Archivos De Macroeconomía - Dnp Departamento Nacional De

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República de Colombia Departamento Nacional de Planeación Unidad de Análisis Macroeconómico ARCHIVOS DE MACROECONOMÍA Determinantes del ahorro de los hogares. Explicación de su caída en los noventa Alberto CASTAÑEDA C. Gabriel PIRAQUIVE G. Documento 061 26 de Julio de 1997 La serie ARCHIVOS DE MACROECONOMIA es un medio de divulgación de la Unidad de Análisis Macroeconómico, no es un órgano oficial del Departamento Nacional de Planeación. Sus documentos son de carácter provisional, de responsabilidad exclusiva de sus autores y sus contenidos no comprometen a la institución. DETERMINANTES DEL AHORRO DE LOS HOGARES EXPLICACION DE SU CAlDA EN LOS NOVENTA1 Alberto Castañeda C. Gabriel Piraquive G.* Introducción La primera parte de la década de los noventa en Colombia está marcada por un descenso en su tasa de ahorro. Esta caída del ahorro fue determinada, en lo fundamental, por el comportamiento de los agentes privados cuyo ahorro pasó de representar el 14 por ciento del PIB en el quinquenio 1985-89 al 10.4 por ciento durante el período 1990-94. Este descenso del ahorro coincide con el programa de reformas para la modernización de la economía colombiana iniciado a finales de los años ochenta, orientado a eliminar las principales rigideces que causaban el lento crecimiento de la economía. La apertura comercial, la reforma al sistema y las reformas al financiero, las reformas cambiarias, al régimen tributario, mercado laboral, constituyeron los ejes de este proceso. El presente estudio se orienta a explicar los posibles determinantes de la caída del ahorro de las familias durante el período de apertura y reformas económicas. En la primera parte del estudio se contrastan las hipótesis de ciclo vital y de ingreso permanente en los hogares colombianos con base en la encuesta de ingresos y gastos de 1984. En particular, se busca dimensionar la existencia de restriccciones de liquidez en los hogares. La segunda parte reseña la evolución del ahorro de las familias durante la primera mitad de los noventa, presentando las diferentes explicaciones dadas a su descenso. Allí, se analizan los determinantes macroeconómicos de la tasa de ahorro de las familias, y se realizan algunas estimaciones sobre su comportamiento en el corto y largo plazo, destacando los principales efectos que sobre el ahorro de estos agentes tienen los choques exógenos de algunas variables específicas. 1 Este trabajo fue financiado por el el Banco Interamericano - BID dentro del convenio de esta entidad y el Deparatamento Nacional de Planeación. Los autores agradecen los comentarios y sugerencias de Fabio Sánchez, Jefe de la Unidad de Análisis Macroeconómico del DNP y de Carlos Oliva del BID. * Los autores son respectivamente consultor y asesor del Departamento Nacional de Planeación. 1 l. Aspectos Teóricos del Ahorro de los Hogares Los estudios sobre los determinantes del ahorro son una excelente ilustración de la secuencia del desarrollo del conocimiento en la teoría económica. Desde el primer intento formal de desarrollar un modelo de consumo por Keynes (1936) hasta nuestros días, las explicaciones teóricas y las contrastaciones empíricas sobre la función ahorro se han ampliado progresivamente y provienen desde todos los ángulos del pensamiento económico. En la mayor parte de las formulaciones sobre el ahorro, la renta es la variable explicativa fundamental. El presente capítulo expone los desarrollos teóricos centrales y la evidencia empírica sobre la respuesta del ahorro a esta variable. El punto de partida son los planteamientos de Keynes sobre la función consumo y la renta absoluta, concentrándonos posteriormente, en razón de los objetivos de este estudio, en los fundamentos de las hipótesis de ciclo vital y de la Renta Permanente, fundamentadas ambas en la teoría de la elección intertemporal, que formaliza las disyuntivas entre el consumo presente y futuro. Hipótesis de la Renta Absoluta La literatura económica reconoce a Keynes (1936) el primer intento de formalización de la función consumo (ahorro). En la Teoría General se corriente establece una relación estable entre el consumo y el ingreso disponible la cual cumple tres hipótesis básicas: a. la propensión marginal al keynes consumo es positiva y menor que la unidad, supuesto al que denominará como "ley sicológica fundamental": b. la propensión marginal al consumo es menor que la propensión media. Así, a medida que la renta aumenta el consumo crece pero menos que proporcionalmente, ya que una vez cubierta las necesidades primarias se tendrá un motivo más fuerte para acumular, y c. la propensión marginal al consumo es decreciente a medida que aumenta el nivel de renta. Haciendo distinción entre la propensión a consumir a corto y a largo plazo, Keynes afirma que los ajustes de los gastos a las variaciones en los ingresos se hace imperfectamente en períodos cortos. Esta propensión a consumir puede variar a lo largo de un ciclo, ya que una renta creciente irá con frecuencia acompañada de un ahorro mayor y una renta en descenso con un ahorro menor2 . Aunque los primeros estudios empíricos corroboraron los planteamientos de keynes, con el paso del tiempo surgieron diversas contradicciones. La principal, 2 Raymond y Uriel (1987) 2 anotada por Kuznets (1946), quien utilizando datos medios de períodos largos de entre 10 Y treinta años, encontró que existía poca variación en la proporción entre el consumo y la renta y, en concreto, que la propensión media no tendía a decrecer a medida que aumentaba la renta disponible. Hipótesis de la Renta Relativa. Posteriormente, Brady y Friedman (1947) demostraron a partir de encuestas de presupuestos familiares que la función consumo se desplazaba hacía arriba con el tiempo, de tal manera que lo que explicaba el ahorro no era la renta absoluta de la familia sino más bien su renta relativa con respecto a la media 3 . Los estudios de Duesenberry (1949), también van a sugerir que la función consumo en el largo plazo es constante e independiente del nivel absoluto del ingreso. Su argumentación en contra de los supuestos de que el consumo individual era independiente del efectuado por los demás consumidores y que este era independiente de los valores anteriormente alcanzados, constituyeron una crítica abierta a la función de consumo keynesiana. En el corto plazo dicha función va a depender de la relación entre el ingreso corriente y el máximo ingreso alcanzado previamente, en razón de su hipótesis de la no reversabilidad de las relaciones de demanda, o el intento de los consumidores de mantener en los períodos de crísis un nivel de consumo relacionado con el nivel máximo de renta obtenido anteriormente. Teorías de la Renta de Largo Plazo El planteamiento central de estas teorías reside en que el consumo en un período particular depende de las expectativas sobre el ingreso para toda la vida y no del ingreso del período en curso. El consumo, por tanto, se mantiene relativamente estable ante las fluctuaciones de la renta corriente. Este supuesto es común en las teorias de ciclo vital (HCV) y de la renta permanente (HRP), y contenidos en los trabajos de Modigliani (1954,1979) Y Friedman (1957). Las teorías del ciclo vital y de renta permanente al relacionar el consumo de los hogares con el ingreso futuro más que con el corriente, exigen para su cumplimiento que los mercados de capitales sean perfectos. Si algunos agentes tienen restricciones de liquidez, derivadas de racionamientos en el crédito, su consumo responderá más al