vuestro consejo me han sido de gran ayuda en mi ministerio. En estos ocho años hemos vivido con fe momentos bellísimos de luz radiante en el camino de la Iglesia, junto a momentos en los que alguna nube se ha adensado en el cielo. Hemos buscado servir a Cristo y a su Iglesia con amor profundo y total, que es el alma de nuestro ministerio. Hemos dado esperanza, la que nos viene de Cristo, que solo puede iluminar el camino. Juntos podemos dar gracias al Señor, que nos ha hecho crecer en la comunión, y juntos rogarle que os ayude a seguir creciendo en esta unidad profunda, de forma que el Colegio de los cardenales sea como una orquesta donde las diversidades —expresión de la Iglesia universal— cooperen siempre a la armonía superior y concorde. Desearía dejaros un pensamiento sencillo, que me importa mucho: un pensamiento sobre la Iglesia, sobre su misterio, que constituye para todos nosotros —po- demos decir— la razón y la pasión de la vida. Me dejo ayudar por una expresión de Romano Guardini, escrita precisamente en el año en que los padres del Concilio Vaticano II aprobaban la Constitución Lumen gentium, en su último libro, con una dedicatoria personal también para mí; por ello las palabras de este li- El saludo del cardenal decano Como los discípulos de Emaús Publicamos el saludo que dirigió al Papa el cardenal Angelo Sodano durante el encuentro en la Sala Clementina. Santidad: Con gran ansiedad los padres cardenales presentes en Roma se estrechan en torno a usted para manifestar una vez más su profundo afecto y para expresarle su viva gratitud por su testimonio de abnegado servicio apostólico por el bien de la Iglesia de Cristo y de toda la humanidad. El sábado pasado, al término de los ejercicios espirituales en el Vaticano, usted quiso dar las gracias a los cardenales y a sus colaboradores de la Curia romana recurriendo a estas conmovedoras palabras: «Amigos míos —así nos llamó—, desearía daros las gracias a todos vosotros, y no sólo por esta semana, sino por estos ocho años en los que habéis llevado conmigo, con gran competencia, afecto, amor, fe, el peso del ministerio petrino». Palabras análogas y conmovedoras dirigió ayer en la plaza de San Pedro al pueblo presente, igual que a sus colaboradores. Amado y venerado sucesor de Pedro: somos nosotros quienes debemos dar las gracias a usted por el ejemplo que nos ha dado en estos ocho años de pontificado. El 19 de abril de 2005 usted se introducía en una larga cadena de sucesores del apóstol Pedro y hoy, 28 de febrero de 2013, se dispone a dejarnos, en espera de que el timón de la barca de Pedro pase a otras manos. De tal forma continuará aquella sucesión apostólica que el Señor prometió a su santa Iglesia, hasta que se oiga en la tierra la voz del ángel del Apocalipsis que dirá: «Tempus non erit amplius... consummabitur mysterium Dei» (Ap 10, 6-7), «se ha terminado el tiempo... se ha cumplido el misterio de Dios». Concluirá entonces la historia de la Iglesia, junto a la historia del mundo, con el advenimiento de cielos nuevos y tierra nueva. Padre Santo: con profundo amor hemos procurado acompañarle en su camino, reviviendo la experiencia de los discípulos de Emaús, quienes, tras haber caminado con Jesús un buen trecho de camino, se dijeron el uno al otro: «¿No ardía nuestro corazón mientras nos hablaba por el camino?» (Lc 24, 32). Sí, Padre Santo: sepa que ardía también nuestro corazón cuando caminábamos con usted en estos últimos años. Hoy deseamos expresarle una vez más todo nuestro agradecimiento. Le repetimos a una voz una expresión típica de su querida tierra natal: Vergelt’s Gott, ¡que Dios le recompense! bro son particularmente queridas para mí. Dice Guardini: la Iglesia «no es una institución inventada y construida en teoría..., sino una realidad viva... Vive a lo largo del tiempo, en devenir, como todo ser vivo, transformándose... Sin embargo su naturaleza sigue siendo siempre la misma, y su corazón es Cristo». Ha sido nuestra experiencia ayer, me parece, en la plaza: ver que la Iglesia es un cuerpo vivo, animado por el Espíritu Santo y vive realmente por la fuerza de Dios. Ella está en el mundo, pero no es del mundo: es de Dios, de Cristo, del Espíritu. Lo hemos visto ayer. Por esta es verdad y elocuente también la otra famosa expresión de Guardini: «La Iglesia se despierta en las almas». La Iglesia vive, crece y se despierta en las almas, que —como la