ingreso corriente que al futuro, es decir seguirán un 3 Modigliani (1985) 3 comportamiento similar al planteado por Keynes 4 . Las teorías de ciclo vital y de renta permanente coinciden en lo fundamental, aunque la primera desarrolla con más atención el impacto de la riqueza y de otras variables demógráficas en la función de consumo, y la HRP se concentra en la mejor manera de predecir la renta de largo plazo. La Hipótesis del Ciclo Vital (HCV). Esta teoría se encuentra asociada a los trabajos de Modigliani y Brumberg (1954), Brumberg (1966), Ando y Modigliani (1963) y Modigliani (1985). Su planteamiento central reside en que el individuo realiza un plan de consumo para toda la vida y que el ahorro se debe fundamentalmente al deseo de las personas de garantizar su consumo en la vejez. De acuerdo con el ciclo vitalicio propuesto por Ando y Modigliani, los ingresos laborales de un individuo tienen un perfil en el tiempo en que las retribuciones máximas se alcanzan en la edad adulta o mitad de la vida, cuando la productividad es alta, y son menores en las etapas extremas de la vida, donde la productividad es escasa. Estas últimas, a su vez, corresponden a los dos períodos en la vida de un individuo en que no puede ahorrar: los primeros años (prestatario neto) y los últimos años (desahorra). A diferencia de la edad adulta, donde los individuos realizan el mayor ahorro para pagar las deudas anteriores y para financiar su jubilación. Aun cuando el perfil de la renta a lo, largo de la vida sea desigual el individuo desea mantener un perfil uninforme del consumo, por lo que la HCV introduce explícitamente la riqueza como uno de los determinantes en las decisiones de consumo. Evidencia Critica Sobre la HCV. De acuerdo con lo expuesto por la HCV, al final de la vida se han agotado los activos4 . Este es el punto mas controvertido de esta teoria, puesto que las 4 De acuerdo con Hayashi (1985) aproximadamente el 20% de la población de Estados Unidos sufre de restricciones de liquidez. En otro estudio (1985), Hayashi encuentra que la proporción de familias con restricciones de liquidez es mayor entre las familias jovenes que entre aquellas de edad más avanzada. Hall y Mishkin (1982) utilizando datos de panel estiman que el 20% de las familias americanas sufren de restricciones de liquidez. 4 Una persona que se comporte de acuerdo a lo planteado por la teoría del ciclo vital gastará todos sus activos a lo largo de la vida. Para que eso se cumpla, Modigliani plantea que la propensión marginal a consumir la riqueza debe ser mayor que la tasa anual por intereses. 4 personas de mayor edad no parecen desahorrar mucho y por el contrario mantienen intactos sus activos para traspasarlos a sus herederos. Numerosa literatura, basada en estudios de corte transversal, o indirectamente, a través de estimaciones de la ecuación de Euler, reporta evidencia en contra del desahorro después de la edad de retiro: Mirer (1979), Danzinger et al (1982), y Hall y Mishkin (1982), Fenstein-McFadden (1989), Venti-Wise (1990),y Ando y Kennikel (1986), entre otros. Contrariando lo expuesto por la HCV, Kotlikoff y Summers (1981), plantean que la mayor parte del ahorro se hace para dejar una herencia más que para financiar el consumo en la vejez. Soportan su argumento con cálculos que muestran que gran parte de la riqueza en los Estados Unidos ( más de la mitad) tiene origen en las herencias más que en el ahorro generado durante el ciclo de vida. Resultados similares sobre el ahorro de los ancianos en Japón e Italia fueron obtenidos por Hayashi, Ando y Ferris (1988). Acerca de la razón de las herencias existen numerosas posiciones. Para Barro (1974), la gente deja legados por razones altruístas. Con ello la restricción presupuestaria de una familia se extendería no solo al ingreso de la generación actual sino que cobijaría el ingreso durante la vida de la generación futura. 5 Summer et al (1985), argumentan en contra del altruísmo de Barro, que con las herencias los padres tratan de condicionar el comportamiento (ayuda) de los hijos respecto a ellos. De otro lado, la incertidumbre respecto a la duración de la vida, es la razón expuesta por Abel (1985). Ella reflejaría la aversión al riesgo y el coste de quedarse sin riqueza al final de la vida. Y una justificación última para el no agotamiento de los activos al final de la vida, señala que el sentido del ahorro no está en garantizar el consumo futuro, sino en otorgar prestigio y poder en la sociedad. Restricciones financieras al consumo de los jubilados más viejos surgen para explicar su excesivo ahorro. Este puede obedecer a la imperfección de los mercados financieros que dificultan el consumo de su patrimonio, en muchos casos la vivienda que habitan, anclándolos al ahorro por razones de precaución 6 . Hipótesis de la Renta Permanente En su teoría de Renta Permanente Friedman (1957), plantea que las las familias tienden a suavizar su consumo y prefieren una trayectoria estable de este, el cual dependerá del ingreso promedio esperado en un horizonte de largo plazo. 5 6 Este planteamiento es la base de la Equivalencia Ricardiana. Oliver (1995) 5 Friedman establece una distinción entre la renta actualmente recibida o renta observada y la renta en que el consumidor basa su conducta, denominada renta permanente. Esta última debe reflejar el efecto del valor de su capital o riqueza: la riqueza no humana que posee, los atributos personales de Jos perceptores de ingresos, tales como su instrucción, capacidad, personalidad, los atributos de la actividad económica donde realiza su labor, etc. El ingreso total en un período dado está formado por el ingreso permanente que el individuo se asigna a si mismo más un componente transitorio del ingreso, siendo este tan solo una fluctuación aleatoria alrededor del ingreso permanente. Análogamente, el consumo total en cualquier período está constituido por el consumo permanente más un componente transitorio, que representa una desviación del nivel permanente o normal del consumo. El supuesto central de la HIP, es que un aumento repentino del ingreso debido a una fluctuación transitoria no afectará inmediatamente el consumo del individuo. Friedman argumenta que el consumidor desea emparejar su corriente actual de ingresos en un patrón de consumo más o menos uninforme, lo cual provee un nivel de consumo permanente proporcional al ingreso permanente. El planteamiento acerca de que la tasa de ahorro crece cuando aumenta la renta transitoria, pero no lo hace cuando aumenta la renta permanente, resolvió el dilema planteado por Kuznets, quien percibió que en los Estados Unidos la tasa de ahorro no había subido en un siglo a pesar de los incrementos en la renta. Los hallazgos de Kuznets rebatían la evidencia de que la propensión marginal al consumo era menor que 1, Y que al aumentar el ingreso de las familias ricas, sus tasas de ahorro crecían. Evidencia Crítica sobre la HRP Las contrastaciones empíricas de la Hipótesis de Renta Permanente encuentran dificultad en el hecho de que ella no es una variable observada. Por ello, el desglose del ingreso en sus partes transitorias y permanentes, al igual que el referido al horizonte temporal para definir el ingreso permanente, son arbitrarios. Los argumentos de la HIP conducen a que la propensión marginal al consumo de la renta corriente sea menor que la propensión de la renta permanente. Esto ha sido corroborado empíricamente, estimándose que la pmc para la renta corriente se encuentra entre 0.2 y 0.3 , en tanto que para la renta permanente se encuentra cerca a 17 . Bodquin (1959), con una encuesta de presupuestos de 1400 familias que recibían un ingreso típicamente transitorio ( un seguro a veteranos de guerra) , 7 Sachs y Larrain (1994) 6 refuta la hipótesis de Friedman de que el coeficiente de correlación entre la renta transitoria y el consumo transitorio sea igual a cero. En forma contraria, Reid ( 1962) aporta evidencia en favor de la hipótesis de la renta permanente, basándose en datos de herencias, indemnizaciones y otros ingresos transitorios: la propensión marginal a consumir la renta permanente era mayor que la la propensión marginal a consumir la renta transitoria 8 . La validez empírica de la HRP en los países en vía de desarrollo es contradictoria. La elasticidad del consumo respecto al ingreso permanente es menor que 1 y el ingreso transitorio no se ahorra en su totalidad. Sin embargo, la mayoría de los estudios demuestran que la propensión marginal al ahorro del ingreso transitorio es mayor que la del ingreso permanente 9 . Otros determinantes del Ahorro de los Hogares La relación entre ahorro y tasa de interés, planteada por los clásicos, con sus efecto renta (negativo) y sustitución (positivo) ha encontrado evidencia empírica contradictoria. De una parte, la elevación del tipo de interés aumenta el valor esperado de las rentas futuras, lo que permite mantener el consumo futuro con un nivel de ahorro menor. De otra, con un tipo de interés más elevado, se dará una sustitución entre el consumo presente y el futuro, con lo que el ahorro aumenta. El resultado global sobre el ahorro de la economía dependerá de que efecto domine. Igualmente complejo es el efecto de los impuestos sobre al ahorro ya que, además de los anteriores efectos renta y sustitución, hay que considerar si los impuestos son transitorios o permanentes, y si ellos se realizan en presencia o ausencia de restricciones de liquidez. Un aumento permanente de los gravámenes sobre la renta reduce la renta permanente y los niveles de ahorro, pero si es transitoria, la deja prácticamente invariada. Un aumento de impuestos, bajo restricciones de liquidez, supondría una caída de la renta que llevaría a reducir el consumo, aunque los impuestos sean transitorios. Los efectos sobre el ahorro también deben considerar si los impuestos causan una redistribución de la renta inter o intrageneracional. La seguridad social también ha sido considerada como un factor determinante en las decisiones de ahorro de los individuos sin que haya evidencia empírica concluyente sobre el tema. La previsión social al reducir la necesidad que tienen los trabajadores de ahorrar para su jubilación pueden llevar a que el ahorro privado descienda 10. Otro planteamiento señala que este efecto negativo Raymond y Uriel (1987) Sachs y Larrain (1994) 10 Feldstein (1974) 8 9 7 puede ser contrarrestado si las familias reconocen que lo beneficios de la previsión social se pagarán con los impuestos de los hijos, lo que los inducirá aumentar el ahorro con el fin de dejar un legado a estos para que paguen las contribuciones a la seguridad social. Con respecto a la inflación su efecto es también ambiguo. La teoría económica tradicional predice que su aumento reduce el ahorro, ya que se incrementa el consumo ante la expectativa de una alza en los precios de los bienes duraderos. Una explicación contraria, plantea una relación positiva entre el ahorro y el aumento de la tasa de crecimiento de los precios, a partir de la incertidumbre económica que genera esta última. Incertidumbre sobre los precios relativos, sobre el ajuste de las rentas laborales y las pensiones, sobre las tasa de interés, sobre los impuestos, que generarán un mayor ahorro por motivo precaución. Otros planteamientos relacionan de manera fundamental los niveles de ahorro de un país con algunas características microeconómicas de la población y de su participación laboral: la edad de la población, el tamaño del hogar, la oferta laboral femenina, y el nivel educativo, entre otros. Un cambio en la estructura de edades de la población influye en la forma de colocar el ahorro: en bienes duraderos y vivienda los jóvenes, en activos financieros los mayores. El número de hijos también influye en las decisiones de ahorro de las familias. El aumento en el número de hijos debe reducir la renta per cápita y con ello el ahorro. Pero, si se planea dejar herencias a los hijos, el mayor número de estos lleva a aumentar el ahorro. También, es probable que los padres esperen ser atendidos en el futuro por estos, cuando sean mayores, reduciendo el nivel de ahorro agregado al crecer el tamaño de la familia. Así, cabe esperar que el ahorro descienda con el aumento del número de hijos, salvo que el motivo herencias pese decisivamente en las decisiones de los padres. Cuando la entrada a la fuerza laboral se retraza por razones legales, económicas o sociales, aumenta la tasa de dependencia con los efectos sobre el ahorro anotados anteriormente. Igualmente, el aumento de la participación de la mujer en el mercado de trabajo, probablemente reduzca el nivel de ahorro al reducir la necesidad del mismo por motivo precaución, además que el mayor ingreso facilita el acceso al crédito y con ello, un mayor consumo. 11. EL AHORRO EN LOS HOGARES COLOMBIANOS En el presente capítulo se presentan los aspectos metodológicos centrales de la encuesta de ingresos y gastos de 1984, en particular de los alcances y 8 limitaciones para estudiar el ahorro en Colombia. Posteriormente, se describe el tratamiento dado al ahorro en este estudio - la parte del ingreso no consumido-, una vez realizado el ajuste de los rubros de ingresos y gastos de la encuesta a nivel de los valores agregados reportados por las cuentas nacionales. Finalmente, se contrasta la hipótesis de ciclo vital para los hogares colombianos. La Encuesta de Ingresos y Gastos 1984-85 La Encuesta de Ingresos y Gastos de 1984-85, base informativa para este estudio sobre el ahorro, fue realizada por el Departamento Nacional de Estadística -DANE- en las ciudades colombianas mayores de 100 mil habitantes, quince en total con sus correspondientes áreas metropolitanas. 11 En la encuesta el ingreso del hogar es la suma de todos los ingresos mensualisados de los perceptores del hogar (excluyendo los empleados domésticos y los pensionistas), más la autovaloración del servicio de la vivienda propia, el autoconsumo y el autosuministro. El otro componente importante de la Encuesta es el relacionado con los gastos del hogar. Esta información cobija todos los desembolsos realizados por los hogares en la adquisición de bienes y servicios, más las transferencias del Gobierno y de las instituciones sin ánimo de lucro. Para su cuantificación se consideran los gastos relacionados con el consumo final, la autovaloración del servicio de la vivienda ocupada por los propietarios, los gastos de inversión en bienes raíces y los financieros, las transferencias y otros gastos. Definición del Ahorro a Partir de la Encuesta de Ingresos y Gastos. A nivel macroeconómico, el ahorro es la parte del ingreso no consumido. El cumplimiento de esta definición a partir de la encuesta de ingresos y gastos no es posible de una manera directa, pues la diferencia entre esos grandes rubros sería negativa para la mayoría de los hogares 12, como muestra el cuadro 1, dada la frecuente infravaloración en este tipo de encuestas de los ingresos y, en menor proporción, de los gastos. Estos resultados no son sorprendentes por cuanto este tipo de encuestas no estan dirigidas a medir el ahorro de los hogares, sino la estructura de sus gastos. 11 DANE (1989). 