Virgen María— acogen la Palabra de Dios y la conciben por obra del Espíritu Santo; ofrecen a Dios la propia carne y, precisamente en su pobreza y humildad, se hacen capaces de generar a Cristo hoy en el mundo. A través de la Iglesia, el Misterio de la Encarnación permanece presente para siempre. Cristo sigue caminando a través de los tiempos y de todos los lugares. Permanezcamos unidos, queridos hermanos, en este Misterio: en la oración, especialmente en la Eucaristía cotidiana, y sirvamos así a la Iglesia y a toda la humanidad. Esta es nuestra alegría, que nadie nos puede arrebatar. Antes de saludaros personalmente, deseo deciros que continuaré estando cerca de vosotros con la oración, especialmente en los próximos días, a fin de que seáis plenamente dóciles a la acción del Espíritu Santo en la elección del nuevo Papa. Que el Señor os muestre aquello que quiere Él. Y entre vosotros, entre el Colegio Cardenalicio, está también el futuro Papa, a quien ya hoy prometo mi incondicional reverencia y obediencia. Por esto, con afecto y reconocimiento, os imparto de corazón la bendición apostólica. página 16 L’OSSERVATORE ROMANO domingo 3 de marzo de 2013, número 9 De modo nuevo VIENE DE LA PÁGINA 1 Vamos adelante con el Señor por el bien de la Iglesia y del mundo Imágenes del traslado del Papa desde el Vaticano (el helicóptero sobrevuela la cúpula de la basílica de San Pedro) a Castelgandolfo; el saludo a los fieles a su llegada; y el cierre del palacio apostólico y retirada de la Guardia Suiza a las 20 horas del 28 de febrero, inicio de la Sede Vacante Del cónclave de hace ocho años habló Benedicto XVI también en una plaza de San Pedro repleta e iluminada por un sol tardoinvernal: «Señor, ¿por qué me pides esto y qué me pides?», era la pregunta que se agitaba en aquel momento en su corazón y que encontró una primera respuesta en los labios del propio Papa, cuando dijo durante la misa inaugural del pontificado que su programa era escuchar cada día, junto a la Iglesia, la voluntad del Señor. Y durante ocho años Cristo ha guiado al Pontífice, como repitió, añadiendo que nunca se había sentido solo «al llevar la alegría y el peso» de un papel único en el mundo. Y esto porque «el Papa pertenece a todos y muchísimas personas se sienten muy cerca de él». Cercanía que, también visiblemente, Benedicto XVI ha experimentado desde el 11 de febrero, cuando anunció su renuncia en plena libertad y públicamente, pero que cada día ha advertido en los ocho años de un pontificado que la historia reconocerá en su grandeza. Una grandeza no buscada, pero que se ha impuesto, y no sólo en una dimensión espiritual. A Peter Seewald el Pontífice, elegido a una edad muy avanzada, dijo que en los siglos a los grandes Papas se habían alternado pequeños Papas, especificando con sencillez y sin ninguna afectación que se sentía un pequeño Papa, instrumento en las manos de Dios. Pero precisamente por esto no sólo los católicos, ni sólo los cristianos, ni únicamente los creyentes, sino en gran número mujeres y hombres de todo el mundo han comprendido cada vez más que tenían delante a un Papa entre los más grandes, un gran hombre de nuestro tiempo. Y precisamente la renuncia, acto serio y nuevo que algunos no entienden, ha mostrado a todos la valentía apacible pero firmísima y la serenidad gozosa de este hombre: ni una sola vez Benedicto XVI ha retrocedido ante los lobos y jamás se ha dejado aplastar por la turbación frente a suciedad y escándalos, que en cambio ha contrarrestado con determinación. Sostenido por muchos colaboradores, como varias veces ha repetido, pero sobre todo por la oración que por él se elevaba en la Iglesia, como por el apóstol Pedro. Y tal vez la serenidad gozosa —que viene de la confianza en Dios y se trasluce tan visiblemente en su rostro— es el legado más duradero de este Papa, que concluye en la paz y de un modo nuevo un pontificado inolvidable. Colegio cardenalicio El 1 de marzo de 2013, primer día de la Sede Vacante, el cardenal Angelo Sodano, decano del Colegio cardenalicio, ha procedido a convocar a los cardenales a la primera Congregación general, según prevé la Constitución apostólica Universi dominici gregis. Esta primera Congregación tendrá lugar el lunes 4 de marzo a las 9.30 en el Aula Pablo VI, Sala del Sínodo de los obispos. Se prevé asimismo una segunda Congregación general por la tarde, a las 17 horas, en el mismo lugar.