12 Para el conjunto de los hogares el Gasto total en la Encuesta supera en un 11.6% al Ingreso. 9 Cuadro 1 INGRESOS Y GASTOS MENSUALES 15 CIUDADES Y SUS AREAS METROPOLITANAS Total Hogares (miles) 2.332.715 Total Ingresos (miles) 177.506.497 Total Gastos Diferencia (miles) (miles) 198.101.017 -20.594.520 Fuente: Encuesta de Ingresos y Gastos de 1984 . Una alternativa para superar el subregistro de los ingresos y gastos de la encuesta, y por ende el ahorro negativo en la mayoría de las familias, es la de ajustar esos valores micro a los niveles macro de la contabilidad nacional del año 1984. Para este ajuste, en primer lugar, se procede a compatibilizar las definiciones de los rubros de ingresos y gastos de la encuesta con los de las cuentas nacionales. Aquí, en particular, se restringe el consumo final de los hogares a nivel de los residentes. Luego, se estima la participación de cada uno de los rubros agregados de la encuesta en su respectivo valor de la contabilidad nacional. De allí surgen los factores de corrección que se aplicarán de manera proporcional 13 para hacer coincidentes los valores agregados de la encuesta con los que reportan las cuentas nacionales. Una vez aplicados los factores de corrección a la encuesta de ingresos y gastos, y compatibilizados sus agregados al nivel de las cuentas nacionales del año 1984, es posible estudiar el ahorro como la parte del ingreso no consumido. Para obtener el consumo final de los hogares se resta del gasto total mensual los gastos en bienes durables y los de inversión en bienes raíces y financieros. La Propensión Media al Ahorro El valor medio de la propensión al ahorro para el conjunto de los hogares colombianos es del 10 por ciento de la renta familiar disponible,- similar a la reportada por la contabilidad nacional. Este valor - que está dado por la razón del ahorro medio total sobre el ingreso mediototal, E(S)/E(Yd) -, reporta para las cuatro grandes ciudades una propensión media superior al promedio nacional e inferior a este para el resto de ciudades. 13 Esta hipótesis de proporcionalidad supone que el grado de ocultación es el mismo para distintos niveles de renta y de consumo. 10 Cuadro 2 PROPENSION DEL AHORRO PAIS Propensión Media al Ahorro Total Nacional 0.1 Cuatro Grandes Ciudades 0.13 Otras Ciudades 0.09 El gráfico 1 confirma la suposlclon de keynes, corroborada en numerosos estudios de corte transversal, que cuando el ingreso aumenta el consumo no sube proporcionalmente - es decir, que la propensión marginal al consumo es menor que la propensión media-.Bajo esta consideración, las familias colombianas tienden a gastar un porcentaje cada vez menor de sus ingresos, o se inclinan ahorrar un porcentaje cada vez mayor del ingreso. En el gráfico 1, la renta de los 26.867 hogares se ha clasificado en tramos que varían cada 10 mil pesos de renta del año 1984. Allí puede apreciarse que los jefe de hogar ubicados en el primer tramo de renta « 1O mil pesos) tienen un consumo medio de 11.458 pesos y un ingreso medio de 7.165 pesos, por lo que arrojan un ahorro negativo y una propensión media al ahorro del -0.6. Este exceso de consumo debe ser financiado mediante el endeudamiento, lo cual tan solo resulta posible dado que la mayor parte de estas rentas son transitoriamente bajas, es decir, son rentas que ese año se encuentran por debajo de su corriente esperada de ingresos. En el otro extremo, se encuentran las rentas superiores a 280 mil pesos, caracterizadas por tener una renta disponible media de 440 mil pesos, un consumo final medio de 328 mil pesos, y una propensión media al ahorro del 25 por ciento de la renta disponible. Este alto valor del ahorro refleja rentas que en parte son transitoriamente altas, es decir que ese año se encuentran por encima de su renta permanente. 11 Gráfic o 1 PROPENSION MEDIA AL AHORRO POR TRAMOS DE REN TA ft2 ~ -. ~ / 1 J -0.2 I -0.4 .0..7 I 10 40 7b HHJ no 1~ o RfNTA tAlLES DE PESOS [)E 1984 210 t1I' 380 Esa relación entre la renta y el ahorro de los hogares se encue ntra asociada al número de trabajadores en el mercado laboral. El desahorro transitorio de algunas familias puede ser explicado, además de los bajos ingresos, por la presencia de un único perceptor de ingresos en el hogar, asociándose las posibilidades de ahorro de las familias urbanas con las condiciones de demanda del mercado laboral. Aunque este efecto no es muy claro. Si el desempleo es de carácter transitorio, se observará como una desviación pasaje ra de la renta corriente respecto a la renta permanente y el ahorro se reducirá. Por el contrario, si es de naturaleza duradera, dará a las rentas esperadas un carácter incierto, reduciendo el consumo (motivo incertidumbre). Cuadro 3 PROPENSION MEDIA AL AHORRO POR PERCEPTOR Propen sión Media Un perceptor O Más de un perceptor 0.09 La prope nsión media por edade s. De acuerdo con el ciclo vitalicio propuesto por Ando y Modigliani, el ahorro de 12 un individuo tienen un perfil en el tiempo en que los valores maxlmos prestatario neto- se alcanzan en la edad adulta o mitad de la vida, cuando la productividad es alta, y son menores -desahorra- en las etapas extremas de la vida, cuando la productividad es escasa. Así, en la edad adulta los individuos realizan el mayor ahorro para pagar las deudas anteriores y para financiar su jubilación. El gráfico 2 permite relacionar las propensiones medias al ahorro de los jefe de hogar con la posición que estos ocupan en el ciclo vital. Las edades de los jefes de familia fueron agrupadas en seis intervalos. La propensión media al ahorro fue calculada como el cociente entre el ahorro agregado y la renta agregada del conjunto de individuos pertenecientes a un rango de edad. Puede observarse alli, contrariamente a lo predicho por la teoría del ciclo vital,13 que estas propensiones antes que declinar con la edad, concentran sus valores más altos en los rangos superiores. Cuadro 5 PROPENSIONES DE AHORRO POR TRAMOS DE EDAD Grupos de Edad Grandes Ciudades Otras Ciudades Menores de 40 años 0.05 0.02 40 - 60 años 0.08 0.05 Mayores de 60 años 0.13 0.09 Este comportamiento del ahorro respecto a la edad se mantiene presente al considerar diferentes carácteristicas de los hogares. Tanto en las grandes y pequeñas ciudades el ahorro se concentra en los jefes de familia de mayor edad, destácandose que las mayores propensiones son alcanzadas en las ciudades grandes. Igual comportamiento se observa al separar los hogares con jefes asalariados y aquellos con trabajadores independientes. 13 Y contrario a lo expuesto por Ramírez (1992) con esta misma encuesta, quien encontraba las mayores tasas promedio de ahorro (13 por ciento) en los hogares con jefes de familia entre los 30 y 35 años de edad. Luego esta tasa bajaba (hasta el 8 por ciento) para los hogares con jefes mayores de 64 años, llevándole argumentar el cumplimiento de la hipótesis de ciclo de vida en el país. 13 Gráfico 2 PROPENSION MEDIA AL AHORRO POR TRAMOS DE EDAD 0.2 0.16 0.12 0.08 0.04- o ~ < JO ~ ¡..- 31 - 39 V / 40 - 49 ~ 50 - 59 ~ 60 - 65 '> 56 EDAD JEFE OEL HOGAR Cuadro 6 PROPENSION AL AHORRO POR OCUPACION Grupos de Edad Asalariados Independientes Menores de 40 años 0.03 0.04 40 - 60 años 0.05 0.07 Mayores de 60 años 0.11 0.11 Evidencia en contra de los postulados del ciclo vital se encuentra al relacionar la riqueza con la edad del jefe del hogar. En las familias colombianas no se cumple la tradicional triangularización de los activos, en que se acumula en las etapas de alta productividad con el fin de financiar el retiro. Al observar la riqueza física y financiera 14 acumulada por grupos de edad, puede apreciarse que los activos promedio de las personas mayores de 60 años Uubilados) son superiores a los del resto de la población, y estos se incrementan al considerar a los jefes de familia más viejos (mayores de 70 años). 14 La forma de cálculo de la riqueza física y financiera, a partir de la encuesta de ingresos y gastos, se encuentra en las páginas 15 y 16 de este estudio. 14 Cuadro 7 RIQUEZA Y EDAD DEL JEFE DEL HOGAR Grupos de Edad Riqueza Total Menores de 65 años 2.811.529 Mayores de 65 años 3.046.820 Mayores de 75 años Pesos de 1984 3.450.793 Esta concentración del ahorro colombiano en los jefes de familia de mayor edad 15 puede ser explicada por diversos factores, que contrarían parcialmente los postulados de partida de la hipótesis de ciclo vital, ya que hay que interpretar este modelo teórico como una predicción bajo la hipótesis ceteris paribus. Hay que establecer diferencias con lo expuesto por el modelo puro y unas características propias de los hogares colombianos. En primer lugar, la mayor concentración de los activos en el último tramo de edad puede asociarse, o bien al motivo herencias, o bien a un motivo precaución, dado que en Colombia existen restricciones financieras al consumo de los jubilados ante la ausencia de mercados financieros que posibiliten el consumo de su patrimonio. Lo primero parece corroborarse al observar que el promedio de los activos (físicos y financieros) de los hogares con más de un hijo sin ingresos es superior al de los hogares si hijos dependientes. Cuadro 8 DEPENDENCIA ECONOMICA y RIQUEZA TOTAL Riqueza Total* Dependencia Económica Sin Hijos sin Ingresos 2.652.642 Con hijos sin ingresos 3.530.450 *Pesos de 1984 Adicionalmente se esperaría que los hogares con jefes de mayor edad fueran más pequeños que el resto, y por tanto, tuvieran tasas de dependecia menores. Bajo esta situación, el mayor tamaño de la familia debe conducir a un menor ahorro - al reducir la renta disponible-, salvo que el motivo herencia pese decisivamente en las decisiones del jefe del hogar. Reforzando esta última hipótesis, se encuentra que las familias de los jubilados, al igual que el resto de los hogares, tienen en promedio cuatro miembros. 15 Tal como se plantea en el primer capítulo de este estudio, numerosa literatura basada en estudios de corte transversal, o indirectamente, a través de estimaciones de la ecuación de Euler, reporta evidencia en contra del desahorro después de la edad de retiro: Mirer (1979), Danzinger et al (1982), y Hall y Mishkin (1982), Fenstein-McFadden (1989), VentiWise (1990), Ando y Kennickell (1987), Oliver y Raymond (1994) entre otros. 15 Contrastación de la Hipótesis de la Renta Permanente Las variables que definen los recursos disponibles del jefe del hogar propuestas por la HCV, y compuestas por la riqueza (WR) acumulada hasta el período t-1, más la renta (YL) percibida en el período t, más el valor medio de las rentas laborales esperadas en el futuro (YLe), permiten estimar la siguiente función de ahorro para los hogares colombianos: e St = WRt-1 + YLt + YLt ESTIMACION DE LA RENTA PERMANENTE PARA COLOMBIA Según estas teorías, la renta sobre la que un consumidor basa su conducta debe considerar además de su ingreso corriente (conocido y producto del trabajo), los ingresos futuros o esperados. Es decir, un concepto de renta que contemple toda la vida del individuo y, por lo tanto, mucho más amplio que el de su renta corriente. Dado que la renta media o renta de largo plazo es una construcción teórica que no es observable, a continuación se presenta la metodología para su estimación. En primer lugar, se realizará una aproximación a la riqueza neta de los hogares (WR), a través de sus componentes físicos y financieros. Posteriormente, se establecerá la composición de la renta corriente disponible (YL) de acuerdo con la información reportada por la Encuesta de Ingresos y Gastos de 1984. Finalmente, se presentará el camino seguido para la construcción de los flujos de la renta futura (YLe). ESTIMACION DE LA RIQUEZA NETA (WR). La información contenida en la Encuesta de Ingresos y Gastos permite una aproximación tanto al patrimonio físico, representado por la vivienda, como al capital financiero de los hogares. Esta riqueza, por lo tanto, estará constituída por la suma de los activos de todos los individuos del hogar. Activos físicos La vivienda constituye el único activo físico de las familias cuyo valor puede aproximarse a través de la Encuesta de Ingresos y Gastos. En el capítulo de ingresos se reporta una imputación del "valor de la vivienda en uso" y, en forma 16 separada, los "ingresos recibidos por arriendos de bienes raíces" . Se asume como aproximacion de la riqueza física, el reporte directo en la encuesta del "valor mínimo de venta de la vivienda" cuando el hogar tiene propiedad sobre ella 16 . Igualmente, se incorporan las "rentas mensuales recibidas por el alquiler de bienes raíces". Se estima el valor del inmueble en alquiler asumiendo que las rentas recibidas a lo largo de diez 1O años permiten amortizar su valor de compra. Así, multiplicando por 120 (meses) el ingreso proveniente del alquiler, se obtiene una aproximación al valor de los bienes raíces que originan las rentas mensuales reportadas por los individuos en la encuesta. La suma de estos dos valores ( de la vivienda en uso y de la vivienda alquilada) aproxima el valor del patrimonio físico del hogar. Los Activos Financieros En el capítulo correspondiente a los ingresos del hogar la Encuesta de Ingresos y Gastos reporta un rubro referido a las rentas de capital recibidas. Estas incluyen los siguientes flujos: i) utilidades y ganancias por inversiones; ii) intereses y dividendos; y iii) otros ingresos periódicos de capital 17 . La estimación al patrimonio financiero neto del hogar se realiza sumando el conjunto de estos flujos, una vez mensual izados, y dividiendo esta suma por una tasa representativa del mercado financiero. De esta manera, la riqueza neta del hogar se calcula mediante la suma de los activos físicos y financieros de todos los miembros del hogar. 16 Es importante tener en cuenta los sesgos que frecuenta la información sobre este acervo, principalmente porque la imputación del valor la hace directamente el informante, quien puede sobrevalorar o subvalorar el precio de la vivienda, ya que por lo general no cuenta con la información actualizada del valor comercial. 17 Con la información sobre intereses y dividendos también existe problemas de subregistro, especialmente en los estratos altos donde la renta generada pasa a ser parte del capital acumulado, sin que se conozca su existencia como una partida del ingreso del hogar. 17 Cuadro 9 DISTRIBUCION DE LA RIQUEZA TOTAL FISICA y FINANCIERA DECIL VALOR OBSERVACIONES VALOR ACUMULADO ACUMULADAS ACUMULADO (%) (%) 306 1 412759 365 2 851731911 441 3 1280085464 513 1959649767 4 591 5 2037751612 653 6 4281050874 750 7 4015563610 816 8 3602589564 862 9 8008496245 932 10 26420700523 1000 Fuente: Encuesta de Ingresos y Gastos. Pesos de 1984 O O O O 16 24 37 39 82 77 69 153 504 LA RENTA CORRIENTE DISPONIBLE (YL) Esta renta cobija los ingresos de todos los miembros del hogar y está compuesta por la suma de: a) todos los ingresos provenientes del trabajo, deducidos los impuestos y los aportes a la seguridad social, y b) los ingresos provenientes del capital, y constituídos por la suma de los siguientes rubros mensualizados: i) utilidades y ganancias por inversiones de capital; ii) intereses y dividendos; y iii) otros ingresos periódicos de capital LA RENTA MEDIA ESPERADA (YLe) El análisis de la rentas futuras conlleva una consideración acerca de cómo los individuos forman sus expectativas respecto a los ingresos futuros, y sobre el horizonte temporal para definirlos. Aquí, los supuestos fundamentales son: 1) que el flujo de rentas esperadas a lo largo de toda la vida está relacionado con la renta laboral disponible corriente y esta última, a su vez, se encuentra determinada por la edad y la educación. 2) Se reconoce que las rentas laborales no se mantienen constante a lo largo de la vida de un individuo, y 3) Se supone también, que el horizonte temporal considerado por el individuo en la estimación de sus rentas futuras abarca veinte años 18 . 18 La muestra cobijó a 21.330 trabajadores (asalariados e independientes), con edades comprendidas entre los 20 y 65 años, que han laborado como mínimo 12 meses. 18 Dado el perfil temporal de los ingresos laborales colombianos, semejante al propuesto por la teoría del ciclo vital (HCV), en la construcción del flujo de rentas esperadas, se establecieron tres tramos a lo largo de la vida de un trabajador: Un primer tramo, construído bajo el supuesto de que un individuo toma como referente de sus rentas futuras las recibidas por otras personas de mayor edad y similares en atributos personales y de actividad económica (Friedman,1957). En este primer tramo, un individuo i de edad T estima su flujo de rentas futuras desde la edad i=T+1, asumiendo en cada año las rentas medias (YLjt) observadas de individuos J de mayor edad y similares características personales (rentas dadas por el coeficiente beta de la variable edad en la ecuación de regresión de ingresos estimada, anexo 1), y ajustadas ellas por un Gráfico 3. IU! NTA. MEDIA I!I!IPI!IUI.DA TRAMOS DE RENTA ESPERADA III JI EDAD eo 20 crecimiento estimado de la productividad anual (r): et N N YLi=L (YLi+~j)(1 + r) i=T+1 Se establece un límite para dichas comparaciones contemporáneas de la renta el cual marcará el fín del primer tramo, fijado a la edad en que se alcanza el 19 máximo ingreso laboral en la vida de un individuo ( señalado como 11 en el gráfico 3). En el anexo 1, se presentan las edades a las cuales se alcanza dicho ingreso laboral máximo. Se define un segundo tramo, comprendido desde la edad donde el trabajador obtiene su renta máxima hasta la edad de jubilación obligatoria, la cual es de 65 años en Colombia. En este segmento se hace el supuesto que la renta media esperada ya no crece, y tan solo se mantiene en términos reales respecto al máximo alcanzado en el tramo anterior. Para ello se considera que este segundo flujo de rentas esperadas (YLe) crece a la misma tasa de productividad (r) de la economía, estimada en el 2 por ciento 19 : N eT N Yu = L Yu (1 + r) i=T+1 El tercer tramo de flujos de la renta esperada, se inicia a partir de la edad de jubilación obligatoria, T= 60años para los hombres y 55 para las mujeres, y donde se considera que la renta cae en un 27% respecto al último ingreso (YLi) obtenido en la vida laboral activa 20 • eT N Yu = L T O.80( Yu ) i > 60 Finalmente, con el fin de mantener la posición inicial de un individuo respecto a la trayectoria media de los ingresos ( pues este puede encontrarse por encima o por debajo de ella), se remplaza el coeficiente de la constante reportado en las regresiones estimadas por el valor de la renta disponible (YLi) declarada en el momento t. De esta manera, (YLi) pasa a constituír el intercepto en el modelo de regresión y diferirá de la renta disponible inicial solo si hay discriminación en los ingresos por sexo o ciudad (las dos variables cualitativas especificadas). Es claro que una sola función de ingresos esperados no es compatible con la dispersión de los ingresos por trabajo que presenta un mercado laboral con una oferta tan heterogénea como la colombiana. Por ello, la renta esperada se 19 A un crecimiento proyectado del economía (5% anual), se le restan dos puntos, correspondientes al crecimiento estimado de la población colombiana (censo de 1993). 20 Este porcentaje equivale a una cotización de 1200 semanas en el sistema de seguridad social. 20 estimo para nueve segmentos de ingresos (trabajadores asalariados e independientes en función de la variable años de educación). En el anexo 11 pueden observarse los coeficientes de regresión obtenidos, los cuales serán utilizados para el cálculo del primer tramo de la renta esperada. Luego de caracterizar el proceso de formación de las rentas a lo largo de la vida de un trabajador, la sumatoria de los flujos obtenidos en cada uno de los tres tramos, puede ser sustituída por una renta media esperada (Yle): e N eT Yu = 1/N¿ Yu i=T+1 Cuadro 9 Variable Media Desviación Estándar Renta Esperada 15769 25614 Renta Disponible 57723 48857 Riqueza Total 2637603 5610677 Fuente Encuesta de Ingresos Y Gastos. Pesos de 1984. Contrastación de la Hipótesis de Renta Permanente Para Colombia Según esta teoría la propensión marginal al ahorro de la ser mayor que la propensión de la renta permanente. Ello empíricamente para otras naciones 21 , estimándose que la permanente estará cerca a 1, mientras que para la renta entre 0.2 y 0.3 . renta corriente debe ha sido corroborado pmc para la renta corriente se ubicará La contrastación 22 de la HCV para el conjunto de los hogares del país arroja unos resultados que no son concordantes con la Hipótesis de Ciclo Vital. Esto se aprecia al estimar la ecuación de ciclo vital para el conjunto de los hogares, la propensión marginal al consumo de la renta esperada, aunque ya que estadísticamente significativa, es menor que la correspondiente a la renta disponible y de signo contrario al propuesto por la teoría. La hipótesis de Friedman, de que el comportamiento del consumo se basa en la renta 21Flavin (1981); Hall y Mishkin (1982); Eisner (1958) 22 El método de estimación es por mínimos cuadrados ordinarios, computándose los estadísticos t y errores estándar por el método de White, robusto a la heterocedasticidad. La hipótesis de normalidad fue contrastada utilizando el test de Jarque-Bera, no resultando rechazada para un nivel de confianza del 95 por 100. 21 permanente y, por tanto, que el consumo varía en la misma proporción que esta, no se cumple para el caso colombiano. Resultados similares a los presentados en el cuadro 8, han sido encontrados por Carral (1994) para Estados Unidos, y por Székely (1996) para México. Cuadro 10. Variable dependiente: Consumo Constante Ingreso Disponible 19815 0.56 (94) (154) Estadístico t entre parentesls. Ingreso Esperado Riqueza Total R2 Observ -0.17 (-29) 0.00037 (16) 0,79 26858 Las teorías del ciclo vital y de renta permanente al relacionar el consumo de los hogares con el ingreso futuro más que con el corriente, exigen para su cumplimiento que los mercados de capitales sean perfectos. Si algunos agentes tienen restricciones de liquidez derivadas de racionamientos en el crédito, su consumo responderá más al ingreso corriente que al futuro, es decir seguirán un comportamiento similar al planteado por Keynes, como se deriva del cuadro 8. Para la mayoría de los hogares colombianos su horizonte de consumo es demasiado corto y, por tanto, este no tiene preferencia en el tiempo, reaccionando rápidamente con las variaciones de la renta corriente disponible. Las restricciones de liquidez, explicarían este exceso de sensibilidad del consumo a las variaciones de la renta corriente para la mayoría de los hogares, y puede ser justificada por la concentración del ingreso y de la riqueza en Colombia. De otra parte, la ecuación 8 muestra que la influencia positiva de la riqueza sobre el consumo, aunque estadísticamente significativa,relativamente es poco importante. 22 Anexo I Segmento 1. Asalariados sin estudios Edad Ingreso Laboral Máximo: 30 Coeficientes Regresión: Constante: Edad: Ciudad: Sexo R2 = 0.32 F = 229.0 10109 318.9 1682.7 -6326.1 Signif F = 0.0 (t = 28.3) (t 9.9) (t = 6.9 ) (t -26 ) = = N = 1469 Casos. Segmento 2. Asalariado con primaria completa. Edad Ingreso Laboral Máximo: 34 Coeficientes Regresión: Constante: -2.287 (t= -4.2) Edad (t= 19.3) 372.1 Ciudad (t= 5.8) 1282.5 Sexo (28.2) 6236.2 R2 = 0.24 F = 269.9 Signif F = 0.0 N = 2590 Casos. Segmento 3. Asalariados con bachillerato incompleto. Edad Ingreso Laboral Máximo: 38 Coeficientes Regresión: Constante: -6863.5 (t = -10.8) 765.3 (t = 32.0) Edad: (t = 3.2) Ciudad: 718.4 (t = 15.3) 3438.2 Sexo: (t = 2.7) Años Ocupación: 28.4 R2 = 0.17 F = 77.2 Signif F= 0.0 N = 4708 Casos. Segmento 4. Asalariados con universidad incompleta Edad Ingreso Laboral Máximo: 44 Coeficientes Regresión: R2 = 0.05 Constante: -9.402 Edad: 1002.1 Ciudad: 2060.3 Sexo: 3285.3 Años Ocupación 77.2 F = 46.7 signif F = 0.0 (t = -9.4) (t =26.6) (t = 5.4) (t = 8.6) (t = 3.4) N = 3545 Casos. 23 Segmento 5. Asalariados con título profesional. Edad Ingreso Laboral Máximo: 51 Coeficientes Regresión: Constante: -19236 (t =-5.2) Edad: 1751 (t=15.4) Ciudad: 11617 ( t = 8.3) ( t = 9.5) Sexo: 13706 R2 = 0.11 F = 57.9 Signif F = 0.0 N = 1548 Casos. Segmento 6. Trabajadores Independientes sin estudios Edad Ingreso Laboral Máximo: 30 Coeficientes Regresión: Constante: 9801.5 (t = 19.5) (t = 3.1) Edad: 42.18 Ciudad: 1841.4 (t =5.8) R2 = 0.27 F = 231 Signif F = 0.0 N = 1326 Casos. Segmento 7. Trabajadores Independientes con bachillerato incompleto Edad Ingreso Laboral Máximo: 32 Coeficientes Regresión: Constante: Edad: Ciudad: Sexo: R2 = 0.22 F = 209 7479 76.8 252.1 4052.2 Signif F = 0.0 (t = 11.6) (t 4.2) (t = 3.9) (t = 12.3) = N = 2346 Casos. Segmento 8. Trabajadores Independientes con universidad incompleta. Edad Ingreso Laboral Máximo: 40 Coeficientes Regresión: Constante: 10570.7 Edad: 198.8 Ciudad: 1888.1 Sexo: 2168.6 R2 = 0.11 F = 27 Signif F = 0.0 (t = 5.7) (t 3.6) (t=2.4) (t = 2.6) = N = 701 Casos. Segmento 9. Trabajadores Independientes con título profesional. Edad Ingreso Laboral Máximo: 45 Coeficientes Regresión: (t = 3.8) Constante: 14802.0 (t = 3.1) Edad: 349.3 (t = 2.1) Ciudad: 3480.7 N = 301 Casos R2 = 0.09 F = 13.9 Signif F = 0.0 24 111. EL AHORRO DE LOS HOGARES EN LA DECADA DE LOS NOVENTA La primera parte de la década de los noventa en Colombia está marcada por un descenso en su tasa de ahorro. Esta caída del ahorro fue determinada, en lo fundamental, por el comportamiento de los agentes privados cuyo ahorro pasó de representar el 14 por ciento del PIB en el quinquenio 1985-89 al 10.4 por ciento durante el período 1990-94. Este descenso del ahorro coincide con el programa de reformas para la modernización de la economía colombiana iniciado a finales de los años ochenta, orientado a eliminar las principales rigideces que causaban el lento crecimiento de la economía. La apertura comercial, la reforma al sistema financiero, las reformas cambiarias, al régimen tributario, y las reformas al mercado laboral, constituyeron los ejes de este proceso. El objetivo del presente estudio es reseñar la evolución del ahorro de las familias 1 durante la primera parte de los noventa y los ochenta, haciendo énfasis en los posibles determinantes de su caída durante el período de apertura y reformas económicas. Se realizan algunas estimaciones sobre el comportamiento del ahorro de los hogares en el largo y corto plazo, evaluando la magnitud que tienen algunos choques exógenos de algunas variables especificas. EVOLUCION DEL AHORRO EN COLOMBIA En las dos últimas décadas el ahorro colombiano como proporción del pib ha fluctuado entre el 13.7 Y el 22.5 por ciento. Hasta la década de los setenta el comportamiento global del ahorro se encuentra asociado con la evolución del sector privado y en lo años ochenta con la dinámica del sector público. En los años noventa su descenso se asocia principalmente con las bajas tasas de ahorro privadas. Mientras el ahorro público osciló entre tasas de 2.6%> y el 11 % del PI B, el ahorro de los agentes privados varió entre el 9% y el 14%. Las tasas de ahorro del sector público han estado asociadas con las reformas tributarias y con los períodos de auge exportador, en tanto que las del sector privado se relacionan con la tributación y el desenvolvimiento de la economía. La contribución de los agentes privados al ahorro también ha sido oscilante. Entre los años setenta y noventa, el ahorro de los hogares varió entre el 5 y 11 por ciento del PIB, en tanto que el de las empresas osciló entre el 4.1 y el 9.7 por ciento del PIB. Al interior del ahorro privado se destaca la pérdida de participación de los hogares desde los mediados de los años ochenta y, en particular, la pérdida en los noventa de quince puntos respecto a las empresas. 1 El comportamiento de las empresas, y en particular el descenso en sus tasa de ahorro en los años noventa, ha sido estudiado por Sánchez et al,1996 25 Cuadro 11 Distribución del Ahorro Privado HOGARES EMPRESAS TOTAL 1970-1974 74.3 25.7 100 1975-1979 64.9 35.1 100 1980-1984 75.5 24.5 100 1985-1989 65.1 34.9 100 1990-1994 50.2 49.8 100 FUENTE: Banco de la Republlca - Cuentas Financieras Cuadro 12 Participación del Ahorro Privado en el PIS PRIVADO EMPRESAS HOGARES 1970-1974 13.0 4.9 8.1 1975-1979 13.5 5.2 8.3 1980-1984 13.6 5.2 8.4 1985-1989 14.0 6.7 7.3 1990-1994 10.4 4.2 6.2 FUENTES: Banco de la República - Cuentas Financieras, DANE - Cuentas Nacionales El Ahorro Privado en la Década de los Ochenta y Noventa Durante los ochenta, la repartición del valor agregado en favor de los agentes con mayores propensiones de ahorro, aunado a la mayor carga tributaria para el saneamiento del déficit fiscal, va a explicar la caída de la tasa de ahorro de los hogares 2 , del 8.5% al 7.60/0. Paralelo a la caída del ahorro en los hogares en el período 1985-89, las empresas casi que duplican su tasa de ahorro. Ello es resultado del fin de la crisis económica y la política económica ejecutada, en particular la reforma tributaria de 1986 la cual, en sus motivaciones más importantes, destacó el fortalecimiento del mercado de capitales y la disminución del sesgo al endeudamiento empresarial con medidas como la eliminación de la doble tributación que recaía sobre las utilidades empresariales. 2 Podemos señalar que la tasa de ahorro de las familias colombianas para el período 1985 - 1987, correspondientes al 7.5% del YND es similar a la del Reino Unido; mayor que los Estados Unidos en casi tres puntos, e inferior en cinco puntos a otros países desarrollados como Francia, Canadá y Alemania. 26 En conjunto estos factores van a explicar el ascenso de las empresas en el ahorro nacional en los años ochenta 3 . Su participación pasa del 17.3% en 1970 al 28.60/0 en los últimos años de los ochenta, mientras los hogares ven reducir notablemente su participación al pasar del 48.2% al 35.9% en el mismo períod0 4 • Gráfico 4 AHORRO PRIVADO TOTAL, EMPRESAS Y HOGARES (COMO PORCENTAJE DEL PIB) 16,00 _ 14,00 -o-AHORRO. PRIVADO TOTAL 12,00 10,00 _ -o-AHORRO EMPRESAS 8,00 6,00 -f:s- AHORRO 4,00 2,00 HOGARES 0,00 oex) (J) ..-ex) (J) Al iniciarse la década de los noventa, el país inicia una reforma estructural de su economía basada en la apertura de la economía. Paralelo a este proceso, la tasa de ahorro nacional inicia una caída vertiginosa, más de cinco puntos del ingreso nacional disponible, desde el 21.3 % en 1990 hasta el 15% en 1994. Esta caída del ahorro esta asociada al comportamiento del sector privado, cuya tasa pasa del 13.2 por ciento del PIB en 1990 al 8.6 en 1994. Esto es explicado por el descenso simultáneo del ahorro en los hogares y las empresas. La tasa de ahorro de los hogares cae hasta el 6.1 por ciento del PIB, luego de haberse situado en 1991 en el 9.3, la más alta en veinte años. De otra parte, la tasa de ahorro de las empresas desciende del 7.8 por ciento del pib en 1990 al 4.0 en 1994. Esta caída en al ahorro empresarial, más que a la reformas estructurales que acompañaron a la apertura, estuvo asociada al relajamiento de las condiciones de crédito internos. 3 El ascenso del ahorro de las empresa privadas en la segunda parte de la década de los ochenta se asocia a la recuperación de la economía, la aceleración del ritmo de devaluación, junto a un incremento en los aranceles, además de loa aumentos a los incentivos exportadores (Sánchez, et al 1996) . .¡ En la mayor parte de las economías desarrolladas la década de los 70 estuvo marcada por un excepcional incremento del ahorro de las familias. Ello fue resultado del proceso inflacionario padecido y, dado al carácter de prestamistas netos de los hogares, contablemente recibieron un "premio inflacionista". En la situación contraria, las empresas, prestatarios netos, vieron subestimado sus niveles de ahorro. Este proceso se reinvirtió en la década de los ochenta, donde el auge económico y el control del proceso inflacionario redujeron en los hogares su percepción de incertidumbre y el "premio intlacionista" de los intereses recibidos, y con ello sus niveles de ahorro. Así, en los años 80 los grandes protagonistas son las empresas, quienes recuperan sus excedentes y ante el control de la inflación, aumentan sus niveles de ahorro. 5 Sánchez et al (1996) 27 Gráfico 5 AHORRO PRIVADO TOTAL, EMPRESAS Y HOGARES (COMO PORCENTAJE DEL PIB) 14,00 12,00 b~0________------S-=q0Y00~008]"""8""l Y"'7~~~1 PRIVADO TOTAL 10,00 8,00 +•. . •. 6,00 K 4,00 2,00 --a- AHORRO. ..1>""2••.••.•. .•. . / -o-AHORRO ENlPRESAS > .. 1-0~1~.• • · oT-ª--~~~t0 1990 1991 1992 --tr- AHORRO HOGARES 1993 1994 1995,_ _ _ _ _ _----' Ejes de este proceso de apertura y modernización fueron la liberación comercial, una nueva regulación en el sistema financiero, la liberación cambiaria y las reformas tributarias y laboral. La reforma comercial con la reducción de aranceles eliminó el criterio de protección que hasta entonces había servido de base a la política de importaciones. La reducción de los precios relativos de las importaciones determinó la expansión de las compras al exterior. Entre diciembre de 1990 y diciembre de 1994 el índice de precios de bienes importados cayó 37.2 % frente al índice de precios al consumidor y 24.5 % frente al índice general de precios al productor6 . Estos factores sumados al aumento en la disponibilidad de crédito y la revaluación, hicieron que entre 1991 y 1994 las importaciones reales de consumo se cuadruplicaran. Cuadro 14 Total Importaciones - US$ Millones 1994 1994/1991 Bienes de Consumo 2.218 4.11 No Duradero 938 2.95 Duradero 1.280 5.78 Materias Primas 4.837 1.71 Bienes de Capital 4.831 2.82 Total Importaciones 11.894 2.34 Fuentes: Anuarios de ComercIo Exterior. La reforma financiera, con base en la Ley 45 de 1990, tuvo como objetivos el fomento de la competencia y ampliar la capacidad de intermediación del sector. Su 6 Carta Financiera, Mayo 1995 28 efecto principal sobre el consumo fue el de relajar las restricciones de liquidez de la economía. basada en la Ley 50 de 1990, buscó otorgar una mayor La reforma laboral, flexibilidad al sistema de contratación, con el fin de lograr mayor productividad y competitividad. Los elementos centrales de esta reforma fueron el establecimiento de un nuevo régimen de cesantías, eliminación de la norma de estabilidad después de diez años de labores y de la pensión sanción 7 . La reforma cambiaria, Ley 9 de 1991, que eliminó el estricto control de cambios que operaba desde 1967, lo cual permitió sanear los activos poseídos en el exterior con anterioridad al 1 de septiembre de 1990. Estas medidas, en el marco de una revaluación del peso, contribuyeron a la entrada de capitales y a la disponibilidad de recursos de crédito para el consum0 8 . Explicaciones a la Caída del Ahorro en los Noventa La caída del ahorro doméstico a partir de 1991, ha sido examinada desde diferentes ángulos. La disponibilidad de crédito de consumo; el deterioro de los ingresos de los exportadores; la reducción de las utilidades operacionales de muchas empresas; la excesiva carga tributaria; posibles efectos permanentes; efectos demostración del consumo suntuario; la caída significativa de los precios relativos de los bienes transables; la liberación, con las reformas de apertura del consumo de bienes durables, represado por la sustitución de importaciones; son algunas de las respuestas que se han dado al aumento del consumo en los últimos años. 1. Aspectos que explican el auge del consumo. a. La relajación de las restricciones de liquidez explican el auge del consumo privad0 9 . El argumento central es que las restricciones de este tipo presentes en años anteriores, disminuyeron a consecuencia de: • La fuerte entrada de capitales 10, en un marco de reformas financieras y cambiarias, que incrementaron la eficiencia del sistema. • El aumento de la oferta monetaria, en el intento de defender la tasa de cambio y proteger el proceso de apertura que se iniciaba. • La modernización del sector público y la reforma laboral que condujeron a planes de retiro e indemnizaciones, los cuales estimularon el gasto público. (Urrutia, 1994). Se considera que la modernización del sector público y la reforma laboral condttieron a planes de retiro e indemnizaciones que estimularon el consumo privado. s Los ingresos provenientes del servicios prestados al exterior por residentes en el país son de libre tenencia, posesión y negociación, fijando los bancos y corporaciones la tasa de compra y venta de divisas. 9 La relajación de las restricciones crediticias a los hogares se refuerza al observar que el crédito al consumo ganó participación en el total de la cartera, frente a la industria y la agricultura. Efectivamente, aquel pasó del 18 por ciento en 1991 al 23 por ciento en 1994, mientras el crédito al sector industrial se reducía en cinco puntos. 10 La caída las tasas de interés de corto plazo en Estados Unidos, al nivel más bajo desde la década de los sesenta; La recesión en los Estados Unidos; La caída en los términos de intercambio de América Latina; y los cambios en la regulación en los mercados de capitales y de los países industrializados, explican la entrada masiva de capitales en Latinoamérica. 7 29 Gráfico No3 VARIACION ACUMULADA DEL CREDITO A LOS HOGARES 30.000 25.000 20.000 ~ 15.000 10.000 5.000 -f--I--I--I---+-I-+-+--+---+-+-+--+-+-+-+--+ ~ - ~ ~ ~ ~ ~ ~ ~ ~ ~ ~ él ~ ~ ~ ~ ~ ~ ~ Años - C r é d i t o a La rgo Plazo I _Crédito a e orto Plazo I b. Utilizando el esquema de fuentes y usos que reportan las cuentas financieras del Banco de la República, Bernal (1995) encuentra evidencia de que las variaciones en el endeudamiento si afectan las decisiones de consumo de los hogares. A partir de 1991, los hogares mantienen un crecimiento sostenido en el consumo de los bienes durables cercano a un punto del PI B, Y utilizan de manera significativa el endeudamiento 11. Gráfica No 5 VARIACION ACUMULADA DE LAS IMPORTACIONES DE BIENES DE CONSUMO (Bienes Durables y No Durables) 7.000 6.000 1 5.000 -- 4.000 al U ~ 3.000 2.000 1.000 -- --I---t--l-t---t m o ID tttttm m m m m ., 1.0 t- m ., .,m I .,m N .,'"m I .,....m I I '"m